Mostrando mi mujer a un mocoso - final
Esto es todo lo que pude ver la mañana siguiente, si hubo más no lo sé ni lo sabré nunca
Continua:
Estaba en mi despacho delante del ordenador, completamente impresionado por lo que acababa de ver.
Me acabo de enterar de que mi mujer se masturba y que ha llegado a un pacto de silencio con un niñato al que acaba descubrir corriéndose en sus bragas.
Guardo el archivo, borro la cámara, lo apago todo y me voy para casa, no podía quedarme en la oficina.
Por el camino, mientras conducía, mi cabeza no paraba de dar vueltas imaginándome a mi mujer tocándose y David mirándola. Nunca he visto a mi mujer haciéndose el dedillo, debe poner cara de vicio como cuando hace el amor, ¿en quién debía estar inspirándose?
Aparqué a dos manzanas de casa y dando un rodeo entré sigilosamente por una puerta trasera y de allí me deslicé como un gato hasta un armario que está en el pasillo y donde sólo guardamos la ropa de invierno, las mantas y los edredones por lo que era poco probable que me descubrieran
Ana estaba en la cocina y David en el salón, no se hablaban, pasó mas de una hora hasta oír un mínimo de movimiento
David, creo que lo mejor es que le pidas a tu madre que te venga a buscar, yo me siento muy violenta y no quiero sentirme así en mi propia casa
Pero Tía, quedamos en que nos olvidaríamos y que haríamos como si nada hubiera pasado
Tu y yo sabemos lo que pasó y no puedo sacármelo de la cabeza, me siento muy violenta y avergonzada, nadie más que tu tío me había visto desnuda
...
Entreabrí un poco la puerta del armario para poder verlos
Mira David, lo he intentado toda la mañana pero estar en casa contigo, tal y como tienes las hormonas de alborotadas me resulta imposible, me siento observada continuamente, casi acosada
Tía, lo siento de verdad no pude evitarlo, cuando vi la oportunidad de mirarte en la ducha todo fue superior a mí, yo nunca había visto una mujer desnuda
David, pero las cosas no se hacen así, debes controlarte
Ya lo sé Tía pero es muy difícil controlarse, tu también te masturbaste en la ducha
Ahora es Ana la que se queda en silencio
Tía, por un momento pensé que te masturbabas por mí
Pero que dices loco, no me vuelvas a sacar de mis casillas David, llevo toda la noche y lo que llevamos de mañana intentando tranquilizarme
Tía, ayer por la mañana me viste desnudo cuando entraste en mi habitación
Pero que dices
Lo hice aposta, y te quedaste mirándome, ni me despertaste ni te fuiste, te quedaste allí en silencio mirándome, yo lo sé porque te vi, no estaba durmiendo, me desnudé esperando a que entraras como cada mañana en mi habitación y me vieras...
Ante el silencio David se baja los pantalones y se muestra ante Ana que tarda en reaccionar
- Pero que estás haciendo David, basta ya, tapate, debes irte
David empezó a masturbarse lentamente mirando a Ana que no se estaba perdiendo detalle
- Para, estás loco de remate, si viene mi marido te mata
Él permanecía en silencio tocándose frente a ella
Quiero que te vayas David, ahora!!!
Shhh, no digas nada Tía, shhh
Él seguía masturbándose y Ana completamente hipnotizada no paraba de mirar como lo hacía, David le ofreció la otra mano y Ana se lo pensó varias veces pero al final se la dio y él se la acercó hasta su miembro y lo puso encima siguiendo los movimientos
- Estas loco David
David apartó la mano y dejó que Ana lo masturbara sola mientras él intentó desabrocharle la blusa
Ana paró en seco
De eso nada
Por favor tía
No David, de eso nada, si quieres acabo lo que ya he comenzado pero nada más
Ana se lamió la mano y volvió a pajearle
David dio un suspiro profundo al sentir su mano mojada de saliva apretándole la polla
- Buff tía eres lo mejor
David le puso la mano por debajo la falda pero Ana dio un salto impidiendo que la tocase
No David, se acabó, esto no tiene sentido
No Tía, por favor no me dejes así
Venga David acaba, quiero verlo - dijo sentándose en la butaca de enfrente
David volvió a pajearse solo mientras miraba a Ana y Ana no perdía detalle
Al poco Ana puso sus manos bajo su falda, se quitó las bragas y se las tiró
- Te gustan mis bragas
David ni contestó, las cogió al vuelo y se las puso en toda la cara aspirando profundamente
- Me gusta tu olor Tía
Ana se puso las manos entre las piernas por debajo de la falda y empezó su masturbación
Muéstrame las tetas tía
Ya tienes todo lo que te voy a dar, disfrútalo porque en cuanto se me acabe esto tú te irás de aquí
Se quedaron los dos mirándose y masturbándose un buen rato, David aceleraba y paraba para no correrse, sin dejar de oler las bragas y sin perder de vista a Ana
Yo tampoco podía con la escenita y me masturbaba en el interior del armario
- Me voy a correr tía
Ana se levantó y cogiendo las bragas le cubrió el pene mientras David se corría entre jadeos
Se quedaron los dos mirando un buen rato como pensando en lo que habían hecho
Tía de verdad me tengo que ir?
Ya veremos...
Al cabo de un media hora fueron hacia la piscina y yo pude salir del armario
Estaba muerto de calor entre la masturbación y el encierro, me asomé a la ventana los dos estaban tomando el sol tranquilamente, miré a mi esposa, nunca me la hubiera imaginado tan vulnerable como para hacer esto, igual es que la tengo un poco a régimen…
David estaba tomando el sol con una sonrisa de oreja a oreja, vaya suerte tiene el cabrón, le han hecho una paja de campeonato, ya me hubiera gustado a mí a su edad tener esa suerte.
Me fuí de casa dando mil vueltas por la calle hasta que regresé, los dos estaban sonrientes, nada que ver con la tensión de la mañana.
Lamentablemente el resto de su estancia en nuestra casa no lo pude ver, entré en casa a escondidas un par de veces más pero no pasaba nada, escondí la cámara en la sala, y en todas las habitaciones sin ningún resultado
No sé si pasó algo más o si Ana pudo mantener a ralla a David y creo que ya nunca podré saberlo. Tenia una mujer super decente fuera de toda duda y ahora no lo sé, eso es lo que he conseguido.