Mis compañeras de estudios maduritas (final)
.después de habernos excitado mutuamente en la piscina Cristina y yo, era hora de preparar la comida
Mis Compañeras maduritas 3
.después de habernos excitado mutuamente en la piscina Cristina y yo, era hora de preparar la comida
Salí de la piscina al cabo de unos minutos cuando mí erección era ya imperceptible, y me dirigí al interior de la casa, en busca de la cocina; donde deberían estar Sonia y Cristina preparando algo de comer. Al acercarme a la cocina , pude escuchar como estaban hablando, quise ser un poco chafardero y sin llegar a entrar puse la oreja para ver de qué hablaban, .
Sonia: se os veía muy avenidos, en la piscina a ti y a Mario, no?
Cristina: ..si hemos estado hablando de todo un poco,
Yo diría que más que de todo un poco, por la caras que ponías intercedió Sonia-
Qué quieres decir, por la caras que ponía?
Pues que me imagino que te lo has pasado en grande hablando con Mario, y que de no ser porque el agua os tapaba, quizás se hubieran visto signos de cierta excitación, o me equivoco?
Para que engañarte Sonia, la verdad es que Mario ha conseguido ponerme cachonda perdida, y perdona por la expresión, pero somos mujeres adultas, no?
Si, si, tranquila mujer, además, debo decirte que no has sido la única en poder disfrutar de una agradable charla con Mario,
Vaya, vaya,..explica, explica, no me dejes con las dudas Sonia .que pillín el Mario este,
Si tu supieras?, de camino aquí, hemos empezado a hablar de todo un poco, y hemos ido deribando el tema, como quien no quiere la cosa, hacia cuestiones más candentes, en los que ambos hemos estado expresando, nuestros gustos, y pasiones prohibidas, la verdad es que ha sido todo un ejercicio de sinceridad, muy agradable, te lo aseguro Cristina.
Y se puede saber, si no es preguntar demásiado, a que pasiones os habéis referido?
Si quieres te lo cuento por encima con una condición; que tu me cuentes de igual manera de qué habéis hablado, mientras yo tomaba el sol solita, vale?
Me parece correcto Sonia, no tengas la menor duda, de que te lo explicare encantada, espera, que voy a proporcionarnos un poco de tiempo, dijo Cristina, acercándose a la entrada de la cocina, pudiendo pillarme a la escucha, de forma que opte por salir a su encuentro, como si estuviera entrando en ese instante, .
Vaya, aquí estas dijo Cristina, casi tropezándonos, y quedando a escasos centímetros de su cuerpo, envuelto tan solo por la fina tela transparente del pareo, iba a buscarte ahora mismo, te importa ir preparando el fuego en la barbacoa de la terraza, para que hagamos unas costillas de cordero?, .Perfecto, ningún problema, le dije mirándola a los ojos, y notando cierta brillantez en ellos, tus ordenes son deseos para mi, estoy a tu entera disposición, le dije, con cierta sorna.
Venga zalamero, ves a hacer de pinche, que como sigas así, te voy a poner a mis ordenes pero de verdad, increpó mientras me daba un cachete suave en la nalgas, justo cuando me giraba,
La verdad es que el jueguecito de miradas, me estaba poniendo cada vez más malo, solo pensaba en como podía tirármela, y disfrutar de su cuerpo, pero Sonia, me ponía tanto o más que Cristina, y no quería perder la oportunidad de hacérmelo con ella también. Me fui preparar el fuego, quería hacerlo tan rápido como pudiera, para volver a mi escondite bajo el dintel de la cocina, y seguir escuchando lo que hablaban,..así que le eche un buen puñado de leña, bastantes trozos de papel y un poco de yerbajos secos para que prendiera a gusto, y de esta forma pudiera ir a escuchar qué se decían entre ellas, .mientras se iban consumiendo los troncos.
Tarde unos quince minutos en completar la operación de la barbacoa, y me dirigí raudo y veloz hacia la cocina de nuevo, para escuchar su conversación,
Cuando llegué vi que estaban preparando una ensaladilla, Cristina tenia las manos entre las verduras, mientras le ponía la mayonesa, y escuchaba con cierta sudoración lo que Sonia le explicaba, entre risas tímidas y exclamaciones, pude escuchar como Sonia, le estaba explicando, por encima la historia que le había expuesto en el coche, con las dos amigas del gimnasio, de vez en cuando Cristina preguntaba por algún detalle, y Sonia, tras algún que otro silencio, se lanzaba a la palestra y se lo relataba sin tapujos, y con todas las palabras, .el intercambio de expresiones de admiración y risitas era constante.
A los poco minutos, fui a ver como estaba el fuego, aquello iba bien por el momento, moví, un par de troncos, para que fueran haciendo brasa, puse alguno más, y me volví hacia la cocina,
Al llegar Cristina, estaba diciendo: qué fuerte, vaya historia, como para ponerse mala Sonia, no crees?, yo no se si hubiera respondido chica, dijo mientras soltaba una tímida sonrisa,..
