Mis inicios (ii)

Siguen mi historia de mis inicios en el mundo gay

MIS INICIOS (II)

Hola a todos. Antes de empezar quiero que sepáis que esta historia, salvo los nombres que aparecen, es totalmente real, no hay nada inventado. Mi nombre es Javi y en la actualidad tengo 52 años, soy un hombre felizmente casado con mi mujer y tenemos dos hijos.

En el relato anterior, os conté como fueron mis inicios en el mundo gay, como fue la primera vez que meneaba una polla que no era la mía. En este os contaré un paso más allá.

Tras la primera paja, vinieron otras muchas, por las tardes acudía a casa de Jose con la excitación de pensar en lo que me esperaba. Al llegar y tras cerrar la puerta, lo primero que hacía era meterle mano, tocar su polla por encima del pantalón, pero una tarde todo cambió, al ir a tocarle me dijo

Jose: hoy no me apetece

Yo: porque

Jose: estoy cansado de hacerlo

Yo: venga tio, déjame, le dije con cara de desilusión

Jose: que no maricon, que ya estoy cansado de las pajas

Me quedé callado, cortado y con mi excitación por las nubes, le dije

Yo: venga, hago lo que quieras, pero déjame hacerte una paja

Jose: pero que guarra eres, ¿de verdad te gusta tanto mi polla?

Yo: si, me vuelve loco

Jose: y que estarías dispuesto a hacer

Yo: lo que quieras

Jose, tras pensarlo un poco, me dijo

Jose: desnúdate, con voz autoritaria

Me desnude lo más rápido que pude

Jose, aún vestido y de pie en medio del salón, me dijo

Jose: ven aquí putita, a cuatro patas

Me agache y como un perro me acerqué a el

Jose: mmm que bien, eres una buena puta, ahora desabrocha mis pantalones, desnúdame

Comencé a quitarle el cinturón, baje la cremallera de su bragueta y tiré de los pantalones, ante mi apareció su slip mostrando el bulto, aún en reposo, de su preciosa polla, la acaricié por encima pero Jose me dio un fuerte empujón que hizo que perdiera el equilibrio

Jose: quien te ha dicho que puedes tocarla, me dijo casi gritando

Yo: lo siento, pensé que,,,

Jose: no estás aquí para pensar, la putita no piensa, solo obedece

Yo: vale, lo que tu quieras

Jose: baja los slips

Se los bajé y su polla saltó como un resorte,  me quedé quieto, esperando su nueva orden

Jose: no sé si seguir, no me gusta lo que has hecho

Yo: por favor, no volverá a pasar

Jose: jaja, la putita está deseando mi polla, ¿la quieres?

Yo: si, por favor

Jose: está bien, abre la boca

Yo: que vas a hacer

Jose: ¿no te lo imaginas?, estoy cansado de que me hagas pajas y ahora quiero que me la chupes

Por mi mente había pasado este momento en muchas de mis mejores pajas, pero ahora no sabía cómo hacerlo, no sabía si me gustaría o no, ¿y si no me gustaba y Jose se enfadaba?

Jose: a qué coño esperas, que abras la boca te he dicho

Al fin , la abrí y su polla entro en mi boca, procurando que solo entrara la cabeza, así permanecimos poco tiempo

Jose: mmmm, mi primera mamada, jaja

Yo disfrutaba teniendo su capullo en mi boca, jugaba con mi lengua, me gustaba esa nueva sensación, mientras con una mano le acariciaba los huevos y con la otra se la sujetaba por la base.

Jose: pon las manos en la espalda, me dijo mientras cogía mi cabeza con las dos manos

Obedecí, sin pensar en lo que pasaría, no estaba dispuesto a que se enfadara y dejásemos de hacerlo

Una vez que puse las manos en la espalda y tuvo mi cabeza bien agarrada, haciendo un pequeño esfuerzo, me la metió entera en la boca y la dejó quieta, sintiendo la profundidad de mi garganta. Yo me ahogaba, no podía respirar y haciendo un tremendo esfuerzo, conseguí sacarla

Yo: joder Jose, casi me ahogas

Jose: jaja, no te preocupes, te acostumbraras, abre la boca

Volví a abrirla y Jose empezó a meterla, primero despacio y luego más fuerte y más adentro, follando mi boca. Yo me estaba acostumbrando a tenerla dentro, ya no me daban arcadas y esa follada que me daba, era lo mejor que me había pasado en mi corta vida.

Jose: mmm, como me gusta, así, así

Yo seguía sin tocarle y el sujetando mi cabeza, estuvimos en esa posición durante mucho, Jose era duro para correrse y eso a mi me encantaba porque podía disfrutar más de su polla. De pronto noté que me sujetaba más fuerte y que su polla entraba más en mi garganta

Jose: ohhhh siiiiii me corrrrroooooo

Quise apartarme, pero no me dejó y sentí una gran cantidad de líquido caliente, espeso y entre salado y dulce, que me llenaba la boca.

Jose: mmmmm si, traga puta, traga toda mi leche, siiiiiiii

Siguió vertiendo leche dentro de mi boca, con la polla en lo más profundo obligándome a tragarla

Jose: te gusta mi leche zorra, te gusta tragártela

No podía contestar, su polla permanecía en mi boca y seguía sujetando mi cabeza

Jose: yo creo que si, que te encanta mi leche, creo que eres una puta maricona mamapollas y traga leches

Cuando terminó de correrse y saco la polla de mi boca completamente limpia, yo estaba colorado, mis mejillas estaban ardiendo por el duro tratamiento que me había dado, mi boca tenía el sabor de su leche y me había corrido sin tocarme

Jose: pero si te has corrido y ni siquiera te has tocado, jaja

No pude decirle nada

Jose: joder, la verdad es que desde el principio sabía que esto te gustaría, pero nunca imagine que hasta el punto de correrte sin tocarte

Me encantaba la forma en que me trataba, las órdenes que me daba, la rudeza de sus palabras. Ese día me di cuenta de que me gustaba ser sometido, ser sumiso. Su sumiso

Jose: recoge todo y vístete

Tras recogerlo todo salimos con el resto de la pandilla.

A esta tarde le siguieron otras muchas, con el mismo resultado, su leche en mi boca y yo tragándomela.

Agradecería comentarios

sumisobisex@gmail.com