Mon petit, Mon amour. Jaime (3)

Finaliza la feliz andadura de los amigos.

Mon petit, Mon amour, Jtaime. I I I

Lunes (Tarde), me dediqué a ordenar el expediente médico de Ricardo, Lo mejor posible Esa misma noche tenía lugar la cena Y quería entregar al Doctor cohen los documentos para que llegaran a su poder ese mismo día.

Pude cumplimentar todos los documentos,.

Eran las ocho de la noche, pasé a buscar a Ada, toqué la puerta, en poco tiempo se abrió dejando ver la figura de una estupenda mujer, la cual me hizo cerrar los ojos porque era un ángel disfrazado de extraordinaria mujer. Un vestido laminado en oro moldeaba su cuerpo maravilloso, una abertura lateral dejaba entrever parte se su pierna como aseverando al observador que lo que envolvía el traje no disimulaba la veracidad de lo que dejaba entrever en su interior.

Parecía como si el tiempo se hubiera detenido para los presentes en esa cena El Doctor Mandolini acerco sus labios a mi oído y con mucho disimulo me murmuró: Tu amistad con Dios debe ser excelente para poder satisfacer el pedido de que te preste sus ángeles cuando quieres dejar idiota a todos los seres humanos con estas obras de arte, Y le contesté: La amistad que me profesa debe estar en segundo lugar, porque dentro de tu casa existe un ángel maravilloso esa es tu mujer. Evidentemente Ada era la expectativa de todos los caballeros presentes, nunca me he sentido tan orgulloso de mis compañías como la de Ada.

Rato antes de que pasemos al comedor hicimos una pequeña reunión en el escritorio entre el Doctor Cohen, mi amigo, Ada y yo. Allí fue donde entregué al Doctor Cohen las historias clínicas de Ricardo y entre su madre y yo, hicimos un breve resumen de su situación actual, el Urólogo nos comunicó que gracias a Mandolini tenia un adelanto de pequeños detalles sobre el paciente y que había dado ordenes para que me cursaran el día y la hora en que podía recibirnos, y dirigiéndose a Ada le dijo con palabras muy cariñosas que no debía hacerse problemas ya que el caso de Ricardo era mucho mas común de lo que la mayoría de la gente imaginaba.

La cena transcurrió como no era para menos, la simpatía y belleza de Ada la pusieron en el centro de todas las miradas, tanto femeninas como masculinas y yo me encontraba repleto de felicidad por ser el compañero de una mujer maravillosa.

A través de un amigo sabía el Miércoles iba a tener una entrevista con el Urólogo.

Y ese día llegó, serían pocos los minutos que separarían las dudas de la realidad, El Doctor Cohen comenzó a informarnos.

Los testículos son mas pequeños de lo que consideramos normal, pero sí, puede tener una relación sexual sin ningún tipo de problemas eso depende de la personita que tenga al lado si es una mujercita inteligente y prima el amor que ambos se puedan tener, verá usted mi estimada señora que no lo cambiará por ningún otro hombre del mundo, (Dicho esto con una amplia sonrisa de satisfacción del Dr. Cohen frente a la incredulidad de Ada).

El único inconveniente que encuentro es que sea lo suficientemente capaz de superar todas la barreras psicológicas a las cuales se pudo enfrentar a través de tanto tiempo.

Con respecto a tener descendencia no veo ningún obstáculo que lo pueda impedir. Considere a su hijo como que un adolescente cuyo único inconveniente es que tiene un pene menor que la tasa media de chicos. Pero créame que hago especial hincapié en le inteligencia de la chica que pretenderá ser su nuera.

Muchas gracias Doctor, usted nos ha allanado mucho el camino, se lo agradezco de todo corazón el habernos atendido.

Todos los días llamaba a Ricardo para saber como estaba, Y ya me había adelantado la fecha de llegada.

Ada a su vez lo extrañaba muchísimo pero seguía radiante, feliz y vivía el momento con plenitud, sabía que a Miguel no lo podría tener nunca a su lado, la diferencia de edad, el ser intimo amigo de su hijo, eran cosas que no podría superar, realmente quería a Miguel pero era realista por sobre todas las cosas.

