Mi Vida con Arturo 12
Segunda vez con Rubén
Mi Vida con Arturo 12
Seguimos con nuestra tradicional y monótona vida, en una ocasión que estábamos viendo la fiesta de 15 años de Brenda, en donde discutimos porque él quería dominar todo hasta quien podía o no invitar mi hija, Brenda se molestó diciéndole que parecía más su fiesta que de ella y se fue a su cuarto, seguimos discutiendo y no sé por qué razón me dijo que “bastante hacia con mantenernos”, si de por sí mi consideración o cariño hacia él ya era mínimo con eso ya no sentía nada por él, solo coraje y si algo de gratitud por como trataba a mi hijo, que parecía suyo.
Cuando llegaba a casa de cerrar la papelería, me cambiaba de ropa poniéndome algún short o en simple pantaleta me sentaba a chatear toda la tarde hasta la hora de cenar o irme a dormir. Platicaba tanto con Igor como con Mario (el brasileño) y con Araceli que me insistía en volver a hacer un cuarteto o de plano un trío con su amante, yo le decía que no quería que eso afectara nuestra amistad ya que sentía que Rubén comenzaba a tener ciertos sentimientos hacia mí y a mi no me interesaba en absoluto. Me comentó que era una fantasía que ella tenía y quería llevarla a cabo y que mejor que con una amiga, le dije que lo pensaría pero no le aseguraba nada, me dijo ojalá aceptes y si quieres después de eso ya no volvemos a salir con ellos, sólo te invitare cuando esté mi marido.
Igor cada día era más atrevido en sus diálogos conmigo, pero sin atreverse a concertar una cita conmigo y como no me llamaba la atención su físico, pues no le insistía para conocerle, de hecho nunca lo conocí aunque tuvimos ratos de extrema calentura vía chat, que me dejaban super húmeda. Incluso en dos ocasiones hasta pude tener un orgasmo; con Mario la plática aunque seductora no era nada sexual y a diferencia de Igor él si me insistía mucho en una cita personal, ya que trabajaba en una empresa internacional y en cualquier momento regresaría a su país y quería tener el gusto de haberme conocido y salir conmigo.
Lo platiqué con Brenda y me dijo que ella me acompañaba a conocerlo, aprovechamos un día que Arturo me comentó que iba a llegar tarde por cuestiones e su trabajo y le s lo comunique en el chat a Mario, le puso muy contento e hicimos la cita, le hice mención de que no iría sola y me dijo que no importaba que sería un placer conocernos a mí y a mi hija.
Quedamos de vernos en una cafetería de la colonia Juárez, Cuando llegamos él ya se encontraba en el lugar y haciéndonos señas, nos invitó a sentarnos, caballerosamente recorrió nuestras sillas para que nos sentáramos, era un hombre guapo y muy interesante, de 45 años, con insipientes canas en las patillas, que lo hacían ver más interesante, alto como de 1:80, amplias espaldas y manos fuertes, nos saludó con un beso en la mejilla, pidió la carta de pasteles y nos dejó elegir lo que quisiéramos, Brenda pidió un pastel y yo no quise más que el café. Fue un momento muy ameno, la pasamos muy bien, me insistía en que aceptara su invitación a cenar o ver un show, le dije que lo pensaría pues tenía familia y pareja.
Cuando se fue al sanitario, Brenda me dijo que porque no aceptaba ya que a mí me gustaba bailar y él se veía que era una persona fiable además de guapo, nos reímos y le dije no como crees y Arturo? Me dijo ay Arturo si ni caso te hace, además sale mucho y me miró de reojo con una sonrisa picara.
Insistió en llevarnos a la casa pero le dije que no y nos llevó hasta un metro y de ahí ya nos fuimos a la casa.
Pasaron como tres semanas, de esa cita y Arturo me comentó que se iría el viernes a entregar unas refacciones a Jalapa, pero no se llevaría al niño porque regresaba el sábado al medio día; en el chat le dije a Mario que si seguía en pie su invitación a cenar y que podríamos ir el próximo viernes, me dijo que estaría perfecto y así convenimos le dí la dirección de la papelería y que pasaría por mí a las 7 pm.
