Mi vida con Arturo 9

Vi mi reloj y eran las tres de la mañana, Ara desmontó a Julio y se acostó a su derecha, quedando yo en medio de Julio y Rubén, nos metimos bajo las sabanas y nos quedamos dormidos.

Mi vida con Arturo 9

Vi mi reloj y eran las tres de la mañana, Ara desmontó a Julio y se acostó a su derecha, quedando yo en medio de Julio y Rubén, nos metimos bajo las sabanas y nos quedamos dormidos.

Me desperté al sentir que acariciaban mi pierna y mis senos, abrí los ojos y vi frente a mí a Julio que me sonreía y Rubén me decía hola hermosa, sin dejar de sobar mis senos, estaba atrás de mi con su pene creciendo y poniéndose duro en medio de mis nalgas y sus gordos testículos reposando junto a mis piernas, acaricie la pierna de Julio buscando su escroto y acariciándole sus ricas bolas, su pene estaba semi erecto y estimulado por mis caricias en breve adquirió la dimensión que tanto placer me había dado en la sala, seguí acariciando su miembro y moviendo mis nalgas para sentir mejor la dureza del pene de Rubén, me sentía muy relajada y contenta recibiendo y dando placer sin tapujos ni remordimientos, es oía la respiración tranquila de Ara quien seguía durmiendo boca abajo.

Rubén humedeció con su saliva la punta de su miembro y tomando crema del buró se embarró todo el tronco y me puso en la entrada de mi culito, metiéndome un dedo hasta el nudillo, sacándome un gemido de placer, se acomodó y abriendo mis nalgas empezó a empujar lenta pero continuamente su miembro en la entrada de mi no hasta que logró introducir con ayuda de la crema la mitad de su pene en mi hambriento culito, yo seguía masturbando a Julio quien acariciaba mi clítoris y metía un dedo en mi vagina, se me quedó mirando al sentir creo yo el pene de Rubén en mi culito, yo asentí con la mirada y entonces él acomodó su glande en la entrada de mi vulva abriendo mis labios vaginales y metiéndomelo lentamente, que placer tan grande el sentir dos duros penes dentro de una ufff indescriptible, Rubén me abrió las nalgas con sus manos metiendo por completo todo su duro trozo de carne en mi ano hasta la empuñadura, sintiendo sus vellos y su escroto pegados en mis glúteos quedándose quieto para permitir que Julio siguiera metiéndomelo en mi vagina.

Sentía como palpitaban sus penes dentro de mí, separados por esa sutil membrana tuve un orgasmo maravilloso en ese momento que mordí el pecho de Julio apretando sus hombros con mis dedos mitigando mis gemidos, mordiendo mi labio inferior; comenzó Rubén a moverse de atrás hacia delante de manera que Julio acompasara sus movimientos con los de él, mientras uno lo metía el otro lo sacaba así me estuvieron cogiendo entre los dos en un exquisito sándwich sexual que enardecía nuestros sentidos, en pocos segundos tuve dos orgasmos encadenados que me hicieron gemir y chillar de placer, Ara se despertó levantó su cabeza y viéndome se sonrió conmigo y comenzó a acariciar las nalgas de Julio que al sentir sus caricias me lo metía más adentro si eso fuera posible, me sentía en la gloria un placer indescriptible que no dejaban de fluir mis jugos humedeciendo completamente los testículos de ambos.

Me siguieron dando placer tan rico, sentí sus duros penes llegar hasta el fondo de mis entrañas, Rubén me lo metió hasta el fondo y sentí su corrida fuerte y caliente inundar mis intestinos, mientras me decía que rico culo tienes mami!!! Apretando deliciosamente mis nalgas, yo hice mi mano izquierda hacia atrás y empujándolo hacia mi para que no se retirara de mi.

Julio me besaba mis senos y comenzó a serrucharme duro con una velocidad vertiginosa que sentía como golpeaban sus bolas entre mi ano y vagina haciendo un curioso sonido que más lo impulsaba a seguir dándome duro y continuo, hasta que ya no pudo aguantar más, derramando su esperma dentro de mi útero, bañándolo completamente siguió moviéndose hasta vaciar por completo sus testículos dentro de mi ser. Nos quedamos abrazados un buen rato sudorosos, exhaustos pero satisfechos y yo completamente llena. Poco a poco abandonaron sus miembros mis hoyitos, dejándome sentir un enorme vacío.

Al rato se levantó Ara y se metió a bañar seguida por Julio, mientras Rubén se quedó dormido un rato, se oían las risas de Ara y Julio enjabonándose y después los gemidos de Ara que por su volumen se veía que la pasaba de maravilla, Rubén se despertó y al oír los gemidos de Ara se levantó y se unió a ellos, yo me puse mi falda y la blusa y me fui a la cocina a preparar el desayuno de los cuatro.

Cuando salieron ya vestidos los tres nos sentamos a la mesa y desayunamos comentando lo bien que lo habíamos pasado, se despidieron de nosotras con unos besos tan apasionados que poco faltó para que regresáramos a la habitación.

Me metí a bañar, me vestí y me maquillé, le dilas gracias a Araceli, quien me dijo que cuando quiera podemos organizar otra fiestecita.

Tomé un taxi y llegué a mi casa, Arturo veía la tele y las niñas estaban en su habitación, Fer jugaba en l alfombra, los saludé y me preguntó Arturo que como me había ido le comenté que bien lo clásico de un baby shower los regalos infinidad de pañales y cosas para el bebé, que terminó temprano y nos fuimos a dormir.

Después de la comida Arturo se llevó al niño al parque mientras las niñas terminaban sus tareas, regresaron y el niño se durmió, Brenda le pidió permiso de ir con una vecina y se llevó a Sonia con ella; al quedarnos prácticamente solos, Arturo me pidió que me sentara con él en la sala y comenzó a acariciarme le dije que las niñas podrían regresar y nos fuimos a la habitación, nos empezamos a acariciar, me quitó la blusa y el brassier y masajeaba mis senos, le desabroche el pantalón mostrándome su erección bajo su truza, le agarre los testículos y los apreté suavemente, él suspiró me quitó la falda y la pantaleta, ya que no me puse el liguero ni las medias pues cuando lo hice en la sala con Arturo se mancharon de semen mis medias y las guardé en mi bolso con el liguero.

Me besó mi vientre y bajó hacia mis labios vaginales y los empezó a besar, los abrió e introdujo en mi vagina su lengua pero creo que percibió el olor a semen, pues de inmediato, se incorporó se quitó la truza y colocándose en medio de mis piernas me penetró, metiéndome más de la mitad de su pene que se deslizo como cuchillo en mantequilla, me besó en los labios y estuvo como diez minutos con un rápido mete y saca eyaculando dentro de mí, con tres potentes chorros que terminaron de mojar mi canal vaginal, recostándose a mi lado. Me levanté a cerrar la puerta del cuarto me puse mi pantaleta y mi camisón y me acosté a dormir.

No se cuanto me dormí, pero me desperté sobresaltada pero Arturo me dijo que ya eran las diez y que los niños ya habían cenado, se acostó y nos dormimos hasta el di siguiente.