Mi verano entre una chica y su hermano

Acababa de estar con mis amigos, ya sabéis, de esos amigos que te echas en el verano, cuando tú no eres del todo tu, y me encontraba un poco decepcionado, hundido más bien, así que decidí que en lugar de ir a mi casa, como de costumbre, daría un paseo por la playa. En mitad del paseo me senté en la arena, y dio la casualidad de que coincidí con una chica que había eso lo mismo que yo, o al menos lo supuse. Aunque estaba oscuro pude ver por la luna que era una preciosa rubia de ojos castaños, y actitud amable, pero lasciva. Ella inicio la conversación, no me acuerdo de todo lo que hablamos pero yo me encontraba a gusto, más a gusto de todo lo que me había encontrado en el verano siendo un hipócrita, y la invite a casa, ya que me conto que había discutido con su hermano, y no tenía donde dormir. Tengo que decir que supo agradecerme el favor en cuanto llegamos. Se quito la camisa y se desabrocho el sujetador, dejando a la vista una maravilla jamás imaginada. Continúo con sus pantalones ajustados, y se metió el dedo dentro del tanga haciéndose una paja delante mía, yo soy muy tímido y en ese momento me quede a cuadros, pero ella dulcemente me unió a la fiesta. Le aparte el tanga y empecé a hacerle un cunnilingus. Ella estaba excitada, pero yo, no hay palabras para describirlo, ese olor me volvió loco, mientras le metía un dedo por el coño, la bese apasionadamente. Después pare, porque ella me lo pidió, me quería devolver el favor y me bajo los pantalones y los calzoncillos de un tirón, de donde salió mi metralleta preparada como un resorte. Tanto ella como yo sabíamos lo que venía a continuación pero siendo mala empezó por los huevos, y fue bajando dirigida hacia… Antes de llegar paro y se dispuso a comerme la polla, de la cual ya salía liquido pre seminal. Comenzó chupando la punta, pero enseguida se la trago entera, y me la chupaba a un ritmo frenético, el cual dejo momentáneamente para meter mi polla entre sus tetas, y juguetear con ella mientras me la seguía mamando. Pensaba que como siguiera así esto acabaría muy pronto, con lo que para disuadirla hasta que pudiera follármela cogí una vela de la mesa más cercana y se la metí por el coño, y se la saque, y se la metí, al mismo ritmo que ella me la chupaba, pero de todas formas me corrí, de una manera increíble, totalmente excitante, pero no acabo ahí, porque la erección continuaba, y decidí cogérmela contra la mesa, metiendo y sacando mi polla varias veces de su vagina. Ella tan excitada y morbosa como yo, me pidió que mientras lo hacía le metiera la vela por el culo, a mi me extraño, pero lo hice, y el conjunto era tan increíble que cuando me corrí por segunda vez el semen brotaba como una fuente, de la una bella ninfa (con una vela en el culo) no hacía más que tragar y tragar semen. Después de eso nos acostamos juntos y abrazados,  llenos de semen.

A la mañana siguiente lavamos entre los dos las sabanas y decidimos darnos una ducha, donde hubo otro revolcón con dos cuerpos hermosos y mojados, después de quitarnos el semen de los dos días, nos despedimos con un:

-Hasta luego

-¿Volvemos a vernos?

-Seguramente, si mi hermano todavía no me abre, vuelvo esta noche.

