Morbo en el trabajo (01)

Otra historia de morbo, esta vez relatada dia a dia, entre una chica de la limpieza y yo.

Morbo en el trabajo

Este relato lo voy a escribir dia a dia, porque me esta pasando en estos momentos. Cuando acabe, lo subire a la pagina para que aquellos que quieran puedan disfrutar del morbo que estoy teniendo yo ahora mismo.

Desde hace poco tiempo, trabajo en un edificio de oficinas. Es enorme, monstruoso... uno de esos de cristal y acero donde los objetos de metal, e incluso el agua cuando bebes, reflejan con un chispazo todas esas porciones de electricidad estatica que vas recogiendo a lo largo del dia.

En un edificio como ese no podia faltar, por supuesto, la vigilante de seguridad y las señoras de la limpieza. No voy a mentir, como no lo he hecho en los anteriores relatos... no son, en ningun caso, unas bellezas. La vigilante de seguridad es bajita, algo fea, pero muy divertida. Morena, con el pelo negro y lacio que le cubre con media melenita. Una de las mujeres de la limpieza es mayor, tendra unos cincuenta años o mas, y se le nota ya machucheta, con ganas de terminar de trabajar para irse a casa a descansar. La otra mujer de la limpieza tendra unos treinta y cinco años, y la verdad es que le sobran unos quilos. Unos veinte quilos.

Estas son, de momento, las protagonistas. Y digo de momento porque aunque no parece que vayan a salir mas, como voy escribiendo el relato a medida que me va pasando, es posible que mas adelante salga alguna. (Sorpresa me daria, la verdad, pero como dice la cancion "soooorpreesas te da la vidaaaaa laaaa vida te da sorpresaaaaaa".

Antes de empezar, me gustaria recordaros que a mi lo que de verdad me excita es el morbo, no el hecho de follar, correrme o "meterla hasta el fondo". Alguna vez, incluso el simple gesto de una chica en un autobus pasandose la lengua por los labios mientras me miraba ha hecho que me excitara mas que el hecho de acostarme con ella.

Bueno, empiezo de una vez, que sino, no acabare nunca.

La cuestion es que cuando acabo de trabajar, y teniendo en cuenta lo mucho que me gusta conversar con la gente, suelo quedarme un rato a hablar con Maria, la de seguridad. Durante esos momentos nos reimos, hacemos el mono un rato y yo me voy para casa mas contento al salir con la mente ya despejada, mientras que Maria se queda en el edificio, con unas cuantas sonrisas entre pecho y espalda. Ultimamente, debido a que durante el verano mi horario laboral finaliza un poco antes, se han añadido a los treinta minutos de descanso las dos mujeres de la limpieza, que entran justo en ese momento. Mientras que la mayor se va pronto (no suele durar mas de cinco minutos) la otra se queda la media hora con nosotros dos, riendonos, diciendo chorradas y haciendo la vida un poco mas feliz.

La semana pasada, en una de esas conversaciones, salio el tema de los tangas. La chica de la limpieza (Susana) comento que ella siempre llevaba tanga, ya fuera verano o invierno. La verdad es que no se porque lo dije, pero aunque me lo creia perfectamente, le conteste que "seguro que no es verdad".

Ella me aseguro que si, y yo le dije que no me lo creia. Y en ese momento, Maria lo resolvio muy facilmente: "Si no se lo cree, se lo enseñas, y ya esta".

Las bromas siguieron a partir de ahi, aunque me dio a entender de una manera muy clara que no iba a dejar que lo viera, me pusiera como me pusiera. Yo, claro, de broma, le dije que me habia fastidiado la tarde. Me fui y no volvi a pensar en ello.


Empieza el relato de verdad:

Lunes

Hoy, al finalizar mi jornada laboral, he salido como todos los dias. En la puerta, donde nos paramos a hablar normalmente, estaban, como siempre, Maria, Susana y la otra mujer, hablando. Sin embargo, Susana no se ha quedado como suele hacerlo, sino que tan pronto como llegaba yo al mostrador de Maria, donde esta sentada vigilando, ha salido con la otra mujer en direccion a los vestuarios.

En un principio he pensado que incluso podria haberse molestado por la conversacion del otro dia, ya que reconozco que me puse un poco pesado. Tenia pensado pedirle disculpas cuando he visto que volvia, ya cambiada, para pedirle las llaves a Maria de los distintos departamentos donde tienen que entrar a limpiar.

Y cuando ya las tenia en las manos, se gira hacia mi y me dice:

-"Por cierto, hoy tambien llevo tanga".

Rapidamente, Maria le contesta:

  • Venga, va, pues enseñalas.

  • No, no las voy a enseñar, que aqui se ve todo por las camaras.

Yo vuelvo a lo mio:

  • Entonces es que es falso.

Y cogiendome la mano, me contesta:

  • Dime si esto es falso o no.

Y me lleva la mano al triangulito que tienen los tangas por detras, donde se unen los tres cordones. De repente, mi polla se pone mas dura que una piedra, ya que aunque le tocaba el triangulito mis dedos estaban tambien acariciando el hilo dental hacia abajo, y se hundian entre los dos molletes mofletudos del culo.

Maria, rapidamente, ha dicho algo asi como "vaya suerte tienes, ¿eh?", aunque la verdad es que yo no estaba para escucharle mucho, ya que no retiraba mis dedos de ese canalillo posterior, mientras mi polla parecia que iba a reventar. Cuando al final los he retirado de ese calido espacio, le he contestado con voz ronca y entrecortada:

  • Si, tienes razon... es... un tanga.

