Mis vecinas: El contrato.

MIS VECINAS: EL CONTRATO.

(CONTINUA DE MIS VECINAS: EL ROBO)

A los pocos minutos baje, ya con el documento y en bañador, estaban más animadas tomando algo, puse el folio sobre la mesa para que lo observaran y decía así.

CONDICIONES:

1.- ACEPTAREIS TODAS MIS PETICIONES SIN PONER LA MENOR RESISTENCIA, SEA CUAL SEA.

2.- ESTARÉIS SIEMPRE LOCALIZADAS MEDIANTE MÓVIL, POR SI NECESITO ALGO.

3.- DE LUNES A VIERNES REALIZAREIS TODAS LAS TAREAS DEL HOGAR EN MI CASA, Y ME PREPARAREIS LA COMIDA.

4.- UTILIZAREIS MIS CHEQUES SUPERMERCADO Y OS ENCARGAREIS DE COMPRAR.

5.- TENDRÉIS UNA HABITACIÓN CADA UNA EN MI CASA, DONDE SUS PUERTAS SIEMPRE PERMANECERÁN ABIERTAS, ASÍ COMO LA DEL CUARTO DE BAÑO.

6.- NO ENTRAREIS A MI HABITACIÓN SALVO QUE YO OS LO PIDA.

7.- PODÉIS PASAR AQUÍ EL TIEMPO QUE QUERÁIS, UTILIZAR MI PISCINA, TELEVISIÓN, INTERNET.......TODO.

8.- SIEMPRE BAJO MIS ORDENES ESO SI.

ACEPTAMOS:

ANA.                                    AUXI.                                          NOELIA.

J.- Bueno llevaros esto, leerlo tranquilamente y pensarlo muy bien, no hace falta que respondáis ahora

, tomaros 24 horas, pero ahora vais a hacer una cosa.

Ax.- El que?

J.- A bañaros desnudas en mi piscina. Venga quitaros los bikinis y al agua.

Las tres se quedaron de piedra, no esperaban mi petición, Ana dijo:

A.- Si hombre que te has creído?

Yo permanecí impasible sentado en mi silla, mirándolas con mis gafas de sol, estaba claro que Ana era la más rebelde, pero se que disfrutaría con todo esto, su cara de vicio me lo indicaba.

J.- No lo voy a volver a repetir, es a lo que habeis venido no? pues ya sabeis, desnudaros y al agua.

Noelia fue la primera en levantarse, tras ella, Auxi y Ana también lo hicieron, se pusieron frente a mi y comenzaron a quitarse los bikinis, primero el de arriba, sus tetas ya las había visto pero no desde tan cerca, luego se quitaron la parte de abajo, y la imagen fue perfecta, Noelia tenía un triangulo bien recortado con unos labios vaginales normales, Ana tenia una finita linea de pelo, donde acababa esta linea, sobresalían unos labios preciosos, y por ultimo Auxi tenia una linea de pelo algo más ancha que Ana con unos labios más cerrados, tras ver a estas tres bellezas mi polla se salía del bañador y dije:

J.- Vamos al agua, que voy a llamar al seguro para que venga un cristalero.

Ellas se tiraron al agua, y yo me fui a llamar por teléfono con una erección de caballo.

Cuando volví de llamar, ellas estaban tan felices en el agua, deje tres toallas sobre una silla y dije:

J.- Aquí os dejo toallas para que os sequéis.

.- Gracias.

J.- Cuando salgáis del agua, marcharos a casa y reflexionar sobre el documento que tenéis que firmar, yo me voy a mi habitación, adiós chicas.

.- Adiós. Dijeron las tres.

Desde mi habitación vi como salían del agua y se secaban, ellas a mi no me veían, se pusieron sus bikinis y se marcharon a casa, el documento lo cogió Auxi.

A media tarde llamaron a la puerta, sería  el cristalero, abrí y mi sorpresa fue que eran ellas, las tres traían una bolsa de viaje, las hice pasar, Auxi me entrego el documento firmado por las tres, me llevé una gran alegría, tardaron muy poco en pensarlo y aceptar.

J.- Bien, veo que aceptáis, estas son las llaves de la casa. ahora entraréis cuando os apetezca, los cheques del supermercado están en este cajón, comprar lo que necesitéis, apuntad vuestros móviles en ese folio y dejármelo en la mesa del salón, subid conmigo.

Les indique cual era la habitación de cada una, y yo me volví a la piscina que era donde estaba, tras un cuarto de hora, bajaron las tres en bikini y con una toalla, y dije:

J.- Cuando os bañéis aquí no llevaréis la parte de arriba, como en vuestro patio.

Las 3 a la vez empezaron a quitarse el bikini, no sin antes escuchar a Ana.

A.- Joderrrrr.......

Se tumbaron a tomar el sol, mientras yo seguía leyendo, no hablaban mucho, estaban un poco cortadas, llamaron a la puerta, ese si seria el cristalero.

