Mis adorables vecinos

Mi vecina me pone a cien, no paro de masturbarme pensando en ella. Mi mujer los invito a cenar a casa y mis fantasias con ella no fueron como imaginaba.

No puedo mas tengo que contarle a alguien lo que me paso el viernes pasado. Llevo  varios días comiéndome el coco. El caso es que tengo una vecina, que no es que muy buena, pero a mi me pone a mil. No es que este enamorado, como persona nola aguanto. Esla típica que no para de hablar, te pregunta y no escucha cuando le contestas. Pero tiene un cuerpo... que no puedo dejar de masturbarme pensando  en ella. Cuando entra en mi casa, a ver a mi mujer (si estoy casado, que le vamos a hacer, ella también) con su ropa de estar en casa, unas mallas celestes ajustadas que le marcar todo el potorro. ¡Dios! que ganas de agarrarla por detrás, bajárselas y fallármela con el tanga puesto y todo. O verla entrar en pijama, con una camiseta que se le marcan unos pezones del tamaño de una galleta Maria, y empieza a hablar sin parar. No puedo con eso tengo que irme luego al baño a meneármela, pensando en que le callo la boca a pollazos, hasta que me corro en su cara, ¡aghhh!.

Para colmo de que paso cuando la veo, a mi mujer no se le ocurre otra cosa que invitarla a cenar a ella y a su marido, (digamos que ella se llama Carmen y el Jaime). Jaime, es tipo de mi edad, treinta y muchos, mi altura. No esta gordo, pero es fuertote. Es simpático o se lo hace conmigo. Nos llevamos muy bien las 2 parejas, a parte del problema que tengo con Carmen. Entramos en pijama en la casa del otro, nos prestamos cosas y odiamos al resto de vecinos del bloque. Una buena relación. Pues para la cena decidimos preparamos cuatro cosas para picar, mucho vino y poco más. Como somos de confianza y después de haber estado todo el día trabajando, no nos arreglamos ninguno. De hecho quedamos en ropa como de estar en casa, mi mujer Luisa, con un pijama y una bata (no he hablado de mi mujer mucho, otro día os contare algo de ella), mi vecino con un pantalón de chándal y un camiseta, mi vecina con sus MALLAS CELESTES (me iba a pasar empalmado toda la cena) y yo me puse camiseta y pantalón de pijama. Trajeron a su hija de cuatro años, una niña insoportable, pero le pusimos una peli y no dio lata ninguna.

La cena la pasamos muy bien. Comimos. Bebimos (bastante vino). Y nos reímos de nuestros vecinos. Yo seguía  a lo mió, mirarle el potorro y las tetas a mi vecina. Creo que Jaime se tuvo que dar cuenta de como le mira el culo cuando ella iba a la cocina a ayudar a mi mujer. Decidimos que era el momento de tomar unas copas. La conversación fue subiendo de tono, influida por el alcohol. Hablamos de como usaban nuestras mujeres el sexo para chantajearnos y los extraños ruidos que hacían algunos vecinos por las noches. Con la segunda como mi mujer estaba KO. Carmen levanto su potorro y dijo que se iba a acostar ala niña. Mimujer se disculpo y se fue ala cama. Jaimey yo decidimos tomar la última copa. Continuamos hablando de nuestras mujeres y lo estrechas que eran cuando querían. Al ver que Carmen no venia se acerco a su casa a ver que pasa y vino diciendo que se había acostado. “Esta se piensa que no me la voy a follar esta noche, pero la lleva clara”, dijo. Me sorprendió el comentario, en las conversaciones anteriores no habíamos sido tan explícitos, pero aproveche para que me contara más cosas con las que pajearme en el fututo.

  • y vas a conseguir que se despierte para  metérsela.

  • Ahora voy le bajo el pantalón y empiezo a comerle el coño y veras como en 5 minutos la tengo encima de mi cabalgando como una zorra, por muy dormida que este.-  Buah me puso a mil no sabia que decir.

  • joder, que suerte. A mi mujer no la despierta ni Brad Pitt.

  • Pues yo, la pienso poner mirando a Cuenca.- Dijo Jaime levantándose y frotándosela entrepierna.- Sele notaba que la tenía morcillona.

Se sento en el sofá  a mi izquierda.