El Viernes llegó Ricardo enarbolando su medalla las chicas y yo le hacíamos todo tipo de perrerías y él estaba feliz como pocas veces lo había visto, llevé los vasos a la cocina y Ada estaba allí me cogió la cabeza entre sus manos me besó en los labios suave, pero profundamente y con un magnífico brillo en los ojos me dijo, te amo como nunca he amado a otro ser humano, esto quería decirte.

Era las ocho de la mañana cuando sonó el teléfono, Ada lo atendió, la voz de Miguel resonó en el aparato, por favor dile a Ricardo que se ponga, espera un momento - Le dijo –

Dime, - contesto Ricardo–

¿Que tienes que hacer hasta el Lunes?

De importante, nada - respondió –

Te voy a hacer una pregunta, contesta con un si o un no. No admito otra palabra que no sean esas. ¿Sigues enamorado de mí?.

Transcurrieron varios segundos. Si. –Contestó-

Bueno, coge ropa y pasa por casa a buscarme, nos vamos al campo.

¿Que estás diciendo? - respondió asombrado -

Hoy es el gran día muchacho, te espero - y colgó -

Media hora es lo que había tardado en llegar, ¿Donde vamos? - pregunto -

Alquile una casa rural por el fin de semana, en un pueblo cercano a Mar del Tuyú, además iremos a sacar ostras mañana, eso si no te vuelves antes a Buenos Aires.

-Lo dijo en un tono misterioso -

Cuando llegaron a Mercedes pararon en un hostal para comer, el almuerzo transcurrió sin nada importante.

La casa era un bonito chalet totalmente equipado conectaron la nevera y acomodaron la comida que habían traído y Miguel encendió el calefón para bañarse, ve tú Ricardo que ahora voy yo - le dijo - Esa frase le extrañó pero no le dio importancia. Al rato entra Miguel, con una toalla anudada a la cintura, se arrodilla en el suelo poniendo los brazos sobre el borde de la bañera y se queda mirando a Ricardo.

¿Que haces? - le dijo -

Mirarte, me gustas mucho, eres muy hermoso, dicho esto sumergió la mano en el agua y comenzó a acariciarle los muslos el lo dejo hacer, además le gustaba que lo hiciera, te acuerdas cuando lo hacía en tu cama cuando cogiste a aquella rabieta así que tú también me amas ¿No?

Y lo sigo pensando -Le dijo -

Se sacó la toalla y se metió en la bañera sentados frente a frente, le cogió la cabeza con las dos manos y empezó a besarlo en los labios y a lamérselos, bajó su cabeza hasta sus senos, los saboreaba como si destilaran ambrosía, su mano comenzó a acariciar aquel pequeño miembro que estaba en total erección, Ricardo sintió un escalofrío que le recorrió todo su cuerpo, era la primera vez que alguien lo tocaba aparte de él. Miguel salió de la bañera, lo levantó en brazos y así mojado lo llevó a la cama sin dejar de besarlo. Todo su cuerpo era de una perfección femenina sin parangón, era tan perfecto como el de su madre, se entretuvo largo rato en los senos eran pequeños pero con un pezón excepcionalmente largo, lo giró y lo puso de espaldas. Ricardo, alarmado

-Preguntó ¿Que vas a hacer?. Secarte con mi boca -Respondió- Fue lamiendo cada gota que cubría su espalda, su cintura, tenía unas caderas maravillosas, lentamente con las manos separó las nalgas del muchacho y su lengua hurgaba en el ano con la avidez de un sediento y debido al calor del órgano éste se abrió como una flor, Ricardo tuvo la certeza de que en ese momento lo iba a poseer, pero, No, lo giró nuevamente y fue besando y lamiendo su pequeño miembro que lograba introducirlo fácil y totalmente en su boca, Ricardo no podía contener semejante placer sin gritar, Miguel cogió el lubricante y muy lentamente fue aplicándoselo alrededor del glande, luego se subió a horcajadas sobre él y muy lentamente se lo fue introduciendo en su propio ano, ves, - dijo - lo único que cuenta es dar placer al que tanto se quiere, Ricardo no atino a contestar nada vivía en un continuo éxtasis.