Yo me quede rezando porque así fuera, y después me fui con mis amigos, con los que fui a la playa, después a la piscina, y por la tarde entre todos decidimos ir al pueblo, que estaba a unos quince minutos andando, pero por el camino encontré a aquella rubia de ojos castaños, de quien no sabía ni el nombre siquiera, con un chico alto, de 1’90 aproximadamente, también rubio, ojos verdes en este caso, y con unos músculos muy marcados, especialmente los abdominales, me daba una envidia porque yo siempre había querido unos músculos como esos pero no era capaz de mantenerme en el gimnasio lo suficiente, ni mantener una dieta lo suficientemente estricta, tampoco es que sea feo, rubio de ojos castaños también, guapo de cara, delgado pero no excesivamente, músculos ligeramente marcados aunque los abdominales nunca han sido mi fuerte. Les pregunte por la discusión de ayer y mientras él me contestaba que había sido un malentendido ella me dijo que volvería esta noche conmigo, a lo la mayoría del grupo se rio hasta que se dieron cuenta que era verdad. Después de un rato con ellos no me encontraba tan irritado como ayer pero igualmente deseaba que volviera la noche para repetirlo, en cambio, cuando llegue a mi portal esperando verla, me encontré a su hermano sentado en un rincón de la puerta destrozando una pobre planta. Me dijo que habían vuelto a discutir de cosas que a él le parecían insignificantes pero que su hermana no soportaba y que está noche le había tocado irse a él fuera. Me pregunto si podía quedarse a dormir él hoy, ya que sabía lo de su hermana y la dirección por la conversación de la mañana., Me dio pena y acepte que se quedara, total ya me había perdido un polvo esa noche, por lo que subimos le abrí la puerta. Parecía cansado así que se tumbo en el sofá y se quito la camiseta, dejando su cuerpo al natural. Me quede embobado con sus abdominales y él se dio cuenta, por lo que me dijo que los tocara, haber si me animaba para ir al gimnasio. Tímidamente me acerque y empecé a tocarle el brazo, me daba una envidia, y a tocarle los abdominales con la otra, cuando de repente me da un beso de tornillo. Ambos nos pusimos, y decidí darle lametones en el cuello, había un olor en la sala intenso que no paraba de olerlo desde que se había quitado la camiseta, y que hacía que estuviera más excitado que avergonzado, así que continúe bajando y le mordisque chupe un pezón, que después continúe mordiendo, hasta que vino otro beso de tornillo, y me quito mi camiseta, algo que aprovecho para pasar su lengua por mi cuerpo, el cual según él, le volvían loco, hasta que empecé a probar sus abdominales, que me estaban calentando desde la primera vez que los vi, los recogí por completo, sin dejar un palmo libre, parecía que le gustaba, y me propuso devolverme el favor. Me desabrocho el botón del pantalón y mi polla salió como un resorte, inundando la sala con un olor más fuerte que el de antes, y la verdad es que chupando se parecía a su hermana comenzando por la punta, pero enseguida se la trago entera, y me la chupaba a un ritmo frenético, pero además intercalaba momentos en que me chupaba el huevo izquierdo, o que me pajeaba  con sus dos manos marcando todos los músculos del brazo. Después de un rato que me supo a gloria, él se bajo los pantalones y me arrodillo enfrente suya, haciéndome chupar la tela de sus calzoncillos, porque le ponía mucho como pude averiguar por la mancha que apareció después en ellos. Tan excitado le vi, que me negué a chupársela por un tiempo para poder disfrutar de la visión de que se pajeara antes mis narices hasta que cogí su tranca y me la metí de una vez en su boca, chupando cada vez más rápido. Pasado un rato le dije que se diera la vuelta y me puse a mamarle el culo, y a meterle un dedo dentro, y fácilmente dos, lo tenía más dilatado de lo que pensaba, pase la lengua por todos los rincones, y seguido metí mi polla en sus esfínteres, primero a un ritmo más bien lento, después también lento, y mucho después ya comencé a ir cada vez más rápido, porque al principio no se atrevía pero más tarde no hacía más que suplicar por tenerlo todo dentro, por lo que me corrí allí, cosa que le encanto, ya que después bajo a limpiarme mi polla y a dilatarme el culo, ya que yo era el siguiente, era mi primera vez y me pareció que no se atrevía pero aun entre placer y placer sentía un dolor intenso difícil de describir. Le dije que mejor que se corriera en mi cara, el sabor de su semen era extraño, pero de todos modos me trague la mayoría, deje lo justo para que él lo probara en el último beso que nos dimos esa noche. Nos fuimos a dormir, el me dijo que prefería el sillón, y a eso no me negué, si conciliaba del mismo modo el sueño, me arrope y soñé con diversos sueños húmedos, o eso supuse al ver que estaba empalmado por la mañana.