  • Joder que envidia.- le dije sin pensar, el entendió que me gustaría ser yo el que me follara a su mujer, o se pretendía hacerme creer.

  • tenias que verla como grita cuando se corre la muy zorra.-

  • Ya lo me gustaría - comente. Tenía la polla durísima imaginándomelos follando.

  • Te gustaría verlo, ¿eh?- dijo con una mira picara.

  • Uhf, ya lo creo.

  • Y, ¿te gustaría participar?

Me que de a cuadros, que era eso una invitación a un trío, no me lo podía creer, me estaba pasando esto a mi.

  • que, dices pues claro que si.- le dije entusiasmado.

  • si ya lo sabia yo que querrías.- acto seguido se levanto y sin decir palabra se bajo el chándal, dejando al aire la polla mas gorda que he visto en mi vida. No era muy grande, pero era gordísima. Morcillona con el glande operado, rosadito.

Se volvió a sentar. Yo no que reflejaba mi cara, pero acto seguido, me puso la mano en la cabeza y tirando de mí hacia su polla, dijo- si ya sabía yo que tú eras de esos.

Me planto mi cara en su pollaza, tenía un olor que no sabría describir. Me gustó.  Y sin saber porque, abrí los labios y la bese, sin oponer ninguna resistencia. Empecé a morderla con los labios sin meterla en mi boca.

-eso es, muy bien, sin prisas- comento al vez que aflojaba la presión sobre mi cabeza.-

Yo seguía en mi tarea, no pensaba, solo se que me estaba gustando. Me la metí en la boca, la chupe con todas mis ganas.

-oh si- Estaba disfrutando se notaba, se le había puesto como una piedra un15 centímetrosy un grosor que me llenabala boca. Larecorrí con mi lengua le la mi los huevos. Tenía el vello recortado, para mi suerte.

Me dedique de lleno a meterla y sacar, ayudándome con la mano.

De repente sentí su mano enredando con mi entrepierna, abriendo se paso a través del pijama. Consiguió bajármelo. Me agarro con fuerza el pene y empezó a masturbarme, yo estaba chorreando. Me toco el capullo con la punta de los dedos recogiendo mis jugos  y le vi. Llevárselos a la boca, me quede mirándole y sonriéndole como una colegiala con el chupachups que le acaban de dar. Se lo rechupeteo.

-Delicioso- dijo

Agache y continué disfrutando de su polla. Volvió a repetir la operación jugueteo con sus dedos y mi polla. La soltó y se llevo la mano a la boca de nuevo. Esta vez estuvo chupándoselos dedos mas a conciencia. Acto seguido llevo su mano a mi entrepierna, pero fue más allá. Sentí como sus dedos húmedos acariciaban mi ano. Eso no estaba previsto. Alguna vez había fantaseado con follar con un hombre, pero esto le estaba sobre pasando.

-que haces- le dije-

-tu tranquilo que se lo que hago-

Que habría querido decir que es experto en prepararle el culo a Carmen, o que. Las caricias no estaban mal, incluso cuando volvió a lubricarlos dedos e introdujo uno me gusto. Tanto que deje de chupársela para gozar un rato.

  • Vamos zorrita saborea tu culo- me dijo mientras metía dos dedos en mi boca. Los lamí con gusto me di cuenta de que había perdido el control, estaba poseído por el sexo. Volvió a la tarea con dos dedos. Esta vez le costo mas y a mi me dolió un poco.

