Mujer acosada y emputecida iii

Al día siguiente en la oficina intenté ir un poco más atractiva y más pintada de lo normal, para agradarle, yo entraba a las 8 pero Roberto nunca llegaba antes de las 9:30, cuando llegó me llevó a una cafetería fuera del trabajo, y me contó lo que quería de mí y lo que yo podría conseguir.

• Mira Bego he hablado con el director general de mi empresa y están muy interesados en vuestro programa informático para implantarlo a todos los niveles de la empresa, producción, facturación, ventas, compras, etc.

• Eso quiere decir que podría llegar a ser un proyecto de fácil de dos millones de Euros de consultoría para tu empresa. Me ha preguntado si tú eras la persona adecuada para liderarlo, y coordinar al equipo de consultores que tendría que mandar tu empresa no menos de 10.

• Le he respondido que en principio si, pero que tendría que pensarlo, ¿Entiendes lo que esto podría suponer para tu carrera profesional?

• Si te portas bien conmigo en la cama y fuera de ella, primero vivirías muy bien, endosando el trabajo a los consultores juniors que te mandarían, podrías exigir un aumento de suelo de más del doble, con dietas y coche al tener que viajar y además si no te lo dan, yo haría fuerza diciendo que si tu no estás liderando el proyecto no les contratamos.

• ¿De verdad harías eso por mí?

• Sí, podría justificarlo porque eres una tía competente, aunque eso a mí me da igual, lo haría por tenerte disponible a mi antojo en realidad.

• Tendrías fácil un sueldo de cien mil euros (más del triple que lo que ganas ahora) sin horarios, viviendo como una reina, y explotando a tus consultores para que el trabajo salga adelante.

• Roberto si acepto sería como renunciar a mis principios, por ser tu amante, triunfaría en mi carrera, pero no por mi valía, sería como aceptar prostituirme, para mejorar mi posición.

• Mira perrita, pareces tonta, en el mundo empresarial en España, o se triunfa por enchufe, o en el caso de las tías, por liarse con tíos es así, tú decides, piénsatelo hasta mañana y hablamos, llegarías a la cima.

Esa noche a pesar de los ansiolíticos no pude dormir, ya era una adicta a ellos, por la ansiedad que me provocaba este hombre, pero en el fondo sé que tenía razón, por mi valía, nunca llegaría a lo más alto, siempre sería una consultora haciendo un montón de horas y ganando un sueldo del montón, como le pasaría a mi marido.

Total Roberto ya me había follado de todas las maneras, y económicamente sería bueno para mi familia, a pesar de los cuernos de mi marido, y viviría como una reina a costa de explotar a los consultores que pusieran a mi cargo.

Al día siguiente me reuní con Roberto muy nerviosa, tomamos café y me encendió un cigarro, aunque yo había dejado de fumar hacía 8 años, al final poco a poco me fui enganchando de nuevo para combatir los nervios constantes, y le respondí que si que estaba dispuesta a aceptar, siempre y cuando el cumpliera su parte.

• Bien Bego, creo que has hecho lo mejor para ti, yo no quiero destruir tu matrimonio, además tengo una novia que está muy buena, o sea que serás mi folla consultora en realidad, mi empresa me importa una mierda, tu sacas el proyecto, pero yo te follo ¿entendido?

• Si Lo entiendo.

• Te voy a poner de momento unas normas muy fáciles.

• Mira quiero que tu seas físicamente algo distinta de mi novia para cambiar, ella por su trabajo está muy delgada, y tu cuerpo salvo las tetas, es muy parecido al suyo, luego quiero que engordes, que ganes un par de tallas, tienes una 36, pues pasa a una 40.

• Estarás mejor, al ser alta porque ganes 5 kilos no pasa nada, como pesas 57, pasa a 62, o incluso si quieres o te descuidas, te dejo llegar a los 65 kg, con 170 de estatura estarás muy macizorra, estoy ansioso de coger carne, te quiero a lo kim kardashiam, que tiene unas curvas así y presume de ello, lo harás, ¿eso es fácil no?

• Si ese es tu deseo si, aunque me cuesta mucho ganar peso, pero supongo que comiendo guarrerías lo conseguiré.

• Como comeremos todos los días juntos te elegiré la comida, no te preocupes.

• Quiero que te tiñas de rubio, mi novia es morena, pues tu de rubia, pero no platino, más bien discreto, por tu trabajo tampoco quiero que llames la atención, además con los ojos azules te quedará muy bien, cortado a capas.

