Mis colegas heteros y yo (3)

Nacho se acercó a la ventana del salón y observó a través de las cortinas. Tras unos segundos, se dio la vuelta completamente pálido y se limitó a decir: Es Samu, me ha visto por el cristal, me ha saludado y está subiendo las escaleras.

-¡Joder! ¿Qué coño quiere este ahora?- gritó Borja de mal genio.

-¡Poneros la ropa cojones! Nos va a pillar en bolas y empalmaos y a ver como coño se lo explicamos…- dijo Nacho perdiendo los papeles. Fue rápidamente hasta donde había dejado su ropa y empezó a vestirse torpemente.

Borja lo imitó. Yo que no me había quitado nada de ropa, me limité a ponerme de pie y a peinarme un poco el alborotado pelo. Ya se escuchaban los pasos en las escaleras, y unos segundos mas tardes Samu tocó al timbre.

-¡Tu, idiota, que tienes lefa en la mejilla!- me gritó Nacho dándome un leve empujón. Se notaba que claramente había perdido el control de la situación. Me limpié con la manga de la camiseta y me senté en el sofá y cogí la primera revista que encontré en una mesita que había en el salón. Borja me imitó y Nacho fue a abrir la puerta.

-¡Ey tíos! ¿Qué pasa?

Se produjo un incómodo silencio, que yo no tardé en romper:

-Pues nada Samu, aquí estamos que nos íbamos a poner a ver una peli.

-¿A estas horas tío?

-Es que nos hemos puesto a cenar y a hacer el tonto, y se nos ha pasado el tiempo volando.- respondí sin dudar.

-Joder, pero no os pongáis ahora a ver una peli, he venido para que vayamos a dar una vuelta o algo.- dijo nuestro colega mientras se quitaba la cazadora de cuero y la dejaba encima de un sofá.

-Puff, yo no tengo ganas Samu, estoy reventado de todo el día.- dijo Nacho sentándose en el sofá, entre Borja y poniendo los pies descalzos sobre la mesita de las revistas. No le había dado tiempo a ponerse los calcetines y se podía ver un poco de mi saliva en algunos dedos de su pie derecho.

-Yo tampoco tío, además me duele un poco la cabeza. Me apetece quedarme aquí de tranqui viendo una película.- comentó Borja estirándose.

-Que perros estáis hechos- dijo Samu sentándose en el sillón que quedaba libre y subiendo las piernas al brazo del sillón.- ¿a que huele aquí?- dijo oliendo fuertemente.- Jajajaja ¡cabrones, os habéis estado pajeando! Por eso no queréis salir ni nada, porque os he pillado en mitad de un pajote… jajaja

-Jajaja pero ¿Qué dices Samu?, no desvaríes anda.- Dije yo empezando a ponerme nervioso.

-Que si, que si, que aquí huele a rabo que flipas. ¡Además estáis todos empalmados! Jajaja os he pillado cabrones.- efectivamente, a Borja se le notaba un prominente paquetazo debajo del pantalón. A Nacho menos, pero también se le veía enorme

-Jajaja que cabrón Samu, nos has pillado en mitad de un pajote en grupo y nos hemos asustado porque creíamos que eran mis padres los que habían tocado al timbre.- dijo Nacho poco convincente.

-Jeje, lo sabía, si es que estáis hechos unos maricones.- dijo Samu. A continuación se bajo el pantalón entero y se sentó en calzoncillos en el sillón de nuevo, mientras se frotaba el paquete dijo.- bueno ¿Qué? Que yo también quiero hacerme una paja. Poned alguna porno o algo.

Nacho se levantó, puso la tele, y fue directo al canal que emitía porno. En esos momentos había un trío. Un tío se follaba a una rubia tetona, mientras el otro le daba pollazos en los mofletes. Yo estaba aún muy nervioso como para actuar con normalidad. Samu por el contrario había dejado de darse refregones en la polla por encima del calzoncillo y se lo bajo entero. Dejando al aire su bonito rabo. Era la primera vez que veía un rabo recto. La mayoría de los tíos tienen el rabo ladeado hacia un lado. Pues era el primero que veía con la polla tan recta. Era muy oscura de piel, un poco largo y muy muy gruesa. Empezó a masturbarse con naturalidad. Yo miré a Nacho y Borja, ambos se bajaron también el pantalón y comenzaron a pajearse mirando la porno, sin decir nada.

-Joder... esto me pasa… por no echarme una puta novia… de una vez… y seria ella... quien me haría las mamadas…- Dijo Samu entrecortadamente debido a las sacudidas que se estaba dando en el nardo.

