Mi viaje a la capital (I)

Habían pasado casi 2 meses de haber estado con Alejandra, ya se le notaba el embarazo, cada vez que la veía no podía dejar de pensar si era mi hijo el que llevaba en su vientre, las ganas de hacerlo con ella aun las tenia pero por el temor de hacerle daño a ambos me las aguantaba, ya que los sedantes al igual que muchas otras drogas no pueden ser usadas por embarazadas porque pueden ser peligrosas tanto para ellas como para el bebe, necesitaba follar pero mis otras mujeres no estaban disponibles, Cesar estaba aun oficialmente incapacitado para volar así que permanecía atendiendo el negocio de aromaterapia con Camila y yo no iba a ser tan menso de hacerle una visita nocturna a Camila con Cesar en el Dpto., con Marcela como ya lo he dicho antes no se podía contar ya que las oportunidades de estar con ella eran muy escasas.

Así que tuve que buscar carne fresca para saciar mis instintos, afortunadamente para mí, mujeres con quienes hacerlo era lo que había a mí alrededor, a medida que vaya contando cada una de mis experiencias les describiré a cada una de mis mujeres y como hice para tirarmelas, pero por ahora les contare lo que le hice a una chava del grado 11 en un viaje a la capital, estaba en clase de álgebra, cuando el profesor nos anuncio que necesitaban a los mejores alumnos de cada salón en la dirección y como yo era el mejor de mi clase tenia que ir a ver para que era.

En la dirección el director nos dijo que los mejores alumnos de cada grado de secundaria irían en representación del colegio a un concurso organizado en la capital por el ministerio de educación en el cual se premiarían los conocimientos de los alumnos con becas y auxilios educativos para los alumnos ganadores y una sala de computo totalmente nueva para el plantel educativo que los ganadores representaran, gracias a mis notas yo era el mejor alumno del grado 9, así que fui escogido para representar a mi grado, mis padres se sintieron orgullosos de mí por haber sido escogido para formar parte de la representación del colegio.

La representante del grado 11 a quien llamaremos K era una chava muy singular, ya que tenia cualidades muy difíciles de encontrar juntas en una mujer, era bella, inteligente y sencilla, la gran mayoría de chavas que he conocido tienen una inteligencia normal pero subutilizada ya sea por pereza o por vergüenza a que digan que son unas cerebritos, las mas listas por lo general se creían la gran cosa y miraban a los demás por encima del hombro y no se juntaban con nadie, esta chava no se avergonzaba de usar su cerebro y a pesar de ser muy inteligente no humillaba a los alumnos menos aventajados, es mas les explicaba con amabilidad si no habían entendido algo, era muy sencilla tanto en personalidad como en el vestir.

Desde la semana anterior al viaje mi madre comenzó a preparar mi equipaje, para que no me faltara nada, el día del viaje además de nuestros padres, estaban varios alumnos y maestros en representación de todos los grupos del colegio en la terminal de buses para despedirnos y desearnos suerte, salíamos a las 4 PM y el viaje duraría toda la noche, llegaríamos a la capital ya de mañana, además de los alumnos iba también nuestro rector y un maestro en nombre del personal docente como monitor del grupo, subimos al bus y K se sento a mi lado, ya que desde que supe que ella iria trate de ganarme su confianza, lo cual logre gracias a mi amabilidad, mi vasta cultura y mi humor, los otros representantes eran muy antipáticos, mucho estudio, poca diversión y poca amabilidad.

Así que durante las semanas anteriores me acerque a ella con el pretexto del viaje y logre hacerme su amigo y le pedí el favor de que se sentara conmigo durante el viaje y así conversar mientras llegábamos a la capital, gracias a mi fama de chavo serio e inofensivo ella accedió, durante las primeras horas del viaje conversamos de distintos temas, sus conocimientos eran tan vastos como los míos y en algunas áreas me superaba ya que se estaba preparando para la universidad, K me atrajo no solo físicamente sino también intelectualmente, me puse a pensar como seria un hijo nuestro con su belleza y nuestra inteligencia, yo había llevado mi provisión de cloroformo y rohypnol en la maleta por si encontraba en la capital la ocasión de usarlos con alguna mujer, mi intención original con K era no hacerle nada pero al pasar tanto tiempo juntos mis instintos comenzaron a alborotarse, a las 8 PM paramos a cenar en un parador del camino y aproveche para sacar de la maleta un frasquito con cloroformo y guardármelo en la chaqueta.

Durante la cena hablamos de nuestros respectivos proyectos para el futuro, la universidad, familia, trabajo y vi que teníamos muchas cosas en común, luego de la cena regresamos al bus y seguimos el viaje, entre las 9:20 y 9:45 PM ella empezó a bostezar así que le pregunte si tenia sueño y ella me dijo que si, así que en cuanto vi que empezó a cabecear le dije que yo también tenia sueño, nos tapamos con una cobija que me había dado mi madre y le desee buena noche, me hice el dormido y comencé a roncar pasito como a los 15 minutos ella se volteo y apoyo su cabeza en mi hombro, yo aproveche que estaba dormida y saque el frasquito, lo destape, eché un poco de cloroformo en mi pañuelo y se lo puse suavemente sobre su boca y nariz, deje que siguiera respirando y cuando sentí que su cuerpo se iba relajando se lo apreté un poco mas contra el rostro hasta que estuvo totalmente sedada.

