Mitad real mitad fantasia, parte 3ª ultima.

Después del 2º día juntos, mi esposa, yo y un amigo álex, es sabado por la tarde , nuestro ultima noche y vamos a mirar de pasarlo lo mejor possible, mi mujer, todo y ser su primera vez el estar con otro hombre después de 14 años, tal dia como hay se ve como una profesional del amor y todo promete

17,30 de la tarde del Sábado,  nos hemos acercado al pueblo los tres para dar una vuelta, vamos vestidos pareciendo guiris, colorados del sol de esta mañana y con un atuendo muy veraniego, Silvia lleva un gorro de paja con unas gafas de sol blancas a juego con un vestido blanco corto y unas sandalias de madera atadas al tobillo, Àlex, nuestro buen amigo ahora, lleva piratas blancos con sandalias de cuero y una camiseta deportiva Nike, también con sus gafas de marca y yo, pantalón largo de lino blanco, camisa a juego, unos zapatos tipo zueco marrón y unas gafas de sol negras metálicas.

Nos hemos sentado a tomar unas cañas en una de las terrazas cerca de la playa, hablamos de todo un poco, de lo que nos gusta ver en la tele, que libros o tipo de lectura nos gusta, Àlex por lo que parece, no es muy lector es más de consumir prensa deportiva en exclusive, por lo que los libros le pesan un poco, afición que tanto yo como mi mujer Silvia si tenemos, los devoramos, los libros. Relajados y animados por las cañas frías que entran la mar de bien, nos adentramos en temas más picantes, como viene siendo costumbre estos dos días, cualquier excusa nos es válida para que un comentario sobre juegos sexuales, posiciones, partes del cuerpo o lencería salga a flote en todas las conversaciones. Nos enfrascamos en una conversación subidita de tono, no que gritemos si no que, los comentarios están a la altura de palabras más bien soeces y faltonas, como “guarra o putita” refiriéndonos a mi esposa Silvia, también Álex se le refiere como “polludo cabrón o niñato salido”, pues entorno a este estilo va la cosa, risas, caricias y miradas de complicidad.

Pasado un rato, Silvia nos pide que la dejemos ir a comprar una cosa que antes había visto, nos dice que prefiere ir sola ya que puede ser una sorpresa para esta noche, ya que va a ser la última noche juntos y que por la mañana ya no iremos, total , como nos vamos a negar, la dejamos que vaya y nos quedamos mirándola como se aleja andando por la acera del paseo marítimo y como el vestido que lleva le hace un poco de transparencia con lo que se le puede ver, mejor dicho no se le ve nada porque no lleva, pero sí que se le dibuja  el buen culo que tiene. Al volver la mirada los dos, nos reímos y Álex me confiesa estar muy caliente con ella, que le encanta habernos conocido y más dejar que se folle de esta manera a Silvia, durante el fin de semana entero. Espera que no sea la última vez, que le gustara, si estamos dispuestos, a quedar otras veces, o que nos mantengamos en contacto por msn.  Nos pedimos algo de picar, y charlamos de las cosas que le gustan de ella, a mi solo de escucharlo como me cuenta lo caliente que le pone mi mujer, ya hace que se me ponga dura, reconoce que es una mujer apasionada y activa en el sexo, abierta a probar cosas a lo que coincido y respeto y le explico todo lo sucedido hasta llegar a conocerle a él como primer contacto, para este tipo de relación, que de alguna manera, siempre fue ella la que inició estas fantasías y la que deseaba probar algo más y por fin parece habar hallado algo con lo que veo que se siente bien y la hace gozar.

Son las 19.30h, y Silvia asoma por el final del paseo andando hacia donde estamos, lleva su bolso colgado y sostiene una bolsa de papel, llega cerca de nosotros y nos propone que busquemos un buen restaurante para cenar por allí, lo de ir a jugar a casa, puede esperar, empiezo a sospechar algo atrevido y divertido, le pregunto a Álex que le parece, a lo que accede en seguida, le preguntamos por la compra y a que se debe tanto misterio y no nos quiere contar nada, nos acercamos al coche para dejar la bolsa en el maletero y nos vamos paseando a ver donde cenamos.

