Miércoles

Manuel era un señor fuerte de 1.73 c.m, marcado, pelo castaño, ensortijado, cuando me levantaba lo hacía con mucha facilidad, cuando lo acariciaba podía sentir la dureza de su cuerpo, en un tiempo trabajo en la central de abastos de estibador, hasta que le llego una propuesta diferente

Preludio:

Iba caminando rumbo a la casa, cuando en la puerta tocando el timbre encontré a una compañera del salón, la cual mi profesora asesora le había encomendado la tarea de averiguar por qué había faltado tanto, pues  ya con lo del viernes, lunes y martes eran  tres días, le dije que había estado enfermo, pero no fue creíble por que venía con mi uniforme húmedo, pero igual no le importó solo me dijo que no faltara más y se fue.

Abrí la puerta de la casa, entre y deje mi mochila, tome un libro de algebra del librero y me fui a mi habitación, estando en mi espacio puse el libro en la escritorio,  me empecé a desvestir para que se secara mi uniforme, lo colgué en el closet pero eso era lo de menos  no sé cómo podría decirlo pero estaba contento, al estar desnudo mis manos buscaron acariciar mis pecho junto a mis pezones y sentí esa sensación otra vez. Una y otra vez mi entrepierna se tensaba con una sensación de querer sentir y recordé a Manuel.

Manuel era un señor fuerte de 1.73 c.m, marcado, pelo castaño, ensortijado, cuando me levantaba lo hacía con mucha facilidad, cuando lo acariciaba podía sentir la dureza de su cuerpo, en un tiempo trabajo en la central de abastos de estibador, hasta que le llego una propuesta diferente en cambio yo era delgado media 1.58 c.m. cabello negro, me peinaba de lado, físicamente pues no se (“alguna vez me dijeron: “si habrías sido mujer con esa cinturita y las nalgas que te cargas, no faltaría quien te diera”) me dedicaba a estudiar según pero bueno en esas andaba cuando mi padre llego y toda la sensación desapareció, cuando mi padre fue a mi habitación, ya estaba con ropa y con el libro en la mano. Una tarde como cualquier otra.

Miércoles:

Al despertar pude sentir mucho frio, me levante, me bañe a pesar de que me estaba congelando y me puse el uniforme rápidamente con una chamarra sin hacer ruido me salí de la casa, Manuel a lo lejos ya me esperaba como últimamente lo hacía. Nos saludamos y nos fuimos caminando a su casa, no se veía el sol y caía agua nieve, apresuramos el paso.

Al llegar abrió su puerta y nos metimos rápidamente, aunque estaba templado, se sentía frio, me dijo:

-Sírvete chocolatito caliente en lo que me doy un regaderazo rápido, estás en tu casa, ya lo sabes-Tomando su toalla y dirigiéndose al baño.

Busque en la sala mi pants, pero no estaba, así que me senté en la silla del comedor y me serví chocolatito con un pan, los degustaba tranquilamente cuando escuche la puerta del baño. Me levante para preguntar por el pants y que me encuentro a Manuel descubierto del pecho con la toalla en la cintura, a pesar de haberlo visto desnudo me ruborice y quise desviar la mirada hacia otro lado, me tomo de la mano y me llevo a la recamara.

Al entrar se sentó en la cama me puso frente a él, me quito la chamarra y el suéter, la camisa me la fue quitando lentamente mientras me veía a los ojos, con su manos me tomo de los hombros, me acerco a él y trato de besarme pero voltee mi rostro y sus labios se dirigieron a mi cuello sentía una sensación que me hizo abrazarlo buscando su calor, el bajo sus brazos desabrocho mi pantalón, me lo bajo y empezó a acariciarme las nalgas. Mientras me mordía el cuello y los hombros, solo atine a abrazarlo, a acariciar su espalda, fue cuando lentamente me bajo la ropa interior y al estar la ropa en el piso se levantó, me tomo de las nalgas me acostó y se quitó la toalla, pude ver su miembro erecto, su cuerpo marcado y haciéndome a un lado se acostó junto a mí.