Era un hombre de unos 48 ó 50 años con bigote, 1,80 y fuerte, se sorprendió al ver las tetas de las chicas, pero no dijo nada.

C.- Vengo a tomar las medidas.

J.- Muy bien.

Parecía que estaba tomando las medidas de las tetas de mis vecinas, porque estaba más pendiente de eso que del marco y el cristal.

C.- Lo que pasa es que hoy no se lo vamos a poner.

J.- Por que?

C.- Hay que cortar el cristal y son las 5 de la tarde, cuando llegue a la fabrica han cerrado, luego tiene que aceptar el presupuesto y se lo traerán mañana.

J.- Que presupuesto, si esto lo paga el seguro.

C.- No señor, los del seguro me han dicho, que usted no ha presentado denuncia, sin denuncia el cargo corre a su cuenta.

J.- Bueno usted tome, las medidas que ya llegaremos a un acuerdo, dije yo mirando a mis vecinas.

Al hombre se le ilumino la cara, y mis tres vecinas me miraron con cara de enfado,  el hombre anotó en un cuaderno las medidas y la clase de cristal y dijo:

C.- Voy a llamar a fábrica pero va a ser difícil.

El hombre se metió en el salón para hacer la llamada, yo le acompañe y antes de que marcara le dije:

J.- Le gustan mis vecinas?

C.- Si mucho, porque lo dice?

J.- Por nada, usted ponga el cristal hoy, y a coste cero, que alguna alegría se va ha llevara.

El cristalero alucino, no se lo creía por la cara que puso, cogió su móvil y llamo a la cristalería, para dar las medidas, dijo que lo quería para esa misma tarde y a coste cero, el regalo de las vecinas le había echo cambiar de opinión y dijo:

C.- Bueno, pues va a ser posible tener el cristal para esta tarde, y la empresa se hace cargo del coste, vendré en una hora a ponerlo, ahora que me estaba diciendo de las chicas?.

J.- Que chica le gusta más?

C.- No lo se, me gustan las tres, pero siempre me han gustado las que tienen las tetas grandes.

J.- Entonces su petición esta clara, Auxi la chica castaña del pelo liso es la que más tetas tiene, no se preocupe sera suya.

C.- De verdad?.

J.- Esas tetazas seran suyas esta tarde, ya lo vera, .........usted ponga el cristal esta tarde,......... imagino que no vendrá solo, que se marche su compañero, y le aseguro que disfrutara.

C.- En una hora estamos aquí.

Volví a la piscina, se estaban bañando las 3, me invitaron a bañarme con ellas, pero no lo hice.

J.- Vais a salir esta noche?

Ax.- Podemos?

J.- Si claro, podéis hacer lo que queráis.

A.- Pues si saldremos, te quieres venir con nosotras?

J.- No, mañana trabajo, hoy he tenido que salir antes, y tendré mucha tarea.

Estuvimos charlando toda la tarde, parecíamos amigos de toda la vida, yo me reía con sus historias y ellas bebían bastante, les encantaba ir a la nevera a por más cerveza, dieron las 6 y puntual llego el cristalero, venia acompañado de otro tipo aun mayor que el, y más gordo, ellas ya estaban tumbadas en las hamacas tomando el sol, le mande a Auxi que fuera a por unas cervezas para los cristaleros y se la comieron con la mirada, estaban un poco borrachas y tenían la risa floja, tras beberse la cerveza y colocar el cristal, los dos salieron hacia fuera y yo les acompañe, en la puerta de mi casa, se despidieron los dos cristaleros y yo volví para dentro con el que había tomado las medidas, pasamos los dos al patio y le dije que se sentara en la silla que había junto a mi.

J.- Auxi, ve a por otra cerveza para el señor.

Auxi se levantó y fue a la cocina a por la cerveza ante la mirada del hombre.

J.- Ana, Noelia, vosotras iros a casa tendréis que arreglaros para salir esta noche, recordar que mañana hay que hacer las tareas del hogar, la comida y la compra, no creo que necesite nada más de vosotras, eso si estar localizadas por si acaso, ir a la playa o hacer lo que queráis, hasta mañana.

Las dos chicas cogieron sus toallas y la parte de arriba del bikini, y tomaron la salida de mi casa por el camino se encontraron con Auxi.

Ax.- Os vais?

N.- Nos ha dicho que nos marchemos, que volvamos mañana.

Ax.- Esperarme, que me voy yo también.

Auxi, dejó la cerveza en la mesa y dijo.

Ax.- Bueno, pues yo también me voy.

J.- No, tu no.

Su cara cambio de repente, una mezcla de miedo y curiosidad se apodero de ella, su cara de buena había cambiado en un minuto. Mire a sus amigas y dije:

J.- Hasta mañana chicas pasarlo bien esta noche.

El hombre abrió a cerveza y se la bebió de un trago.

J.- Bueno Auxi, este hombre se ha portado muy bien con nosotros, nos ha puesto el cristal hoy y no lo ha cobrado, ahora te toca a ti portarte bien con el, has entendido.