Llegamos a un garito lleno de gente, es un restaurante tipo vasco, de pinchos y montaditos, entremos y nos sentamos en una mesa, son todas como pequeñas barras de maderas repartidas a lo largo del pasillo que configura el restaurante de aspecto rectangular y hondo, muchos pinchos a la vista , variados, apetitosos, muchos tipos de cervezas y botellas de vino tras la barra, nos pedimos unas cervezas bien frías y nos cogemos cada uno 2 o 3 montaditos, nos volvemos a la mesa y Silvia se pone delante de mí en el taburete pegada a la pared y Àlex a su lado, a estas alturas las vergüenzas o las formalidades ya son pocas, y por cómo se hablan, el trato que se tienen Àlex y mi mujer son como dos amiguitos o una pareja de novios primerizos, con las típicas risitas sin ton ni son, palabras calientes como “espero que tanta cervecita te deje más vulnerable esta noche..”, ambiente que no escondo que me pone cachondo y alguna vez incluso apunto detalles o comentarios que favorecen a este rol que tenemos. En algún momento de calentura Àlex la ha besado, ahora ya no me pide ni perdón ni permiso y ella también hace bien normal que la bese y que le haga mimitos en el cuello…comemos, bebemos y cuando estamos saciados ya son casi las 23h. y decidimos, antes de ir a la casa, pasear para hacer que la comida baje y acabar en alguna terracita para tomar algún cóctel o copa, andamos por las calles estrechas a lo que parecen del casco antiguo del  pueblo y al final de una de ellas se oye mucho ruido, como de una cabalgata o fiesta grande, cada vez se oye mas el ruido y la música, que por el estilo que hay no es de fiesta mayor, parece más bien algún tipo de concierto, llegamos a doblar la última esquina y entre focos de colores, la gente y la música house a toda pastilla, se ve como unos chicos encima una tarima pinchando música y mucha publicidad de Monster, una bebida energética, la verdad no está nada mal, yo y mi mujer nos miramos, notamos como ese ambiente no és mucho ya para nosotros pero al momento Álex la coge de la mano y la se meten dentro de una melé de gente saltando. Hago el intento de seguirlos pero entre la gente les pierdo de vista, me meto me meto, chicos, chicas sudados saltando, bebiendo, gritando eso es una locura y sigo sin verlos, voy a salirme y esperar por fuera, fin y al cabo tenemos los móviles.

Al salir por un lateral doy con una barra donde ponen esa bebida que anuncian con vodka, gin, whisky..Gratis,  me cojo uno mientras no pierdo de vista la melé con la esperanza de verlos a los dos…, pasa ½ hora y nada, ni llamada, 1 hora, son las 24.15h y cada vez hay más gente semi vestida en esa plaza, ahora la melé está ya tocando la barra donde estoy y que está abarrotada de gente pidiendo bebida, no dan abasto las tías que han puesto a ahí.

Una vez me termino el pelotazo me dispongo a rodear la melé por si ellos también han salido por otro lado, me abro paso entre locos de la música y locos del porro y la bebida, es una amasijo de gente sudada saltando y bailando, abrazándose y besándose algunos, ando pegado a las paredes de las casas que rodean la plaza y si ¡¡¡¡, parece que son ellos dos a unos 300 metros en una de las otras barras que hay, diviso el vestido blanco de Silvia pero veo que , si son ellos, este Àlex , la tiene apoyada en la pared mientras se besan efusivamente, no dejo de andar hacia allí, no de besarse ni un instante, se comen la boca a lo desesperado y se manosean, ya casi llego y veo que Álex le tiene el vestido medio levantado por detrás mientras le aprieta las nalgas con sus manos, y por lo que veo no soy el único que me doy cuenta, hay un corralillo de 3 chicos al lado de ellos que los miran descaradamente, estoy a unos 20 metros, y veo que tengo que cortar ese entusiasmos  de los dos ya que a cada cuánto va los menos más al aire le queda todo, tanto que en una de estas le puedo ver hasta el coño, suerte que al haber mucha gente pues no se dan cuenta pero esos 3 se están poniendo las botas.

