Mucho gusto. Parte 1

Para historias, la mía.

¿Alguna vez han estado en un lugar donde las luces se unen con el humo? ¿En donde las voces se mezclan con la música?, ¿Cuándo el pudor y el erotismo pudieron unirse de esta forma? es tan extraño, todo parece encerrarse más, los espacios son reducidos, esto no es como en las películas ¿Dónde estoy? ¿Y esta fea, por qué me mira? ¿Han estado en un lugar donde no importa tu sexo, no importa tu pasado ni tu presente y mucho menos tu futuro?, aquí… Todo es cerveza, vodka, ron, hombres besando hombres, chicas besando chicas ¿Qué es esto? ¿Dónde estoy? ¿Dónde estoy?

Mierda, Mónica se está besando con Susy.

Caí aquí por casualidad les juro fue vaga casualidad, yo nada mas quería jugar al póker en mi casa con mis amigas y un poco de alcohol, pero es que en una semana empezamos el colegio queríamos divertirnos, lo que no sabía era que… Ellas no entendieron el tipo de diversión que estaba buscando ¡Por Dios! Soy una niña de 16 años, lo único que quiero es pintarme las uñas y tener una pijamada con mis amigas ¿Era mucho pedir?

Les cuento, todo estaba muy bien yo nada mas quería comprar un poco de alcohol y jugar póker, pasarme de la raya… Mis papás no estaban en casa era de esperar que iba a hacer algo loco por primera vez en mi vida, pero las cosas se me salieron de las manos, Susy… Si, la que se estaba besando con Mónica, es mi mejor amiga pero tiene un defecto… Bueno así lo vi yo… Así lo veía yo Susy es lesbiana, sus papás lo saben y los míos también, ella ya había frecuentado esos sitios a esto que le dicen “El ambiente”. Acepte la idea de ir a esta disco, para nada hetero, una disco para gente homosexual como le dice mi mamá Why Not, así se llama, me pareció un poco absurda la idea pero ya habíamos comprado el alcohol, me había bebido uno que otro trago y accedí, fue un error… Yo nunca debí decir que si y bueno, cada error trae consecuencias y yo hoy vine a contarles mi historia.

Imagínenselo, debía agarrar la mano de mi mejor amiga haciéndonos pasar por novias, subimos unas escaleras, pero antes de eso pidieron mi ID, estaba nerviosa me temblaban hasta las pestañas, les di mi cedula falsa aquí en Venezuela es muy sencillo eso por suerte… Mido 1.79 los hombres de la entrada se la creyeron completamente, yo ni parpadee, entre despacio sujetando la mano de Susy ¡Mierda! Había demasiadas personas, feas, bonitas, gordas, bajas, altos, flacos, mujeres, hombres, viejas, viejos, pero eso no era lo peor… Todos bailaban de la forma más descarada posible yo estaba aterrorizada el alcohol que había tomado se me había pasado estaba tuerta de ver tanto descaro, mi amiga… Muy tranquila saludando a cuanta lesbiana se le acercaba, cada vez entrabamos mas las mujeres me veían y yo esquivaba todas las miradas, mi amiga bebía un trago tras otro y muy pronto más de lo que pensé, soltó mi mano, el lugar era tan amplio que me perdí, estaba tan asustada… Tan asustada, no sabía a dónde ir, de lejos vi a Mónica, me acerque a ella y me dio un trago, estaba en la barra… Había muchas botellas y muchos barthenders supongo que era una clase de barra, Mónica agarro de la mano a otra mujer y me dejo nuevamente sola. Empecé a beber, a relajarme a hacer que estaba en un lugar heterosexual, trataba de no ver a los lados porque las mujeres estaban que me comían y sinceramente no quería ser su comida, a mi ni siquiera me gustan las mujeres, ni un poquito o bueno… Eso creí hasta ese día.

La música, el olor a cigarrillo, sudor, besos, mis oídos retumbaban, estaba sentada en una silla de esas que están cerca de la barra, tratando de dejarme llevar por la música, tratando de disfrutar el momento. Esquive todas las miradas que pude lo juro ¡Las esquive! Fui al baño una que otra vez, bebía mas y mas tanto como para dejarme llevar, empecé a aceptar una que otra mirada de algunas mujeres hermosas, empecé a divertirme a mirarlas, fue efecto del alcohol, todo empezaba a solucionarse, comencé a bailar con una que otra desconocida, no bese a ninguna muchas veces lo intentaron pero no me deje tocar, no sé si ustedes han escuchado esto de que lo único que hace falta para dejar de ser homofóbico son 3 vasos de ron, pues si… Es muy cierto, exhausta me senté a pedir otro trago.