Miguel sintió que le inundaban su recto y a su vez, sin poderse contener, lo derramó sobre el vientre y los senos de su amigo.

Permanecieron unos minutos paralizados, luego Ricardo, se cubrió los ojos con su brazo.

¿Estás bien? - Pregunté -

Si, me he de bañar.

Déjame bañarte, - le suplique -

No, lo haré solo - respondió - No lo tomes a mal pero estoy muy confundido.

Te entiendo -Le respondí- Mientras lo observe pasar, no pude evitar sonreírme, menos mal que no lo noto.

Cuando salió del baño habían dado las siete, y se pusieron a cenar.

La casa constaba de dos dormitorio uno era con cama de matrimonio y el otro dos camas pequeñas.

¿Donde quieres dormir? -Pregunté- Yo lo haré en la cama grande, vine a pasar un feliz fin de semana y lo haré contigo o sintigo -Bromeó- ¿Te acuerdas quien fue el boludo que lo dijo?.

!Si¡ -Respondió- Ricardo -lanzando una carcajada- En la cama grande y hablaremos, son muchas las cosas que quiero decirte, ¿te parece bien, no?

De maravilla -Contesté- pero antes buscaremos whisky, vasos y hielo

y a partir de ahí, quiero escucharte y luego hablaré yo ¿De acuerdo?.

!De acuerdo¡

Luego de acostarnos y de beber unos tragos en silencio, Ricardo comenzó su exposición.

Desde que te conozco sufrí una atracción muy grande por ti realmente creí amarte primero por mi condición física, yo no sé si soy un hombre o una mujer, tú siempre has estado a mi lado y cuando hubo alguien que se intentaba propasar conmigo estabas tú para defenderme yo no podía hacerlo porque por lo que dijeran, siempre era verdad si me decían mariquita, que crees tú que sentía yo cuando me miraba en un espejo, era cierto, las chicas de la escuela, excepto Noemí y Mónica ninguna se acercaba a mí a todas les gustan los chicos bien machotes, tú me has mirado crees que yo soy lo que ellas quieren y cientos de cosas parecidas te podría contar, considera todos los agravios que puedan tener los chicos, gay, los homosexuales, las chicas lesbianas y las que no lo son pero que se acuestan con una mujer porque es lo mas afín a ellas que tienen cerca, porque están hartas de los supermachos que pululan por las calles del mundo, entonces apareces tú, entras en mi vida como un... voy a decir una incongruencia, un torbellino de suavidad, de delicadeza, y eso me pasa a mi que jamás podré hacer el amor con una mujer, y creo amarte y ahora sí te puedo decir con toda la sinceridad de mi alma, que te quiero mucho pero hoy me di cuenta y no me preguntes porqué, que no estoy enamorado de ti, eres mi mejor amigo más que eso eres mi hermano y por ti podría llegar a dar la vida, se que esto que te estoy diciendo te podrá doler mucho, porque ahora comprendo la frase que me dijiste en la puerta del colegio, ¿recuerdas? que como te podías sentir si tú estuvieran enamorado de mi, perdóname, pero al amigo no se le miente.

¿Has terminado? -Pregunté-

!Si¡ -Respondió-

Antes de hablar quiero hacerte una pregunta, que no tengo la menor duda que me la contestarás sinceramente. Si tú tuvieras mi físico, ¿cual entre todas las mujeres que conoces?. ¿A quien elegirías como novia para que algún día sea tu mujer?,

¿Es importante que conteste a esa pregunta? -Preguntó-

!Fundamental¡ -respondí con energía. Y por tu felicidad futura, esta vez no puedes equivocarte porque el error lo pagarás muy caro. Es más, Yo te lo haré pagar muy caro. Como si fuera tu peor enemigo.

Se quedó pensativo un rato, pero no eligiendo una mujer entre muchas, estaba pensando en si me lo decía o no, aunque yo ya conocía su nombre.