Llego donde ellos, y cuando los llamo se separan de repente intentando recomponerse la ropa y todo, veo de reojo que los 3 chavales se han dado la vuelta y parece que se van, acordamos que nos vamos para la casa y salimos de aquella multitud ruidosa …tomamos una calle la cual no sabemos para nada donde va, ya sin mucho tránsito de gente, otra a la derecha y dos más a la izquierda, tenemos la sensación de habernos pedidos, preguntamos a una pareja,  que se cruza con nosotros, por el parking de la playa, que es donde tenemos el coche, y nos indica que està a 3 calles más abajo, dirección al mar, siguiendo las calles que hacen bajada.

Mientras andamos, me preguntan dónde me había metido, encima, les contesto que  les perdí de vista. En un momento me veo andando solo al lado de mi mujer, Álex se ha avanzado un poco más y la cojo por el hombro y le pregunto que qué estaba haciendo ahí delante de la toda la gente, que se le podía ver todo, ella me responde que fue un arrebato, que está muy caliente de estos días, a lo que me pregunta si me gustó verla así….joder, si claro pero… “te quiero amor, pues eres un cabrón con suerte, no?” me dice, a lo que me deja sin palabras. “te gusta ver-me bien puta ¿?”, me suelta, “y te pone cachondo ver como este me folla, verdad?”,  joder con esta, no se lo puedo negar, parece haberle cogido bien el gusto a esto tener un amante pero tiene razón, en todo,  me dice y me mira de una manera tan … de putita...que no se...y sin darme cuenta ni mediar palabra, me mete la mano por delante de los pantalones y por dentro de los calzoncillos y me agarra el pene, “que cachonda estoy cariño, me encantan tu pichilla amor, espero que se te pongo algo más cuando lleguemos a casita, tengo muchas ganas de follar”, madre mía Silvia quien me iba a decir a mi….a lo que se aparta el vestido de arribar a lado y lado de cada teta, dejándola las dos al aire mientras andamos, yo miro por si viene alguien aunque esas calles están bastante desiertas y estrechas y oscuras con muy poco luz,  Ella a mi lado, le grita fuerte a Àlex, haciendo que este se dé la vuelta y la vea andando con las tetas al aire, ella arranca a correr hasta donde él está, soltándome de golpe el pene que me tenia agarrado, este la abraza fuerte y le come los pechos en mitad de la calle mientras ella se ríe ya con un puntito de alcohol, vamos bastante entonados los tres. Se detienen  los dos mientras se abrazan y se estrujan fuerte, yo llego donde están ellos, se besan y en un movimiento rápido, apoya a Silvia en una de las paredes de una casa en aquella calle con muy poca luz, se agacha y le levanta la falta por la cintura, y le deja al aire el coño húmedo, brillante y afeitado,  le separa las muslos con las dos manos y le sorbe con fuerza el coño combinándolo con chupetones y lengüetazos, Silvia me pide que la ayude, que le sujete el vestido y lo hago , ella se frota a dos manos sus grandes tetas mientras Àlex le propina placer desde abajo, solo los sorbos de uno y los gemidos tímidos de la otra, se oyen en la calle, yo tengo la perspectiva de mi mujer de pie a mi lado, con la cabeza apoyada en la pared y la cara de gusto y los ojos cerrados y sus piernas separadas le ofrece el coño a este, viendo la boca y la lengua de Álex lamer y mordisquearle con ansia, se lo está dejando muy mojado por lo que brilla y en él se le refleja la poca luz que hay en la calle. Estamos así un buen rato, unos 15 min. y por no ir a mas allí mismo, decidimos emprender el camino a casa. Silvia se baja el vestido y se enfunda los pechos. Llegamos al parking y regresamos a la casa.

Llegamos, son la 1h. De la madrugada y estamos bastante excitados y bebidos  y algo sudados, acordamos que primero se va a dar una ducha Álex que nos lo ha pedido, luego irá Silvia y por último yo, nos pondremos cómodos y nos serviremos unas copas, ese es el plan, por ahora. Mientras se ducha Álex, me insinúa Silvia que el regalito que ha comprado me va a dejar de piedra, que me va a encantar, le insisto que me lo diga, a lo que no accede,  es un juguete ¿? o bien ropa interior??? o un DVD porno o que¡¡¡¡,  por lo menos que  me esperen ya que soy el último en ducharme. Me dice que esté tranquilo.