— ¡Vodka!

— ¿Qué?

— ¿Qué de qué? Que un vodka dije.

No había terminado de dar las gracias cuando ya me había bebido la mitad del vaso, ¿Qué fue eso? Me pregunte…

No sé si, alguna vez en su vida han escuchado algún sonido que haga latir su corazón un poco más rápido, ¿Un poco? De que estoy hablando, hablo de algo que haga que su pulso tiemble, algo que te active todos los sentidos… O mejor dicho alguien que te mueva el piso en dos segundos.

Que risa tan hermosa, fue tan alta que opaco la música, trate de hacer contacto de ver de dónde había salido esa risa que me había hecho perder el control y hasta derramar mi trago, rápidamente busque su mirada pero ya estaba de espalda… Ustedes lo saben, son todos unos alcohólicos yo apenas tengo 16 años, pero uno con tragos encima es capaz de hacer cualquier cosa, me acerque hasta esa mujer, más alta que yo… Tenía tacones y un vestido negro, le toque ligeramente la espalda para llamar su atención, le hacía toques de ¿Hola? ¿Alguien ahí?

— ¿Dime?

Me quede intacta, no podía decir nada, todo se me bloqueo en ese instante, mis pensamientos, mi voz.

— ¿Tengo cara de payaso? Fue lo único que alcance a decir, fui una estúpida lo sé.

Ella, se volteo y me dejo hablando sola, me dio tanta ira, tanta… Había demasiadas mujeres mirándome para que ella me ignorara, agarre mi vaso bien fuerte, me lo tome todo, pedí otro trago y me le acerque de nuevo, ella volvía a estar de espalda, esta vez… No fui tan tonta ¿Qué les puedo decir? ¡Me gusto! ¿O que creían que iba a ir a una disco de ambiente y ninguna mujer me iba a gustar?... Pues no, me gusto esta tipa me gusto, al parecer no era tan hetero… Ni yo lo sabía.

Estaba indignada, yo me le puse de frente, ni siquiera me presente yo no quería ser educada quería ser sexy, y bueno… La bese, si… Yo Maya la bese, ella se retiro y me dejo con el beso ahí, fue tanta mi ira que volví a halarla para volver a besarla ella volvió a rechazar mi beso ¡Qué pena! ¿Qué estaba haciendo?

—   No es lo mío andar besando niñas mal educadas. Me dijo la muy zorra.

—   ¿Mal educada, por qué? Respondí con un tono alterado.

—   No me gusta besar desconocidas.

—   Mucho gusto, Maya.

—   Elena.

Justo después de ahí, me di media vuelta para ignorarla. Ella halo mi brazo se me quedo viendo a la cara sin preguntarme más nada, me besó, nos comenzamos a besar descaradamente, no me importo el lugar, la gente, mis amigas, solo pensé en mi y en lo rico que se sentía besar a una mujer, nos besamos sin parar, varias canciones pasaron mientras nos besábamos, ella olvido que seguramente yo le doblaba su edad, nos besamos, lo acepto… Fue súper rico, me encanto. Me tomo de la mano con delicadeza, me halaba poco a poco, yo no sabía a dónde iba, sentía que caminaba sin rumbo, entramos al baño mientras nos seguíamos besando, ella abrió una de las puertas del baño, y me incrusto ahí adentro me empujo, me pego a la pared y empezó a besarme cada vez con más intensidad, yo no podía y sigo sin creer lo que me pasó, me moje desde el momento en el que ella comenzó a besarme, ella lo noto y comenzó a quitarme el vestido, yo le impedí y apreté sus manos ella lo entendió, pero seguía besándome diciéndome cosas al oído.

—Déjame quitarte todo ya.

— ¿Estas loca?

— ¿Estas mojada?

—Para nada, no me gustan las mujeres.