Sonia: pues si te soy sincera, de no haber estado viniendo hacia tu casa, no se que hubiera pasado, pero estaba mojada perdida, suerte del baño al que nos has invitado, porque lo necesitaba para bajar mi grado de excitación, aunque al verlo en bañador, no he podido imaginarme como la tendría, .ambas soltaron una carcajada casi furtiba,
Yo seguía escuchando con los ojos abiertos como platos, aquella situación era para mi totalmente inesperada, Sonia, justo cuando acabó de relatar su experiencia, le dijo a Cristina:..bueno antes de que empieces a decirme de que habéis hablado, tan solo una pregunta, te ha dicho Mario algo de mi, o de mis deseos incumplidos?
Era una clara petición de prueba de mi palabra, y suerte que no le había contado nada, me ayudaría a tener más puntos en el ranquing de Sonia, .Cristina le contesto, que no, pero que si quería podía contárselo ella, a lo que Sonia, tras un ligero silencio, le pidió que le explicase de qué habíamos estado hablando al borde de la piscina,
Se movieron por la cocina, y me fui disparado a ver el fuego, suerte de que lo hice, porque vinieron a verme, mientras disimulaba y hacía ver que estaba allí, de forma casi contemplatiba,
Vaya, muy bien, eso va viento en popa, me dijo Sonia, mientras se acercaba al calor de la barbacoa, y rozaba uno de sus senos en mi espalda. De nuevo mi entrepierna luchaba por salirse y ella se dio cuenta perfectamente, dirigiéndome una mirada cómplice, la verdad es que aquello se ponía interesante, al tiempo que complicado, no se como iba a salir airoso de aquella situación, que cada vez se ponía más caliente, Ambas se dirigieron de nuevo a la cocina, dejándome con las brasas,..lógicamente en unos minutos regrese a mi escondite, para seguir escuchando,
Cristina estaba relatando nuestra conversación bajo el agua, hablándole, de la experiencia con mi vecina, con más detalles de los que había nutrido su historia Sonia. Esta ultima, tenia los ojos como platos, y se dibujaba una cierta ruborosidad en sus mejillas, me pareció ver como sus pezones, se marcaban en la parte superior del bikini que aun llevaba puesto, de vez en cuando ambas reían en voz baja, mientras se iban confesando las sensaciones que tenían al escuchar en mis palabras las experiencias por las que había pasado,..estaban casi a punto de acabar la ensaladilla y Sonia, ya tenia listos los entrantes y el aperitivo, y con la bandeja en la mano, se dirigía hacia la salida de la cocina. Nuevamente salí directo a la barbacoa, notando al poco como estaba tras de mi, habiendo dejado la bandeja sobre la mesa, y preguntándome, mientras se acercaba, cómo, va nuestro pinche?
Bien, bien le conteste, con bastante calor, por el fuego, pero aguantando estoicamente, Sonia se detuvo tras de mi, muy cerca, notando de nuevo rozar sus senos, ella intentaba mirar por encima del hombro, el fuego, obligándose a pegarse aun más, debido a mi mayor estatura,...notando sus protuberantes senos pegados a mi piel, le dije, ojo Sonia, que ya tengo calor suficiente como para que lo aumentes por detrás,
Se acerco aun más, preguntándome: qué es lo que hace que aumente el calor Mario?,..
Pues sentir tu piel tan cerca de mi,
Mi piel, o estas dos que están pegadas a tu espalda, me dijo, sin dilación alguna, pegándose a mi espalda por completo, y pasando una de sus manos, por delante de mi cintura para agarrarme el antebrazo, .Yo ya estaba cachondo perdido, parece que se había desatado una guerra particular a ver quien se llevaba el gato al agua, y el felino en cuestión, no era otro que yo, .Notar aquellos senos me tenia empalmadísimo,..a lo que le dije,
Si bajas la mano un poco más, creo que podrás notar como hablo en serio Sonia. Pensé que serviría para que desistiese de ponerme más caliente, pero estaba totalmente equivocado,..pues su mano se deslizo sin decir palabra, hasta llegar a mi abdomen, diciéndome que no notaba nada, .Puse mi mano sobre la suya, y la guié hasta mi entrepierna, posando su frágil mano, con el anillo de casada sobre mi polla endurecida y aprisionada en el bañador, hizo un ademán de apartarla, pero se la cogí más fuerte y la deje sobre mi paquete, para que notase el grado de excitación, .estuvo un ratito así, hasta que me susurró: pues parece que si que tienes ciertos problemillas, aquí abajo, a ver si algún alma caritatiba, consigue ayudarte, o quizás debas hacerlo tu mismo,..no?
