Mis chicas

Una tarde cualquiera salí a tomar algo con un amigo, tras unas cervezas se unió un pequeño grupo de amigos donde se encontraba una chica que no conocía: Elena. Tenemos la misma edad (26) es bastante delgada, con gafas y un culo respingón. Ella sabía que yo tengo una relación abierta con mi pareja, no se lo oculté en ningún momento. Esa misma tarde seguimos bebiendo y hablando y al llegar la noche acabamos liandonos en mi coche. Elena es realmente fogosa, pensaba que solamente nos besariamos pero no tardó en hacerme una mamada. Acabamos follando en el asiento trasero, desde luego sabe moverse.

Días después, Elena y yo habíamos quedado para follar un par de veces más, se lo conté a mi chica e insistió en conocerla, así que una tarde la invité a casa.

Elena llegó pronto, venía casual, con una camiseta de cuello abierto, luciendo el tatuaje de su hombro y unos pantalones ceñidos que marcaban su culo. Yo le abrí la puerta, me abrazó con fuerza, parecía algo nerviosa. Pasó al salón donde esperaba mi chica, con un vestido granate escotado. Mi chica es más voluptuosa que Elena aunque tienen más o menos la misma altura. Las dos chicas se dieron dos besos al saludarse, pude ver como mi chica la miró de arriba abajo cuando Elena no miraba. La tarde fué bastante bien, charlamos y reímos mucho, poco a poco el ambiente era más acogedor hasta que finalmente surgió el tema: "Entonces, ¿sois folla amigos?" Preguntó mi chica. Elena se pusó roja, no sabía que responder, mi chica rió y poniéndole la mano en la pierna le dijo que no se preocupara, que lo sabía y no le importa. Pasada esta barrera la conversación tomó otro rumbo, mi chica tocaba el pelo de Elena y ella le alagaba el vestido, estabamos todos más cerca.

Fuí a la cocina a buscar algo que tomar y mi chica vino detrás, me arrinconó y comenzó a besarme al tiempo que me confesó que Elena le estaba poniendo, le parecía muy mona y tenía ganas de besarla, pero quería que nos pusieramos a tono. Saqué una botella de ron y unos vasos de chupito y un par de tragos más tarde mis manos estaban acariciando la espalda de Elena, bajando poco a poco hasta su culo, ella respiraba agitada, algo nerviosa, acercó su boca a mi cuello, sentía su aliento, jadeaba y me dió un beso húmedo. Miré a mi chica, estaba en la esquina del sofá mirándonos con la copa en la mano "seguid, no os corteis" dijo con una sonrisa.

Elena y yo comenzamos a besarnos, reconozco que tenía ganas desde el momento que entró por la puerta, no tardé en quitarle la camiseta dejándola en sosten, Elena tiene el pecho pequeño pero firme. Le acaricié todo el cuerpo, ella se quitó los zapatos y se sentó sobre mi para besarme mejor, miré a mi chica que me devolvía la mirada con lascivia. Seguí besando a Elena hasta que mi chica la separó y tras decir "yo también quiero" las dos empezaron a besarse. Acaricié a ambas mientras disfrutaba del espectáculo. Nos besamos los tres y poco a poco comencé a desvestirme. Mi chica bajo su vestido, dejando sus pechos al aire, Elena se lanzó a lamerselos, yo le quité el sostén a Elena y como pude le bajé los pantalones. Nos levantamos para ir a la habitación.

Ya en la cama la ropa comenzó a volar, nos quedamos completamente desnudos, besándonos y tocándonos. Mi chica se arrodilló y comenzó a chupármela mientras Elena me besaba, luego alterno entre mi polla y el coño de Elena, empujé levemente la cabeza de Elena hacía abajo, entendió lo que quería, se arrodilló y mientras besaba a mi chica comenzó a chupármela también. Verlas a las dos comiéndome la polla al mismo tiempo era un espectáculo, se besaban y chupaban al mismo tiempo, mi chica escupía en la polla y Elena me la comía, aguanté las ganas de correrme en sus caras.

