Mis Días con Luisa XIV
Tincho ya sabe de lo nuestro
Mis Días con Luisa XIV
Hola me llamo Luisa… Luisa María Cuello…Seguiré con mi parte en la historia…
Después de eso, la primera vez en nuestra cama, las horas, días, semanas y hasta los meses pasaron muy rápido…
Carolina fue aceptada por mis hijos y mi madre sin problemas, inclusive pasaba más tiempo con ellos de que conmigo. Mi madre la adoraba porque era una chica vivaz que siempre estaba a la par de ella, intentando aprender todo lo que le fuera posible. Mis hijos la adoraban porque era una amiga, una hermana y muchas veces hizo de madre con Mirta que se encontraba en el torbellino de la adolescencia con todos los porqué que eso implica… Faltaba la parte que más me preocupaba… Tincho! como le diría a Tincho quien era Carolina… hasta que pasó!
Una tarde en que Mirta tenía un campeonato de básquet pasamos con Eduardito a buscar a Carolina, pues como ella ya era parte de nuestra sociedad secreta siempre intentábamos realizar actividades juntos. Ese día al llegar al lugar ella se adentró primero porque necesitaba decirle algo a Mirta, no me incomodaban los secretos entre ellas porque sabía que Carolina era un buén ejemplo para mi niña, antes que entráramos ella volvió con una mueca en su rostro…
Carolina: mmm… creo que está tu marido – apuntando hacia adentro-
Nosotros: Tincho… Papá - al unísono-
Eduardito: Que hace el viejo acá?
Yo: lo mismo me pregunto…
Carolina: que hacemos?
Yo: nada, no hacemos nada… vinimos a verle a Mirta y aso vamos a hacer!
Eduardito: entremos entonces que ya está por empezar
Carolina: uuuy que tonta… le ví a tu marido y hasta se me olvido que tengo que decirle algo a la pitufa antes de que entre a jugar – y salió corriendo-
Yo: ashhh… ustedes con sus apodos…
Edu: ella es azul por lo tanto como querés que le digan a Mirta… si es una replica de ella
Yo: Mirta replica de Carolina…? – no podía creer lo que escuchaba-
Edu: ay vieja… te digo en los movimientos, los pases, todos… hasta la forma en que se para a esperar la pelota es de azul, entremos y ya vas a ver…
Entramos al lugar y ví a Tincho que estaba en la parte inferior de las gradas y Carolina hablando con Mirta un poco más alejado. Ella hablaba y Mirta asentía con la cabeza como puliendo los últimos detalles antes de la partida.
Eduardito siguió hasta donde se encontraba su padre mientras yo subí al segundo escalón y me acomodé más al medio para tener una mejor visión. Carolina pasó por frente a ellos buscándome con la vista a lo cual correspondí alzando mi mano en un saludo para que ella me encontrara, subió hasta donde yo estaba y colocó su mano sobre la mía, la sentí fría y volteé el rostro para ver de que se trataba, ella sonrió y yo con ella..
Carolina: estoy tannn… que te… ahora mismo!
Yo: uiachi… que miedo! – Riendo de su ocurrencia-
Carolina: no te rías…! – Mordiéndose el labio-
Yo: bb… no hagas eso!
Carolina: hacer qué…?
Yo: no empieces… le prometimos a Mirta que veríamos su partido… compórtate!
Carolina: no hay problema… la pitufa sabe más que vos de esas cosas!
Yo: que…? – me estaba diciendo en la cara que mi hija ya no era virgen? o lo entendí mal?-
Carolina: lo que escuchaste…
Yo: si lo escuché… pero me estás diciendo que mi nena ya es mujer y yo ni me entero…
Carolina: ououououuuuuuuuuu… no dije eso!
Yo: me dijiste que ella sabe más que yo de esas cosas…
Carolina: Sip, y en ningún momento hablé de que ella ya no era más virgen... créo!
Yo: pero es lo mismo…
Viéndole a la cara, ella no dijo nada solo negaba con la cabeza.
Carolina: te dás cuenta lo precipitada que son las madres… y después quieren que sus hijas le sean confidentes
Yo no dije nada, era cierto lo que decía… apenas escuché lo que dijo ni siquiera hice el intento por comprender y ya estaba haciendo una tempestad…
Carolina: creo que todavía estás a tiempo de rescatar la confianza con ella.
Yo: jamás… creo que con vos encontró la guía perfecta!
Carolina: Euhh… quiero que tengas con ella la misma confianza que tengo yo con mi madre… ya estoy trabajando en eso!
