Mis inicios 2

En el relato anterior mi vecino solamente pudo hacerme debutar en el sexo oral, ahora él me penetrará por primera vez.

Luego de aquella primera experiencia con mi vecino, pasé unos días de confusión y cierto arrepentimiento por lo sucedido esa noche y una posterior ansiedad, traté de evitar cualquier encuentro cotidiano con él, ya que éramos vecinos, pero el sábado siguiente en la siesta nos juntamos camino a casa y hablamos un poquito de ese encuentro, antes de llegar a casa me dijo: esta noche te quiero visitar así que ponte bien linda para mi. Esa propuesta me llenó el estómago de mariposas, aumentó mi ansiedad y me excitó mucho.

El resto de la tarde lo usé para comprar algunas ropitas, arreglar mi dpto y depilarme toda.

En la noche me dispuse a producirme para el, me duché, puse cremas humectantes en todo mi cuerpo, me puse una colaless negra, corpiño negro, medias negras con liga, mini tableada de color gris, una remerita negra ajustada, sandalias y mi peluca peliroja tipo carré.

Llegó pepe con un regalito y una botella de vino, nos dimos un beso, cerré con llave y nos fuimos al dormitorio para estar mas ocultos. Lo dejé en la habitación y fuí al baño a pintarme un poquito y a perfumarme, cuando regresé me dijo que estaba muy linda me abrazó y me dió un profundo beso, nos sentamos a conversar de nosotros mientras tomábamos una copa de vino, se acercó y acarició mis piernas, la calentura iba en aumento, nos sentamos en la cama y comenzamos a besarnos desenfrenadamente, sus manos me acariciaban por todos lados, me dijo

  • te quedan bien las medias, entonces levanté mi falda para mostrarle las ligas y mis caderas que él no tardó en acariciar.

  • mostrame la bombachita que te pusiste, me dijo. Yo me paré y levantandome la mini le mostré la parte delantera y luego giré para mostrarle la cola.

  • qué te parece? Le dije

  • guau, que bien te queda esa tanguita y que hermoso culo tenés mi amor!, me dijo.

  • este culo está para comerselo, me dijo y se abalanzó sobre mi, me tomó las caderas y comenzó a lamer mis nalgas, su lengua y sus dedos recorrían mis nalgas mi raya, me daba unos mordiscos y chirlos que me hacían gritar.

  • quien iba a pensar que tengas este orto, me decía mientras me seguía comiendo las nalgas.

Yo estaba muy excitada porque toda esa escena la veía reflejada en el espejo de mi guardaropa

  • vení chupame la pija, me dijo recostandosé en la cama.

Le fuí desabrochando su camisa y luego su pantalón hasta dejarlo totalmente desnudo todo para mi, acaricié su verga, lo besé en la boca y luego recorrí su pecho, su vientre hasta llegar a su pija, estaba hermosa, gorda dura y rodeada de bellos negros que me excitaban muchísimo, lamí su pija desde la punta hasta la base una y otra vez, luego me fuí metiendo esa barra de carne en la boca lo sentía gemir, me tomó la cabeza apretandome contra su cuerpo en señal de querer acabar.

  • no mi amor, no acabés todavía, entretenete con mi colita mientras te chupo la verga, le dije mientras acercaba mi cola a su cara.

Él no tardo en subirme la pollera hasta la cintura y brindarme atenciones con sus manos y sus dedos

  • hagamos un 69, me dijo. Yo no respondí porque tenía mi boca ocupada así que crucé mis piernas por encima de su cabeza dejando mi culo bien cerca de su boca, corrió la tanguita y comenzó a abrirme el ojetito con sus dedos y su lengua. Cada vez que yo veía eso en mi espejo bozaba muchísimo.

Estuvimos un rato así hasta que me dijo

-ahora te voy a coger pero antes fijate en el regalito que te traje y usalo para mi.

  • bueno mi macho, le dije y ví que era un body con portaligas, tanguita y medias, todo en color rosado suave. Fuí al baño a cambiarme y al regresar pepe se estaba colocando un forro, se excitó mucho al verme así y yo también me excité al verme en el espejo, entonces instintivamente me agaché a chuparle la pija con el forro puesto. Pepe me acosto de espaldas separó mis piernas, corrió la tanguita, me mojo con sus dedos ensalibados y acercó su pija a mi orto yo cerré mis ojos y sentí como frotaba y presionaba su punta en mi ano, luego de un ratito ya estaba entrando su pija en mi culo, sentía algo de dolor pero el dulce de pepe con mucha paciencia esperaba y luego volvía a embestir hasta que por fin logro meterme la cabecita, luego me tomó por detras de mis rodillas, .evantó mis piernas y empezó a empujar con un poco mas de fuerza hasta metermelá entera, yo sentía que mi culo se abría mas y un placer enorme.

  • vení ponete en cuatro patas que te voy a culiar como una yegua.

  • si mi amor haceme tuya, me gusta tu pija, la quiero toda adentro. Me acomodé en la cama de modo que mi cola quedara frente al espejo, pepe se arrodilló detrás mio y me dijo que rico se te ve el culo desde arriba, apoyó su verga y con mucha facilidad la metió en mi orto. Me tomó de la cintura y me embestía con fuerza.

  • que rico cogerte así mi yegua, te gusta putita?

  • si mi amor me encanta ser tu yegua, tu perra, tu puta, dame toda esa pija. Mientras miraba en el espejo mis nalgas redondas y blancas a cada lado de los huevos redondos negros y peludos de pepe, extendí mi brazo por entre mis piernas y acaricié los huevos de pepe, él se acaballó sobre mi cola y pude ver como entraba y salía su pija de mi ano. Que placer!

Siguió así hasta que acabó dentro mio apretando mis caderas con mucha fuerza. Finalmente me la sacó y pude ver mi ano abierto, me lo acaricié y metí mis dedos hasta que yo también acabé mojando mi tanguita.

Esto también fué mérito para el, para decir que fué primero en todo.