Monterrey, Infidelidad en trio

SECRETO

Mi nombre es Carmen, soy de Monterrey, tengo 43 años, soy casada, me considero una persona normal sexualmente hablando, de soltera fui coqueta normal pero en lo que cabe tradicional, pero les contare un secreto que nunca he contado y aprovecho esta página para expresarlo.

Cuando tenía 34 años, mi esposo continuamente viajaba a la ciudad de México, siempre lo iba a despedir al aeropuerto los domingos, en una de esas veces, habíamos tenido una reunión familiar de un cumpleaños, por eso no olvido la fecha exacta; todo fue de lo más normal, llegamos al aeropuerto lo despedí y regrese a la reunión por mis hijos, al ir en camino había una reparación en la carretera, lo que me desespero y me detuve a un Oxxo a comprar agua, ya que había tomado unas copas en la fiesta y quería despistar a los tránsitos en caso de que me los topara, saliendo del Oxxo e intentando evadir el tráfico que se hacía por la reparación tome la calle que entraba a la colonia, al avanzar como 2 cuadras aparecían muchas bodegas y  grandes y muy solas las calles, queriendo salir a mi rumbo y avanzadas como 15 cuadras no encontraba salida y eran calles muy solitarias y en una de ellas observe un señor como de 40 años asomarse por una puerta de una bodega y en su mano una cerveza, no le puse mucha atención y al dar vuelta a la siguiente calle siento algo en la camioneta, como toda mujer no hice caso y segui adelante, sin embargo la calle no tenía salida, al querer retornar sentí el volante duro, empiezo a regresar y la camioneta se movía raro, entonces baje y veo una llanta delantera ponchada, dije que mala suerte y donde estoy, a quien pido ayuda si no hay nadie, sentí algo de preocupación, no pasaron ni 5  minutos, cuando el señor que había visto con la cerveza se asoma por la esquina, eso me dio miedo y me puse nerviosa, tome el celular para hablar y no podía ni marcar, el señor camino hacia donde yo estaba, y yo me ponía cada vez más nerviosa, lo veía acercarse y eso de escuchar que te mandan a buzón, me puso más a temblar, iba vestida para fiesta y pensé lo peor, me va asaltar; cuando le faltaban como 10 metros me dice, no se asuste seño, soy el velador de las bodegas y la vi pasar y como no regresaba se me hizo raro porque las calles no tienen salidas, claro con eso no deje de temblar, ya le comento que se poncho una llanta y me dice el me ayudaba a cambiarla, que solo le decía a su otro compañero que me ayudara porque el nunca había cambiado una llanta, regreso a la esquina y le grito a su amigo, era un señor como de 50 años, ya estando los dos, me  pidieron el gato para subir la camioneta y como ni sabia donde estaba, le dije que no traía, entones movimos la camioneta frente al lugar donde había visto inicialmente al primer señor; ya sacaron unas herramientas y cambiaron mi llanta, como yo me ensucie un poco las manos, le dije al velador que si tenia agua para lavarme y me dijo que pasara al baño de su cuarto donde dormía, entre, era un lugar muy desordenado, un baño sucio, me lave las manos y salí, solo observando los botes de cerveza tirados en el suelo y bajo su cama se veía una revista de adultos; ya les dije que mucha gracias que cuanto era, me dicen no como cree seño, les comente por lo menos para sus cervezas que ya vi que les gusta mucho, solo rieron y comentaron que es domingo y esta muy aburrido ese día porque no hay movimiento en las bodegas, yo bromeándoles les contesto si, ya vi como se desaburren con esa revista que tienen bajo la cama, rieron y se apenaron echándose la culpa uno al otro, empezamos a platicar un poco y me invitaron una cerveza, dije bueno una más que más da, comenzamos la plática, Manuel era de San Luis, tenia 46 , casado pero iba cada 3 meses a ver a su esposa, Pedro de 50, de Torreon, separado y total empezamos a platicar nuestras penas de matrimonio, y ya saben 3 cervezas y los wiskis que ya llevaba antes, olvide la pena, bromeamos de anécdotas de cuando eramos jóvenes,  yo les dije y que les paso, deberían conseguirse novia en vez de andar viendo revistas, tu Pedro principalmente, porque Manuel mínimo cada 3 meses ve a su mujer,  en eso ya ni como hacerle, le pedi el baño a Pedro para orinar, de regreso para bromearles , saco la revista bajo la cama y llego con ellos, empezando a bromear, debo admitir que al ver las escenas de como besan a la chica, la acarician y verla haciendo oral me éxito, y les pregunte, pues dese cuando no tenían relaciones, Pedro me dijo que ya tenia mas de 2 años y Manuel más de 3 meses, les dije se les va echar a perder por falta de uso, Pedro estaba parado cerca de mi y le dije, 3 es mucho tiempo y le toque su pene sobre el pantalón, sobándoselo y sentí como se fue poniendo duro, eso me hizo sentir bien, tanto tiempo si esa sensación de que un hombre se exitara con mis caricias suaves, le baje el cierre y le saque su pene, un poco más grande que mi esposo, desde soltera años si ver uno distinto al de casa, empece a masturbarlo y no paso ni el minuto cuando eyacula, fue algo altamente satisfactorio, saber que te desean y ver como salta, su olor y muy espeso, cayo un poco en mi vestido y mis manos se llenaron, le dije vaya que si tenias tiempo de no hacerlo; le digo a Manuel, y tu eres muy timido, también comencé a sobarle y casi inmeiatamente quitarle el cinturón y bajarle los pantalons, pensé al verlo en trusa se le ve grandecito el paquee, le acaricie aun en truza sus testículos y besaba sobre la truza su pene, luego se la bajo y veo algo tan delicioso, más grueso y largo que la de su amigo, no pude resistir y empece a darle sexo oral, me di gusto como 10 minutos, luego le dije termina que ya me tengo que ir, me tomo de la cabeza y casi inmediatamente termino en mi boca, me limpie con un trapo que había cerca, me levante y les dije ya me tengo que ir, gracias por la llanta, me Sali, nerviosa pero exitada, subi a mi camioneta con las piernas temblando, mi corazón latía a mil, al ir manejando tenia sentimientos encontrados, era casada, había sido infiel, aunque pensé, solo fue oral, al llegar de nuevo al Oxxo que me había parado, vuelvo a bajar por coca y agua mineral para poner a mi vestido, como mujer percibes ese olor tan característico, pensé, igual si una cuñada me pregunta me hago la ingenua como si fue mi esposo; para bajar busco mi monedero y no lo encuentro, pensé me lo robaron como puede ser, pero recordé, lo deje en la silla, por las prisas y los nervios no me acorde, me puse helada, había pensado fue solo una aventura, nadie lo sabra y jamas los volveré a ver, el pensar que tenia que regresar por mi monedero, me apenaba, pero no tuve otra, regrese y me dice  Manuel, olvido su monedero, si por eso regrese, me contesta puede venir cuando guste, pensé, es mucha tentación, le dije si claro, me entrego mi monedero y lo cheque, me dijo, no desconfie,  somos decentes, lo que paso es otra cosa y mis respetos para usted, pero no somos ladrones, le dije no se preocupe, pero ya sabe como es una, si se ven muy buenas gentes, y como usted dice, lo que paso paso, yo soy casada y espero que ustedes sean todos unos caballeros, claro que si seño, me dicen los dos, lo de hace rato nunca paso, les dije gracias, me acerco y les doy un beso en la boca a los dos y al dárselo a Manuel, le digo en broma, mi beso sabe a ti y le agarro de nuevo sobre el pantalón y siento como va creciendo de nuevo, les digo, bueno si regrese voy a aprovechar y será despedida, le digo siéntate, lo sente, le quite los pantalones y empeces de nuevo a chuparcelo, le dije, me voy a sentar sobre ti, pero lo haces despacio porque estoy en mis días fértiles y adelante no quiero riesgos, se lo bese y lo ensalibe mucho, me fui sentando poco a poco  y sentí ese dolorcito tan rico y calientito, acostumbrada desde hace años solo con mi esposo que tenia mas de un año que no me hacia trvesurs ahí, ya sentada aun acostumbrándome  le dije al otro ven tu, se acerco y empece a hacercelo oral, nunca había hecho eso, dos a la vez, sentía como estaba invadida por mi recto con algo mas grande de lo acostumbrado, me movia suave par adaptarme, mientras saboreaba otro en mi boca, asi estuve como 10 minutos, le dije al del frente, quieres venirte ya, si me dijo, les dije háganlo al mismo tiempo los dos, el empezó a moverse y empujándomelo mas dentro, yo gemia pero a su vez me callaba el pene de Pedro, sentí que ya venia y lo saque de mi boca, y lo hizo en mis labios, luego le dije a pedro, faltas tu, empece a moverme y como a los 2 minutos sentí ese chisguete caliebnte dento de mi, me quede unos segundos sin mover y me retire, me arregle rápido y les dije, ahora si ya me voy espero no se me haya olvidado nada, gusto en conocerlos. Me subi a mi camioneta, tranquila y complacida, me dije, ahora si complete de ser infiel, mi boca con olor a dos penes, mi vestido y con semen de un desconocido moviéndose dentro de mi, ya ni me pare al Oxxo por refresco ni nada, por la hora me fui directo a la reunión familiar como si nada hubiera pasado, llegue muy normal, algo distraída por lo que viví, solo me preguntaron te tardaste y te veo algo rara, solo les dije, es que se poncho una llanta.

