Mis días de separación 2
Me fui adentrando en mi nuevo trabajo, ya no estaba nerviosa, mi jefe estaba más relajado, ya no me presionaba tanto, Juan Carlos fue a la oficina matriz en Monterrey por un tiempo, pero me llamaba continuamente para saber cómo iba si ya me había adaptado a mi nueva función etc
Mis días de separación 2
Me fui adentrando en mi nuevo trabajo, ya no estaba nerviosa, mi jefe estaba más relajado, ya no me presionaba tanto, Juan Carlos fue a la oficina matriz en Monterrey por un tiempo, pero me llamaba continuamente para saber cómo iba si ya me había adaptado a mi nueva función etc., nos hicimos muy buenos amigos y hasta cierto punto mi confidente.
Un día llegó a la oficina Alfonso por unos extintores y pasó a saludarme, mi jefe le saludó pero en su semblante se veía que no le agradó la visita, ya que después me dijo que los proveedores de servicio, tenían que ir al departamento correspondiente, yo le expliqué que paso a saludarme porque era mi amigo y trabajé en su empresa antes, eso aminoró su malestar.
Cuando Juan Carlos regresó a la ciudad de México, le comenté lo sucedido y le dijo a Arturo (mi jefe), que nos invitaba a comer el próximo jueves.
Llegó ese día y cual es nuestra sorpresa que había invitado a Alfonso y a Felipe a la misma, con el objetivo de presentárselos a Arturo, fue una comida muy agradable casi no se hablo más que lo necesario de trabajo y eso hizo que todos nos relajáramos. Al regresar a la oficina Arturo me comentó que le habían agradado mis ex jefes.
Al paso del tiempo me comentó Juan Carlos que yo no le era indiferente a Arturo pero por la diferencia de edades y la relación de trabajo no se animaba a invitarme a salir; yo le comenté que a mi la edad no me importaba y el caso de convivir no implicaba nada.
Al parecer se lo comentó a mi jefe ya que como a la semana, al salir de mis labores me alcanzó mi jefe y me preguntó si tendría tiempo de conversar con él y que me invitaba un café, acepté su invitación y nos fuimos a un café muy bonito por hidalgo y reforma “café bohemio” o algo así se llamaba, un ambiente muy bonito en un edificio de la época colonial amenizado por un piano, la pasé muy a gusto a pesar de que la conversación con mi jefe era un tanto seria debido a su timidez, ahí me enteré que tenía poco de haberse divorciado por conflictos con sus hijastros ya que su mujer eran sus segundas nupcias.
Que terminaron mal ya que ella le quitó prácticamente todo y le estaba costando recuperarse, le dije que yo también tenía poco de haberme separado.
Estuvimos saliendo en varias ocasiones, incluso llegó a ir a mi casa y se identificó muy bien con mis hijos sobre todo con el niño y con Vero mi hija mayor; les enviaba obsequios y conmigo se volvió mucho más atento.
Le pedí permiso de llegar un poco tare el siguiente lunes ya que tenía una invitación el fin de semana fuera de la ciudad y tenía que llevar a mis hijos a la escuela a inscribirse, me dijo que no había problema pero que me costaría aceptar su invitación a comer el siguiente viernes, le dije que encantada y se sonrió.
Alfonso me había llamado en la semana para invitarnos un fin de semana en Cuernavaca, quería convivir con mis hijos y que lo fueran conociendo más, pues su idea era que viviéramos juntos; yo acepté pero le dije que no precipitara las cosas, que necesitábamos tiempo y ahora mis hijos eran vulnerables pues ya tenía un tiempo que su papá no iba a verlos.
El viernes me llamó temprano para decirme si pasaba por mi y nos íbamos desde ese día para aprovechar mejor la estancia en Cuernavaca, le dije que sí pero tendría que empacar mis cosas y las de los niños y se ofreció a ayudarme. Así lo hicimos mis hijos estaban muy entusiasmados con la salida y también ayudaron a empacar sus cosas y salimos rumbo a Cuernavaca cerca de las 7 de la noche.