Pero antes que pueda seguir fuimos interrumpidas por Eduardito.
Edu: azul… quiero presentarte a mi viejo
Carolina levantó el rostro, ya que estábamos prácticamente cuchicheando las dos, y se encontró con la mano extendida de Martin…
Tincho: Mucho gusto… escuché hablar mucho de vos! soy Martín, los amigos me llaman Tincho!
Carolina: -poniendo la mejor sonrisa- mucho gusto “don”…
Y él se sentó en las gradas a su lado y Eduardito a mi lado. Podía notar lo tensa que se había vuelto la tarde con la presencia de Martín. Mi cabeza no paraba de pensar en que momento hablamos de Carolina en casa? o quién había abierto la boca? de donde Martín sabia de Carolina?
El partido empezó y todo se hizo más ligero, cuando nos dimos cuenta estábamos los cuatros abrazándonos y festejando los tantos y asistencias de Mirta. Éramos la mejor hinchada y mi hija feliz de ver a su familia apoyándola en uno de sus mejores momentos. El partido terminó, ganaron por goleada y bajamos los cuatros a felicitarle por su actuación… Todas las chicas estaban muy eufóricas con la victoria y a Tincho no se le ocurrió mejor idea que invitarlas a cenar… Pero llegando al lugar más cercano, el espacio era muy chico para tanta gente así que lo que hizo fue hacer el pedido de pizzas y gaseosas y llevarlas a todas a nuestra casa a festejar el triunfo.
Eran las once de la noche de un viernes y mi casa estaba infestada de señoritas que entraban y salían de todos lados, el que más disfrutaba era Eduardito que andaba poniendo sus ojos en alguna chiquilina. Carolina y yo nos refugiamos en la cocina a preparar las comidas y las bebidas para las mozuelas. Tincho a la hora de siempre se perdió a lo suyo dejándonos todo en nuestras manos. Cuando la cosa se calmó y notamos que alguna de las chicas ya se retiraban a sus casas fuimos hasta el refri, sacamos un par de cervezas y seguimos la conversación que había quedado cortada…
Yo: entonces a que te referías con que Mirta sabe más que yo…
Carolina: a eso… ella te habla con un profesionalismo que mamiiita, nadie va a decir que tiene tan poca edad
Yo: a sí... y de que hablan..?
Carolina: de todo… amores, desamores, tranzas, toques… enfermedades
Yo: sabes que me gusta saber de esa faceta de mi hija…
Carolina: pero no veo el porque de que yo te tenga que contar…
Yo: si… pero no tengo idea como llegarle… como empiezo a hablar con una adolescente que se cierra en su mundo o que vive prendida a un computador?
Carolina: fácil… invitándole a pasar tiempo juntas…
Yo: bb no tengo tiempo... Y el tiempo que tengo lo paso con vos!
Carolina: entonces vamos a tener que hacer cambios las dos…
Yo: a si…? o sea preferís que pase mi tiempo con Mirta… es ese el cambio?
Carolina: esperá… ya lo vamos a planificar! tampoco podemos interferir en sus actividades
Yo: ammm… importante!
Carolina: esa te gustó no…? – riendo-
Yo: sabes lo que me gustaría en este momento?
Carolina: no lo digas… Dejáme adivinar… - cerrando los ojos-
Yo: es fácil… te doy una pista? cama, tu y yo, sin ropas…
Carolina: te dije que lo adivinaría…
Yo: siiii, dos meses después…
Carolina: y si probamos tu cama…?
Yo: que oferta más tentadoora…
Carolina: y si probamos el baño primero…
Yo: no querés que te adopte también…
Carolina: y te convertiría en una madre pervertida…?
Yo: mmmm… suena bien!
Carolina: no puedo creér lo que estoy escuchando… - poniendo cara de sorprendida-
Yo: es que bb… con vos de por medio todo me suena perfecto!
Carolina: Y vamos entonces…
Yo: estás loca… la casa está repleta de gente!
Carolina: era broma… - riendo- pero que no te quepa dudas de que si estuviéramos solas no te salvarías… te comería entera!
Yo: bb… no empieces por favor
Carolina: porque… empiezan a calentar los motores…?