• En el trabajo, lo llevaras siempre recogido en una coleta engominado, porque quiero que te muestres como una mujer segura de si misma, tendrás que ser una cabrona con tus consultores, si el proyecto falla, pierdes el chollo, y es un proyecto a varios años, es decir, mentalízate que además de complacerme, para tu vivir bien, tendrás que ser como yo, es decir, una cabrona con los demás.

• Sí, me teñiré el pelo y me peinaré como te guste,  y sí, sé como tengo que explotar a la gente porque lo han hecho conmigo varios años.

• Tendrás que ir siempre muy arreglada, maquillada, uñas pintadas y de pedicura, pero sin parecer una zorra, aunque si llamando la atención. Trajes de chaqueta con faldas cortas, y pantalones marcando curvas, demostrando que estás muy orgullosa de tu cuerpo.

• En cuanto a la ropa interior, siempre sujetadores que te hagan ganar una talla, quizás al ganar peso, también ganes pecho, y tangas, o braguitas sexys, nunca blancos o de color carne.

• Muy bien iré en ese plan no tengo problemas.

• En cuanto a tu marido, ya te digo que quiero que sigas con él, pero con la subida de tu status, que note que la relación ya no es de igual a igual, y follar lo justito o menos.

• Bueno supongo que eso irá siendo así no tardando mucho, porque con dinero al final podré hacer siempre lo que me de la gana, y bueno de hecho en casa ya le domino ahora.

• Muy bien de momento no te pido más, mañana mismo ya puedes entrar a trabajar en vez de a las 8 a las 11, y luego por la tarde sales conmigo a hacer lo que yo quiera, y si me tengo que ir con Cristina, sales pronto, como ves ya empiezas a vivir bien no? Pero mañana ya te quiero teñida, peinada y maquillada como quiero, y empezando a comer.

• Muy bien Roberto, ¿cuando se confirmará el proyecto?

• Estamos a mediados de agosto cielo, en 15 días en cuanto llegue el director general de vacaciones se lo plantearé, y espero que en otoño se firme el contrato.

• Ahh y a partir de ahora no quiero que seas fría conmigo, quiero sonrisas, verte relajada si te toco, y que la gente lo note, eso es lo más importante, no quiero seguir con una frígida.

• Muy bien Roberto, me costó sonreírle, pero lo hice, después de todo no pedía tanto y físicamente me gustaba, por su aire de chulo a lo Bruce Willis.

Esa semana, hice todo lo que pidió, y empecé a comer muchísimo aunque no tuviera ganas cosas que engordaran, me puse la típica dieta de los americanos, donuts para desayunar e incluso entre horas de chocolate, el café con mucho azúcar, no bebía agua sólo coca cola normal, snacks a deshoras, todo frito la carne, el pescado, etc. e iba al mcdonalds a por hamburguesas que cenaba casi a diario.

Tomás por el cambio de horario no dijo nada, el salía de casa a las 630, y yo me levantaba a las 1030 ahora, al entrar a las 11 y cuando llegaba tarde después de follar con Roberto, o simplemente salir de copas, le decía que era por el trabajo.

A la segunda semana del acuerdo, Roberto se presentó en mi casa sin avisar a las 10 de la mañana, yo medio dormida le abrí la puerta aterrada, en camisón blanco, con tanga negro, como a él además le gustaba, y sin sujetador, todavía era verano y hacía calor.

• ¡Qué haces aquí es mi casa!, ¿y si te ha visto el portero o viene mi marido?.

• El portero me ha visto pero no sabe a donde iba, y tu marido está trabajando, vengo a follarte en la cama del cornudo.

Me rompió el camisón por los tirantes cayéndose al suelo, y luego el tanga por un lado, quedando desnuda, con mi sexo ya siempre depilado.

• Ahora quiero que me quites toda la ropa, me tumbes en la cama de matrimonio, donde duermes con tu marido, y que me hagas una mamada, parando cuando yo te diga perrita.

Eso hice, y como una auténtica profesional, empecé a quitarle la ropa, mirándole a los ojos y sonriendo, aunque nerviosa por estar en mi propia cama, el se dejaba hacer como si fuera un niño, no me tocaba, sólo me miraba, luego lo senté en la cama, y le dejé caer, quedando tumbado boca arriba.

Entonces me acerqué gateando de rodillas sobre la cama como una perra en celo, busqué su cara y le di un beso con lengua. Todo esto lo hacía sin dejar de mover circularmente mi trasero.