Elena se tumbó en la cama, mi chica sobre ella comenzó a besarla y recorriendo su cuerpo con la lengua llegó a su coño, le estaba haciendo una buena comida mientras estaba a cuatro patas, con el culo bien abierto, no pude aguantar las ganas y hundí la cara entre sus nalgas, después me uní a mi chica y juntos seguimos comiéndonos el coño de Elena, estaba empapada y chorreaba, mientras mi chica le comía el coño yo bajé a comerle el culo, Elena no paraba de gemir. Las dos chicas comenzaron a besarse de nuevo, de rodillas sobre la cama, quise unirme a ellas pero Elena me agarró la cabeza y me la llevó hacia sus coños, estaban realmente mojadas, mi lengua pasaba entre sus coños húmedos, les metía los dedos, les lamía hasta los culos, sentía que me iba a reventar la polla, mi chica se movió y sin darme cuenta comenzó a cabalgarme mientras Elena siguió sentada sobre mi cara. Ambas gemían "Bésame joder" dijo mi chica y siguieron besándose mientras me follaban. Al final me corrí dentro de mi chica. Sacó mi polla de su coño, un chorro de semen cayó sobre mi, Elena se levantó y lamió la corrida hasta que no quedó  casi nada y volvió a besar a mi chica. "Ahora follame a mi" me dijo Elena, pero necesitaba un momento y les pedí que follaran ellas un rato, quería verlas.

Empezaron a besarse con ansias, se mordían, se lamían los pechos y tocaban su coños, reconozco que en poco tiempo ya estaba listo para volver a follar, pero quise ver el espectáculo. Mi chica estaba absorta mientras follaba con Elena, le apretó la cabeza contra su coño mientras me miraba "Te gusta vernos?" Me preguntó totalmente cachonda "haced la tijera" le respondí, mi chica sonrió y se pusieron a intentarlo, les costó un poco pero encontraron la postura, ver sus coños juntos era increíble, estaban tan mojadas que cada vez que se separaban un poco se creaban hilos de lívido entre ellas. Yo me estaba masturbando, viéndolas gozar, me acerqué a ellas con intención de participar, pero Elena me puso el pie em el pecho "todavía no" me dijo con actitud burlona, le hice caso me quedé cerca viéndolas y masturbándome, acabé lamiendo el pie de Elena cosa que le puso más cachonda, la cara de sorpresa que puso al descubrir eso me exitaba muchísimo.

Mi chica se separó de ella y se hizo a un lado "follatela, quiero veros" me puse un condón y comencé a follarme a Elena, ella boca arriba su coño estaba chorreando aunque era estrecho, mi chica nos miraba mientras se masturbaba. Elena me puso los pies en el pecho de nuevo, yo la embestía con fuerza y ella gemía a lo bestia mientras se acariciaba el clítoris, me acercó los pies a la cara "muerdemelos" ordenaba, nunca me había pedido eso pero no lo dudé, comence a comerle los pies mientras me la follaba. Mi chica se puso sobre la cara de Elena, de rodillas siguió masturbándose hasta que se corrió en su rostro "ahora tu" dijo mi chica jadeando mientras se levantaba de la cara empapada de Elena. Dejé de comerle los pies para lamerle el fluido que mi chica había dejado en su cara "Me corro, me corro, vuelve como antes" gritó Elena, así que volví a lamer su pie y a follarmela, ella se corrió entre gritos justo a tiempo, porque yo no aguantaba más. Saqué mi polla, quité el condón y me corrí en su cara, poco semen cayó en su boca, casi todo acabó en su rostro. Mi chica se dedicó a lamerselo y pasárselo a su boca, se besaron un rato con mi semen hasta que mo quedó nada.

Después de eso nos duchamos juntos, cenamos algo y estuvimos hablando, Elena nos confesó que había descubierto dos cosas ese día, que le gustaba comer coños y que le comieran los pies.