Los domingos siguientes que iba a dejar a mi esposo, de regreso veía el Oxxo y pensaba que estarán haciendo, así paso un mes y medio y pensé, mes y medio y mi esposo ni me ha tocado, pensé, porque no, entre a la zona de bodegas y no veo a nadie, regreso y me paro en frente y no salió nadie, ya de regreso los veo que venían del Oxxo con unas cervezas y les digo, hola como están me van a invitar una, así empezó esta aventura, impuse mis reglas, les pedi arreglan bien ese cuarto que estuviera muy limpio asi como el baño, yo llegaba y nunca jamas hablarían de esto y Pedro era el que entraría por mi ano y Manuel  por adelante, aunque luego de 2 meses el orden no nos importó, después quien llegaba al Oxxo por las cervezas y cigarros esos domingos por la tarde  era yo, me encantaba ponerlos borrachitos, meduritos de pueblo, respetuosos pero con unas cervezas encime me encantaban, una vez me dijo mi esposo y ahora tu con ese vestido, esta algo coqueto, le dije, ya tenía rato sin  ponérmelo y  casi no me queda, lo voy a regalar a alguien, me contesta, no, se te ve bien aun, ufff, me dio pauta a ponerme lo que sabia que a mis dos amantes los seduciría y los disfrutara en secreto.

Como a los 9 meses Manuel regreso a su pueblo en San Luis y 2 meses después la empresa donde trabajaba Pedro cerro y se fue también a su tierra, desde ahí sigo siendo esa esposa rutinaria. celia-novio@hotmail.com