En el inter de esos días, me llamó Araceli para que nos viéramos en su casa, que teníamos tiempo de no vernos y que cómo estaba con Arturo, le comenté que las cosas iban de mal en peor, pero que aguantaba sus desplantes por el bien de mis hijos, me dijo no te preocupes que nos divertiríamos un buen rato y la pasaríamos super, quedamos para vernos el miércoles siguiente y que ella pasaba por mí, le dije que si íbamos a estar solas y entonces ella volvió a la carga diciéndome que su esposo iba a ir con su mamá y regresaba hasta el viernes, que si yo quería invitaba a Rubén y a Julio, le dije que no quería intimar mas con Julio, ya que estaba con Arturo y eso no me llevaría a nada y que mejor quedara como un agradable recuerdo.
Le comenté a Arturo que iría a ver a Araceli por la tarde así que cerraría temprano, él me comentó que trataría de llegar temprano y que como a las 9 me llamaría para pasar por mi; le dije que estaba bien pero que me llamara a las 9:30 pues hacía tiempo que no la veía y tendríamos mucho que hablar y de seguro me invitaría a cenar.
Me fui a la papelería y a la hora de la comida, me fui a arreglar, me di un buen baño, me perfumé y arreglé con un vestido corto blanco, medias elásticas negras, y un conjunto de brassier y pantaleta beige de encaje y zapatillas negras; me bajé a la pape nuevamente encargándole a Brenda que cuidara a sus hermanos que hicieran sus tareas. Como a las cinco de la tarde, me llamó Araceli para decirme que estaba muy atrasada, pero que le había dicho a Rubén que pasara por mi y ella nos esperaba en su casa, quise preguntarle que porque iba Rubén por mi pero me colgó, traté de marcarle pero estaba ocupado, me fumé un cigarrillo y apenas lo llevaba por la mitad cuando llegó Rubén. Entró a la papelería y me dio un beso en la mejilla, diciéndome que Ara no podía ir y que nos esperaba en su casa, le comenté que no sabía que él iba a estar con nosotras, me dijo que fue a visitar a Ara y ella le comentó de nuestra cita y como la vio muy apurada le dijo que él pasaba por mí, y ahí se zanjó la conversación.
Me encogí de hombros y me dije a mi misma, pues a ver qué pasa….
La realidad era que si me gustó estar con Rubén la primera vez, era un hombre si no guapo, varonil que me supo dar placer y en el fondo de mi no había descartado la posibilidad de volver a estar con él por los comentarios de Araceli.
Me ayudó a recoger lo del mostrador y al ver mi vestido que al ser entallado resaltaba mi figura, me piropeaba diciendo que hermosa me veía, y posando sus grandes manos en mi cadera, me decía que le gustaba mucho y que la pasaríamos muy bien, acarició mis nalgas,, le retiré las manos y le dije que se estuviera quieto y ya nos fuéramos, me agaché por mi bolso y él aprovechó para arrimar su paquete en mis nalgas, lo sentí algo duro y lo empujé con mi mano y puse cara de enojada diciendo: estate quieto o no voy ya, nos pueden ver y me perjudicaría, me pidió perdón diciendo es que estás buenísima linda, no te enfades; bajamos la cortina me tomó de la cintura guiándome hacia el auto, y al abrirme la puerta y ayudarme a subir, acarició mi nalga derecha, no le di importancia y acomodé mi vestido que por lo corto se me subió a mas de medio muslo, cosa que no pasó desapercibida a sus ojos.
Era obvio que Ara y él habían platicado la posibilidad de otro encuentro y por eso Rubén actuaba con tanto descaro y la verdad tenía a flor de piel todas mis hormonas, así que el camino era fértil para que se diera.
Subió al auto y posó su mano sobre mis piernas, yo la tome entre las mías diciéndole: ya vámonos. Llegamos al edificio de Araceli y subimos al elevador, al cerrarse las puertas me abrazó y besó apasionadamente de tal forma que hasta la respiración se me fue, puse mis manos en su fuerte pecho, pero no pude separarlo de mi, acariciaba mi espalda y sobaba mis nalgas.