En ese momento, Susana se apoya en el mostrador, y mirando a Maria, le comenta:

  • ¿Ves como si que llevo tanga?

Yo no estaba para muchas conversaciones, aunque permanecia apoyado contra el mostrador para que no se me notara el bulto de mi pantalon. Entre las conversaciones, me entero de que este viernes es el ultimo dia de las dos antes de marcharse de vacaciones... un mes. Sin embargo, mis manos tenian vida propia, ya que sin yo pretenderlo, y apoyado como estaba en el mostrador junto a Susana, y de manera que Maria no lo viera, he ido acercando la mano hasta la bata de la limpieza que llevaba, y he intentando introducirla para meterle mano, ya que se que en verano no llevan ropa debajo. Meterle mano implicaba acariciarle directamente la piel suave de la ingle.

Como estaba muy lejos, no he llegado, y era ya la hora de irme. Mañana sera otro dia.


Martes

Despues de pasar una noche horrible, en la que casi no he dormido porque no he dejado de pensar en ese tanga, he decidido que la cosa tenia que avanzar un poco mas.

Hoy, nada mas llegar al mostrador, Susana ya estaba apoyada y cambiada, asi que me he acercado por detras, y he saludado como si nada. A los pocos minutos, y disimulando un cambio de posicion, y reuniendo todo el valor que he podido encontrar, le he apoyado la mano en el culo. Ella se ha sobresaltado, o al menos ha hecho un gesto como de sorpresa, mirandome de costado, pero luego a avanzado el trasero facilitandome la caricia.

Asi que viendo que no tenia nada en contra, mientras seguiamos hablando le he pasado la mano por encima de la bata de trabajo, mientras con los dedos notaba los dos abundantes gluteos que encerraban la tira del tanga, hasta alli donde la bata me dejaba.

Durante todo el dia llevaba rumiando una idea, y me veia con oportunidades de llevarla a cabo. La verdad es que cuando estas tan caliente como yo estaba hoy, no hay momento en el que no pienses como puedes aprovecharte, y las miles y miles de ideas que han pasado por mi cabeza son como arenas en la mar... se escapan de las manos de lo futiles y ligeras que son. Sin embargo, esta rondaba una y otra vez.

Me he dado la vuelta, y me he sentado al lado de Maria, mientras miraba a Susana. Entonces, le he dicho a Susana:

  • La verdad es que me gustaria hacer una prueba. Llevamos varios dias hablando de lo dura que es Maria, y que tal se comporta y cosas asi. Creo que deberiamos probar su valor.

  • Como? -me ha contestado.

  • Ven, que te lo voy a contar.- Me he acercado a su oido, y le he dicho susurrando que hiciera de matona y bravucona, a ver como reaccionaba Maria. Debido a que es mas alta que ella, y esta mas rellenita, parece mas imponente y dura, incluso con la bata de trabajo puesta. Asi que disimulando una curiosidad, y mientras Maria nos miraba con suspicacia, Susana se ha puesto enfrente de ella, con los brazos en jarras, mientras le miraba duramente y desde arriba y le decia con voz profunda y dura:

  • Oye, tu, enana, dame todo lo que tengas.

En ese momento yo, que seguia sentado detras de Susana mientras esta estaba de pie, he levantado la mano para metersela por la parte de detras de la bata, de manera que desde delante no se viera nada, el mostrador nos tapara de posibles interrupciones y yo tuviera via libre mientras mi mirada seguia "interesada" en Maria, viendo "con toda atencion" como respondia.

Al acercar mi mano, lo primero que he sentido han sido las piernas, algo juntas. Mientras Susana interpretaba ante Maria una supuesta dureza, y le decia que se mantuviera sentada que se iba a enterar, yo iba subiendo la mano, acariciando los muslos lentamente, notando esa piel suave del interior.

Y mientras notaba que la voz de Susana aumentaba de dureza y ferocidad mientras subia mi mano, de repente noto como mis dedos alcanzan un vello humedo y suave. Sigo subiendo la mano, mientras mis dedos acarician su coño, y empiezo a mover los dedos. Estos, ya humedos, han apartado con cuidado el hilo del tanga, de manera que no se vieran desde delante, y se han introducido durante unos momentos en un baño calido y suave de flujo, del coño mas humedo y deslizante que he notado nunca, y con el clitoris mas erecto que jamas mis dedos han alcanzado. Creia que me corria, ya que como he contado, me va mas el morbo que el sexo en si.

Desgraciadamente, la farsa ya estaba durando demasiado, asi que Susana, al minuto (y que minuto mas jugoso) ha avanzado hacia Maria, liberando mi mano de sus carnes, pero no de su maravilloso olor, que todavia tengo entre mis dedos.

Desgraciadamente, cada uno tenia que hacer cosas por su lado, y asi ha quedado el dia de hoy, aunque no he podido evitar el masturbarme con la mano que habia introducido, con el morbo de saber que el aroma que me llegaba y cubria mi polla era el del coño de Susana.

Mañana, mas.


Miercoles

La cosa se ha fastidiado del todo. Resulta que Susana ha llegado hoy con la regla, y claro, ante esa situacion, me ha pedido en privado que por favor lo dejaramos para septiembre. Sin embargo, hablando con Maria, me he enterado de que da masaje deportivo.

Asi que la semana que viene, el lunes, ire a su casa con un problema muscular... y unos boxers muy holgados.


Bueno, si alguna chica quiere tener una relacion morbosa via msn, ya tiene mi direccion: pedete_lucido@hotmail.com .