Llegamos al hotel, nos instalamos, ya los niños venían dormidos, tuvimos que cargar a Sonia y a Fernando, Vero se agarró a mi falda y nos instalamos, eran dos habitaciones con una puerta de intercomunicación eso me agradó porque podía ver si necesitaban algo mis hijos en cualquier momento.
Acosté a mis hijas en la cama matrimonial y a Fer en una individual los arropé y siguieron durmiendo, dejé la puerta de intercomunicación abierta y pedimos de cenar en la habitación, ya que no me sentía a gusto dejarlos solos en lo que traían el servicio Alfonso se metió a bañar saliendo con sólo la toalla en su cintura le hice señas de la puerta y cogió su pijama y se regreso al baño a vestirse.
Salió con una pijama adoc al clima, era una camisa azul cielo lisa y un short haciendo juego, se veía muy bien!! Y algo excitado pues presentaba un gran bulto en su entrepierna.
Me fui a bañar me sentía sudorosa, salí con un camisón rosita que me daba a la mitad del muslo, cubriendo mis pantaletas de encaje, secando mi cabello.
Fui a ver a mis hijos, los arrope y cerré la puerta de intercomunicación, él ya se había acostado y la sabana mostraba una enorme carpa en su entrepierna, me dijo que ya me acostara, fui hacia la cama y al levantar la sabana, su pene estaba super erecto fuera del short de la pijama, le vi a los ojos me sonreí, y tomándolo entre mis manos le dije a que se debe esto?
Ël se sonrió y dijo que estaba así por mí y para hacerme los honores debidos, yo sobaba sus testículos que se notaban bastantes cargaditos, y empecé a masturbarle lentamente, me subió el camisón hasta el cuello y comenzó a besar mis senos y mordisquear mis pezones, mientras introducía su mano en mis pantaletas y acariciaba mis nalgas.
Nuestras respiraciones se fueron haciendo entre cortadas y eran disminuidos nuestros suspiros y gemidos mientras nos besábamos que ganas tenia de estar con él desde que me dijo de su invitación imaginaba que bien la pasaría y por lo que tenia entre mis manos no estaba decepcionada jeje
Nos quitamos uno al otro las prendas quedando totalmente desnudos, acariciándonos mutuamente, me levantó mi pierna colocándose en medio de mí introduciendo su glande en mi vagina, cómo me gustaba esa postura de lado con mi pierna en su cintura y la otra en vilo sostenida por su mano, y sentir como poco a poco su potente miembro se va abriendo paso hasta topar con mi cuello uterino y tomándome de mis nalgas empezar un vaivén sistemático y constante que me hizo humedecerme tanto que sentía mis jugos mojar su pene completamente y escuchar ese excitante golpeteo en mi pierna y nalga de su escroto, haciendo un musical plop plo splashh plop splash riquísimo.
Tuve i primer orgasmo mordiendo su hombro para no gritar y apretando y arañando sus nalgas, el arremetiendo fuertemente me lo metió por entero vaciando sus cargados testículos en el interior de mi matriz, fuertes disparos inundaron mi vagina y útero, besándonos con pasión, lo atraía hacia mi para que no sacara ni un milímetro de su largo y potente miembro, mientras sentía los espasmos de su pene al expulsar hasta la última gota de esperma en mí.
Siguió acariciando mis senos y quedarnos enlazados con su pene dentro de mí que mantenía cierta dureza, salió de mi sólo para voltearme de espalda a él y volverme a penetrar desde atrás, besando mi espalda y pellizcando mi pezón izquierdo.
Humedeció sus dedos y empezó a meterlos en mi ano lentamente con movimientos circulares de manera que iba distendiendo mi esfínter, así estuvo un buen rato metiendo y sacando sus dedos de mi ano, al principio me dolió al sentir cómo sus dedos estiraban mis pliegues anales pero poco a poco me fui amoldando a su caricia y con el placer que me daba su pene dentro de mi vagina, empecé a echar mis nalgas hacia atrás al encuentro de su penetración dactilar en mi culito, que ya los recibía con placer.