K era una chava de 18 años, sin novio conocido, media 1,72 mts, cabello castaño rojizo cortado a la mitad de la espalda, ojos cafés, boca y labios normales, piel trigueña, tetas no muy grandes, su cuerpo era algo delgado pero no era flaca, su culo era bien parado y las piernas eran largas y fuertes ya que practicaba basketball, en ese momento K tenia puesta una chaqueta, una sudadera y unos viejos tenis, lo primero que hice fue bajar la cremallera de mi pantalón para dejar salir a mi erecto miembro y comencé a acariciar bajo la cobija sus muslos por encima de su sudadera, luego hale un poco el elástico de la sudadera y metí mi mano en su entrepierna, podía sentir su calor y sus pelitos que salían de los lados de su braga.

Le metí mi mano bajo su braga y acaricie su peludito, mis dedos se enredaban en su espesa mata de pelo, con mucho cuidado fui bajando hacia su coño, con mi dedo medio comencé a rozar su entrada con movimientos circulares, los elásticos de su sudadera y de su braga se apretaban contra mi muñeca arriba de mi dedo pulgar impidiéndome avanzar mas allá, tuve que halarlos un poco mas hasta que al fin pude introducir mi dedo medio en su concha, K no era virgen pero aun era estrecha, su concha se sentía cálida y firme, empecé a mover mi dedo lentamente dentro de ella y aumente la velocidad hasta que sentí que empezaba a mojarse, le saque mi dedo. Lo olí y chupe para catar el olor y sabor de sus jugos, su olor y sabor eran fuertes como el de un jamón serrano.

Mi verga estaba erecta y pedía una concha que penetrar, pero por la posición en que estaba K era imposible poder penetrarla sin llamar la atención, así que me tuve que conformar con dedearle su coño, pero sus manos estaban muy cerca de mis piernas así que abrí mi pantalón, tome su flácida mano izquierda, le entrelace los dedos con los de mi derecha coloque mi verga entre las palmas de las dos para masturbarme con ellas, no quería manchar las manos de K y mi cobija con semen así que busque un condón en mi billetera, pero no tenia ninguno, todos estaban en la maleta, así que cubrí mi verga con una de las bolsas que se usan para el mareo y comencé a pajearme con lentitud para evitar ser descubierto por el monitor, el plástico de la bolsa me permitía tener una sensación parecida a tener un condón en mi verga, pero era algo ruidoso así que tuve que ser muy cuidadoso de a que ritmo me movía.

La sensación era algo distinta a mis anteriores experiencias pero se sentía bien, sentía una gran emoción al masturbarme con la mano de una bella mujer tan inteligente como yo, su mano era cálida y suave, con uñas pintadas de blanco perla, la presión de mi mano empujando mi verga contra la palma de la mano de K y los lentos movimientos que hacia al pajearme retardaron mi corrida permitiéndome disfrutar de una larga y deliciosa paja, en cuando sentí que mi leche estaba por salir, moví mi derecha un poco mas rápido y eyacule dentro de la bolsa, le solté la mano a K y me moví quedando mi cuerpo de costado mirando hacia K.

En esta posición me quedo fácil bajarle la cremallera a la chaqueta de K, bajo la chaqueta traía una blusa verde de algodón cuyos botones eran a presión así que seria fácil de abrir, los fui abriendo uno a uno hasta que su blusa estaba totalmente abierta y me puse a ver su cuerpo el cual era mío para tocarlo y manosearlo a mi antojo, mientras pensaba esto le acaricie su abdomen, su piel era cálida y suave como seda, comencé a tocarle sus tetas y apretárselas suavemente, se sentían esponjosas y sus pezones se sentían a través de la tela del sostén, con alguna dificultad logre desabrochar su sostén bajo la cobija y se lo subí dejando al descubierto sus tetas, eran apretadas y firmes, sus oscuros pezones estaban erectos por el frió del aire tenían una aureola de unos 3 CMS de diámetro, le acaricié sus pezones con mis dedos y se los apreté con cuidado, tenia deseos de besarlos pero la cercanía del monitor me hizo desistir de mis deseos, pero decidí masturbarme mientras le magreaba las tetas.

Así que mientras le manoseaba las tetas a K, yo me masturbaba con mi verga dentro de la bolsa plástica, el ruido que hacia al frotar la bolsa contra mi verga era ahogado por la cobija sin embargo yo me moví lo mas lento posible para evitar delatarme, con una mano agarraba sus tetas y con la otra me pajeaba así estuve varios minutos hasta que me vine dentro de la bolsa, tenia ganas de verle los pies a K pero vi que si bien podía quitarle sus tenis con mis pies, no podía quitarle sus calcetines y mucho menos volverle a poner sus zapatos, así que desistí de la idea.