Me puso malísimo, su maldad controlada, pero sentir aquella mano, que se movía, tan lenta como un caracol sobre mi polla, me estaba poniendo peor aun, quise girarme, y plantarle un beso en aquellos labios, pero debió de notar las intenciones porque retiro su mano rápidamente, y se esfumo, como si se la llevase la brisa, Estaba confundido, no sabia muy bien hasta donde podía llegar todo aquello, así que decidí, no hacerme a la idea de nada y dejar que las cosas siguieran su curso,..al cabo de pocos minutos, fui de nuevo a la cocina, antes de que viniesen a traer el resto de las cosas,
Sin llegar a entrar, pude escuchar como Cristina le decía: pues chica no se tu, pero yo me he puesto tan mala, que de no haber estado tu por aquí, creo que me lo hubiera beneficiado, a lo que Sonia, le contesto:...por mi no te cortes, puedo ser muy discreta, y si quieres luego pido un taxi, y os dejo a solas, al tiempo que Cristina le contestaba: tranquila mujer, porque no aprovechar y repartir como buenas amigas el pastel , ya sabes que dicen que donde comen dos comen tres, no?, Sonia, puso una cara de asombro, ante la declaración de intenciones de Cristina, y le volvió a preguntar: Seguro que Mario, no te ha contado nada que yo le haya dicho, Cristina?, no mujer, por que lo dices? respondió Cristina, con la bandeja de ensaladilla en la mano, a lo que Sonia se apresuró a responder: no por nada, por nada, no me hagas caso, pero bueno, también tienes razón, creo que puede ser divertido disfrutar de esta situación , y ver hasta donde llega, no?, Cristina, dirigiéndose hacia mi escondite, le contestaba, claro que si mujer, Carpe Diem, que solo hay una vida, como para estar pensando en sus consecuencias constantemente, .pude escuchar antes de salir disparado a la terraza,
Bueno pues vamos a hacer un vermouth, antes de comer, no? Dijo Cristina, mientras posaba la bandeja sobre la mesa de la terraza, .
Claro, dijimos al unísono Sonia y yo, serví amablemente las copas, con hielo y limón, vertí el vermouth dentro de ellas, y nos dispusimos a brindar, por el trabajo que teníamos entre manos, mientras miraba a ambas a los ojos, notando cierta complicidad,
La comida estuvo realmente deliciosa, regada con un buen vino, y con una carne deliciosa, bien cocinada, gracias a las brasas que había hecho,..estuvimos hablando de todo y de nada, hasta que llegaron los postres y el posterior café.
Luego nos tomamos un bayleys con hielo, el alcohol empezaba a hacer mella en nosotros, las miradas eran cada vez más abiertas, más directas, los comentarios se hacían cada vez más elocuentes, parece que todo iba tomando forma, estuvimos hablando hasta que Cristina, rompió el hielo:
-qué os parece si jugamos a algo, yo no tengo muchas ganas de continuar con el trabajo,
Tanto Sonia como yo, contestamos de forma afirmatiba, así que Cristina se fue a por un parchís, la verdad es que me desinfló un poco el ver que acabaríamos jugando como unas simples bingueras, pero la cosa se animó, cuando Cristina, nos dijo que se trataba de un parchís un tanto especial, pues en su parte contraria, había un juego de la Oca, un poco subidito de tono. Nos quedamos un poco sorprendidos, y Cristina, pregunto si nos atrevíamos a jugar. Yo conteste que si casi de inmediato, y Sonia, aunque con ciertos reparos se unió al equipo sin problemás,
El mecanismo del juego era el mismo, que el del juego de la Oca normal y corriente, pero con casillas, en las que debías pasar algunas pruebas, o quitarte algo de ropa si caías en ellas. Cristina, se dispuso a darnos unas explicaciones un poco pormenorizadas, del juego, con las instrucciones en la mano, diciéndonos que había sido un regalo de su ex, así que empezamos a jugar. Me tocó sacar a mi, y caí en el puente, donde me arrastro la corriente, de tal forma que al irme algunas casillas atrás, debía desprenderme de algo de ropa, lógicamente me quite la camiseta, no llevaba mucho más,
Luego fue el turno de Cristina, y cayo en una casilla, en la que tenia que realizar una prueba, debía tirar el dado para ver con quién la realizaba. Las pruebas estaban escritas en unas especie de cartulinas, a modo de trivial, especificando tan solo si era chico o chica quien le tocaba realizarla. Tiró el dado y salio un tres, de forma que se contaba hacia la derecha, sin contar el que tiraba, le tocó realizarla con Sonia. La prueba consistía en que debía quitar una prenda tan solo usando su boca, Cristina lo tuvo fácil, pues despojo a Sonia de su pareo sin complicaciones, ahora era su turno, saco un seis, y fue a parar a una casilla de esas que pueden volver a tirar, hasta que cayo en una en la que tenia que realizar otra prueba, en esta ocasión tiro el dado y le tocó realizarla conmigo. Para ello debía taparse los ojos, y yo me esconderme un dado, para superar la prueba ella tenia que encontrarlo. Yo sin tapujos de ningún tipo, me coloque el dado, debajo del bañador, mientras Cristina esbozaba una sonrisa, ella empezó a buscar, nosotros le íbamos ayudando, diciéndole si caliente o frío, hasta que se acerco a mi entrepierna, y ni corta ni perezosa, metió la mano por dentro de mis pantalones, rozándome la polla sin problemás, y encontrando el dado, se quitó el pañuelo de los ojos y me miró de forma inquisitiba, pero chispeante a los ojos,
Me volvía tocar a mi, en la casilla que caí, de nuevo la prueba de quitar una prenda tan solo con los dientes. Me tocó hacerla con Sonia, y sin preguntárselo, me dispuse a quitarle la parte de arriba del bikini, la verdad es que me costo horrores, pues no había manera de deshacer los corchetes, y Sonia no ayudaba mucho, pero al final estirando por aquí y por allí, y con algún que otro mordisco en la suave piel de Sonia lo conseguí. Sus senos quedaron atrapados entre sus manos, hasta que Cristina le cogío de los dedos y diciéndole que el juego era el juego, se los apartó del busto, dejando al aire sus hermosas, y enormes mamás, con los pezones apuntando al cielo, y sus carnes desplazándose hacia los lados, blanquitas, contrastando con el color rojizo que había cogído el resto del cuerpo, .