Ax.- No, no le he entendido, que tengo que hacer?

J.- Quiero que se la chupes, y que le hagas una cubana. Con eso estamos saldados verdad?, le pregunte al hombre.

C.- Si por supuesto.

Ax.- Lo siento pero no lo pienso hacer.

J.- Esta ben no lo hagas, mañana pondré la denuncia, y se acabaran tus vacaciones.

Ax.- No puedes hacerme esto.

J.- Si, si que puedo.

Ax.- Que quieres que haga, acabemos cuanto antes.

El hombre le hizo un gesto a Auxi para que se acercara, empezó a magrear las tetas de la joven, en un segundo Auxi tenía los pezones puntiagudos y excitados, el cristalero se desabrochó los pantalones, y se los bajo hasta los tobillos al igual que los calzoncillos, mire a Auxi y esta se arrodillo entre las piernas del señor mayor, aunque no estaba convencida de hacerlo, la situación la estaba excitando, con una mano empezó a pajear la polla de este, que estaba tiesa como un palo, tras un rato así se la metió en la boca, mientras el tipo le tocaba las tetas, Auxi se arrimo más a el y colocó la polla entre sus enormes tetas, tras un par de movimientos el hombre soltó una corrida descomunal, que dejaron llenas de leche las tetas de Auxi, esta retrocedió un metro para levantarse y dije:

J.- No te muevas, aun no has terminado.

Siguió de rodillas ante el hombre, que se subió los pantalones y tomo el camino de la puerta con prisa, me dio las gracias, le acompañé hasta la calle, cuando volví al patio Auxi seguía arrodillada y  la corrida de las tetas, ya bajaba hacia el vientre y la parte de abajo del bikini.

Ax.- Y ahora que quieres?

J.- Ponte de pie.

La mire y me di una vuelta a su alrededor, tenia los pezones excitados, las mejillas sonrojadas, pero la mirada la tenia hacia el suelo de vergüenza, la coloqué en la mesa doblada, con el culo hacia mi, sus tetas y la corrida del cristalero estaban apoyadas en la mesa, me puse tras ella con mi bañador cerca de su culo, pudiendo notar mi erección la pregunte:

J.- Te ha gustado?

Ax.- No te voy a contestar, termina por favor.

J.- Quieres que te folle yo ahora?.

Ax.- Termina, quiero irme, sigo aquí solo para que no pongas la denuncia.

J.- Eso no se lo cree nadie.

Me quite el bañador, y baje su bikini hasta la mitad de sus muslos, toque su coño con mis dedos y estaba empapada, le había encantado la escena, puse mi polla en su vagina y de un fuerte golpe, se la clave, grito mezcla de dolor y de placer, estaba muy cerradita, tenia un coño demasiado pequeño para mi polla, pero tenia todo el verano para hacerlo grande, la volví a sacar y con otro fuerte golpe se corrió de gusto, ya que los gritos y gemidos la delataron, tras unas embestidas más saque mi polla de nuevo, y la coloque en su ano, esta vez quería perforar su precioso culo, entrecortada me dijo:

Ax.- No por ahí no, por favor me va a doler, la tienes muy grande, me dolerá mucho.

Me acerque a su oído y la dije:

J.- Tranquila confía en mi, lo haré despacio, te aseguro que si te duelo lo intentaré otro día.

Escupí en mi mano, y le dí un masaje por el culo metiendo uno de mis dedos, a ella le encantaba gemía de placer, puse mi polla a la entrada del ano, y empecé a hacer fuerza, conforme entraba mi polla sus gritos eran mayores.

Ax.- Para, para me dueleeeeeeeeeeee.

J.- Hoy la voy a sacar y tendré piedad de ti, el próximo día quiero que me entregues tu culo, de acuerdo?, la dije al oído.

Auxi calló y no contesto.

Saque mi polla de su estrecho culo, y la volví a meter en su coño, ella consiguió llegar de nuevo al orgasmo, y en ese momento pensé en mi, quería correrme dentro de ella, y tras unos minutos lo hice, dejando caer mi cuerpo en su espalda, saque mi pene de ella y una cantidad enorme de leche fue saliendo de su coño por sus muslos, llegando hasta la parte de abajo del bikini, ella se giró y se puso de pie, se subió el bikini, y me pregunto:

Ax.- Me puedo ir ya?, dijo sin mirarme a la cara.

J.- No, el próximo día no seré tan bueno, quiero tu culo, y lo tendré, ya me encargaré yo de ello.

Aún tenía resto de semen en las tetas, le acaricie su preciosa cara, y dije:

J.- Ve a casa a ducharte, vuelve con tus amigas, pasarlo bien esta noche.

Ax.- Adiós.

J.- Hasta mañana.

Y se marchó de mi casa, cogiendo su bikini y su toalla.

Me puse a buscar en internet un sex-shop cercano a Conil, tenia que comprar algunos juguetes para mis vecinas, sobre todo necesitaba un dilatador anal para Auxi.

CONTINUARA.

agasan76@hotmail.com