A la 1 AM, todos en el bus estaban roncando así que aproveche para besarle las tetas a K, comencé a besar y chupar sus pesones, se los lamí como si fueran bombones, se los acaricie con mi lengua, golpeándolos suavemente con ella hasta que sé erectaron, le bese los labios a K y le di un beso francés mientras la besaba baje mi mano por su espalda hasta lograr acariciar sus nalgas, durante la noche me masturbé varias veces con nuestras manos unidas o solo con la mía mientras tocaba sus tetas o su culo y le dedeaba su coño, si veía que K daba signos de estar despertando le volvía a poner mi pañuelo en su nariz, la ponía a dormir y seguía con la faena, el tiempo trascurrió muy rápido cuando menos pensé ya eran las 3: 45 AM así que decidí comenzar a vestir a K, le abroche su sostén y se lo coloque en su sitio, lo mismo hice con su blusa y subí la cremallera de su chaqueta, arregle mi ropa y arroje por la ventana la bolsa con mi semen, mi ropa olía a sudor y un poco a semen así que me quite de encima la cobija y deje que mi ropa se aireara un poco con el aire que entraba por la ventana del bus.

En cuanto el olor disminuyo volví a arroparme y me dormí hasta que llegamos a la capital, eran como las 8 AM cuando llegamos a la terminal de buses de la capital, el monitor estaba levantando los alumnos que aun estaban dormidos entre ellos K y yo, por lo general siempre que no haya follado la noche anterior me despierto a las 6 AM, en esta ocasión yo me desperté en cuanto el monitor nos llamo, a K le tomo un poco mas de trabajo despertarse pero lo logro, tenia una cara de sueño que no se la quitaba nadie, nos dimos los buenos días y le pregunte que tal noche había tenido, ella me contesto que le dolían la espalda, las piernas y la cabeza ya que no estaba acostumbrada a dormir casi sentada, yo por disimular le dije que a mi también me dolía lo mismo, nos paramos de nuestros asientos y sentí como me crujían los huesos de las rodillas, la verdad es que las piernas y la espalda me dolían un poco pero la cabeza no, a K le dolía era por el cloroformo.

Caminamos hacia la puerta del bus y K me dijo que la ayudara a bajar ya que se sentía mareada, lo cual hice como todo un buen amigo, ya afuera el monitor nos dijo que en el exterior de la terminal nos esperaba un microbús para llevarnos al hotel donde nos hospedaríamos y que allí desayunaríamos, nos tardamos 15 minutos en llegar al hotel y allí K casi no probo bocado del desayuno, le pregunte que le pasaba y me dijo que no se sentía bien, así que en cuanto tuvo las llaves de su habitación en la mano se subió a ella y no bajo hasta la hora del almuerzo, durante el concurso no volví a tener oportunidad de hacerle algo ya que ella compartía habitación con una joven de otro colegio y nuestras habitaciones estaban en pisos diferentes, además mi compañero de cuarto era un joven cristiano, por lo cual no podía traer ninguna chica a mi cuarto y todas las que me interesaron siempre andaban en grupo.

Cuando el concurso acabo, en el cual por cierto ocupamos un sitio entre los 10 primeros, logre que K se sentara conmigo en el viaje de regreso, pero el maldito monitor se sentó en la silla que quedaba al costado de nosotros al otro lado del pasillo central, así que no fue posible hacerle nada a K, durante el resto del curso nosotros estrechamos nuestra amistad, ella me trataba como un igual, nos contábamos nuestras cosas, yo sabia que en cuanto se graduara se iría a estudiar a otra ciudad y no volvería en mucho tiempo, así que decidí que K seria mía antes de su graduación y con astucia lo logre pero eso se los contare en otro relato, cuando se graduó me sentí triste y alegre a la vez, se iba la única mujer con la que podía conversar de cualquier cosa y alegre porque sabia que ella llegaría lejos en la vida, ella jamás supo lo que paso en el bus, ni que yo la jodi meses después, aunque eso me quemaba por dentro no se lo dije por no matar nuestra amistad, hoy K esta estudiando en una universidad en otra ciudad, sus excelentes notas le sirvieron para obtener una beca y por lo que se tiene un novio con dinero, yo espero el día que ella vuelva ojala sin su novio, ya que la idea de tener un hijo con ella aun me tienta, extraño su presencia a mi lado, no se si esto es amor ya que lo que siento por ella jamás lo he sentido por nadie.

Durante el concurso yo estaba desesperado por joder, ya arriba les comente los problemas que tuve, pero eso no quiere decir que no haya habido conejos para mi zanahoria, pero eso es una historia que les contare en mi próximo relato.