La situación se ponía cada vez más caliente,..era el turno de Cristina, cayo en una casilla, en la que debía estar encerrada o realizar una prueba con el miembro de sexo contrario, que consistía en acariciarle la parte más íntima del contrincante durante tres minutos. Sonia se dispuso a contar el tiempo, Cristina vino hacia mi, empezó por encima, pero Sonia, le dijo, que aquello era trampa y repitiendo las palabras anteriores de su compañera, insistió en que debía hacerlo bien, así, que Cristina enfundo su mano por dentro de mi bañador, y empezó a másajearla, poniéndomela como un palo, me miraba a los ojos. En ese momento me hubiera encantado que se la hubiese tragado toda, pero no era el momento Acabada la prueba y con mi polla como un mástil, era el turno de Sonia, esta vez se libró de la prueba, y avanzo dos casillas, volvió a tirar los dados hasta caer en una en la que tenia que quitarle una prenda al jugador de su izquierda, es decir a Cristina, .y así se dispuso a sacarle el pareo, sin más, pudiendo notar los pezones de Cristina bien duritos bajo la tela del sujetador.
Era mi turno, caí en la casilla en la que había un dibujo que indicaba algo como un hielo, Cristina se dispuso a explicarnos que la prueba consistía en pasar un hielo por el torso de uno de los jugadores durante unos minutos, elegí para la ocasión a Sonia, ya que estaba con los pechos al aire. Me puse el hielo en la boca y empecé a recorrer con el hielo, desde su cuello, pasando por los pezones, que se erizaron en contacto con el agua helada, y acabando en su ombligo, recreandome de lo lindo en sus mamás, la cosa se ponía caliente, pero el juego debía continuar y la deje con sus pezones apuntando al cielo
Cristina volvió a tirar, y de nuevo una prueba, esta vez con un participante del mismo sexo,..consistía, según la tarjetita, en darle besos en cinco sitios diferentes del cuerpo marcado de antemano por la tarjeta, así Cristina, empezó por besar cada uno de los pezones de Sonia. Lo hacia como si no fuera la primera vez, con total parsimonia y detenimiento, recogiendo entre sus labios la totalidad del pezon erecto de nuestra compañera y provocando en Sonia, una fuerte excitación, siguió por su ombligo, le faltaban dos, y eran su coñito y los labios, así que fue directa a su chochete, que besó por encima, a lo que yo le increpe, que era trampa, ya que si a mi me había tocado que me acariciasen directamente, a Sonia le tocaba lo propio. De este modo Cristina separo un poco la tela de la braguita de Sonia, pudiendo ver de cerca su frondosa pelambrera, y le dio un sonoro beso, .que Sonia recibió, con las piernas un poco cerradas, para finalizar la prueba Cristina besó en sus labios, más largo de lo que Sonia quizás hubiera esperado, y que la dejaron durante un ratito sin habla.
Era de nuevo el turno de Sonia. Esta vez, la prueba de la casilla, tan solo consistía en quitarse una prenda de forma sensual, así que se puso en pie, y fue bajando su braguita lentamente de espaldas a nosotros, teníamos ante nosotros su culito bastante abultadito, mientras gritábamos para que se diese la vuelta, sin llegar a conseguirlo, y sentándose en la silla, rápidamente para tapar su chochito, a escasos centímetros de mis manos,
Llego mi turno, tenia que acariciar por debajo de la mesa y con mi pie la parte intima de quien tuviera en frente, y no era otra que Cristian, así, que me descalce la sandalia, y empecé a tocarle su coñito con el dedo gordo de mi pie, mientras ella iba poniendo muecas de gustito, a cada paso que mi pie daba por su vulva abultadita y carente de pelitos .