Noemí, -Contestó en voz que era un susurro.

Disculpa ¿que dijiste? no pude escucharlo, repítemelo por favor.

-Enfadado- me grita !!Noemí¡¡

Que pasa no puedes hablar tranquilamente ¿Porque me gritas de esa forma?

Perdóname, es algo que lo tenía bien guardado y que nadie lo sabía, ahora lo sabes tú.

Ahora hablaré yo -Dije- El hecho de que creías haberte enamorado de mi es muy lógico, la ausencia de tener un relación femenina, hace que te vuelques hacia tu propio sexo, no consideres que esta es una condición que solo afecta sociológicamente a los seres humanos, para nada, también es condición de los animales. Ahora bien, quien era el que siempre estuvo a tu lado incondicionalmente, quien te defendía, quien te acariciaba, resumiendo, quien era el que te quería y juro que te quiero. pues !Yo¡ y por eso creíste sentirlo conmigo. Tú te das cuenta que cuando hicimos el amor los dos. Porque no quiero que te quede duda alguna, no hemos follado. !Yo he hecho el amor contigo¡, y ¿como lo has hecho tú? ¿Como un hombre o como una mujer -Pregunté-

Como un hombre -Contestó-

Ese es el motivo porque quise que tú me poseyeras a mí y no yo a ti y te he disfrutado como pocas veces he hecho con una mujer. Así que ten siempre presente lo que te dije en ese momento. Entonces no tienes ninguna dificultad que lo hagas con una mujer, ¿cierto?

No, porque yo no estoy en la misma condición que tú.

¡¡¡Y una mierda!!! No es cierto lo que dices, tienes !Tú superas a cualquier hombre incluso a mi.¡

¡¡¡Porque dices eso si sabes positivamente que no es cierto!!!

Ese es un tema que se demuestra con hechos y no con explicaciones, no falta mucho para que tú mismo me des la razón.

Todo lo que has dicho de los chicos y chicas gay lo comparto plenamente y queda fuera de toda discusión, aunque discrepo con ellos en grandes matices, que en otro momento te explicaré. Todo lo que pasó entre nosotros para mi fue maravilloso y lo tendré siempre presente entre las cosas grandiosas que me han pasado en mi vida, pero no volverá a pasar nunca más, no te pediré disculpas porque tú lo has vivido sensacionalmente, se te veía en la cara y te aconsejo recordarlo siempre pero solo para ti y si no puedes, olvídalo, será mejor, porque es posible que puedas contarlo a la persona equivocada y hagas mucho, pero mucho daño.

Las vacaciones habían llegado y los exámenes finales olvidados, Mónica había viajado a su provincia con su flamante novio, que ya era médico para presentarlo a sus padres, Hacía dos días que Ada viajó a Brasil a pasar un mes de vacaciones, yo desde la mañana estaba ordenando mi piso, a la noche nos reuníamos los tres para la cena de fin de curso. Preparé un montón de platos, todo fríos, canapés de caviar, centolla, langostinos y diferentes tipos de salsas, en realidad todos mariscos y bastante Lambrusco bien frapé, ponche, cocktails, en el magnetofón tenía preparada una cinta con música lenta, boleros en general muy romántica, a las nueve de la noche llegó Noemí con un vestido verde oscuro con un corte extraordinario, estaba bellísima, le serví un cocktail y otro para mi nos sentamos en la pequeña barra y le dije, esta noche no pienses en nada ni en nadie solamente preocúpate por ser feliz, y no tengas ningún temor, ya sabes que estando Ricardo y yo a tu lado nada malo te puede ocurrir.

Ya lo sé -Contestó-.

Solo déjame hacer a mi, haga lo que haga déjamelo hacer. Espero y deseo con todo mi corazón que todos tus sueños se cumplan y estoy seguro que se harán realidad, le levante la cabeza y vi que sus ojos estaba empañados por dos lágrimas que pugnaban por salir. Esta no es una noche de tristezas sino de total alegría, le di en beso en la mejilla, y acariciando mi barbilla me regaló con la mejor de sus sonrisas.