Me acordaba poco del sueño, recordaba a dos amigas del verano, una de ellas es un poco bajita ( 1’60 m), que se ha teñido este verano el pelo de rojo caoba, pero lo que más me gusta son sus 110 cm de talla. La otra, novia mía el verano pasado,  es mucho más alta, casi como yo (1’85), castaña de ojos y pelo y 90cm de talla. Las recordaba dándose un beso de tornillo, después la bajita le metía el dedo por el pantalón a la otra y empezaba a pajearla mientras seguían con ese beso húmedo, la otra se deja hacer y se baja el pantalón  para que la hagan un cunnilingus, pegando unos gritos de placer como los que pegaba el año pasado conmigo. Mientras se va desnudando lentamente y deja ver sus 90 cm y los lunares muy pequeños bajo la teta derecha y la bajita le sigue metiendo la lengua a la vez que ella también se pajea y se frota el dedo con la vagina. Se saca el dedo y lo chupa como si fuera una polla, de un extremo a otro, y succionando. Vuelve a la vagina de la otra y entonces… ¡RING RING RING! La alarma que había puesto me vuelve a asacar de un sueño hermoso y me doy cuenta que lleva sonando 15 min. y desayuno lo más rápido que puedo porque hace 5 min. que hemos quedado los del grupo. Aprovecho un momento para admirar la maravilla que tengo en el salón y ponerle una nota de lo que tengo en la despensa como desayuno, y que le agradecía lo de la noche pasada, que sentía no poder quedarme con él. Estuvimos en la playa toda la mañana hablando de todo: música, manga, cine, deporte, y como no, al final me preguntaron por la chica del otro día, y no les había nada más que el nombre y el lugar donde la conocí cuando apareció por la playa sola, y la invitamos a venirse con el grupo, a lo que acepto sin problemas. Por la tarde estuvimos en una cala en el puerto, y cuando por la noche propusieron ir a una discoteca, algunos pasaron, ella y yo porque ya teníamos planes en mi casa. Ya nos habíamos quitado la mitad de la ropa y habíamos empezado a pajearnos mutuamente en el ascensor pero cuando abrimos la puerta su hermano Aun no se había ido de mi casa, y nos vio morreandonos. Sin embargo su hermana le propuso unirse a la fiesta y los dos aceptamos, no era nada nuevo. Así que se bajo los pantalones a la vez que su hermana me los bajaba a mí con los dientes, y empezaba a mamarnos a los dos. Nosotros nos besábamos en la boca, en el cuello, y él continuo bajando por mi cuerpo, por mis pezones, por mi ombligo y llego hasta mi polla, por lo que su hermana se aparto para que él me la comiera a gusto y ella siguió con los cojones. Ese roce de cuerpos y ese morbo de estar tirándome a los dos hermanos a la vez me ponía tanto que quise pedirles que pararan para que no terminara tan pronto, pero no me salía la voz, y cuando iba a decirlo, ella subió y me dio un beso que remato la faena y me corrí en toda la cara de su hermano. Para no parar mientras recargaba las pilas, le metí un dedo por el  coño a la chica, le quite las bragas de golpe, y le hice un cunnilingus entranto iba metiéndole mi dedo por su precioso y perfecto culo, lo cual pude deducir por el cunnilingus que le ponía bastante. Para no dejar a su hermano al margen, ella siguió chupándole la polla, algo que a él le encantaba, y para agradecerlo, él la paro, aunque ella empezó a hacerle una paja, y él se dedico a chuparle los pezones, y a sobarle las tetas, ese par de tetas abombadas y lisas, que notan cada caricia, y que ella utilizo para hacerle una paja cubana que me puso hasta mi, si era posible que lo estuviera más. Él se corrió en las tetas de su hermana, y luego se las chupo para limpiarlas de semen. Entonces ella nos animo a penetrarla a la vez, su hermano por la boca y yo por el coño, nos miramos fijamente y le dijimos que no, que él la penetraría por el coño y yo por el culo, a lo que nos respondió con la misma cara del primer día, una cara amable, pero muy lasciva, se notaba que le había gustado la idea, y los gritos de placer que pego cuando su hermano la penetro y yo le metí de una sentada mi polla por su culo lo demostraban. Seguimos un rato penetrándola, y cambiándonos el lugar, mezclando salivas y fluidos, cuando decido sorprenderlo y mientras le petaba el coño a su hermana, yo le peto el culo a él sin decir nada. Al principio se enfado pero el placer que estaba sintiendo siendo el medio de ese sándwich le daba tanto placer que no me pudo decir nada y le bese apasionadamente, lo que pudo con él y se corrió dentro de su hermana, pero no paro porque yo se la saque, se la metí a su hermana y me corrí también dentro de ella. Luego la limpiamos el coño en un cunnilingus final que le hicimos entre los dos a la chica, algo que finalizo su sesión multiorgásmica que había sufrido desde que habíamos empezado a poseerla a la vez. Nos metimos los tres en la cama grande y nos dormimos abrazados.

El verano se ha terminado y llego saliendo con esa rubia de ojos castaños desde hace seis meses. Todas los días lo hacemos una o dos veces, y de vez en cuando viene su hermano de visita, y se une a nosotros. Nos llevamos perfectamente, tenemos gustos parecidos,  aspiraciones similares, amigos comunes, y  somos una pareja liberal. De vez en cuando me lio con otra tía, se lía con algún amigo, me lio con otro tío, se lía con otra tía y me quedo mirando, hacemos tríos, cuatríos, orgias, realizamos masoquismo, el tema sexual lo dominamos estupendamente. Parece que vamos en serio, porque hace una semana hemos juntado a nuestras familias en su cumpleaños, y se ha llevado una sorpresa increíble al ver los primos tan atractivos que tengo, al igual que yo con las primas tan buenas que hay en su familia, pero las orgías en grupo son otra historia, una lástima que mi abuela tuviera hernia de disco. Os espero en mi próximo relato. si os ha gustado o teneis alguna petición, nod udeis en enviarmela a cesar_ortego@hotmail.com