No me parecía justo, les había dado placer a Borja y a Nacho, y Samu era otro de mis mejores amigos, creo que el también se lo merecía. Así que sin dudarlo me levanté del sofá, y aproveché unos segundos en los que mi colega había cerrado los ojos y me puse de rodillas y le cogí el rabo con mi mano. Se asustó mucho y pegó un respingo.

-¿Pero que pollas haces José?- exclamó dándome un empujón. - ¿Por qué me has agarrado la polla?

-Joder cállate Samu, que pareces idiota, déjame que te la chupe y limítate a disfrutar.

No tuve que decir nada más. Mi colega mi estuvo observando durante un minuto con mucho desconcierto y desconfianza, mientras yo iba dando lengüetazos a la punta del oscuro rabo. No era tan rosa como el pito de Nacho y Borja. Este parecía de un moro.

Comencé a mamar con más fuerza y ya bajaba casi hasta la base de su polla. Mientras de soslayo vi como Nacho se sacaba el pantalón y los calzoncillos y los dejaba en el suelo. Borja me sorprendió por el otro lado, mientras comenzó a darme pollazos en la espalda.

-Colega… no me jodas que sois todos… maricones- Dijo Samu jadeando por el placer que yo le estaba dando.

-¿Tu eres tonto? Aquí el único bujarra es José, ¡nosotros hacemos lo mismo que tu!, antes de que llegaras, nos la ha estado chupando y nos lo hemos follado entre los dos. Pero eso no quiere decir que nos gusten los rabos. –Dijo Nacho acercándose y bajándome el pantalón de nuevo. – Que a José le gusta que le rellenen el culo de rabo, pues nosotros lo hacemos, pero haciéndole un favor ¿eh?- zanjó finalmente mientras me empezaba a restregar su polla casi erecta del todo por el ojete.

Yo no pude evitar reírme y empecé a ahogarme con la polla de hasta la campanilla de Samu. Este la sacó corriendo para evitar que me ahogara, pero yo no lo permití y me recuperé sin sacar un solo centímetro de carne de mi boca. Miré hacia la cara de Samu, y estaba sonriendo con cara de incredulidad. Entonces me saco el rabo de la boca con fuerza, evitando que yo lo agarrase, y me dio un pollazo con muchísima fuerza en las paletas.

-Ahh! Joder tronco me has hecho daño- me quejé. Verdaderamente me había dolido ese golpe.

-Encima de mariquita, ¿no eres un hombre? Jajaja.

-Perdón- dije agachando la mirada. Aquella situación de sumisión me estaba volviendo loco por momentos, me llevé la mano a mi polla y la froté con fuerza. Estaba deseando hacerme una paja a mi mismo. Samu me observo durante un instante y a continuación me volvió a meter lentamente el nardo en la boca.

Mientras tanto, Nacho ya me había metido la punta del cipote en el culo, empezaba a embestir cada vez con mas fuerza, pero ya no me dolía, pues lo seguía teniendo abierto de hacia unos minutos.

Borja dejo de darme pollazos en la espalda y se sentó en el sofá. Entonces me saqué el rabo de Samu de la boca y levanté el pie derecho de Borja y le saqué la zapatilla (con la bulla, no había tenido tiempo de ponerse el calcetín). Olía un poco a zapatilla usada. Solté la zapatilla en el suelo y esnifé fuertemente el pie. Mientras le chupaba el pie, miraba fijamente a la cara a Borja. Tenía una sonrisa de oreja a oreja y me miraba con sus bonitos ojillos. Parecía una niño pequeño pasándoselo genial. Borja siempre había sido el más sensible de mis amigos y yo lo apreciaba mucho.

-¿Pero que coño estás haciendo ahora? Jajajaja- Dijo en voz alta Samu.

-Puuf tío, tienes que probar eso. Ahora cuando termine de lamérselo a Borja que te los lama a ti. Es increíble tío, verás que gustazo da.- Respondió Nacho por mí, mientras me agarraba por la cintura y me daba fuerte embestidas. Ya notaba sus huevos golpeando contra mis cachetes. Adoraba ese sonido.

-Pufff… joder y el martes fuimos de putas el Marcos y yo en las motos. José, si lo llego a saber te vienes allí a la casilla donde guarda las herramientas el padre del Marcos y nos la hubieses chupado colega. Que nos gastamos 45 euros cada uno- Dijo Samu pajeándose, pues lo había dejado desatendido mientras me dedicaba al pie de Borja.

• Y yo que sabia, como reaccionarias jeje- Respondí mirándolo a la cara mientras me metía tres dedos de Borja en la boca y los chupaba bien.