Sale Álex del baño solo con una toalla enrollada por la cintura y unas chanclas y ella se coge la bolsa de lo que ha comprado, me besa y se va al baño, charlo de mientras con él y dejamos listos tres mojitos y una jarra llena también de este brebaje mágico por si hay sed. Mi mujer tarda como 20 min. en salir y me dice que ya puedo entrar mientras ella envuelta en un albornoz y con la bolsa en mano se cierra en una de las habitaciones. Me ha parecido ver que se ha pintado los labios mucho, cosa que nunca…

Mientras me ducho rápido, un poco atontado por las copas que  he tomado, abren la puerta del baño y Silvia me dice “ vamos date prisa que yo ya estoy …lista”. Termino y me seco rápidamente , me enrollo también una toalla en la cintura y salgo rápido, medio mojado por algún sitio aun, salgo al pasillo a ver qué pasa con ella, ahí la veo , en mitad de la salita, delante de Álex, brazos en jarra y sonriente,  lo primero que me llama la atención es que no parece ella, unos labios pintados de rojo fuerte y los ojos pintados, combinado con el pelo muy alborotado, una camisa finita y larga hasta la cadera, de color rojo transparente donde por debajo se ven dos tetas grandes que salen por dos agujeros de lo que parece ser una camiseta o body de rejilla a juego, donde esta se une por los extremos de abajo con dos medias también de rejilla color rojo a medio muslo sujetas por  un liguero, acabando con unos zapatos de tacón negro brillante y a juego unos guantes que le cubren medio brazo que tienen el aspecto de ser muy suaves,  y a todo esto se le ve que el culo y el coño lo lleva al aire, ella gira sobre sí misma, se pavonea no tengo idea de lo que parece, lo que sí sé es que no parece mi mujer, al menos la que yo conocí hace 14 años,  Álex aun enfundado en con la toalla, le toca el culo apartando sus nalgas, ella me ve y muy lentamente, andando lascivamente,  viene hacia mí, que me he quedado apoyado en el marco de la puerta del baño mirando el fabuloso espectáculo, me da un besito con los morritos apretados y rojos, me coge la mano y me lleva hacia los sofás, donde estaba ella antes, me quedo de pie a su lado mientras me pregunta que me parece, y da una vuelta, dos, la toco, casi no puedo hablar, le contesto que me encanta, le digo que me parece fantástico, sexual, afrodisiaco, que parece una profesional del amor, por llamarlo finamente, ella me arranca la toalla dejándome desnudo y de pie , me acerca la copa de mojito, mientras le doy unos sorbos, con los que me trago medio vaso, ella me agarra el pene ya completamente duro y me lo frota con una mano, lo noto suave con el guante ese puesto, parece que tenga la mano de seda, no me aprieta mucho, más bien parecen caricias, Ella me mira seria, “una profesional del amor cariño?, no te has dado cuenta que soy una puta? Tu puta, cariño” Me da un lengüetazo en la mejilla mientras ahí de pie voy dando sorbos a mi mojito, ella se gira y se dirige donde Álex, lo coge de la mano, lo levanta del sofá, lo pone de pie enfrente mía y también le quita la toalla, le cuelga la polla como si fuera un salchichón venoso aun medio flácido, ella se pone en cuclillas entre los dos y nos empieza a manosear y chupar,  agarra cada una con una mano y chupa una , a mí, que la tengo como una piedra ya y que con 3 deditos de ella le bastan para agarrármela, luego se la chupa a él que se la sujeta por la base al lado de los huevos con toda la otra mano y lo que le cuelga aun se la podría coger con otras dos manos más, se la chupa, poco más del gordo glande le cabe en la boca, alterna las chupadas de una y otra, nos pajea , nos juntando los dos, Álex me rodea con un brazo por el hombro y nos pajea a los dos, Silvia me la suelta y me la chupa, sin manos, solo un suave moviendo coordinado de cabeza y boquita, para así poder cogérsela mejor a Álex que ya está en su máxima expresión, a Silvia le tira la polla de Álex, hace comentarios sobre lo buena que está y lo grande que la tiene,  ella me mira mientras se la está chupando…. se la tiene cogida con las dos manos, a lo que me quedo mirándolos con el pene empalmado y brillante y empiezo a tocarme al lado de ellos, “que buena puta es tu mujer Juanjo, la chupa de maravilla, se nota que le ha cogido cariño a mi polla..jejeje”, me comenta Álex, a lo que afirmo, “no imaginé nunca que fuera tan buena en esto”. Le paso la copa de mojito a Álex para que beba, mientras Silvia nos mira de vez en cuando a los dos desde abajo, me agacho un poco y le toco el coño desde atrás, está muy mojada, le digo que es una guarra, a lo que medio gira la cabeza y sin sacársela de la boca me sonríe.