Me subió el vestido y metía su mano entre mi pantaleta, apretando y acariciando mi nalga, abrí mi boca correspondiendo a sus besos, él detuvo el elevador y sacó su miembro totalmente erecto, le dije que esperara porque me daba miedo el elevador detenido, el me volteó y puso su miembro entre mis nalgas sobre mi pantaleta y se movía como masturbándose con ellas, se sentía muy rico pero lo separé y le dije que ahí no me sentía a gusto, nos acomodamos nuestra ropa y llegamos al piso de Araceli.
Me volvió a besar e hizo que le tocará el pene, se lo apreté y le dije: niño malo y me adelante a tocarle a Araceli.
Ella nos abrió, pasamos y nos sentamos en la sala, ella se fue a la cocina Le pidió las llaves del auto a Rubén para ir al súper, él le dijo que la llevaba pero Ara le mencionó que iba por varias cosas y ni modo que me quedara sola, que mejor me acompañará, dijo esto sonriéndome y cerrando el ojo.
Cogió las llaves y se fue, yo me levanté y fui por un vaso de agua a la cocina, Rubén me siguió y abrazándome por detrás, me comenzó a besar en el cuello y arrimando su paquete a mis nalgas, acariciaba mis senos, se me erizo la piel con sus besos y volteando me le cogí la cara y nos besamos apasionadamente en los labios, sentía su duro pene en mi pubis, levantó mi vestido de atrás y metiendo sus manos entre mis pantaletas acarició completamente mis nalgas, estrujándolas y abriéndola para poner su dedo medio en mi ano, mordí su labio por el placer que me hacía sentir, levantó mis piernas y me cargó, yo me abracé a su cuello fuertemente y con mis piernas rodeé su cintura. Y así cargándome siguió metiendo sus manos entre mis pantaletas acariciando mis nalgas que estaban totalmente abiertas y sus grandes manos abarcaban por completo mis cachetes posteriores y con sus dedos medio, tocaba los labios de mi vagina, que en esa postura sentía toda la longitud de su pene, rozándolos a través de mi prenda intima, sentía super rico y mi vulva ya segregaba ríos de mis jugos estaba mojadisima!!!!
Al entrar a la habitación, de pie me quitó por encima de mi cabeza el vestido dejándome con mis medias y ropa interior únicamente, se separó de mi para observar detenidamente mi cuerpo, diciéndome que le gustaba mucho y que estaba muy buena, según él.
Se quitó la ropa quedándose únicamente en bóxer, mostrando un pene duro y grande que sobresalía por encima del resorte, llegándole el glande poco arriba de su ombligo, que brillaba por la secreción del liquido seminal, se veía majestuoso, le acaricié los testículos por encima de su calzoncillo, que apenas alcanzaba a cubrir con mi mano, se los estruje levemente, haciéndole suspirar, y bajándole el bóxer, salió disparado como resorte su potente y duro pene, golpeando mi vientre.
Me quitó el brassier, y bajo mis pantaletas a medio muslo, las cuales descendieron hasta mis pies al cerrar mis piernas levemente, acariciábamos nuestras partes el hundía dos de sus dedos en mi vagina, mientras yo masturbaba su gran pene, besándonos apasionadamente, nuestras respiraciones iban acelerándose, nos subimos a la cama acostándonos de lado para seguir acariciándonos mutuamente.
Me quitó las medias dejándome completamente desnuda, abrió mis piernas colocándome boca arriba y situando su cara entre mis piernas empezó a lamer, completamente mis labios vaginales abriéndolos con su húmeda y deliciosa lengua, atrapando con ella mi clítoris que ya estaba totalmente erguido pidiendo a gritos ser atendido, al grado que con tres succiones que me hizo con su lengua enrollada en mi clítoris hizo que llegara a mi primer orgasmo, sujetando su cabeza fuertemente hacia mi vagina, tuve un orgasmo tan fuerte y delicioso que no dejaba de gemir y chillar expulsando mis jugos que él golosamente tragaba.
Cuando dejé de mover mis caderas efecto de mi rico orgasmo, el subió besando mi vientre hasta mis senos, besándolos y succionando mis pezones, levantó mis piernas y sosteniendo las con sus fuertes manos comenzó a penetrarme con su firme y duro pene, el cual estaba tan erecto que sin necesidad de guiarlo con su mano, me lo metió profundamente hasta sentir como su glande se incrustada deliciosamente en mi cuello uterino haciéndome gemir de placer y recorrer me hacía la cabecera de la cama, soltó mis piernas abrazándome y pegando su robusto pecho aplastando mis senos, lo cogí de sus nalgas con fuerza y acompañaba sus fuertes embestidas con mis manos, me estuvo dando a buen ritmo por unos 15 minutos en los que tuve otro exquisito orgasmo, seguíamos besándonos con pasión.