De nuevo era el turno de Cristina. Le tocó quitarse también una prenda de forma sensual, y así lo hizo con su parte superior del bikini, dejando ante nosotros sus preciosas tetazas, de aspecto terso, con forma más puntiaguda que las de Sonia, y con unos pezones mayores en forma de cono desde su enorme aureola, hasta la punta de los mismos, muy abultaditos, como dos montañitas que coronaban sus tetas, .mi polla estaba a punto de estallar,
Sonia tiro los dados, le tocó, besar cinco puntos de un participante del mismo sexo, y así lo hizo. Empezó comiéndole los pezones a Cristina literalmente, y bajando hasta su ombligo, y sin que le dijésemos nada, aparto ella misma la braguita de Cristina, viendo ante ella su coñito perfectamente depiladito, y lanzándose, ante nuestra sorpresa; la mía por inesperado y supongo que la de Cristina por delicioso placer, a comerle el chochito con una devoción inusitada, que desde mi posición podía contemplar perfectamente, Sonia, sin pensárselo, prosiguió con la comida, como dando punto de partida al verdadero juego, metiéndole la lengua una y otra vez, mientras Cristina separaba las piernas y las apoyaba en los reposabrazos, mientras mi polla parecía estallar entre mis bermudas, .Sonia, parecía poseída por la lujuria, y no había quien la parase, estaba comiéndose el que seria su primer coño, con toda la parsimonia del mundo, de cuclillas frente a su compañera, mientras yo me tocaba la polla por encima del pantalón, y veía como se movían sus tetazas al compás de la comida de coño que le propinaban, en un atisbo de lucidez, Cristina me dijo que me acercara, y así lo hice me puse frente a ella, alargo su mano, y saco mi polla bien dura, para aproximársela a la boca y empezar a tragársela por completo, la situación era deliciosamente caliente, allí estaba mis dos compañeras maduritas, la una comiéndose su primera almeja, y la otra disfrutando de mi verga en su boca, .
Empecé a tocarle los pezones, lentamente mientras cerraba los ojos, como no queriendo despertar de aquel letargo, de aquel sueño hecho realidad. Sonia proseguía comiéndose la concha de Cristina, quien cada vez destilaba más jugos calientes, hasta que llego a correrse con al boca de Sonia pegada a su conejito, cuando acabo de tragarse todos los jugos de Cristina, Sonia se incorporo, y se acerco a la boca de su amiga, para compartir con ella mi falo, alternándose las bocas sobre mi polla y mis huevos, me estaba costando horrores aguantar, y quería hacerlo para disfrutar de la situación,..
Mientras Sonia se comía mi polla endurecida, y me miraba a los ojos de forma muy caliente, Cristina le dijo al oído:
-ahora voy a devolverte el favor, y te voy a comer el chochito como nunca antes te lo han hecho, quieres zorra?...aquellas palabras parecían impropias de Cristina, pero parece que a Sonia le encantaron, contestándole:
-comételo putita, estoy deseando que una mujer pruebe mi chochito. Si lo llego a saber me lo rasuro para ti cielo, .
-tranquila cuando acabemos la sesión de follada que vamos a tener, te acompaño al baño y te lo dejo como una putilla, bien depiladito, vale? le contesto Cristina, mientras le metía un par de dedos por la vagina- .
-uhmmm si cómemelo, y depílamelo luego, creo que me va a encantar que lo hagas,
Y diciendo esto se volvió a meter mi polla en la boca, mientras Cristina, se deslizaba a la entrepierna de Sonia, y empezaba por separarle los labios, buscando su clítoris, se lo succionaba lentamente, En el preciso instante de notar los labios de Cristina en su botoncito, Sonia, no pudo reprimir su placer, paro la comida y empezó a disfrutar de los labios y la lengua de Cristina en su chochete, sin dejar de mover mi polla entre sus dedos, entonces aproveche para ponerme detrás de Cristina, separando la mesa, la cogí por el culito, apoye sus piernas a modo de perrita, y acerqué mi boca hasta sus almejita depiladita, para empezar a comérsela despacito, abriéndole los labios con mi lengua, y succionándoselos. Le lubriqué su coñito por completo, dibujando un recorrido desde el culito hasta su almejita varias veces. Cuando tuvo el chochito brillante gracias a mi saliba, coloque mi prepucio sobre su coñito, y le ensarte mi polla, sin ninguna dificultad dentro de su almejita, .empecé a follarmela lentamente, agarrándola por las caderas y empujándola hacia mi y hacia fuera, veía perfectamente como mi polla se escondía entre sus carnes. Lubriqué mi anular con la boca, y empecé a jugar con su culito, dibujándole circulitos suaves en su contorno, Cristina lo noto, pero no puso impedimento alguno. Fui un poco más allá y le clave el dedito por completo en su ojete, parecía que se dilataba sin dificultad, entraba y salía por completo. Fui cambiando el ritmo, atreviéndome a meterle uno más, ya tenia dos deditos dentro de su culito, mientras seguía follandomela, ella hacia lo propio con sus dedos, en el coñito de Sonia, que no paraba de gemir, y de expresar palabras que ninguno de los dos hubiéramos dicho nunca que podrían salir de la boca de aquella compañera de estudios casada y un poco recatada.
La imagen de Sonia despatarrada sobre la silla, con las piernas abiertas de par en par, mientras le comían el coñito, y cerraba los ojos de placer, cogíendo por el pelo a su compañera. Al tiempo que mi polla entraba y salía de la almejita depilada de Cristina y mis dedos dilataban su ojete, me estaba poniendo malísimo, y me costaba horrores concentrarme en no acabar pronto, para disfrutar más, pero era casi incontrolable, y así se lo hice saber a mis amigas, las cuales raudas y veloces, dejaron sus quehaceres sexuales, y se pusieron a mi vera, como esperando que derramáse sobre ellas mi primera corrida.