Yo: bb… se me hierve el agua en el carburador…
Carolina: pareces un arriero hablando así – riendo-
Yo: bien que te calienta cuando te digo cositas por el estilo al oído…
Carolina: siempre… no te miento, me hierve la sangre cuando me decís cochinadas al oído…
Yo: me dí cuenta… - riendo antes su confesión-
Carolina: y seguro que a vos no te pasa lo mismo…
Yo: noooo, para nada… -bebiendo la cerveza-
Carolina: que cara dura por favor… tenemos que sentarnos más seguido a hablar las dos… no te parece?
Yo: y si... porque en tu casa lo que menos haces es sentarte a hablar… al menos conmigo!
Carolina: pffff… si quiero hablar con alguien pago un psicólogo!
Yo: al final… a caso no querías hablar más?
Carolina: si, pero con vos prefiero que sea a calzón quitado en posición horizontal y si es de boca a boca… mejor!
Yo: claro… lo único que se te ocurre conmigo es eso! me empiezo a sentir un…
Carolina: nop… porque no tenés cara de consolador… eeeh!
Su expresión me causó tanta gracia que terminé escupiendo el trago de cerveza y atragantándome con ella. Bajé de un salto de la mesada donde estábamos sentadas de frente y empecé con un ataque de tos, los ojos se me llenaron de lágrimas, ella solo reía mientras yo me estaba desarmando.
Carolina: te ayudo…? – Sobre la mesada-
Yo no le dije nada solo asentí con la cabeza acercándome a ella, mientras no paraba de toser. Ella me tomó los brazos y los levanto luego la cabeza haciéndome ver el cielorraso y me dio dos o tres palmadas en la espalda haciendo cuña… y santo remedio!
Carolina: la próxima ya sabés a quien recurrir cuando te atragantas…
La ví a la cara con los ojos entrecerrados
Carolina: está bien no digo más… pero ya sabés eeehhh!
Yo: Por Dios! y si te callas un ratito…Dejáme respirar!
Carolina: nooo yo solo digo claro… por que si no era por mí a esta hora ya hubieras tirado las patas…
Yo: que tirado las patas… si fue tu culpa de que me atragantara!
Carolina: la culpa siempre es del negro…
Yo: te sale bien el papelito de victima – acercándome-
Ella abrió las piernas y yo me puse en medio, sus brazos alrededor de mi cuello y mis manos en sus piernas, nuestros rostros muy cerca, nuestras miradas juntas, jugó con mi cabello y esquivando mi rostro acercó sus labios a mi oreja y depositó un frío beso detrás de ella, su beso me hizo suspirar y al mismo tiempo erizarme entera, me atrajo hacia ella y estuvimos en un abrazo muy suave durante algunos minutos. Me Volvió a separar de ella y sus labios fueron a besar mi frente, cerré los ojos y me dejé llevar, sus besos empezaron a bajar por mi nariz muy despacito y tocó mis labios con su lengua, me quedé estática disfrutando de sus caricias. Sus manos empezaron a bajar y a subir por mis brazos, suavemente sus pulgares empezaron a acariciar de pasada los costados de mis pechos y yo con los ojos cerrados intentando disfrutar cada toque, ella no decía nada solo sentí su respiración en mi rostro y de vez en cuando sus labios se acercaban a los míos o simplesmente los rozaba con los suyos… sentía como mi cuerpo empezaba a reaccionar ante sus caricias, sentí como mis pechos se contrajeron dentro del brasiers y como mis pezones se endurecían con su contacto, el escalofrió era intermitente cuando uno acababa de recorren mi cuerpo el siguiente ya estaba por la mitad, permanecí quieta con los ojos cerrados disfrutando de lo que me hacia sentir con sus suaves toques, mi corazón latía loco en mi pecho y mi respiración me quería traicionar, sentí cuando sus piernas se aferraron a mi cintura atrayéndome más hacia ella, su mano bajó hasta mis nalgas y las presionó, cosa que hizo que pierda mi concentración y abriera los ojos en ese instante…
Carolina: vamos… - me dijo moviendo la cabeza-
Yo: bb… no podemos...!
Carolina: dale, un ratito… te necesito!
Yo: no puedo…
Carolina: dale porfis… quiero sentirte!