Bajo las cobijas estando a su lado con sus manos acariciaba mis nalgas, me besaba mi cuello y yo mientras no sabía qué hacer, lo estaba disfrutando, y pensaba de alguna manera hacerlo disfrutar como el a mí, con un brazo me coloco arriba de él, fue cuando su boca se dirigió a mis pezones, y sentí esa sensación en medio de las piernas , instintivamente me senté arriba de su miembro, y empecé a frotarlo con mis nalgas, porque así lo sentía, así lo entendía, mientras  el no dejaba con sus manos acariciar las nalgas mi pecho y con los dedos de una mano rozaba mis pezones, en ese ,momento sus manos con fuerza estrujaron mis nalgas, fue cuando el eyaculo primero producto del vaivén de sensaciones. Al sentir sus palpitaciones dirigí mi boca a su miembro  y se la empecé a chupar lo mejor que entendía, me tomo del cabello y el me dirigía primero lo chupaba lento y a medida fui haciéndolo rápidamente, escuchaba sus gemidos finalmente eyaculo por segunda vez, dejando su miembro totalmente flácido. El totalmente cansado me ofreció sus brazos, me acosté a su lado quedamos en cucharita, de espaldas con mis nalgas en su miembro, mientras se recuperaba me acariciaba mis nalgas, empezaba a jugar con mi ano, al tocarlo sentí la sensación de recibir algo, era muy placentera, me besaba la espalda y me decía que quería vivir conmigo, pero como era menor de edad era un problema, que esperaba siguiéramos y con el tiempo se pudiera, me coloco de espaldas y con un dedo humedecido con su saliva empezó a esparcirla en mi ano. Le dije que mañana sinceramente ya había sentido y mi mente estaba lucida, en pocas palabras no estaba tan excitado. Me abrazo y me dijo que estaba bien que estaría preparado. Se acostó a mi lado y dormimos toda la mañana.

Al dar la 1.00 nos levantamos de la cama, me metí a bañar y el a preparar el almuerzo no habíamos desayunado nada, estábamos contentos, termine de bañarme y me vestí, comimos, reímos, y termine de comer tome mi mochila y me fui.

Llegue a mi casa, totalmente fatigado, me desvestí me acosté en la cama y me dormí durante media hora, hasta que tocaron a la puerta, fui a ver quién tocaba , era mi compañera de la escuela con la encomienda por parte de la maestra de avisarle a mis padres que ya había faltado 4 días y que me darían de baja, con el temor a que llegara mi padre y no saber decirle donde me la pasaba toda la mañana, le suplique que no lo hiciera y que ya no faltaría que me diera una oportunidad a la cual accedió bajo la promesa que si faltaba otra vez no habría manera de no decirles

Espere a que llegara mi padre y cuando entraba le dije iría  a la biblioteca, a lo cual accedió, Salí corriendo a los campos de futbol, y me dirigí al grupo de soccer que al verme se alegraron los salude y fui con don Jorge que al verme me abrazo, y me pregunto:

  • Como estas?-  Mirando fijamente.

  • bien, este no sabe dónde está Manuel -le respondí y pregunte presuroso

  • pues en su casa que no te ha llevado-me respondió con una sonrisa burlona.

-no me ha llevado, bueno voy a buscarlo, fue un gusto verlo-le dije

-Sabes te quería ver para invitar a jugar futbol en el equipo, si quieres voy a tu casa a pedir permiso, te parece-me dijo

-si claro-le di la dirección presurosa y me fui corriendo

Al llegar a la casa de Manuel toque la puerta, tardo en abrirme, pensé no estaba y cuando me abre sin camisa, totalmente confundido en lugar de invitarme a pasar se sale sin playera y me pregunta:

-Que quieres-se dirige a mí de una manera cortante

-Nada que mañana no puedo venir porque…-me interrumpió diciéndome

-Está bien-abriendo su puerta y como concluyendo la plática.

En eso sale un señor preguntándole que quien era muy molesto, a lo que él dice no es nadie…cosas del equipo cerrándome la puerta. Alcance a escuchar decirle el señor a Manuel…Otra vez andas de cabron, tu no entiendes…

Me fui a mi casa pues no sé si triste, confundido