-Espera le dije- Me levante y fui a la habitación de puntillas, mi mujer estaba roncando, menos mal. Aquello era una locura y con ella en casa mas. Cogí del cajón de la mesilla un bote de gel lubricante y Corp. al salón. Jaime se había quitado toda la ropa, impresionaba ver su polla tiesa por su grosor. Le enseñe el bote sonriendo y se lo lance. Me quite toda la ropa y fui al sofá. Me arrodille y me la volví a meter enla boca. Despuésde varias chupadas me dijo. - vamos, tengo ganas de disfrutar de tu culo-  me puse a cuatro patas en el sofá. Se echo gel el la mano, el su polla y en mi culo, que se estremeció al sentir el gel. Metió ahora los dos dedos sin problemas y luego tres, estuvo haciendo un mete saca bastante agradable. Se ayudo con la otra mano y con dos dedos empezó a abrirme bien el culo. -Con esto vale- dijo, no estaba yo tan seguro. Acerco su miembro dispuesto a abrirse paso en mi culo virgen. Que cesación al sentir la punta de su capullo, que rico, luego la punta, de momento bien, no era tan duro como yo esperaba. Pero le dio un empujoncito y -ahahaha- grite - para me duele mucho- eso solo al principio- Dijo con voz de satisfacción, y la empujo mas a dentro, me partió en dos. -para por favor, no puedo seguir- intente echarme para sacarla, pero no lo conseguí. Me tiro en el sofá,  me sujeto el brazo derecho y me inmovilizo. Volvió a lo suyo,-  ya veras como luego me lo agradeces- dijo. Tuve morder un cojín para no gritar y despertar a mi mujer. Me echo mas gel en el culo, se agradecía el frescor. Poco a poco fui dilatando y oponer menos resistencia y aquello empezaba a doler menos e intente relajarme. De hecho volví a recuperarla erección. Asíes que empecé a tocarme como pude e intente disfrutar dela situación. Elmete-saca empezó a ser placentero. Sentir su polla en mis entrañas era una sensación extrañamente agradable.

-Ves como te gusta putita.-

-Me das mas placer que Carmen, tu culo es mejor- Carmen no había ha vuelto a pensar en ella, ahora cada vez que la viera solo podré pensar en el cabrón de Jaime dándola por culo, o pensare en Jaime dadme por culo a mi.

-Prepárate que me corro, aghh- dicho esto sentí como retiraba la polla de mi agujero, pero antes de sacarla sentí como un chorro caliente se queda dentro de mí. Acto seguido me agarro por el pelo y me acerco la cara a su polla. Zas, otro chorro a la cara, cayéndome en todo el ojo. Me la puso en la boca y me espeto- vamos, saborea mi leche- abrí los labios y me la metió entera y empezó a follarmela boca. Sentíacomo seguía saliéndole semen. Tenía un sabor muy fuerte, nada comparable con el mió. -Traga zorra, trágatelo todo, no dejes una gota-

Me soltó la cabeza y saco la polla, que ya había empezado a reducir su tamaño. Le mire con el ojo que tenia disponible. Nunca olvidare la cara de satisfacción de ese carbón. Aun así hice todo lo que me pido, me tragué todo su semen, es mas me lance a su polla a rebañarla. Yo tenia una erección increíble, era mi turno, tenia ganas de correrme como lo había hecho el.

-Buff me has dejado seco, putita.- dijo poniéndose el chándal- Le has salvado el culo a Carmen esta noche- y se fue.

Allí estaba yo, en el salón de casa, con la cara llena de semen, la polla como una piedra y el culo reventado, sangrando, que dejo una mancha en el sofá que me ví negro para quitar.

Me fui al baño y me metí enla ducha. Parecíaque me habían arrancado algo dentro del culo ahora me dolía otra vez. Masturbe, visualizando la imagen de Jaime follando en el salón y yo  gozando.

Me metí en la cama hecho polvo, mi mujer se despertó y dijo - hasta ahora habéis estado bebiendo-

-duérmete cariño- se dio la vuelta y se durmió.

A mi me costo mas, estuve toda la noche dándole vueltas ala cabeza. Apesar de haberme lavado los dientes, seguía teniendo el sabor de su semen en la boca, el agradable sabor de su leche.

A la mañana siguiente me levante con el culo reventado. Me fui con mi mujer a comprar y o casualidad de la vida coincidimos en la calle con nuestros queridísimos vecinos. Lo primero que hice en lugar de mirar el coño de Carmen, fue mirar a los ojos a Jaime y luego a su paquete.

Sonrió.

Después de hablar de lo bien que resulto todo. Jaime propuso a mi mujer, pero mirándome de reojo. - lo de anoche lo tenemos que repetir, el viernes que viene toca en nuestra casa.

Cuando se marchaban se acerco a mi oído y me dijo, el viernes que viene quiero que lleves un tanga de tu mujer, putita.- y se fueron.

Me quede blanco.

Y ahora tengo una duda, que me corroe por dentro. ¿Qué color le pondrá mas cachondo el rojo o el negro.?