A continuación me puse encima de él dándole la espalda para que tuviera una perfecta visión de mi trasero, ya sin mi tanga. Dejé pasar un rato durante el cual no dejé de pajear la polla de Rober con mis manos ni de mover el trasero para que Rober lo admirara bien.

Tumbados en la cama, quedé sobre él dándole la espalda restregando mis tetas contra su torso, a continuación moví mi cara hasta que quedó a la altura de la verga, era mayor que la de mi marido, y comencé a darle lametazos y besos. Como estaba sin duchar, olía a hombre, pero no me importó, era normal, yo también tenía que oler, y mas con el calor que hacía.

Besé sus huevos, jugando con ellos con mi lengua, tuve que lamerle el orificio del ano bajando más la cabeza, metiéndole un dedo, ya que me lo ordenó, y luego subí hasta encontrar el prepucio. Abrí todo lo que pude la boca y poco a poco me la fui tragando. Lo saqué del todo y me la restregué  por los labios.

Luego succioné de nuevo todo el pene y cuando consideré que me había acostumbrado a su grosor, comencé a meterla y sacarla de mi boca con todas mis ganas. A veces la metía del todo, otras la sacaba del todo para dedicarme íntegramente a la punta. A las zonas externas.

Rober no paraba de gemir, me ordenó que acoplara a él y le puse el coño en la boca no hizo falta invitarle a que me lo comiera, empezó a hacerlo, tirando del clítoris con los labios hacia fuera, y metiendo dedos por el culo, aquel hombre me volvía loca.

Me dijo que no iba a aguantar mucho y que quería por fin correrse en mi coño, me puse sobre él pero ahora de frente y me la clavé en la vagina hasta la matriz. Empecé a cabalgarle mientras me tocaba las tetas y le besaba en la boca, hasta que se corrió. Me la saqué de mi coño que por fin se inundaba de su semen y se la limpié con la lengua del todo.

Me daba un morbo añadido, el hacerlo sin condón siempre se vaciaba dentro, menos mal que tomaba la píldora, pero es que él no quería ni oír hablar de condones, esta entrega total me ponía más si cabe, por ser además a cambio de mejorar mi carrera profesional, estaba haciendo lo que siempre había criticado, que una mujer tuviera que emputecerse con un tío para triunfar, tenía claro que tendría que ser toda suya en cuerpo y alma.

Me quedé sobre él y nos encendimos un cigarro, yo no paraba de tocarle besarle, ya que comprendí que eso era lo que quería, pasé de una situación de acoso sexual brutal a sexo consentido a cambio de un beneficio para mí, es decir, me estaba comportando como una puta para excitarle de nuevo quería que supiera que me tenía a su disposición.

Así que mientras me fumaba el cigarro y le besaba le cogí la polla con una mano y empecé el movimiento arriba y abajo pajeándole hasta que se empalmó de nuevo.

Me puse a cuatro patas y le dije que me enculara mientras me abría el culo con las manos.

Me la metió por el culo con cierta dificultad, al no estar todavía muy dilatada y entonces yo empecé a culear hacia delante y detrás marcando el ritmo, quería que además me follara con el menor esfuerzo posible, que notara mi entrega.

A los 10 minutos en cuanto noté que me iba a correr aumenté más el ritmo, para poder corrernos los dos a la vez,  Rober también estaba próximo y cuando notó que yo aumentaba el ritmo me ayudo un poco. En cuanto me llegó un orgasmo, Rober se corrió dentro de mi culo.

Me había llenado de semen culo y coño. Entonces me volví y mirándole a los ojos sumisa se la volvía a limpiar.

Agotados, sobre la cama, nos encendimos otro cigarro y Rober me ordenó que en cuanto acabáramos de fumar me duchara, y me pusiera guapa para ir al trabajo, aunque eran ya las 12.

Le rogué que antes de venir a mi casa me avisara, que si llega a estar mi marido hubiera sido un desastre, que al menos me mandara un mensaje al móvil, para avisar, me respondió que difícilmente lo volvería a hacer, que fue porque le daba morbo, ponerle los cuernos en su propia cama, que la próxima vez me avisaría.

A eso de las 2 llegamos al trabajo y directamente nos fuimos a comer, me puse morada a calamares fritos, con dos coca colas y tarta de nata y chocolate, el café lo pedí con leche entera y 3 terrones, Rober sonreía.

Empezamos a hablar del proyecto, la semana siguiente ya era septiembre y lo hablaría con su director general, para empezar en octubre., estaba deseando.

FIN

Se agradecen comentarios.

Autor: Corsarionegro

Correo: corsarionegroesp@hotmail.com