Álex la tiene completamente dura, la levanta por las manos y se la lleva tirando rápidamente de una mano de ella, parecen dirigirse al fondo de la casa, a una de las habitaciones…Silvia de espaldas a mí, casi entrando en una habitación, con el atuendo rojo y su culo nalgón al aire me grita que no me mueva, que no vaya…así que me quedo de pié, en pelotas en mitad del salón, tocándome.

Pasan pocos minutos y la oigo gritar “siiii” de gusto, por lo menos han dejado la puerta abierta,  no para de gemir y gritar, también oigo a Álex que le dice cosas pero no distingo el que, ella en un momento de griterío alza la voz y me chilla a mi “Cariño me encanta que me follen, me gusta su polla, cariño¡¡¡¡”, a lo que hace que me pajee más rápido. Voy a cercarme, no aguanto, en el camino también Álex oigo que me grita”tu mujer es una zorra impresionante Juanjo, me encanta follártela,  parece una treintañera virgen”. Ya al lado de la puerta de la habitación donde están, me asomo, veo la camisa tranparente que llevaba Silvia en el suelo, y oigo que le dice bajito a él “no pares, toda, toda…” y veo que está encima la cama a 4 patas sujeta al cabezal de madera de esta, con la mirada puesta en la pared y los ojos cerrados mientras Álex des de atrás, también de rodillas, le propina unas ráfagas a golpe de cintura, veo que a cada embestida se la hunde hasta los huevos, de debe de haber ahí??? 20 o 22cm de carne juvenil ¿?, no se han dado cuenta que les estoy mirando des de la entrada, mientras, no puedo remediar el estar empalmado y acariciarme.

En un movimiento de mi mujer, se gira al lado y me ve, y con la voz muy cortada de los pollazos que le están sirviendo, me saluda y me pide que me acerque…voy, de más cerca parece que la tenga que romper, no deja de empujarle y darle palmadas en el culo, “si que eres puta, si” le digo yo, ella sonríe y me dice “si, siiii, me encanta como me folla…”. Àlex me pide que vaya al comedor que enseguida van ellos…le hago caso y me voy al salón mirándolos de reojo y mandándole un beso a Silvia que me mira y sonríe.

Estoy casi a punto de correrme en mitad del salón solo escuchándolos a los dos en la habitación, oigo que se mueven y paran, sale ella, manos caídas, sonriente, bien parece una furcia así de frente, con los morros rojos, despeinada, con las dos tetas colgando por los agujeros esos del body y el coño completamente mojado por fuera, viene andando despacio, gustándose al andar, sonríe y me lanza besos con los morritos rojos, veo detrás que aparece Álex sonriente también, algo sudado y la cara roja, la polla aun tiesa y grande se le tambalea al andar, anda detrás se ella y me hace señales para que vaya, me acerco y me dice “me tienes que ayudar , mira..”, él coge a mi mujer por la espalda y los hombros y me dice “levántale una pierna y ponla encima del sofá” lo hago y dejo a Silvia con un solo pie en el suelo, y con el cuerpo caído hacia delante y con medio cuerpo caído por encima del cabeza y hacia delante del sofá. Está completamente mojada y a nuestra merced, completamente espatarrada encima del sofá, “chúpaselo “, lo hago, no digo ni palabra, me agacho un poco y le como el clítoris y la oigo gemir, le doy lengüetazos por todo el agujero (abierto) hasta llegarle al ano, juego un poco con los dedos y la lengua y oigo que le gusta, mientras Álex muy cerca nos mira y noto que se acerca justo a mi lado y veo como  le apoya su nabo en una de sus nalgas “ahora métesela…” yo me incorporo, me cojo el pene completamente duro y recto, para penetrarla y antes de hacerlo, “ no tu no , yo hombre”, con las manos en jarra él, queriéndome acercar su polla, “como?”  le digo, “anda Cari, hazlo..?” me dice también Silvia, yo que en ese momento estaba confuso, entre excitado y caliente y algo molesto, me invade la idea que me propone y la reacción es de….. NO, tocar una polla, no??, pero veo que mi mujer me mira e insiste  en ello, con lo que se la miro, lo miro a él, él aun mirándome y haciendo para que la agarre …pues se la cojo y la acompaño hasta el agujero de su vagina, tiro de ella hasta metérsela dentro un poco y la suelto, “no, no la sueltes, sigue aguantando” , la vuelvo a coger y el la mete y la saca haciendo que resbale por mi mano, la situación es rara pero estoy excitado, noto lo que le entra a ella y como sale de mojado su polla, con la otra mano me masturbo, la mete y la saca lentamente, mi mano recorre desde su vientre y huevos hasta tocar el glande cuando la saca y de lo gorda que la tiene Álex cuando se la agarro los dedos no consiguen tocarse al otro extremos. La saca toda, “sacúdela”  se la muevo dándole golpes en el clítoris de ella, cosa que le gusta, luego se la muevo hacia el ano rosa que tiene algo dilatado de habérselo tocado un poco, pero ese cañón es mucho así de golpe, hago como si se la fuera a meter, pero no, veo como ella quiere que se lo haga, ya se ha corrido antes 2 veces y nos pide que se lo hagamos por el culo.