-Puffff si es que encima de todo, pones mas cara de puta que las propias profesionales jajaja- Dijo Samu llevándose una mano a la cara y con la otra dando sacudidas especialmente fuertes a su cipote.

-Yo… cada vez que necesite… mmm desahogarme, te vas a venir... a mi casa José.- Dijo Nacho entrecortadamente debido a las fuertes sacudidas que me estaba dando mientras me petaba. Me estaba abriendo en canal el cabrón, la tenia muy gorda por la base de la polla, y me estaba haciendo un poco de daño al querer metérmela tan al fondo.

-Oye, pero nos vayáis a pensar que porque sea gay, voy a ser vuestro perro para que me folléis cada vez que queráis eh? Estáis muy equivocados si pensáis eso.- Dije mientras me retiraba el pie de la boca.

-No joder, pero tú eres gay, pero también eres tío, y seguro que eres igual de promiscuo que todos los tíos… o ¿no?- Preguntó Samu incorporándose del sofá y mirándome.

-Joder, si, es cierto que estoy todo el día cachondo perdido y pajeándome frente al ordenador.- Admití delante de mis amigos.

-Pues ya esta tío, nosotros no te vamos a obligar a que cada vez que estemos cachondos nos dejes follarte. Pero cuando tu estés cachondo y nosotros también, pues perfecto ¿no?- Argumentó Samu con su lógica aplastante.

Tenía razón, yo era una cerda y necesitaba rabo casi todos los días, sin embargo no podía estar todos los días conociendo gente en un Chat para quedar y tener sexo. Ahora tendría sexo prácticamente siempre que quisiera.

-Joder, pensado así… Es una idea de puta madre. – Zanjé sonriendo y volviendo a meterme el pie de Borja en la boca.

-Jajaja ¡estupendo!- Se alegró Borja poniéndose las manos detrás de la cabeza y cerrando los ojos.

-Bueno quillo, esto está empezando a secarse… déjate de tanto pie.- Dijo Samu guiñándome y zarandeando su nabo hacia los lados con violencia.

Dejé el pie de Borja con cuidado en el suelo y me acerqué medio metro hasta el rabo de Samu. Lo tuve que hacer con cuidado, pues mientras me movía tenia que moverse Nacho que seguía enculándome fuertemente. El cabrón no la sacaba ni para permitirme moverme con facilidad. Es cierto que el rabo de Samu estaba ya sequito. Axial que escupí le escupí dos veces y a continuación lo engullí con hambre. Samu me cogió con ambas manos detrás de la cabeza y comenzó a follarme la boca con fuerza. Se escuchaba un cómico sonido el que producía mis labios succionando.

Nacho comenzó a reírse de la situación, y Samu, viendo lo gracioso de su hazaña, comenzó a hacerlo con más fuerza. Cuando por fin se cansó, se me cayeron las babas sobre el abdomen de mi amigo.

-¡Que asco colega! No seas puerco, quítame eso de ahí.- Dijo Samu con cara de asco y señalándose la barriga.

-Perdón, no lo he podio evitar tío, que me has hecho eso mucho rato y se me ha escapado.

-Pues quítamelo rápido coño, que me da asco.

Rápidamente empecé a absorber las babas que había vertido sobre su abdomen. A fin de cuentas eran mis babas y precum de mi colega, o sea todo un manjar.

-Jajajaja, me refería a quitarlas con la manga de tu camiseta o con algún trapo, ¡que pedazo de cerdo estas hecho!- exclamó Samu divertido.

-Jeje, joder si es casi todo precum tuyo.- contesté relamiéndome

-Ahh ¿que también tragas la lefa tío?- Preguntó muy sorprendido.

-Puufff, creo que José todavía tiene que mostrarnos muchas cosas que está dispuesto a hacernos.- Dijo Borja guiñándome un ojo. A continuación se puso de pie y se acercó a mí. Me cogió con ambas manos la cara. Tenía las manos muy frías. Acercó sus labios a mis labios. En ese momento no me lo podía creer. Sabía que era el más tierno y cariñoso de mis tres colegas, pero nunca me imaginé que me daría un beso después de todo lo que yo había chupado esa noche.

-Abre la boca y cierra los ojos.- Me dijo con voz tierna.

Cerré los ojos y abrí la boca justo a tiempo para recibir un enorme lapo de boca de mi mejor amigo.

Espero que os haya gustado tanto como los anteriores. Siento haber tardado tanto en publicar esta tercera parte, pero me ha resultado imposible hacerlo hasta ahora.

Muchas gracias por leerme y volveré muy pronto con nuevas y diferentes historias. Un saludo.