Mis amados XV

Hola a todos mis queridos lectores, como ya saben mi nombre es Paulina hace apenas unos meses cumplí 18 años el resto de mi descripción está en mi primer relato que pueden encontrar en mi perfil.

Hoy les contaré todo lo que puede hacer una mujer por despecho, depresión o rencor, como le quieran llamar ustedes.

Después de hacerlo por primera vez con Frank, la relación se cayó mucho ya no era lo mismo, yo ya no quería tener sexo con el nunca más ya que me había lastimado un poco no quise terminar con el porque aún me gustaba mucho y lo quería así que pensé que con el paso de las días todo volvería a la normalidad.

Por fin llegó el día de mi fiesta de XV años y todo transcurrió tal y como se había planeado, la fiesta salió a la perfección, yo estaba súper contenta las cosas con Frank iban mejorando de cierto modo, al momento de terminar la fiesta acordé con mis padres que iría a casa de Andrea para dormir allá, aún que en realidad iríamos a hacer tonterías a su casa, a tomar un poquito y platicar.

Al llegar a su casa Andrea nos avisó que habría algunos amigos de su padre ya que estaban festejando un campeonato deportivo así que nos iríamos directo a su habitación y no saldríamos de ahí hasta que todos se retirarán.

Aceptamos y así lo hicimos, cuando todo iba de maravilla a Karla una amiga cercana se le ocurrió decirme que Frank me estaba engañando, por supuesto yo no le creí, pero ella me mostró fotos que ella le tomo en un café al que ella había ido, efectivamente estaba con otra chica y se estaban besando en algunas fotos.

En ese momento yo me sentí muy mal, casi casi como basura, comencé a tomar un poco más pero mis amigas ya no me permitieron seguir haciéndolo, me ayudaron mucho haciendome sentir bien, diciéndome que no valía la pena ponerme así por alguien que no supo apreciarme y ese tipo de cosas.

Ya cuando estaba mejor tuve que salir al baño junto con Andrea pero ella iría a la cocina por botanas, yo al baño de arriba que se suponía sería para nosotras solamente y no tener que toparnos con lo amigos de su papá.

Al tener tantas ganas entre rápidamente al baño, cuando me percató que está ahí un señor de unos 35 años bastante grande comenzando a sacar su pene para poder orinar, yo me quede embelesada al ver todo eso en su mano el evidentemente lo noto, a mi hasta las ganas de orinar se me habían quitado y creo a el también.

• ¿Le gusta lo que ve señorita?

• me sonroje tanto que solo le pude contestar con un risa algo pícara

• Jejeje lo siento no era mi intención

• no te preocupes pero si te gusto puedes tocarlo.

Asentí con la cabeza y cerré bien la puerta del baño con seguro y estire mi mano hacia ese pedazo de carne estaba calientito y sin estar erecto por completo mi mano apenas podía sostenerla de lo gruesa que estaba.

• el me miró a los ojos

• puedo ver qué estás triste ¿Puedo saber la razón?

• Es que hoy justo hoy que fue mi fiesta de XV me entero que mi novio me es infiel.

• relájate nenita, si el no te valoro ya habrá quien si lo hará

• mientras se acercaba a mi labios

Me comenzó a besar y claro que yo acepté ese beso, sin soltar su verga nos besamos un muy buen tiempo, el ponía sus manos en mi cintura y me apretaba fuertemente hacia él, dejo de besarme y me miró a los ojos yo olvide totalmente que estábamos en un baño.

• te mostraré como trata un verdadero hombre a una señorita tan bella como tú.

Yo solo pude verlo a los ojos y lo volví a besar.

El comenzó a bajar sus manos por lapsos a mis nalgas, las apretaba y volvía a tomarme de la cintura, me comenzó a besar el cuello yo mantenía mis ojos cerrados de lo bien que me sentía en sus brazos, mientras con mi mano masajeaba su pene que ya estaba totalmente erecto.

Me quitó mi blusa y masajeó mis pechos por momentos pasaba su lengua por ellos sin quitar mi sostén, me tomo de la cintura y me giró mientras me volvía a besar el cuello.

• recargate contra el lavabo cielo

Así lo hice y comenzó a besar mi espalda con dulces besos lentos, llegó a mi cintura desabotono mi pantalón y lo bajo lentamente mientras le daba besitos a mis nalgas, traía yo una tanga de hilo color rojo, del mismo color que mi vestido de quinceañera.

Me la quito lentamente, para después pasar a abrir mis piernas el hincado en el piso, paso su lengua desde el comienzo de mi vagina, paso por mi anito donde se detuvo a meter tantito su lengua, eso me llevo a las nubes su lengua siguió su camino hasta donde terminaba la apertura de mis nalgas, nadie me había tocado y excitado tanto como él.

Yo solo mordía mis labios para no hacer ruido y que mis amigas me escucharán, mientras el comenzó a meter sus deditos en mi vagina y succionar mis labios vaginales, mis piernas temblaban de placer.

Me giro de repente y siguió comiendo mi coño de una manera magistral yo solo podía poner ojos en blanco y hacer todo lo posible para no gritar de placer, el se levantó para chupar mis pechos mientras metía sus dedos en mi boca los cuales chupaba completamente.

Se volvió a hincar me giro nuevamente para quedar de frente a mi culo el cual me pidió abrir, me empinó aún más comenzó a frotar mi clítoris como nadie, yo me sentía en la gloria amigos, cuando sentir como me comenzaba a chupar y meter su lengua en mi anito.

Cuando hizo eso me corrí a chorros, algo que nadie había logrado (que yo no tenía mucha experiencia claro) me logro tapar la boca por que noto que gritaría ahora sí de placer, me desvanecí porqué mis piernas eran gelatina.

Me levanto se puso tras mío y cuando por fin, el iba a intentar penetrarme tocan la puerta, yo me puse tan nerviosa era mi amiga.

• ¿Estás bien Pau?

• con voz temblorosa

• Si amiga.

• ¿Estás llorando por ese pendejo?

• Si, lo siento no pude evitarlo pero permíteme ya salgo

• te esperamos en la habitación, no tardes y deja de llorar por ese wey

• Si voy para allá

Ya no pudimos terminar el acto esa noche, solo pude besarlo y darle mi número telefónico, salí del baño rápidamente apegue la luz, no sé cuánto tardo el en salir.

Pero ya en la madrugada me envió un mensaje por Whatsapp, diciendo que quería terminar lo que ya habíamos comenzado.

Obviamente después del placer que me provocó solo con su boca yo también quería ver qué tantas maravillas podía hacer con esa cosota que tenía.

Nos pusimos de acuerdo y no fuimos rápidamente a coger, tuvimos varias citas, nos volvimos novios de hecho, el me enseño tantas cosas y fue fantástico el tiempo que duramos juntos, lástima que termino pero más adelante les contaré esas experiencias que tuve con el que son tan excitantes y calientes.

Muchos besos amores y ya saben masturbense siempre pensado en mí 😘❤️