Mis comienzos, historia real
De como fueron mis primeros inicios, desde muy chico me gustaron las ropas de mujer, y mi primera ves con mi vecino,absolutamente real.
Antes que nada quiero aclarar que todo lo que voy a contar en este relato es totalmente cierto y no tiene absolutamente nada de irreal.
Yo soy de Paraguay de un barrio de Asunción Todo comenzó cuando tenia mas o menos 8 años de edad cuando con dos de mis mejores amigos mientras nos bañábamos juntos, jugábamos escondiendo nuestro miembro, mandándolos hacia atrás y apretándolo entre nuestras piernas, quedando como unas nenitas, como con una conchita peladita, todo esto lo hacíamos inocentemente, cosa que a mi se me quedó y luego ya lo hacia solo en el baño y jugaba a ser niña. Me encantaba ya que era muy flaquito y parecía misma una nenita.
A mi me excitaban mucho las mujeres y ya que mi madre era modista me encantaba mirar las revistas de moda donde aparecían mujeres en ropa interior y con vestidos muy sexi, poco después ya empezaba a imaginarme en ellas.
A los 9 años mi hermana tenia 13 años y una criada de 15 que me excitaba mucho, me acuerdo que cuando ella dormía yo iba y la acariciaba suavemente el pecho sin que ella se de cuenta. Me excitaba tanto que recuerdo que una ves fui al baño a revisar su bonbachicha, una tanguita de licra rosadita, me gusto tanto que me la puse, recuerdo que quede maravillado de cómo me quedaba, Luego de unos días fui a la casa de mis abuelos a pasar el día y yo lleve puesto esa tanguita, estuve excitado todo el día sintiéndome en secreto y en publico al mismo tiempo una mujercita, recuerdo que cada rato me escondía y me miraba con la bombachita puesta.
Luego pasaron los meses y yo ya era bastante experimentado en vestirme de mujer, a la siesta cuando mi mamá dormía y ellas iban al colegio me encerraba en mi cuarto o en el baño y me probaba todas clases de ropas, las tanguitas de mi hermana y mi criada así como también sus corpiños, sus polleritas, sus blusas, sus vestidos mas elegantes de fiestas, sus mallas y naturalmente sus zapatos de taco alto, también me probaba la gran variedad de ropas que mi mamá tenia en su taller de modista , yo me pintaba solamente los labios y los ojos con un lápiz labial rosado que le quite a mi mamá y me quedaba muy bien, me convertía en una gran minita. Pero absolutamente en secreto ya que yo tenia amigos con quien jugaba cosas de hombre y nada sabían de mi gran gusto.
A los 12 años visto en una revista porno de mi hermano mayor una mujer que se estaba por sentar sobre una enorme pija de un muñeco inflable, cosa que se me quedo grabada para siempre. Me excito tanto que quise probar, así que busque y encontré un cepillo de madera con un mango bien redondo, alargado , bien barnizado y muy suave. Corte el mango y lo clave parado a una base de madera, en mi pieza la clave parado al medio de una silla y quedo parado como una pija bien dura. Luego me vestí de mujercita, lo recuerdo bien, una bombachita blanquita con un corpiño de encaje del mismo juego, de mi hermana, una pollerita mini de seda roja con flores bien cortita y una blusita con la barriguita afuera que eran de una cliente de mi madre que lo estuvo arreglando ya que es modista, unas sandalias de taco alto muy lindas, y con la boquita pintadita muy suavecito los ojos también, totalmente una mujercita delgadita. Luego de desfilar caminando, levantando la colita mirándome al espejo, haciendo poses sexi, viéndome realmente una mujer, hasta que quede totalmente excitada empece a levantarme lentamente la pollerita, me excitaba ver que no se notaba nigun bulto adelante con la bonbachita puesta ya que lo escondía muy bien, hice a un lado mi bombachita sin sacármela y con un poco de crema en mi cola empece a sentarme suavemente sobre esa enorme pija parada exactamente igual como avía visto en esa revista, con mi culito apretadito sentía como entraba totalmente, despacito hasta el fondo, me quede sentado sobre la silla y moviéndome meneando mi cola de lado a lado sin sacarla de mi ano, extasiado y sintiéndome completamente una mujer, luego empece a subir y a bajar, la cosa entraba y salía de mi culo muy apretado, todo esto lo hacia mirándome en el espejo, yo me desvanecía de placer y tuve lo que fue mi primer orgasmo, tan intenso que me tuve que atajar del respaldado de la silla que quedo frente a mi, hasta tuve un pequeño sangrado pero no importo, todo esto es algo que nunca lo voy a olvidar puesto que me lleno de placer y les aseguro que todo es absolutamente cierto.