Y antes de que siga insistiendo acerqué mi boca a la suya y la callé con un beso, un beso necesitado, un beso explicativo, un beso deseado… necesitaba hacerla entender que no podíamos dejar la casa sola con todo ese mundo de adolescentes. Ella tomó mi mano y la llevó entre sus piernas, pude sentir la humedad de su sexo eso me hizo delirar, ella realmente deseaba estar conmigo en ese momento, su lengua empezó a jugar con la mía y empezó a mover sus caderas haciendo que el toque de mi mano en su sexo fuera más rudo. Con mi brazo izquierdo envolviéndola por la cintura, la atraje más al frente haciendo que sus piernas colgaran en el aire y apuré mis movimientos sobre su ropa, sus suspiros y gemidos casi no los conseguía callar, estaba en llamas… me tenia que jugar, era el momento perfecto para hacerla llegar. De un tirón la bajé de la mesada y cuando ella menos se dio cuenta metí mi mano en su short hasta llegar a su lubricado sexo, pasé de su clítoris y fui directo, dos dedos entraron hasta donde podía y su respiración seguía totalmente irregular, ella es más bajita que yo sique coloqué su rostro en medio de mis tetas intentando sofocar sus gemidos, ella estaba tan excitada, casi en el éxtasis… dos o tres mete saca, unas presiones con la palma de mi mano sobre su clítoris y sentí como su cuerpo se contraía, su falta de respiración y sus manos que se aferraron a mi espalda me dieron seguridad de que había llegado al orgasmo… me hincó las uñas cuando recuperó el aliento… y luego la risa!
Saqué mi mano mojada de su sexo y acerqué mi boca a la suya para darle un suave beso… ella me beso entre risa, luego se aparto y recostándose por la mesada con su mano en su bajo vientre…
Carolina: sos loca… casi me asfixiaste con eso – señalando mis tetas-
Yo: que querías que haga, que te deje gritar…?
Carolina: yo no grito… no mientas!
Yo: claro… dejémoslo ahí…
Carolina: te voy a denunciar por abuso…
Yo: bien que no pensabas en eso cuando me dijiste…
Carolina: pero no me refería a que me violes…!
Yo: bb, no necesito que me expliques…
Carolina: querer sentirte no significa eso justamente…
Yo: bb pero no pararías hasta conseguir… no me quedó otra!
Carolina: que asfixiarme con tus tetas…?
Antes de que pudiera contestarle entró Eduardito a la cocina...
Edu: Que..? Escuché bien…
Carolina: que escuchaste…?
Edu: q alguien – viendo a mí- te asfixió…
Carolina: si, casi me asfixia con… – poniendo sus manos en sus pechitos- tu madre!
Edu: Ché paren un poco… la casa está llena de pendejas y ustedes jugando de manos…
Yo: yo no estoy jugando de manos con nadie...
Carolina: eso es cierto… ella estaba jugando con la mano…!
Edu: que asco… con razón… pensé que eran las ellas y son ustedes dos, manga de degeneradas…
Carolina: mmm… a ver si aprendes algo de mujeres, nene… te vendría bien!
Edu: con ustedes dos no quiero aprender nada… gracias! – Saliendo de la cocina-
Carolina: después no vengás con los pantalones arremangados a pedir consejos!
Yo: porque decís eso… él te pide consejo...?
Carolina: nooo, cuando le interesa una chica me manda a sondear a ver que onda… pero nada importante!
Yo: eso me gusta… todavía no tiene edad para nada importante!
Carolina: cállate… vos te escuchas hablar alguna vez?
Yo: son mis niños, tengo que protegerlos…
Carolina: si de viejas locas como vos que solo quieren darle placer a tus hijos…
Yo: que decís...?
Carolina: que si Eduardito o Mirta te aparecen con una pareja, independientemente del sexo, quince años mayor que ellos…
Yo: esperá! a que vás con eso…?
Carolina: nos llevamos 15 años de diferencia vos y yo y tenemos el mismo sexo, por si no te diste cuenta!
Yo: y... que tienen que ver los chicos en esto…?
Carolina: Los chicos? yo veo un hombre y una mujer… hace rato dejaron los pañales, ponete eso en la cabeza!
Yo: es cierto… con la edad de Mirta yo ya estaba embarazada de Eduardito...
Carolina: no lo digo de mal... pero ya crecieron y también hacen esto que acabamos de hacer!
Yo: me dijiste que Mirta No…
Carolina: Pero vamos de nuevo… no, Mirta no! pero listo de charlas dame un beso…
Se me acerco y nos besamos despacio sintiendo el abrir y cerrar de labios, su lengua en la mía, mis brazos en su hombro, los suyos en mi cintura y estuvimos abrazadas entre besos y caricias sumidas en los pensamientos. Luego nos separamos y ella busco un par de cervecitas para seguir, volvió hasta donde estaba sentada sobre la mesada y se acomodó entre mis piernas, así con mi mano en su cuello y su mano acariciando mis piernas quedamos en silencio por un tiempo… yo pensando en lo que ella me terminaba de decir y ella sumida en lo suyo…
Carolina: sabés que me gustó…
Yo: si sé lo que te gustó… - pasándole mi mano con olor a su sexo por la cara-
Carolina: cochina… todavía no te lavaste la mano?
