Mi Vida con Arturo 31

Mi Vida con Arturo 31

Me levanté en la mañana y me fui a servir un café, mientras Arturo desocupaba el baño para meterme a bañar, me senté a tomar mi café, cuando salió, lo vi de reojo que me estaba viendo las nalgas y le dije si quería un café, me dijo que si y que si podíamos platicar de una vez aprovechando que los niños estaban dormidos aun.

Fui a servirle su café y me dijo que estaba muy fresca, que si tenía mucho calor, le dije que sí algo y se me quedó mirando nuevamente y me fijé que en mi vulva la prenda se veía más obscura por la humedad generada por los espermas de Eugenio que iban abandonando mi vagina lentamente.

Me senté y comenzamos a hablar, me dijo que no me creía que hubiera estado atendiendo clientes tan tarde además que estaba casi seguro que andaba con alguien, así como cuando comencé mi relación con él y que sustituyó a mi ex. Ahí me molesté y le dije que cuando inicie mi relación con él yo ya estaba divorciada y tenía tiempo sin nadie en mi vida, que no fuera mentiroso y que además él tenía la culpa de mi actitud porque en incontables ocasiones le dije que teníamos problemas que como se sentía en nuestra relación y siempre evadió el tema diciendo que no había problema.

Me dijo que no había mucho que decir que si no estaba a gusto me fuera, es más me dijo: La próxima semana ya no quiero que vivas aquí conmigo. Zas!!! qué bueno que tome precauciones, le contesté que no había problema que mañana mismo me iba que hoy empacaba mis cosas y el lunes me iría con mis hijos y ya que yo había comprado los muebles cuando trabajaba me los llevaría y solo le dejaba la estufa y la cama para que no durmiera en el piso.

Se puso de mil colores y se salió de la casa dando un portazo, le mandé un mensaje a Eugenio para decirle que mañana hacia mi mudanza que ya había estallado la bomba, el me reconfortó y me dijo que no había problema que estaría en mi casa después de su junta para ayudarme con la mudanza y que no me preocupara que contaba para todo con él.

Se levantaron mis hijos y les comenté la decisión de Arturo, mis hijas se molestaron mucho y me apoyaron al igual que Fer y nos pusimos a empacar lo que faltaba, fui por unas cajas al mercado y nos pasamos todo el día empacando, regresó Arturo como al medio día pero como vio que nadie ni siquiera Fer le hacía caso, al contrario cuando entró le vio con cierto rencor y siguió empacando, se metió a la habitación y ahí se quedó hasta que terminamos de empacar que fue como a las 8 de la noche, fui a la tienda por algo de comer, pedí unas pizzas y nos pusimos a cenar, le invité pero no quiso nada.

Esa noche me dormí en el sofá; en la mañana me levanté preparé el desayuno para mis hijos y después me fui a buscar un mudancero, concertamos que iría a las once de la mañana.

Cuando regresé Arturo ya no estaba en la casa, como a las 10: 30 llegó Eugenio, me llamó al celular para que le abriera ya no había nada que ocultar pues las cosas ya estaban dadas, así que le abrí y le serví un café en lo que llegaba la mudanza.

Me preguntó si me llevaría todo le dije que sólo le dejaría la cama y la estufa, todo lo demás me lo llevaba, en eso sonó el timbre eran los de la mudanza, yo me quedé en el departamento y Eugenio salió para checar que todo lo acomodaran bien; cuando salí me dijo que Arturo estaba en la esquina, en efecto desde ahí observó todo, nos fuimos hacia su auto y la mudanza nos siguió hasta nuestro destino, descargaron todo acomodando las cosas donde les decía lo que facilitó el acomodar bien todo después, distribuyéndonos la actividad, terminamos relativamente pronto, nos fuimos a comer a un vips y al salir de ahí pasamos a una mueblería donde Eugenio compró la estufa y una cama para mí, lo malo es que la entregaría en un par de días pues según ellos tenían muchos pedidos pendientes.

Regresamos al departamento, me dijo que si gustaba se quedaba conmigo yo le sonreí y le dije que encantada de tenerlo conmigo, colocamos algunas frazadas en la alfombra para dormir ahí Eugenio y yo mi hija mayor en la cama pegada a la ventana y Sonia y su hermano pequeño en la cama de en medio.

Vimos un rato la televisión en lo que mis hijos se dormían muy cansados; me cambié y me puse una bata china bastante corta que sólo me llegaba como una palma debajo de mis nalgas y me dejé únicamente mi ropa interior un coordinado de encaje rojo muy sexy.

Me levanté por unos vasos con refresco, dándome cuenta que al inclinarme un poco para servirlo se me veían todas mis piernas y pantaletas, ya que sentí el fresco en mi entrepierna, volteé a verlo y estaba con la vista fija en mí.

Le dije que haces, y cínicamente me dice viendo algo muy rico que me gustaría comerme y se sonrió.