Ella me soltó se me quedo viendo por segundos, mi pulso estaba agitado, mi corazón se iba a salir de su sitio, ella se empezó a reír, haciéndome entender con sus gestos que no me creía ni una palabra, a su vez, mientras me miraba y se reía fue rozando mi parte intima, empezó a tocarme muy cerca de mi sexo, yo estaba intacta y deje ir un gemido, esa fue la clara señal que decía, por favor no pares, continua… Ella retiro hacía un lado mi panti y metió sus dedos, estaba tan húmeda que no hacía falta nada para dejarlos pasar, empezó a penetrarme con delicadeza, yo estaba fascinada con todo lo que estaba sintiendo, ya que… Jamás había tenido sexo. Pasaba su lengua por mi oído, diciéndome frases sucias, una de las pocas que recuerdo era “A la niña no le gustan las niñas pero se excita con las niñas ¿Raro no?” Yo nada más me reía, porque me encantaba todo lo que me decía, me excitaba más, me estaba haciendo enloquecer, tuve un increíble orgasmo, ella por supuesto lo noto y aparto sus dedos de mi, había dejado mi himen en un baño de una discoteca ¿Bueno comienzo en el ambiente no creen?.

Me dejo en el baño, se fue… No supe mas nada de ella, eso es lo único que recuerdo, me cogió y se fue… La muy zorra me utilizo se fue.

Me limpie un poco, salí del baño casi 20 minutos después de que ella se había ido, porque pues… Lo que me faltaba es que todo el mundo se diera cuenta que había follado en el baño con una mujer que apenas sabia su nombre, me sentí usada, ultrajada pero al mismo tiempo muy pero muy confundida, porque todo lo que había pasado me había encantado… Lave mis manos y salí con la frente muy en alto, fui por mas vasos de vodka, convine ron, vodka, cerveza, cocteles, absolutamente de todo ¿A que no adivinan?... Si… No supe absolutamente nada más de mí esa noche.

Pero eso no es lo peor, mi tragedia hasta ahora empieza.

¿Dónde estoy? ¿Y mi ropa?

¿Mierda, que? ¡Ay coño, vomite todo el suelo, que asco!

¿Mi teléfono? ¿Mi dinero?

Calma, calma… No, por suerte no me violaron, ahí estaba yo, tirada en mi cama desnuda con vomito alrededor ¿Qué pasó ayer?, me preguntaba mientras mi cabeza quería explotar, tome mi teléfono y tenía como 40 llamadas perdidas sin exagerar, eran las 3 de la tarde había dormido no se por cuánto tiempo porque no tenía idea de a qué hora había llegado, marque a Susy en ese mismo instante.

— ¿Alo?

—Marica, ¿Qué pasó ayer, como llegué a mi casa?

—Pero si es la borracha ¿Cómo amaneciste? Te llevamos casi arrastrada hasta tu casa, estaba preocupada creí que te habías muerto… Te deje comida en el micro, no puedes beber así marica, te pasas…

—Es primera vez, perdón ¿Hice algo malo?

—No tranquila, no hiciste nada lo único que decías era que Elena que no sé quién coño es era una perra lo repetiste como mil veces.

— ¿Elena? ¿Quién es Elena?

—Si, Elena, por cierto te deje un papel que estaba en tu vestido cuando te lo quite.

— ¿Qué dice?

—No sé, tú sabes que el chisme no va conmigo, revísalo tú.

Elena, Elena, Elena, Elena… Chasqueaba mis dedos mientras trataba de…. ¡ELENA! ¡Mierda, no soy virgen! Recordé todo en cuestión de segundos, me levante como pude de la cama rogando que no hubiese dicho nada mas ebria que me perjudicara, no quería que mis amigas se enteraran me daba vergüenza contarles que había follado en el baño de Why Not, y no tanto eso, que supieran que no soy Maya su amiga hetero favorito, vendría siendo Maya su amiga bisexual favorita.

Me levante, me di un baño y comí de lo que me había hecho Susy, mis papás llegaban hasta en la noche aun tenía tiempo para limpiar mi cuarto y no dejar rastro de mi borrachera de el día anterior, pase horas limpiando mientras poco a poco me venían recuerdos de lo que había pasado en el baño, mi rabia no era nada normal, porque me había dejado follar de una tipa que ni siquiera conocía, yo tenía ese sueño absurdo de que mi primera vez iba a ser especial, con rosas, con velas y esas cosas que suelen pensar las soñadoras estúpidas como yo, las “hetero como yo”. Entre tantas cosas había olvidado el recado que me dejo Susy lo de la nota, limpiando mi cuarto recogiendo las cosas del suelo, mientras limpiaba la mesa de noche al recoger mi cartera, descubrí debajo de ella el famoso papel que había olvidado, lo agarre normal sin precaución.