Sonó el timbre, era Ricardo, fue directo a Noemí y le entregó un gran ramo de rosas rojas, unas rosas para otra -Le dijo-. Su rostro se ilumino radiante, y agradeciéndolo con un fuerte beso, me pidió un florero para arreglarlas, cortó una rosa y se la puso en el ojal a Ricardo luego hizo otro tanto conmigo, estallaba de felicidad, le sirvo una bebida y nos sentamos a la mesa los tres.

Mientras yo servía las entradas Noemí dijo, Hace un año que compartimos muchas alegrías y algunas tristezas, pero mientras me vestía para venir estuve pensando lo poco que conozco de los dos, por ejemplo de Ricardo conozco a su madre, a la cual adoro y siempre me ha tratado como a una hija y de él, sé como siente y lo gran ser humano que es, pero nada mas, sus relaciones amorosas y su íntima vida privada no conozco nada. No solamente de Ricardo, porque de ti -dijo señalándome- conozco muchísimo menos y sin embargo los adoro a los dos.

Ricardo, me miró y en su rostro desencajado, pude leer una sola palabra. -!!!Socorro¡¡¡

La cena transcurrió muy amena, los chismes de los amigos fue el plato mas sabroso, tomamos café y cuando estaba preparando los whiskys sonó un bolero de Tito Rodríguez era antiquísimo Noe me sacó a bailar lo hicimos muy juntos durante tres o cuatro boleros, le besé la nariz y le dije -nunca me sentí mejor en los brazos de ninguna mujer como en los tuyos, esta noche te amo, pero Ricardo esta deseoso en bailar contigo, -se rió-, y nos acercamos a él, la dama quiere danzar contigo, Noe se rió diciéndome anticuado.

Los veía bailar y ella comenzó a acariciarle la nuca y en un momento me pareció verla como lo besaba muy cerca de los labios, fui hasta el atenuador de la luz y la disminuí hasta dejar una penumbra me senté en la butaca mientras sorbía el licor, se acercaron me cogió a mi y abrazándome seguimos bailando, su respiración no era normal y se apretaba contra mi, Noe, -Dije a su oído- En el cajón de la mesilla de noche de mi dormitorio hay un juego de llaves de la casa, quédate aquí tranquila con él.

No te vayas por favor -Me suplicó-. Quédate con nosotros los dos te necesitamos diciendo esto comenzó a besarme en los labios, se acerco a Ricardo y los tres parados nos besábamos yo me puse detrás de ella y mientras la continuaba besando el cuello extendí las manos y acerque la cabeza de los dos para que se besaran, mientras se mimaban le desabroché la chaqueta de Ricardo y se la saqué, luego la corbata, mientras ella muy excitada intentaba sacarle la camisa, amagó de no dejársela sacar, me acerqué a su oído y le dije, aquí tienes a la mejor mujer del mundo para ti, ahora, sácate la camisa y que pase lo que pase, me volví detrás de Noe, le bajé la cremallera del vestido y lo dejé caer en el piso, tenía unas medias de encaje que realzaban sus ya estupendas piernas, al sentir caer el vestido giró hacia mí y siguió besándome, mientras Ricardo se sacaba la camisa, le señale los pantalones y también lo sacó se dio vuelta y se lo encontró con el torso desnudo de Ricardo, le acarició los hombros y bajó sus manos hasta el pecho cuando acaricio sus senos giró la cabeza y me miró extrañada, no dije nada, le tomé la cabeza con mi mano y acerque su boca a ellos comenzó a besarlos con mas y mas entusiasmo mientras ellos se mimaban los fui desnudando y nos fuimos hacia la cama y allí continuaron ellos con sus juegos, mirándose y admirándose.

Me desnudé yo también y los tres arrodillados formando un circulo nos acariciábamos dulcemente, y nos reconocíamos, cogí la mano de ella y lentamente la fui llevando hacia los genitales de Ricardo y comenzó a rozar suavemente aquel pequeño miembro, mientras él acariciaba los de ella, los gemidos de placer de los dos me hacían excitar mas y mientras lo hacía me lamía y besaba mis labios.