Yo: no, para qué ..? Me encantan tus olores – llevando mi mano a la nariz-
Carolina: Puajjjjjjjjjj… cochina! pero en serio, sabés lo que me gustó?
Yo: No, no sé de qué estás hablando…
Carolina: de la actitud de Tincho con Mirta y sus compañeras… él es muy bueno con los ellos no?
Yo: si, Martín ama a sus hijos, creo que eso es lo único que lo mantiene vivo...
Carolina: y el chupi, el casino y las mujeres…?
Yo: no, eso no créo… Mirta y Eduardito son su mayor orgullo… acaso no te diste cuenta como el era el que mas gritaba?
Carolina: si eso es obvio… pero ni la más pálida idea de lo que es el juego eeehh… Y vos tampoco.
Yo: Ese no era considerado un juego de señoritas en mi tiempo…
Carolina: tampoco ahora o vos viste alguna señorita en medio de la cancha?
Y así seguimos entre cervezas, charlas, discusiones, besos, caricias hasta que la última pibita se encaminara a su casa. Carolina se quedó a dormir en mi casa por primera vez ya que Eduardito y yo no podíamos conducir porque habíamos tomado más alcohol del permitido. Dormiría con Mirta en su habitación para evitar problemas. Mirta le prestaría ropas y demás para que se diera un baño, así que subieron a la habitación y yo a la mía. Ya eran más de las 2am cuando me terminé de desnudar y me metí bajo la ducha para un baño rápido, cuando cerré las cortinas estaba sola pero cuando las volví a abrir ella estaba recostada en la puerta viéndome…
Yo: de nada te va a servir esa mirada de lince…
Carolina: pero mis manitos de pulpo me servirán de mucho… - acercándose a mí-
Yo: no señorita… guardando las garritas!
Carolina: Dejáme ser feliz… daleeee… - poniendo caritas-
Yo: no, no, no… acá nada! no me vas a convencer con tus berrinches…
Carolina: y si probamos tu camita?
Yo: ya te dije que nada… pasáme mi bata… -poniéndome seria-
Carolina: pero puedo acostarme en tu cama mientras vos seguís con tus cosas…
Yo: si, claro… no hay problema
Ella se tiró en mi cama, acomodó los almohadones bajo su cabeza y quedó en silencio solo viéndome mientras yo me ponía las cremas, iba y venia buscando esto y aquello, cuando me senté frente al tocador vi su reflejo en el espejo… estaba con una mano sobre la cabeza, la otra en el estomago, las piernas cruzadas y durmiendo, su pecho subía y bajaba con la respiración apenas perceptible, me quedé viéndola todo el rato mientras me peinaba, me daba pena despertarla pero tampoco podía dejarla dormir a mi lado, conociéndola sabia que no perdería tiempo en cuanto se despertara así que lentamente y sin hacer ruidos me levanté y fui hasta la cama, me acosté a su lado y la contemplé por un rato más… sus ojos, su pequeña nariz, su boca con esos labios como tatuados, su cabello que con esa iluminación parecía un cacho de fuego y esos largos bucles… era hermoso tenerla así, tan inocente y en mi cama. Suavemente le toque el rostro con mis manos y ella abrió los ojos, llevó su brazo derecho a mi hombro, me atrajo hacia ella y su mano izquierda acarició mi rostro, me besó suavemente en los labios…
Carolina: me voy a dormir
Yo me quedé viéndola a la cara sin decir nada
Carolina: me dijiste que acá nada… así que buenas noches…
Yo: sos terrible…
Carolina: touché… hay que estar preparado para devolver el toque… - sonriendo y poniéndose de pié-
Yo: pero ahora me toca a mi golpear… que te quede claro!
Carolina: lo tengo muy claro, buenas noches – dándome nuevamente un beso en los labios-
Yo: aaahhhjjj… no puedo creé que me estés haciendo esto…
Carolina: haciendo qué…?
Yo: esto…! - sonrojándome-
Carolina: Calentando el agua y no tomando el mate…?
Yo: algo por el estilo...
Carolina: No hay drama, mañana lo resuelvo… y ahora me voy que no aguanto más y mañana te prometo que me hago un tiempito para tus necesidades – sonriendo-
Yo: aaahjjj… andante, rajá…! antes que me olvide donde estamos y cometa una locura!
