Mis inicios (4)
Le bese su cuerpecito para excitarla y hacerla mia.
MIS INICIOS 4
Cerré la puerta y fui al baño a orinar sintiendo una sensación de gozo al hacerlo, y al caer la orina al agua, se hacia como espumita, me saqué lo más que pude el pene y me limpié con papel, la cabecita estaba roja; salí del baño y me fui a mi recámara a acostar, tenia una sensación extraña y ardor en mi cabecita, en mi pene por dentro y por fuera, y una congestión en mi vientre y testículos que me provocaban dolor. Parece que me dormí un rato porque mi mamá me despertó para que fuera a comer, no me preguntó por Laura; así concluyó el resto del día
Tal vez por el desahogo que tuve tan fuerte no me volví a masturbar por mucho tiempo, pero sí se me paraba el pene y extrañaba mucho a mi tía por la que sentía amor y que deseaba me platicara todo lo que había sentido y lo que había pasado después de que se fue de la casa; pasarían como seis semanas cuando tuve noticias de ella, por un comentario que hizo mi mamá de que Laura iba a venir a la casa en esos días; me quedé pensando si me atrevería a preguntarle lo que deseaba saber
Cada vez que llegaba la tarde esperaba ansioso que Laura apareciera en mi casa, pero fueron días después cuando sucedió, venia contenta y muy platicadora, estaba vestida como la última vez que la ví y brillito en sus labios, me dió vergüenza cuando me miró y fue a buscarme, a solas me abrazó y me besó en la boca con fuerza como si me extrañara, me dijo como está mi hombrecito, me avergoncé un poco y me puse rojo, esto le causo risa, le dije estoy bien, extrañándote, me dijo hubieras ido a la casa, yo no puedo venir seguido a tu casa aunque lo desee y tenga ganas de verte y de hacer cositas contigo porque tu mamá sospecharía
Mi mamá salió con una vecina en lo que mi tía aprovechó para platicar conmigo, nos sentamos en la cama a ver televisión y yo nervioso esperaba que dijera algo, cuando me dice, te gustó hacer el amor conmigo, le dije que sí, me preguntó me quieres, le dije sí; entonces volteando a ver sus piernas me hizo una seña y le puse mi mano en su pierna y la empecé a acariciar, mi pene se paró y agarrándome descuidado viendo su pierna, me abrazó y me besó en los labios dejándonos caer en la cama, nos besamos mucho y cuando terminamos me dijo el día que hicimos el amor te tenia una sorpresa que te iba a gustar mucho, pero como hicimos otra cosa, no hubo tiempo para dártela, pero hoy te voy a dar esa sorpresa, solo hay que esperar a que llegué tu mamá para que no nos cache; mientras te voy a platicar algo.
En eso me atreví a interrumpirla y le pregunté que sentiste cuando hicimos el amor, y ella contestó bonito y me gustó mucho lo que me hiciste, incluso cuando llegué a mi casa seguí sintiendo la sensación del orgasmo y de tu pene dentro de mí; después de varios días se me quitó el dolor; te acuerdas que metiste tu pilín en mi vagina y que grité por el dolor, después me limpié y te dije que no había sangrado, quiero que sepas que soy virgen todavía, no me rompiste el himen, ya me revisé metiendo mi dedo en mi vagina y tengo la telita intacta. Cuando Laura me estaba diciendo esto tenia más de doce años por lo que ya entendía lo que me decía; ella tenía como diez y ocho años. Le dije me dejarías que te tocara tu vagina como lo hiciste tú y ella contestó claro que sí, casi soy tu mujercita y tú mi hombrecito; nada más tienes que hacerlo con mucho cuidado para que no me duela el hoyito de la vagina cuando metas tu dedo y cuando toques el himen no me vayas a lastimar
Llegó mi mamá y le preguntó a mi tía por su mamá, platicaron un rato y mi mamá se salió de la recámara, en ese momento mi tía me dice me deseas, le afirmé con la cabeza que sí, entonces me dijo quieres que te dé la sorpresa que traía desde hace tiempo atrás, le dije sí; yo esperaba que me diera algo en la mano, pero no, sino que se voltió hacia a mí estando sentados y sin pensarlo dos veces se levantó la blusita que hasta el cuello dejando desnudas sus tetitas, porque no tenia sostén.