Ricardo la miraba extasiado, no podía dar crédito a sus ojos la mujer que quería estaba allí, en sus brazos, me senté sobre la almohada y recosté sobre mi pecho la espalda de la chica mientras mis manos acariciaban sus pequeños y rosados senos. -Le dije a Ricardo- acércate y muy suavemente, con todo el amor que siente tu corazón, hazla tu mujer y no lo olvides jamás.

Logró introducir sin dificultad su pequeño miembro Noemí sentía un placer inconmensurable y solo era comparable al de Ricardo se decían las palabras mas tiernas que sus sentimientos le dictaban, ella giró la cabeza hacia mí y me dijo. Bésame Miguel, te necesito tanto y mímame, mis tetitas, Miguel mis tetitas. Siento que me muero de placer, así Ricardo, mas, por favor, ya no puedo mas, como él estaba arrodillado en la cama, podía ver el sexo de los dos y en un grito incontenible Noemí mojó todo el pubis de Ricardo y al cabo de unas segundos este llegó al clímax y cayó rendido en la cama yo seguí mimando a Noe y besándola hasta tranquilizarla, te quiero mi niña -Le dije-

Noe, replicó- No puedo mas, nunca creí que fuera así, tan maravilloso aunque eres tú quien lo hizo así.

No mi pequeña todo es obra de tres cosas, mientras hablaba, tanto Ricardo como Noe se hallaban con la espalda apoyada a cada lado de mi pecho y acariciaba y besaba a ambos por igual.

No, eso se lo debemos a tus caricias, y toda la ternura que has puesto sin esperar nada y amándonos a los dos, no sé porque pero siento que nos amas y quisiera hacer el amor contigo.

No, mi niña este es tu hombre y tú su mujer y nadie te hará sentir como él.

De que tdos cosas dices, -Preguntó Ricardo-

Eso te lo explicaré. Algún día.

Luego de ducharse y ya en la cocina, Miguel les decía.

Primero,tú estas enamoradísimo de Noemí y ella lo está de ti, los dos están coladitos el uno por el otro no tengo la menor duda, yo soy el testigo de haberlos unidos, Noe, no hay ofrecimiento que mas me halaga que quieras hacer el amor conmigo es el deseo mas grande en el mundo que tengo, créeme si te digo que sería el hombre mas feliz, pero te desilusionaría y además yo no puedo competir con Ricardo. Te acuerdas, Noe, el día del almuerzo lo que te dije, no me equivoqué, tu no eres para mi.

El lo miró entre incrédulo y creyendo que su amigo decía eso para hacerlo quedar bien frente a Noemí y el segundo -Preguntó-

Y los dos confiaron en mi. Y por eso quería ayudarlos.

¿Y porque ayudarnos? -Preguntó Noemí-

Ya, ya, no te apresures, tu has visto que Ricardo es diferente a lo que conoces como un hombre, pero es mejor que cualquier otro, tiene dos hermosas, tetitas que por cierto, son mas bonitas que las tuyas -Bromee-

!Tonto¡ -Me replicó, ruborizándose-

Ricardo -Le dije- quien crees que te va a comprender más que Noemí que es tu mujer.

Al oír estas palabras se iluminaron sus rostros, se besaron con toda la ternura que eran capaz.

En cuanto a las tetitas se pueden operar. ¿No?. -Sonreí- Conociendo la respuesta

¡No! Se apresuró a contestar Noe.

¿Porque? –Pregunté-

Eso, no te lo voy a decir nunca.

Son las seis de la mañana, que tal si nos vamos a desayunar a la confitería.

Salimos los tres cogidos del brazo, Ricardo se paro y enfrentándose a Noemí, le dijo, Te quieres casar conmigo, a lo que ella contesto cuando tú quieras, pero por favor que sea después de desayunar, ¿Si?

Toda la gente creía que debíamos estar locos por las risotadas que dábamos.

Entramos en el bar de San Juan y Boedo, que está abierto toda la noche, y lo más importante, recién habían llegado las medialunas

FIN

AFRODITA