Mi vecino negro me volvía loca

La historia que me gustaría compartir en esta ocasión es lo que me ocurrió cuando por razones económicas me tuve que cambiar de piso,   por aquel entonces yo contaba con 25 años y lo máximo que me pude permitir es un piso a en la periferia de Barcelona, en un barrio donde la mayoría de gene que residía eran de origen africano , me acomode en un cuarto sin ascensor.

En mi rellano vivía una familia de nigerianos una mujer que nunca estaba ya que trabajaba en una residencia de gente mayor, un niño pequeño de no más de 6 meses y su marido, el era un negro de mas de 1.80 de altura, de unos 45 años cuerpo fibroso desde el principio me fije en el. Siempre me llamaron la atención los chicos de color y él era muy guapo

Yo por mi parte mido 1.70, desde pequeño fui bastante rellenito y al pegar el estirón perdí bastante peso pero se me quedó un buen culo y algo de pecho,  como ya explique en mi anterior relato desde pequeño me gustaba la ropa de mujer y a la que tenía oportunidad me ponía alguna prenda de mis hermanas. El vivir sola me permitió estar la mayoría de tiempo vestida de mujer.

Volviendo a la historia, en aquel verano conseguir un trabajo de camarera en un local del puerto de Barcelona éramos varias chicas trans trabajando y fue una época muy divertida me gusta vestir lo más sexy posible cosa que a los guiris les volvía locos y siempre andaban detrás a ver si podían ligar conmigo. Una noche de regreso a casa serian sobre las 5 de la mañana me encontré en el rellano a Masud que así se llamaba mi vecino,  yo llevaba un vestidito de color rojo con sus tacones a juego, me saludo amablemente, el estaba en la puerta de su piso fumando, yo le respondí al saludo y me dispuse a entrar en mi piso cuando el me paro y me ofreció un cigarro con una sonrisa, no pude negarme,  hablamos largo i tendido el tio tenia buena conversación y el acento africano me ponía bastante, todo se interrumpió cuando desde su piso se sintió a su hijo llorar Masud me cogió de la cintura y me dio dos besos en ese momento pude notar sus brazos poderosos que me cogían por la cintura y se despidió de mi con un hasta mañana vecina o vecino y me giño un ojo, estaba claro que se había dado cuenta que no era una chica,  entre en mi piso y no puede remediar el mastúrbame pensando en aquel impresionante macho negro .

Al día siguiente en el local donde trabajaba celebraban una fiesta ibicenca que había que ir vestida de blanco, me puse un top de encaje blanco que me marcaba bien el pecho, y una faldita corta con un poco de vuelo, un tanga de hilo dental de color blanco y sus zapatos de tacón de abuja a juego con todo el conjunto, me maquille bien para parecer lo más femenina posible los labios con un rojo intenso para que se marcaran bien, me recogí una coleta y Salí de mi piso, justo en ese momento, del piso de enfrente salía la mujer de Masud , la salude amablemente no sin que en  mi cabeza pasara el pensamiento de  la suerte que tenia de tener aquel pedazo de macho a su disposición todo los días, hable con ella mienta bajamos y me dijo que ese dia trabajaba en la residencia 24 horas y que hasta el día siguientes no volvería a casa.

La noche en la discoteca donde trabajaba  fue espectacular, me lo pase muy bien, aun teniendo mucha faena estuve bailado y bebiendo algún que otro chupito que me invitaban los clientes, sobre las 7 de la mañana llegaba a mi piso bastante contentilla para que negarlo, al llegar al rellano allí estaba Masud vestía una camisa de tirantes blanca y un pantalón de chándal negro nada más verlo la cara se me ilumino y el lo noto me saludo

-Vecina que buena que estas hoy

yo no pude más que dedicarle una sonrisa lo más picara que pude, el me interrumpió

-Vecina me puedes hacer un favor

• Claro vecino pide lo que quieras

-Te puedes quedar un momento en mi apartamento, esta mi hijo solo tengo que ir a comprarle leche al paki de abajo.

No me pude negar, entre en su apartamento me acompaño hacia la habitación de su hijo, el peque lloraba lo cogí en brazos y se calmo Masud me sonrio y me dijo

–que bien te que da guapísima, vengo rapidísimo.