Allí estaban las dos, con las bocas semiabiertas, mientras mis dedos movían mi polla rápidamente a punto de estallar, hasta que los primeros brotes de leche hicieron acto de presencia, y fueron a caer sobre los senos de Sonia. Otro reguero de leche fue a parar sobre la cara de Cristina, que los recogía de entre sus dedos, llevándoselos a la boca y degustando la leche de su compañero de estudios. Sonia, no era tan atrevida, o quizás no lo había probado nunca, pero por puro mimetismo, recogíó un poco de semen esparcido sobre sus enormes senos, entre sus dedos y se los metió en la boca para degustar aquella lechita caliente que brotaba de mi polla espasmódicamente. Luego se fundieron en un beso, largo y calido, en el que intercambiaron los efluvios que había depositado por sus cuerpos hacia unos instantes.
Se levantaron y nos besamos los tres, hasta que Cristina, propuso darse un chapuzón, los tres nos tiramos a la piscina desnudos y calientes.
Sonia se me acerco, y besándome, recogíó sus brazos entre mi cuello, para decirme:
-que tal la experiencia Mario?, antes de nada gracias por no decirle nada a Cristina de que estaba como loca por probar con una mujer, ha sido maravilloso, no crees?
Mi polla parecía empezar a excitarse de nuevo, y ella debió notarlo bajo el agua, mientras le contestaba:
-De nada mujer, menudo estreno te has dado, no?
-Ni que lo digas, ha sido maravilloso, nunca me lo hubiera podido imaginar mejor, pero tengo ganas de más, entre otras cosas de que me folles como le has follado a ella, pero antes quiero que Cristina me prepare el chochito bien para que te lo folles, voy a subir y me lo voy a depilar enterito, que te parece la idea?
-Ufff, de miedo, no tardéis, que me estas poniendo malísimo,
Dicho esto, se fue nadando hasta donde se encontraba Cristina, se besaron, se tocaron bajo y sobre el agua, se comieron los senos la una a la otra, y se susurraron cositas al oído, mientras se intercambiaban risas cómplices. Salieron del agua, y tras secarse un poquito se metieron en la casa.
Al cabo de un buen ratito, y viendo que no daban señales de vida, salí del agua, me seque y me fui dentro de la casa. Subí al primer piso, y siguiendo el sonido de su conversación llegué directo hasta el baño que había en la suite. Allí estaba Sonia, con las piernas abiertas, y espumita de afeitar en su coñito, mientras Cristina le pasaba la cuchilla de afeitar suavemente, despojándole de todos los pelitos. Tan solo le dejo una fina línea de pelitos, muy tenue, y muy sugerente. Luego le seco el coñito, y se dispuso a probárselo allí mismo; yo desde la puerta les propuse que lo hicieran en la cama, levantándose al unísono, saliendo del baño para estirarse sobre las sabanas, Sonia, en la parte de la cabecera, y Cristina entre sus piernas, ávida de probar su obra de arte pubica,
Cristina, empezó a comérselo de nuevo. Mi polla empezaba a dar señales de vida nuevamente, y me acerque a la cama, poniéndome a la altura del chochito de Sonia, para compartirlo con Cristina. Entre los dos fuimos comiéndonos aquel recién depilado coñito, sabia delicioso, y Sonia no paraba de disfrutar, y de proferir todo tipo de palabras subiditas de tono.
-No paréis, no paréis!!, me estáis haciendo sentir como la más puta de las putas, que maravilla!!
Mi polla estaba ya lista para un segundo envite y se lo dije a Cristina, que se aparto, para que pudiera clavársela a Sonia con total detenimiento. La mano de Cristina, me guió hasta la entrada de la almejita de Sonia, y mi polla fue escondiéndose dentro del chochito caliente de mi compañera madurita. Empecé a follarmela lentamente, disfrutando de aquel sueño hecho realidad, mientras oía como Sonia se dejaba llevar diciéndome:
-Que te parece el chochito que me ha dejado Cristina?, te gusta como entra cielo?
-Me encanta cariño, te lo ha dejado suave y listo para que me lo folle con total detenimiento, tenia unas ganas locas de clavártela!
-Follatelo a gusto, porque este chochito va a estar dispuesto para ti, cuando y donde quieras, follame como a una puta!!, que es lo que ahora mismo siento!!!...ufffff!!!
Cristina, se encontraba en mi espalda, con sus tetazas apoyadas en mi espalda; notaba perfectamente sus pezones erguidos aplastarse contra mi piel. De vez en cuando nuestros labios se fundían en un beso, y sus manos cogían mis huevos al compás de la follada, hasta que Sonia le llamó:
-Cris, cielo, ven aquí, deja que me coma tu chochito de nuevo, mientras Mario me folla como a una zorra!, quiero volver a probar tus ricos jugos. Pon tu conejito entre mis labios, uhmmmmm!!!!