Le sonreí y le di su vaso, el lo tomo con una mano y metió la otra entre mi bata agarrando directamente una de mis nalgas y poniendo su boca en mi abdomen, lo besó y desanudó mi bata abriéndose completamente.

Me quitó el vaso y colocándolos en la mesa lateral, me tomo por la cintura y comenzó a meter su lengua en mi ombligo haciéndome estremecer y cogerlo de los cabellos.

Bajó sus labios a mi vulva y la beso y lamió sobre mis pantaletas que agarrándolas del borde lateral me las bajo completamente, me recostó en el sofá, abrió mis piernas colocando una en el respaldo y la otra apoyada en la alfombra comenzó a besar mis labios vaginales muy rico, recorriendo con su lengua toda mi vagina para posar su lengua en mi clítoris y jugar con el en la punta de su lengua dándome un inmenso placer, abrió mi vulva con sus dedos y los metió como si me cogiera con ellos, mientras seguía lamiendo mi clítoris, así estuvo dándome placer hasta que ahogando un gemido me corrí en su boca, él absorbió gustoso todos mis fluidos, quedando su barbilla súper húmeda, limpiándosela con mi bata, se quito sus ropas quedando completamente desnudo yo me recosté a lo largo del sofá y cogí con mi mano su erguido pene totalmente duro y me lo metí en la boca chupándolo deliciosamente, lo sacaba dejando únicamente su glande en mi boca presionándolo con mi lengua y paladar, haciéndolo suspirar entrecortadamente.

Acariciaba sus testículos y seguí chupando su grueso pene abriendo lo más posible mi boca para poder albergarlo, lo humedecía, sacaba y metía una y otra vez en mi boca, pasaba mi lengua alrededor de sus testículos lamiéndolos muy rico al grado que parecía crecer algunos centímetros mas, era tanta su excitación que el glande brillaba por toda la secreción que emitía, para evitar, me levanté y cogiendo su falo con una mano lo dirigí hacia la entrada de mi vagina y me fui sentando lentamente en él sintiendo como se abría completamente mi vagina dándole paso a tan rico y vigoroso miembro hasta que me lo introduje completamente, quedando sentada sobre su escroto y piernas, él levanto mi brassier y besaba mis senos metiéndose mis erectos pezones en su boca acariciando mis nalgas con sus dos manos, yo comencé a menear mi cadera de adelante hacia atrás, sintiendo como se movía su pene dentro de mi dándome un exquisito placer poniéndome nuevamente al borde del orgasmo, me agarró fuertemente de mis nalgas y comenzó a subirme y bajarme en su grueso trozo de carne , que delicia sentía al ser penetrada profundamente en esa postura, todo el estrés acumulado del día, comenzó a salir de mi cuerpo relajándome de una forma tal que ya no sentía más que placer,!!!

Mi respiración entrecortada y apoyando mis manos en su velludo pecho lo cabalgué fuertemente sin tregua alguna hasta quedar agotada y recargada en su pecho disfrutando por entero de mi segundo orgasmo, mientras sentía como su esperma explotaba en el fondo de mi matriz en tres potentes y exquisitos chorros que me mojaron totalmente, chillé levemente al sentir como me invadía e inundaba mi vagina, cogí su cara con mis manos besándola ardientemente agradeciendo el gran placer que me proporcionaba en esos momentos al sentir como brincaba su pene en mi interior arrojando las últimas gotas de su esencia, nos quedamos así abrazados disfrutando el calor de nuestros cuerpos sudorosos mientras su pene poco a poco se reducía y salía de mi vagina quedando recostado sobre sus testículos mojando el sofá con los residuos de su venida.

Lo desmonté tome los vasos pasándole el suyo para refrescarnos y me senté sobre sus piernas dejando las mías estiradas sobre el sofá; él posó su brazo sobre ellas con su vaso en la mano, seguimos viendo un rato mas la tele besándonos tiernamente, al poco rato apagamos la tele se puso únicamente el bóxer y yo así como estaba desnuda me tapé únicamente con mi mini bata y nos fuimos a acostar, entornamos la puerta de la habitación, me acosté junto a la cama de mis hijos, dándole la espalda a Eugenio y nos acomodamos de cucharita jalando su brazo para que abrazara mi cintura.