Cuando sintió que ya estaba lo suficientemente dilatado, sacó su pene duro y palpitante de mi vagina para abriendo mis nalgas meterlo en mi anhelante culito recibiéndolo con gran pasión suspirando y gimiendo por su continua penetración hasta alojarlo por entero en mi orificio anal arqueando mi espalda por tan grande placer. Estuvo copulando mi ano por varios minutos creo que cerca de 20 minutos, en los cuales tuve dos orgasmos mas, mojando copiosamente su mano que jugaba con mi clítoris.
Acelero sus movimientos tanto de su mano acariciando mi botón de amor como su exquisito y fogoso mete y saca de su miembro en mi ano hasta que embistiéndome hasta el fondo depositó su semen en mis intestinos, sentí tres descargas no tan potentes como las primeras en mi vagina pero igualmente deliciosas, que rica sensación al sentir palpitar su miembro dentro de mi descargando su semen, es algo riquísimo!!!.
Nos quedamos así, con su pene dentro de mí, perdiendo su dureza y vigor y llevando su mano hacia mis senos nos quedamos dormidos.
En la mañana siguiente nos arreglamos, Vero me ayudó a peinar a su hermana en lo que yo vestía a Fer y nos fuimos al centro a desayunar y de hicimos un paseo por los portales, donde Alfonso le compro unos carritos al niño y unas muñecas a las niñas, íbamos abrazado de la cintura llevando de la mano a los niños.
Regresamos al hotel, los niños querían meterse a la alberca, nos cambiamos y nos fuimos hacia la alberca los niños se metieron al chapoteadero y nosotros nos recostamos en unas tumbonas cerca de donde los niños estaban, yo llevaba un precioso bikini blanco, la parte de arriba se amarraba por detrás del cuello y la parte de abajo se anudaba a los lados con unas cintillas de la misma tela.
El traía puesto un traje de baño corto, que sin ser de tipo slip, le ajustaba tan bien que resaltaba su paquete.
Disfrutaba de esa paz que nos brindaba el lugar, era un hotel pequeño sólo eran 8 búngalos alrededor de la alberca, con un jardín grande donde estaban unos juegos infantiles, casi era para nosotros porque solo había hospedados aparte de nosotros, un matrimonio maduro, una pareja de unos 25 años y nosotros.
Nos metimos a nadar y jugar un rato con los niños, hasta que Fer se salió a jugar con sus carritos y las niñas querían ir a los columpios, les dije que fueran al fin desde ahí podíamos verlas, me recargue en el borde de la alberca, mientras las niñas corrían hacia los juegos y le decía a Fer que fuera con ellas, me dijo que al rato y siguió jugando con sus cochecitos, Alfonso se acercó detrás de mi y mientras le hablaba al niño puso su paquete en medio de mis glúteos, le dije espera… pero él volteando hacia los lados me beso en el cuello diciéndome no te preocupes estamos solos, cogiéndome de la cintura me apretó hacia él, haciéndome sentir como empezaba a crecer su pene en su traje de baño, al sentirlo sólo pare mis nalgas y sin desaprovechar mi disposición, desabrocho uno de los listones de mi bikini, haciendo que colgara en mi pierna, se sacó el pene de su traje y lo pasaba por en medio de mis nalgas entreabrí mis piernas y entonces lo introdujo hasta la mitad en mi húmeda vagina, me recargué en mis brazos, viendo hacia donde estaba mi hijo quien volteó cuando emití un leve gemido y suspiro al sentir como avanzaba su pene en mi interior.
Le dije: Fer ve con tus hermanas un ratito si? Se levantó y corrió hacia ellas.
Alfonso doblando ligeramente sus rodillas me penetro por completo agarrándome de las caderas y así empezó con un rápido y constante mete y saca, que en cada embestida hacia que despegara mis pies del suelo.
Me estuvo copulando a ese ritmo como 10 minutos más llenando mi vagina con su semen, continuó dentro de mi hasta que su pene salió por si solo al reducir su groso y tamaño lo que ayudó a que pudiera tener mi orgasmo. Abroché mi prenda y apretando mis piernas mantuve nuestras secreciones en mi vagina; salí y me recosté en la tumbona tapándome con una toalla de la cintura para abajo.
El se quedó un rato más en la alberca y al salir le llamo a los niños para cambiarnos de ropa e irnos a comer.