Ella aún sonriendo salió por la puerta dejándome sola en la habitación. Me puse a acomodar las cosas en la cama y en mi mente recordaba el episodio de esa tarde, todavía sentía su humedad en mis dedos, mis oídos habían guardado el sonido de sus gemidos, su risa de niña… todo en ella me encantaba, me hacia feliz tenerla, estar con ella, saber que la tenia a pasitos, saber que dormía segura bajo mi techo, la amaba y de eso estaba segura. Con los pensamientos en ella y una sonrisa en el rostro me dormí. Unas horas después me desperté con el ruido de Tincho que llegaba a casa, bajé a ayudarle a llegar a su cama y lo encontré tirado en el sofá…
Yo: Te ayudo… - acercándome-
El se sentó y alzó el brazo izquierdo para que le ayudara a levantarse, se puso de pié y se apoyó en mi hombro
Tincho: pensé que era más grande… -dijo-
Yo, sabiendo a quien se refería no dije nada solo seguí caminando a su lado.
Tincho: cuando escuché por primera vez sentí rabia, no entendía en que fallé… pero después de hablar con tu madre, ella me hizo recordar el porque estamos acá… y hoy cuando le conocí entendí por que te enamoraste de ella.
Yo: Tincho… hablemos mañana cuando estés bien!
Tincho: estoy más que bien… me voy a tirar a dormir unas horas y después hablamos para que veas que no por haber tomado voy a pensar distinto…
Yo: te prometo que hablaremos… - dejándole en su cama-
Tenia que hablar con Carolina y los chicos antes que con Tincho, tenía que explicarles a mis hijos que su padre ya estaba al tanto de todo y que después de que habláramos tal vez las cosas serian distintas, había muchas posibilidades y ellos tenían que estar consientes de que todo podía salir bien o todo salir mal y ellos tendrían la posibilidad de elegir, de hacer lo que les parecía bien… volví a mi cama pero ya no pude conciliar el sueño, me quedé despierta esperando a que los chicos se despertaran. La primera en levantarse fue Carolina, unos suaves golpecitos en la puerta me indicaron que era ella...
Yo: pase… estoy despierta!
Carolina: buen día – sentándose a mis pies en la cama-
Yo: no tan buenos… Tincho ya sabe de lo nuestro…
Carolina: ya me parecía, y… que te dijo?
Yo: todavía nada pero quiere que hablemos…
Carolina: mmm… que pensás hacer?
Yo: nada… decirle la verdad, creo que se merece
Carolina: puedo hacer algo?
Yo: no, gracias bb… esto lo resuelvo yo!
Carolina: independientemente de lo que pase quiero que sepas que te amo y si todo sale mal, igual quiero que sepas que te amé y te amo y te seguiré amando con el alma y el corazón...
Yo: bb porqué todo tiene que salir mal…?
Carolina: no digo que todo va a salir mal… te digo que te amo!
Yo: yo también te amo bb- dándole un beso- los chicos ya se levantaron?
Carolina: si, Mirta en el baño y Eduardito en la cocina…
Yo: bueno, bajá y esperáme que te llevo después de desayunar…
Carolina: ok, te espero abajo… - volviendo a besarme- acordate… te amo!
Yo: también te amo, bb!
Capricornio7
Email: kprycornio7@gmail.com
Todos y todas… aquí su capi, bsots!
nestor (ID 1268691): Mi gente de Córdoba, luisa fue el amor de mi vida, la mujer que me enseñó el sentido de pertenencia… Bsotots!
HombreFX (853427): Gracias Sr. espero que este capi también guste. Bsotots!
Dulzitha (ID 1349162): Gracias y muacks pa ti también chocolatito, jajaja!
caroo (ID 140739): jelou y disculpas, sabés que no tengo idea… me suena el relato pero soy un queso en eso de retener nombres, pero me voy a hacer un tiempito y me fijo... Escribime al mail de arriba así tengo una dirección donde mandarte el link o esperá que publique nuevamente y te lo paso. Bsots!
Danni (ID 352072): Jelou, si creo que a tod@s nos pasa lo mismo… claro que te voy a disculpar, como no? Bsooots!
cintiuspame (ID 1403172): Jelou señorita… sus deseos son ordenes... jajaja! :P
mar (ID 1407762): Mi muñekita vampiresca! jummm… con vos no hay disculpas… y mi comentario? jajaja, Bsoooots!