Besaba sus labios y sus mejillas tomando su cara con mis manos sin dejar de mover mis caderas al encuentro de su potente miembro, me puso de lado y colocándose detrás de mí me penetró vaginalmente hasta que sentí sus vellos pegados a mis nalgas, alcé mi pierna izquierda de manera que podía meter mi mano entre mis piernas para acariciar sus grandes testículos en cada penetración que recibía, sentía su respiración agitada en mi nuca y sus expertas caricias en mis senos, pellizcando mis pezones como si fueran perillas de radio.
Me preguntó qué donde deseaba que terminara, le dije que donde él quisiera pero que no parará, pues estaba a punto de tener otro orgasmo. Siguió dándome a buen ritmo con un mete y saca riquísimo sintiendo toda su longitud entrando completamente en mí y sacándolo hasta dejar solamente el glande adentro, así estuvo unos minutos más hasta que explote en un abundante orgasmo, cerrando mis piernas y haciendo mis nalgas hacia atrás para evitar sus movimientos en lo que disfrutaba de mi orgasmo, poniendo mi mano izquierda en su nalga apretándole hacia mí.
Él acarició mis nalgas y ensalivando su grueso dedo medio comenzó a introducirlo en mi ano, horadando mi orifico con movimientos rotativos metiendo y sacando su grueso dedo, aumentando mi placer al sentirme invadida por mis dos orificios, sacó su pene de mi vagina totalmente impregnado de mis jugos y colocando su glande en la entrada de mi culito empezó a presionar metiéndome hasta casi la mitad de su miembro, con mi mano izquierda abrí mis nalgas permitiendo que con dos embestidas más entrara completamente su miembro invadiendo completamente mis intestinos, empujando mi cadera hacia atrás, hasta sentir sus bolas pegadas a mis piernas, las que separé un poco para acaríciaselas su escrito totalmente tenso, me volvía loca de placer, eran realmente grandes cubrían completamente la palma de mi mano, comenzó a acelerar sus movimientos apoyándose en mis senos, duró unos minutos más dándome duro hasta que le dije moviendo mi cabeza por el placer que me daba, que ya terminara en mi culito, aceleró aún más sus fuertes embestidas y de una fuerte estocada me lo metió hasta adentro que prácticamente lo sentía en mi estómago comenzó a eyacular dentro de mí con tres fuertes disparos inundando mi canal anal con su pringoso y cálido esperma, al sentir su cálida y potente corrida bajé su mano de mis senos a mi entrepierna y presionando mi clítoris con sus dedos hizo que terminara junto con él en mi enésimo orgasmo, nuestras agitadas respiraciones y mis gemidos de placer invadían por completo la habitación. Apreté mi esfínter exprimiendo por completo su pene, que sensación tan placentera sentir como recorría su esperma todo su potente falo hasta salir expulsado fuertemente hacia el fondo de mi intestino y sentir el cabecero de su glande en mi interior, uffff maravilloso.
Nos quedamos en esa posición un rato más hasta que su miembro abandonó lentamente mi culito quedando flácido entre mis nalgas mojándolas con los residuos de su semen.
Me levanté recogí mi ropa del suelo y me fui al baño a asearme y vestirme. En lo que Rubén se metió al baño yo arreglé la cama y me senté en la sala después de preparar café mientras Rubén se aseaba, llegó Araceli como a los 15 minutos de estar yo en la sala, preguntó por Rubén le dije que estaba en el baño, sacó una caja de galletas y me acompañó con un café.
Salió Rubén y se sentó en medio de nosotras al poco rato recibió una llamada, se disculpó y dijo que tenía que irse a su casa. Nos quedamos platicando Ara y yo un rato y hasta que me llamó Arturo y pasó por mi, llegamos me cambié para dormir y tambien mis pantaletas ya que venian super mojadas con todo el semen que salia de mi ano.