Luego de esa experiencia me hice especialista en inventar consoladores ya que a mi no me estiraban los hombres, solo quería sentirme mujer. Probaba con chorizos, zanahorias, pepinos, hasta me senté encima de una botella tapada con un corcho, fue muy excitante ver y sentir como me abría el culo
Luego de un año se mudo frente a casa un nuevo vecino era el millonario de la cuadra, el lo tenia todo, pero tenia dos años mas que nosotros, el tenia 15. Nos hicimos amigos y todo el día jugábamos en su casa, el era un poco pervertido, su juego preferido era luchar con nosotros hasta dominarnos y supuestamente torturarnos, el nos sujetaba en el suelo boca arriba sentándose el sobre nuestros pechos, nos levantaba la cabeza hasta llevar nuestras bocas hasta su miembro, con ropa, claro, todo esto nos parecía un juego, nos decía que era la tortura China. Un día estando yo solo con el comenzamos a jugar la famosa lucha, el de nuevo me sujeto por la cabeza llevando mi cara por su pija, sentí que se empezó a endurecer y en un momento dado se bajó un poco el short y saco su gran pija que estaba totalmente dura, viéndola tan cerca de mi cara yo me asuste bastante, el empezó a fregarlo por mi cara y luego a tratar de meterlo en mi boca, cosa que yo no pude impedir por mucho tiempo, tanto por su fuerza como por que me atraía mucho probarlo, así que abrí mi boca y el lo mando hasta el fondo de mi garganta, en ese momento al instante el estallo en un chorro salado y muy pastoso que lleno mi boca, era su semen que el me obligo a tragarlo totalmente, me empezó a producir tremendas arcadas, el se asusto mucho que fue a la cocina a traerme un poco de leche para que me pase el malestar.
Después de eso no pude dejar de pensar en su enorme pija llenando mi boca y acabando su semen caliente en mi garganta, quedándome con ese olor a pija que desde ese momento me encanto. Luego de ese día yo iba a su casa solamente a chuparle y que acabara en mi boca su esperma caliente que me fascinaba .
Un día fui a su casa con una bonbachita roja de mi hermana, el al verme le encanto, ya que ni se imaginaba de mis gustos, el me llevo a la pieza de su hermana, una hermosa chica quien siempre me excito por la forma en que se vestía, no podía creer que tenga a mi disposición las ropas de ella que siempre me excitaron, me probé de todo caminando y desfilando para el, mientras el me miraba maravillado sentado en la cama, luego me quede con un vestidito bien corto de licra rosado abajo un corpiño hermoso de encaje y una bonbachita blanca, ella tenia tantas ropas sexi que escoger que casi no savia cual elegir, agarre el mejor zapato de tacos que avía, yo tenia lindas piernas y sin vellos todavía, me esmere con el maquillaje, me pinte los labios y los ojos con un tono rosado y un poco de polvo, todo suave, el me dijo que quede realmente hermosa, me tomo de la cintura y me dio un tierno beso en la boca, fue la primera ves que sentía un beso, me abrió la boca con su lengua introduciéndome hasta contactar con mi lengua, era tan excitante, chupe su lengua, me encanto, me acostó en la cama tratándome como a una verdadera mujer, saque su pija comportándome como lo que era en ese momento, una putita y le comencé a chupar, el estaba tan excitado que acabo al poco momento, yo ya era experta y trague todo su semen dejándole limpio su pija pero seguía duro su gran miembro, el me tomo de la cintura cosa que le gustaba ya que yo era bien flaquita y tenia una linda cintura, me puso boca abajo y me dijo que levante la cola, yo levante mi cola como quedando de cuatro pero con la cabeza apoyada en la cama, tenia unas curvas increíble, el dejo la puerta del ropero abierta para que yo me mire en el espejo, el levanto suavemente mi pollerita acariciándome suavemente la cola que tenia redondita, empezó a bajarme la bonbachita que era muy pequeña y la tenia metidita entre el culo, metió su cara entre mi cola lamiéndome el culito, era algo increíble como me metía la lengua en mi ano, cuando ya estuve relajado y mi culo bien mojado agarro su pija y la fregó por mi abujero introduciéndome la cabeza yo ya estaba acostumbrado a meterme cosas pero una pija verdadera era algo hermoso y tan rico, luego de bombear unas cuantas veces ya estaba todo adentro sin nigun problema aunque su pija era bastante grande, luego me dio la vuelta mirando para arriba me pidió que abra las piernas subiéndose el arriba me puso de patitas al hombro y me empezó a meter de nuevo, esa posición me gusto mucho ya que el me besaba en la boca y en el cuello mientras metía y sacaba su gran pija tuve un grandioso orgasmo, pero yo quería mas, tome la iniciativa y me subí encima de el sentándome sobre su enorme pija como en aquella revista que vi a la mujer con el muñeco, quería realizar mi fantasía y lo hice , sentada sobre el con su pija totalmente adentro, bamboleando mi cola a los costados en redondel, me encantaba moverme así, y luego de arriba a bajo, metiendo y sacando, hasta que me abrazo bien fuerte supe que el estaba acabando dentro de mí, era una sensación muy buena sentir mi cola mojada y bien lubricada, luego nos quedamos abrasados por un momento, por ultimo me dio un beso y me dijo que yo era toda una mujercita.
Esa fue la primera ves, cosa que se repitió constantemente, hicimos una costumbre cuando estabamos solos subir al cuarto de su hermana cuando ella no estaba, ya que su casa era bastante grande y sus padres casi no estaban en la casa, lo hicimos casi por un año yo era su mujercita, su putita como el me decía. Luego poco a poco el fue apartándose de mi, creo que su empleada pillo algo y hubo comentarios en su casa, el empezó a tener una novia y al poco tiempo se mudo, nunca mas lo he visto porque también con mi familia nos mudamos de Ciudad.
Espero que les haya gustado mi relato y les aseguro nuevamente que cada palabra que he escrito es la pura verdad, lo tengo grabada muy dentro de mi mente y cada ves que me acuerdo me excita mucho.
Si les gustó, mas adelante les cuento como me fue en mi nueva Ciudad, como hice para tener una linda cola y un bronceado muy lindo con la marquita de la biquini que me trajo muchos problemas, y hasta cuando salí por primera vez a la calle y muchas aventuras mas totalmente increíbles, "todas absolutamente reales"
Si quieren escribirme lo pueden hacer.