Hola, un placer Maya, creo que es mi turno de ser educada, soy Elena, aquí está mi número por si deseas hablar sobria y con menos ruido, te puedo invitar un café cuando digas. 04145679843

¡¿QUÉ?! ¿Es en serio?

No se en que estaba pensando, si yo soy hetero, agarre mi teléfono deje lo que estaba haciendo y llame sin pensarlo ni una vez ¿Estaba loca acaso?

— ¿Alo?

Escuche de nuevo su voz, pero esta vez sobria era evidente que me encantaba esta mujer, no pude soportarlo y colgué sin decir una palabra, los nervios me comían.

Aleje el teléfono de mí y me dije a mi misma que no la iba a llamar, que estaba loca que esta tipa me había dejado tirada en el baño, que tenía un orgullo que cuidar…. Empieza a sonar el teléfono y no sabía qué hacer, di vueltas en círculos, me agarre el cabello, empecé a saltar y deje que la llamada terminara.

Si vuelve a llamar, agarro… Pensé en voz alta ¿Y adivinen qué?... Si… ¡Volvió a llamar!

—Hola… Dije sin mucho apuro.

— ¿Alo? ¿Quién habla?

—Disculpa, yo…

— ¿Maya? ¿Tú?

— ¿Te acuerdas de mí? Dije sorprendida.

—Por supuesto, yo no estaba tan borracha como tú. Risas.

—Que pena de verdad, no debí llamar pero me mato la curiosidad.

— ¿Eres más educada sobria?

—Muchísimo más educada, no sé que me paso yo nunca había hecho eso, yo soy heterosexual.

—Si, lo pude notar ayer. Risas.

—No te rías, no es gracioso.

— ¿Quieres cenar algo?

—No, de verdad no vuelvas a llamar, disculpa la llamada, no te quería molestar, no vuelve a pasar… Perdón.

Colgué sin pensar en que peo me había metido, yo como siempre enrollándome en unas cosas absurdas, olvide todo lo sucedido y preferí hacer de cuenta de que mi virginidad seguía vigente, obvie contarles a mis amigas, no iba a contarle a nadie, iba a ser mi secreto mi pequeño secretito.

Elena:

— ¿Te animas o no te animas?

— ¡Ay pero por Dios! Exclame .

— ¿Por dios qué Elena? Desde Alexandra no has tenido nada más.

—   No es eso.

— ¿Entonces qué es?

— ¿Qué va a hacer una vieja de mi edad allá?

— ¡¿Vieja?!

—Tengo 34 mi amor.

— ¡Y bien conservadita que estas!, vamos no seas así.

Ana Luisa me convenció de ir de nuevo a antritos como si fuera una niña de 15 años, creo que ya estaba mayorcita como para eso, pero bueno… Después de lo de mi separación con Alexandra, era cierto no me había dado una oportunidad, creo que me había tomado muy en serio esto de conseguir un nuevo trabajo, hasta que conseguí el mejor. Agarre mis llaves, me puse mi mejor vestido unos buenos tacones y fui como niña de 15 años Why Not, no lo podía creer tenía años que no iba a una vaina de esas, llegue y pues... Lo mismo de siempre música que en mi vida había escuchado un montón de jovencitas todas bellas la verdad, pero jovencitas ninguna me miraba yo estoy muy anciana para ellas, una que otra me miro pero que va… Tampoco podía irme con una fea de ahí, vieja pero bien orgullosa que soy, decidí mejor dejar el show e irme a la barra a pedir whiskey, y escuchar la música de estos tiempos, observando detalladamente como las cosas no cambiaban y siempre era la misma lujuria desatada por la gente de ambiente, que de verdad… Detestaba.