Entonces, aparto a Álex, y se como un poco en culo a ella, le paso un dedo , dos….y cuando veo que ya, me la cojo  y se le meto poquito a poco, ni dice nada, se lo hago despacio pero parece que quiere algo mas, con lo que pone en el suelo, la pierna que tenia levantada, junta las dos piernas y apretando y empujando rápido para que se lo haga mas deprisa….lo hace tan de prisa que me voy a correr…y me separo no quiero hacérmelo aún, cosa que no le gusta, quería seguid, no cabe decir que Álex le mueve el culo hacia donde está él de pié, haciendo que mi mujer tenga que estirar los brazos para seguir agarrada al sofá y  él me mira y me dice “ anda métesela…” yo que me la estoy meneando con una mano, me acerco y se la vuelvo a coger se la pongo cerca, ahora si , del ano ya mas grande, y empujando despacio, la desliza por mi mano y noto como moviéndola de dentro a fuera lentamente le va entrando cada vez un pedazito mas, ella gime fuerte, le pide repetidamente que siga que siga, yo no aguanto más…. Silvia se suelta una mano y me la coge fuerte y me la mena hasta que me corro en su mano y en la mía, porqué con la otra aun sigo sujetando la de Álex….me vacio entero y ella sin cerrar la boca veo como intenta sonreír  seguidamente de lo que parece un orgasmo y se agarra de nuevo al sofá y las piernas le flaquean un poco.

Ahora Álex se la está metiendo entera y se va a correr, Silvia está extasiada y llora un poco del gusto que tiene, “me corro¡¡ “ exclama Álex, a lo que mi mujer se parta y se gira poniéndose de rodillas delante de su polla la cual aun sujeto yo, “ vamos Juanjo que me corro dale ¡¡¡¡” dice él, “ anda cariño tíramela encima” me pide ella, yo que suelto mi pene ya chiquitín y rendido, se la cojo a dos manos y lo pajeo fuerte , a lo que le sale un chorro de leche que dirijo hacia la cara de mi mujer, con los ojos cerrados y sonriente, 3 y 4 ráfagas de leche le salen y que le dejan a ella la cara, las tetas y el pelo llenito del jugo del amor. Se termina de vaciar Álex encima de Silvia, mientras voy a por una toalla y limpiamos un poco todo el desorden, nos refrescamos un poco , se besan , me besa a mi Silvia, y me pide que nos duchemos juntos, cosa que accedo, mientras Álex, que no lo habíamos visto fumar en todo el finde, se sale al jardín y se prende un cigarro.

Nos duchamos entre besos y abrazos, me dice lo feliz y satisfecha que está y lo mucho que me quiere por saber y entender lo que necesitaba.

Una vez todos limpitos y agotados, nos vamos acostar…son ya las 04.h. ha sido un fin de semana agotador, excitante, lleno de emociones, creo que le hemos sacado partido a nuestro primer encuentro con otro hombre y por como he visto las cosas, parece que esto habrá que repetirlo.