Cuando le ví sus tetitas se me puso duro el pene, me excité muchísimo y me quedé con la boca abierta; sus tetitas eran pequeñas con forma de dos volcancitos terminando en punta, paraditas y firmes como si trajera sostén, tenia un pezoncito pequeño como una bolita y su areola era simétrica en redondo alrededor del pezón de un tamaño medio, su piel de tez blanca, su areola y pezón de color cafecito. Mi tía vió que me quedé como encantado sin moverme y excitada me dijo, tócame son tuyas; pasé saliva y levanté mi mano derecha, la acerqué a su tetita y con la yema de los dedos toqué su teta derecha, cuando sentí su piel suavecita, me prendí más, me emocioné tanto que sentía derretirme, me quedé en blanco, recorrí mis dedos por toda su teta para después tocar, siguiendo en círculo su areola y por último su pezoncito. Laura me dijo, eres el primer hombre que ha tocado mi cuerpecito; enseguida hice lo mismo con su otra tetita.
Emocionado como pocas veces le dije tienes unas tetitas muy bonitas y suavecitas, no dejaba de tocar, acariciar y apretar a veces sus pezoncitos que le provocaban estimulación, porque me dijo me estás incitando y luego me vas a tener que cumplir; yo estaba como niño con juguete nuevo, no quería que esto terminara, me dijo bésame los senos, al escucharla mi excitación se prendió más y sin querer le dije estoy excitado, me dijo a ver enséñamelo, me bajé el pantalón y mi pene estaba paradísimo, me lo tomó con su mano y me masturbó un poco, teniendo mi pene en su mano, me acercó sus tetas a la cara y me dijo bésamelas, me aproximé y despacio gozando el instante empecé a besar sus tetitas centímetro a centímetro sintiendo su piel, la suavidad de sus tetas en mis labios era tan provocador que empecé a gotear líquido de mi pene
Me dijo chúpame los pezones con los labios, tomé un pezoncito entre mis labios y al empezar a chupar, ella se estremeció y su piel se puso erizada apretando mi pene, me empezó a masturbar, ví que gozaba con lo que le hacia y le chupé el otro pezón, se excitó tanto que me subió el pantalón y se acostó en la cama diciéndome que por favor siguiera chupando sus pezones y su areola, mientras yo le hacia esto, sabiendo lo que debía hacer le quité la tanguita y le empecé a acariciar su panochita que no tenia vellito y al meter los dedos entre sus labios mayores frotando el área del clítoris y las piernas empezó a jadear, me dijo mama mis senos como si estuvieras tomando leche, empecé a chupar y a succionar desde sus areolas hasta los pezones suavemente y después de un rato de hacerlo, sus gemidos, estremecimientos y jadeos se hicieron más acelerados
Le separé las piernas lo más que pude, le dije que doblara las rodillas juntando los talones lo más próximo a sus nalguitas para tocarle su vagina como le había dicho y ella separó sus labios mayores con sus manos, levantó un poco la cadera apoyándose en los talones y le ví el orificio vaginal, estaba cerradito y le dije te voy a meter un dedo como tú lo hiciste para tocar tu himen, me dijo que sí, le empecé a meter un dedo y en cuanto empezó a entrar me dijo que le dolía, lo seguí metiendo y de repente sentí un tope, en ese momento me dijo ahí esta la telita no lo metas más porque me vas a lastimar, tenia caliente y babosito por dentro, le saqué el dedo y seguimos con lo demás
Prácticamente mi tía estaba excitadísima y dispuesta a todo, me quité el pantalón, le pedí que se pusiera como la vez pasada, con las rodillas dobladas pegadas al pecho, le recorrí la minifalda hasta la cintura y con su ayuda puse mi pene en el orificio vaginal y antes de que intentara penetrarla me dijo hazlo despacio; su vagina estaba lubricando porque sus labios mayores estaban mojados.