Pasaron varias horas y no veía nada interesante era momento de irme, busque con la mirada a Ana pero nada que la encontraba, pero ya saben… Uno está buscando una cosa y aparece otra que necesitabas pero no estabas buscando, vi a una niñita de unos 20 años calcule por su estatura, muy linda ella, cabello castaño, y una sonrisa muy bonita… Fue lo que alcance a ver las luces y la oscuridad no me dejaban detallarla más, pedí otro whiskey para detallarla más, me parecía muy gracioso como se movía de lado a lado, era muy obvio que era su primera vez en una disco de ambiente me recordó a mí en mis tiempos, perdida como un pez fuera del agua, al parecer estaba bebiendo muy seguido yo no dejaba de mirarla, pero ella estaba más concentrada en su trago y en su plan de soy hetero, no me miren… Me pareció muy gracioso como se dirigió hacia el mesero y no soporte reír, en ese momento me di cuenta que ella se fijo en mi risa, lo peor que pude hacer fue dar la espalda como si no la hubiera mirado en toda la noche cuando la verdad era que tenía bastante tiempo viéndola.

Pasaron unos minutos y la jovencita se me acerco de una manera muy descortés, yo preferí dejarla con la palabra en la boca y no prestarle mucha atención, igual ni entendí bien lo que me había dicho creo que me dijo algo relacionado con que si ella era muy graciosa, la note problemática y preferí ignorarla, la aparentemente hetero se acerco a besarme, yo como mujer educada que soy la deje con el beso en la boca, lo volvió a intentar y cruce unas palabras con ella, vi que se molesto y se alejo y en ese momento pensé ¿Qué estoy haciendo? ¿Es linda, cual es el rollo? Le agarre un brazo y comencé a besarla, perdí el control besaba de una manera increíble, me encanto esa niña desde que la vi, le seguí el juego hasta ver a dónde íbamos a parar y bueno… Fue en el baño donde follamos como locas, ella estaba muy borracha pero sabía que le había gustado fue tanto así que me gusto que no quise dejarlo hasta ahí, ella decía muchas estupideces, yo estaba al parecer también un poco ebria, en eso le di un beso para despedirme porque mi amiga me estaba llamando al teléfono.

Mi intención era esperarla afuera y tratar de entablar una conversación con ella, pero que va… Mi amiga tenía un problema con su novia y fui a buscarla para llevarla hasta su casa y así evitar inconvenientes, pero antes, tome un papel y escribí algunas cosas para que ella pudiera tener mi numero y de repente esperar una llamada al siguiente día se lo deje en la cartera, no estaba segura de que lo iba a tener pero igual hice el intento ¿Qué podía perder? No la conocía…

Me fui muy apenada, pues ella debió pensar que la deje tirada ahí y que no me había gustado, pero… Primero mi amiga a ella la acababa de conocer y pues Ana ha sido mi amiga de toda la vida, llegue a mi casa y me acosté exhausta. Al otro día desperté como a las 9 de la mañana, recordando con una sonrisa estúpida lo que había pasado la noche anterior, me puse mi tenis y salí a correr como de costumbre.

Todo el día estuve esperando su llamada, pero al parecer no iba a tener el valor para llamarme, pensé en que fui una estúpida y que debí yo de guardar su número, aunque quizá iba a ser muy precipitado... Se hicieron las 5 y algo de la tarde y ¡BAM! Tenía una llamada de un número desconocido en mi teléfono, conteste súper rápido pero me colgaron, era obvio que era ella, volví a llamar y no contesto, pero dije: “Bueno, la tercera es la vencida”. Y así fue, Maya como creo que era su nombre o lo poco que le había entendido me contesto, estaba muy nerviosa y obviamente era otra persona, yo trate de ser la misma pero no me salió, ella estaba sobria y asustada, me sentí un poco apenada y pues lo que esperaba sucedió, se lavo las manos como toda heterocuriosa y dejo las cosas hasta ahí, yo simplemente prendí un cigarro me senté a pensar lo sucedido y quede en no volverla a llamar jamás.

Ya era tarde eran aproximadamente las 11pm debía dormir, para empezar a arreglar todo lo del nuevo trabajo, el material y estas cosas, y ¡Slahs! Recibo un mensaje de maya.

“ Perdón, no quise ofenderte, lo pensé mucho… ¿Podemos vernos mañana?”

Mujeres, mujeres… Pensé… Obviamente le respondí que si podíamos vernos, quedamos en una cita en el café de la calle 32, a las 3 de la tarde, bueno… No me podía quejar iba a conocer a una joven interesante de unos 20 años, lo acepto… Estaba emocionada.