-Ya mismo!, yo también tengo ganas de que me comás el conejito; antes me has dejado a medias, quiero que lo repases por completo, y que me hagas sentir también bien puta!!
Cristina se puso con las piernas abiertas sobre el chochito de Sonia, de cara a mi, pudiendo ver la escena por completo, notando sus ojos clavados en los míos, llenos de excitación contenida, y disfrutando de la lengua de su nueva compañera de juegos, Yo seguía follandome el conejito de Sonia, cambiando de ritmo, y sujetando sus tobillos con mis manos, abriéndola por completo, la notaba muy caliente, y no tardo en correrse de nuevo, convulsionando todo su cuerpo, y lubricando aun más mi polla, sin que su lengua dejase por un instante de succionar el clítoris de Cristina,
Yo quería probar el culito de alguna de las dos, y mis dedos, se fueron hacia el ojete de Sonia, lubricado por sus propios jugos, pero al notar las yemás de mis dedos allí me dijo, que era virgen por el culo, y que nunca lo había probado antes. Entonces Cristina, dijo:
-Follamelo a mi primero si quieres cielo, y que Sonia mire y vea, que es delicioso , te parece?
Se puso a nuestro lado apoyando sus manos sobre el cabezal de la cama, y poniendo el culito en pompa, listo para ser sodomizado, Saqué mi polla del conejito de Sonia, y escupiéndome la mano, lubrique un poco mi verga, antes de apuntar con mi prepucio la entrada del ojete de Cristina,
Se la fui clavando poco a poco, mientras ella misma indicaba a Sonia, que se pusiese bajo ella, en posición inversa, para que le fuese comiendo el coñito, y mitigar el dolor con la excitación de la lengua de su amiga,
Sonia se coloco, bajo Cristina, saco su lengua, y prosiguió la comida que había estado realizando segundos antes, mientras veía como mi polla entraba lentamente en el ojete de su amiga, que gritaba como una posesa que no parase por nada del mundo
-No pares, no pares!!!, sigue así, Mario, por lo que más quieras no me la saques, sigue un poquito más,..me estas matando!!!, dios!!! Hacia tanto que no me follaban el culo!! Rómpemelo, entero, follate mi culito, follatelo sin compasión, que placer!!! Uummm...que maravilla de polla tienes cabron!, dime que la voy a tener a mis disposición!!!, ufffff, ahhhhhgggg, No me importa compartirla con Sonia, pero quiero que me folles cuando lo necesite!!!, si, lo harás?...uffffff, más, más!!!...aggggg!
Mientras mi polla estaba casi por completo engullida en el ojete de Cristina, Sonia no para de comerle el chochito y de vez en cuando me lamía los huevos con su lengua, aquello era muy excitante,
-Claro que vais a tener mi polla a vuestra disposición, zorras!!!, cuando queráis, no sabéis como me ponéis las dos de caliente!!! Quiero estar todo el fin de semana follando, hasta que me dejéis secos perras!!!
El tono de las palabras cada vez se hacia más abrupto, más candente, exento de tapujos, justo lo que me encantaba. Sentía mi polla apretadísima en el ojete de Cristina, y empecé a moverme dentro de él acompasadamente, follandalo rítmicamente, y tocándole las suaves tetas, que se movían al compás de la follada, hacia delante y hacia detrás, hasta que Sonia salió de debajo de Cristina, se puso en paralelo a ella, a cuatro patas y dijo:
-Quiero probarlo, ahora o nunca, me habéis puesto como una perra en celo!!!, por favor Mario, desvírgame el culo, antes de que me arrepienta,
Yo ni corto ni perezoso, le saque la polla del culito de Cristina, y le pregunte si tenia algo de lubricante por la casa, señalándome la cómoda que había frente a la cama. Del primer cajón saque un bote de vaselina, que hacia mucho que debía estar allí, pues casi no quedaba, al haberse evaporado; aunque por suerte había lo suficiente para un ojete ávido de probar por vez primera una polla. Mientras untaba mi polla con el gel, y dibujaba un circulo con dos dedos sobre el ojete de Sonia, le decía:
-La de cosas que has estrenado hoy, Sonia!
-Ni que lo digas, y que rabia!!, habérmelas perdido tanto tiempo!!!, .mi primer chochito, y mi primera enculadita, por favor, se suave!! Cariño.
-Tranquila, lo haré con muchísima delicadeza, pero es necesario que tu estés totalmente relajada, para que no envíes ningún impulso a tu culito, que cierre tu esfínter y haga que mi polla no pueda pasar, así que relájate, piensa en cómo estas disfrutando, en cómo lo deseas, y deja la mente en blanco, .abrete a un nuevo mundo, y mientras le decía esto, casi dos dedos estaban entrando y saliendo de su culito. Cristina, se había puesto en la misma posición que Sonia antes, y le comía las tetas con detenimiento,
-Follatelo, por favor, me muero de ganas!!!, quiero probarlo, dártelo enterito, follate mi culo cabron!!!