Nos dormimos como un par de horas, cuando siento su mano jugar con mis senos y mis pezones poniéndolos a punto; que haces? le dijo y él solo besa mi cuello excitándome más, levanta mi bata por detrás y siento como pone entre mis nalgas su pene cubierto por su bóxer, pero ya bastante duro, bajó su mano a i vulva para acariciar mi clítoris, al sentir todavía húmeda mi vagina por mis fluidos y sus espermas que metió tres dedos en ella haciéndome gemir, los sacaba mojados y metía uno de ellos en mi ano dilatándolo y humedeciéndolo, así lo hizo como tres veces y otras tantas hacia su pene embadurnándolo con nuestros jugos para posteriormente, comenzar a meterlo por mi dilatado ano, que rico se sentía como iba abriéndose paso en mi canal anal poco a poco distendiendo mi esfínter al máximo, llenándome por completo, yo movía mi cadera hacia atrás para que me lo metiera completamente, mi respiración se aceleró al igual que la suya, abría mis nalgas con su mano para ver como entraba y salía su duro y grueso pene de mi culito, creo que esa visión lo enardecía porque empezó a moverse con mas fuerza y rapidez dentro de mi, lo sacaba hasta sentir solo la punta dentro de mi ano para después meterlo completamente y sentir como golpeaba su pubis con mis nalgas emitiendo un delicioso sonido de plaf plaf que por la hora se magnificaba, haciendo que en un par de ocasiones, mi hija Sonia despertara y volteara hacia nosotros que nos quedábamos quietos hasta que ella volvía a voltearse hacia la ventana, me estuvo cogiendo por ahí durante más de 20 minutos ya que como tenía poco de haberse corrido, aguantó mucho mas dándome un extenso placer que me hizo tener dos orgasmos mas, súper placenteros tratando de mitigar mis gemidos con la almohada, acelero frenéticamente sus movimientos y en espera que terminara pronto cerré mis piernas y apreté mis nalgas obligando a que su fricción fuera mas dura y por la presión que mi esfínter hacia en su falo pronto sentí como se inflaba y regaba todo su esperma dentro de mis intestinos, haciéndome retorcer de placer arqueando mi espalda y haciendo mi mano hacia atrás agarrándolo fuertemente de su nalga apretarlo más hacia mi enterrando mis uñas en su glúteo, mientras el gruñía de pasión llenándome con sus espesos y potentes chorros, me abrazo acariciando mis senos y así pegados como lapas nos quedamos dormidos placenteramente.

A la mañana siguiente me levanté a recoger nuestras ropas que quedaron regadas por la sala y meterme a bañar, empezaba a enjabonarme cuando siento que se abre la puerta de la regadera y entra Eugenio totalmente desnudo a bañarse conmigo, me quedé un poco sorprendida por su audacia ya que mis hijos sabían que andaba con él pero ya estar bañándonos juntos era otra cosa, pero en fin lo que tenga que ser que sea, ya me dirían mis hijas si no les parecía algo.

Le pasé el jabón por su velludo pecho haciendo una buena espuma al roce de sus vellos y con esa espuma lavé su pene completamente hasta sus testículos y perineo, me entretuve bastante que en poco tiempo su miembro ya apuntaba rígido hacia el techo y antes de que él pensara hacer otra cosa le dije: quiero desayunar mi lechita caliente si?

El se sonrió por la ocurrencia y recargándose en la pared se dejó hacer….

Enjuagué todo su órgano sexual completitos desde la punta de su pene hasta sus deliciosa y excitantes bolas, para después lentamente recorrer su piel de adelante hacia atrás masturbándolo mientras pasaba mi lengua por sus testículos lamiéndolos uno a uno y metiéndolos en mi boca como si fueran caramelos, recorría todo su grueso trozo de carne con la punta de mi lengua hasta llegar a la puntita de su pene haciéndole cosquillitas en su orificio rodeando golosamente su glande con mi lengua para posteriormente meter lo mas que podía de su grueso miembro que llegaba hasta mi campanilla provocándome una pequeña arcada, se lo agarré por la base empuñándolo para controlar la penetración en mi boca y así poder disfrutar mejor la felación que le hacia.

lo metía y sacaba casi por completo de mi boca, lo chupaba completamente, le besaba todo el tronco dándole leves mordisquitos jugueteaba y lamia como si fuera un chupirul, jeje, volteaba a verle a los ojos viendo como disfrutaba, se mordía los labios emita sonidos guturales, cerraba los ojos y se le aceleraba la respiración, moviendo sus caderas hacia mi ayudando a mi estupenda mamada.

que rico se sentía tener en mi boca ese trozo de carne caliente, dura y palpitando en mi mano y boca sintiendo como se inflaba dentro de mi boca y expulsaba su savia fuertemente hasta llegar a mi garganta y me tragaba todo lo que me daba, fueron tres delicioso chorros que trague con pasión y gusto saboreando ese riquísimo liquido espeso y blanco que a mí me sabia a gloria sintiendo en mi mano como corría por la parte de debajo de su pene y salir disparados hacia mi garganta y estomago, ahora si que lo dejé seco tragándome hasta la última gota dejándoselo súper limpio, se lo volví a besar por todos lados al igual que sus testículos con una pasión desbordada, le sonreí y le dije guiñándole un ojo gracias estuvo muy rica!!!!!

Terminamos de bañarnos, nos envolvimos en nuestras toallas y nos fuimos a la habitación a vestirnos en lo que mis hijas se bañaban, preparé el desayuno, hicimos algo de sobremesa y lo fui a despedir al estacionamiento.