Apunte mi polla a la incipiente entrada de su culito, separando las nalgas, mientras notaba la cara de Cristina bajo su chochito, que sacaba la lengua y disfrutaba comiéndose el coñito de su amiga, .Fui empujando un poquito, hasta notar como ella cerraba el ojete. Le cogí del pelo, casi acariciándolo y le dije, que se evadiese por completo, mientras mi mano tocaba sus enormes tetas suavemente, repetí la operación, empuje un poco más, parecía que se iba abriendo camino, y se cerraba de nuevo, Sonia soltó el primer gemido, ahogándolo con su boca sobre la almohada. La lengua de Cristina siguió comiéndose el chochito con mayor profusión, y aproveche para dar otro empujoncito, sin dejar de hablarle suavemente:
-Tranquila cielo, solo es al principio que duelo, déjate llevar, déjate llevar, poco a poco notaras como se abre camino, por tu recién estrenado culito
-Cabron!! Me estas partiendo en dos!!!, pero no pares,uffff, .aggggg, dios!!!! no pares, clávamela por completo, uiiissssss, .no pares!!!, follate el culo de tu putita!!!....follatelo!!!
-Así cielo, así, tranquila, ya esta casi la mitad dentro un poquito más y la tendrás toda, y sin darle tiempo a reaccionar, le ensarte el trocito de polla que quedaba hasta el fondo
-AAAAAAggggggg!!!!, .joooder! cabron!, que dolor, dios!!!!!!, me estas partiendo!!!, me quema todo, no te muevas, no te muevas, déjala un poco ahí hasta que me acostumbre, uffffff!!!
Cristina seguía comiéndole el coñito con mayor deseo, lo tenia totalmente lubricado, y le animo a Sonia a que hiciese lo propio con el suyo, para evadirse de la sensación de estar siendo follada por el culo,
-Sonia, cómeme el chochito cielo, enterito, que tiene ganas de sentir tu lengua!!
-Ufffff, si, si, ufffff, que maravilla, ya empiezo a acostumbrarme, dame tu coñito, si, si,..,uhmmm, sssssluuurrrrp, sssslllrrrupppp, .
-Así muy bien cielo, uhmmm, que maravilla, ..comételo mientras sientes la polla de este cabron en tus entrañas!!
-Uhmmmm, que apretadito tienes el culo cielo, esta muy calentito, voy a ir moviéndome poquito a poquito,
Empecé a desplazar mi polla dentro de su culito, sacándola y enterrándola despacito, escupí un poco sobre su ojete para lubricárselo, y lentamente fui aumentando el ritmo de la follada, Cristina no paraba de comerse la almejita de su amiga, y Sonia, cada vez disfrutaba más de la desvirgada de culo a la que le estaba sometiendo,
-Ufffff, cabron!, que polla tienes, la noto en todo su recorrido, me esta encantando!!!,..aggggg, duele un poquito pero es una delicia, .estoy sintiendo que me voy a correr sin parar!!!!, que delicia, uffffff
Sonia, había empezado a convulsionarse, concatenando los orgasmos uno tras otro, mientras impregnaba la cara de Cristina de sus jugos, hasta que cayo rendida, apoyando la cabeza por completo sobre el coñito de Cristina y aplastando sus tetas sobre el cuerpo de esta, yo no podía aguantar mucho más, le avise de que me iba a correr, hice un intento de sacársela del culo, pero Sonia, quiso evitarlo:
-Ni se te ocurra sacarla!!! Lléname de leche cabron!, quiero sentirla dentro de mi!!!, aggggg, dámela, dámela yaaaaa
-No puedo maaaaassss, .teeeeeeeen!!!! Toda mi lecheeeee,..ufffffff
Me corrí, descargando una cantidad considerable de semen, que le lleno el culito, y que tras sacarle la polla del ojete fue deslizándose por sus piernas, Cristina se había apartado, y besaba a Sonia en la boca, mientras le acariciaba la espalda, y jugaba con su pelo, todos estábamos muy sudados y rendidos, y nos quedamos estirados sobre la cama, en un amásijo de manos, piernas, senos, cuellos, hasta que se nos hizo de noche, .
Aquel fin de semana, no paramos de follar ni una vez, Sonia se quedo a dormir en casa, los tres juntos. Comíamos, cenábamos y desayunábamos desnudos, o tan solo con un albornoz, siempre dispuestos. Yo tuve enormes dificultades en levantarla todo lo que ellas hubieran querido, pero en más de una ocasión encantadas se tuvieron que dar placer entre ellas, .
Entre las cosas realmente increíbles que ocurrieron, os diré, que Cristina fue a comprar un consolador con arnés, para que Sonia probase la doble penetración, y así lo hizo! O como el marido de Sonia llamo por teléfono, justo cuando Cristina tenia su coñito en la boca, y mi polla entre sus tetas,
Fueron muchas y variadas experiencias, que supimos disfrutar durante mucho tiempo, hasta que acabamos la licenciatura,..pero la vida da muchas vueltas, Cristina se volvió a casar, Sonia estuvo a punto de separarse, y yo me fui a trabajar al extranjero, quizás un día de estos les llame para ver que es y ha sido de sus vidas,