Y se fue hacia la tienda, me quede en aquel apartamento con el puntillo que llevaba de toda la noche y con aquel niño cogido en brazos intente dejarlo en la cuna un par de veces pero cada vez que lo hacía se ponía a llorar así que opte por pasear por el apartamento con el, a los  15 min llego Masud con la leche

-hola mami guapa ya estoy en casa, acompáñame a la cocina

Entramos al cocina el se puso a preparar el biberón, me dejo que se lo diera yo, nunca lo había hecho pero la verdad no se me dio mal

–parecemos una familia yo el padre tu la madre y nuestro hijo-solto Masud,

Ese comentario despertó algo en mi me puso cachonda imaginarme estar casada con el y follar todos los días, en eso el pequeño acabo con el biberón y se quedó dormido, me lo cogió con delicadeza y se lo llevo para el cuarto, yo me quede en la cocina bebiendo un vaso de agua, al poco apareció Masud me miró fijamente a lo ojo y acernadase a mi me dijo

-te as portado como una buena madre a hora toca portarse como una buena esposa

Me agarro de mi culo con las dos manos y me acerco hacia él nos empezamos a besar, nuestras lenguas entraban y salían jugueteaban en el aire, nuestra saliva se entre mezclaban  era un beso apasiona de peli porno total, el me había levantado la parte de atrás de la falda y con sus poderosas mano jugaba con mis nalgas.

Le quite la camiseta y delante mío apareció un torso musculoso con todos sus abdominales bien marcados, no me pude resistir empecé a bajar y a lamer aquel torso fui bajando hasta quedar de rodillas delante de su paquete, estaba apunto de estallar dentro del chándal, con las dos manos baje el pantalón y los calzoncillos, de golpe delante mío salto una polla magnifica, de color chocolate era preciosa no deje que saltara y de un golpe me la metí en la boca, Masud gimió de placer la metí hasta el fondo de mi garganta y empecé a chupársela,  la quería saborear al máximo, era una polla de unos 20 cm con un grosor bastante considerable y coronada con unos buenos huevos negros los que deguste con pasión, se la mamaba con fuerza el sabor de aquel tronco de carne color chocolate me estaba volviendo loca de vez en cuanto miraba para arriba, directa a los ojos de mi acompañante el solo gemía de placer y me cogía el pelo con fuerza para que no parara de comérsela.

De repente paro mi mamada , me cogió de los hombros y me levanto,  nos besamos otra vez con pasión con la boca lo más abierta posible para que nuestras leguas y nuestra saliva jugara.

Lentamente me apoyo en una pequeña mesa que había dentro de la cocina, me giro quedando mi torso sobre la mesa y todo mi culo a su merced me subió un poco mas la falda y me bajo el tanga hasta las rodillas, se agacho detrás de mi y con dulzura empezó a besar mis nalgas hasta llegar con su poderosa lengua a mi apertura,   la devoro como un atentico león, yo moría de placer solo podía gemir y gemir Masud se levantó y de su pantalón de chándal que estaba en el suelo saco un condón, el cual se puso rápidamente, empezó a restregar su polla por la entrada de mi culo hasta que de un golpe seco de caderas me la metió sentí que me partía,  empezó un bombeo lento con calma, yo gemía le pedi un par de veces que lo hiciera con delicadeza pero no me hizo mucho caso, el bombeo cada vez era más y más violeto sentía como mi culo hi va a estallar, hasta que paro, me la saco y me ordeno que me fuera hacia el salón, una vez allí se sentó en un viejo sofá y me ordeno que me subiera encima de el, quería que lo cabalgara me fui introduciendo su polla lentamente hasta lo máximo que pude y empecé con el movimiento de caderas, llegado a ese instante mi culo recibía aquella maravillosa polla negra sin ningún problema la cabalgada se fue haciendo mas intensa según pasaban los segundos de un golpe me la saco, se levantó y me puso de rodillas otra vez delante de el, se despojó el condón y me la metió hasta el fondo de mi garganta empezó a follarme la boca con fuerza, había momentos que pensaba que vomitaba, de golpe empezó a correrse como una fuente de semen me costaba retener tal cantidad de lefa trague toda la que pude el gemía de placer, me miro a los ojos, me levanto y con un pañuelo me limpio la leche que salía por la comisura de mis labios me dio un morreo intenso me sonrió y me dijo

–me bien que follas mami

yo le sonreí y lo volví a besar el sabor de sus besos me volvían loca, nos quedamos los dos sentados en el sofá acariciándonos y besándonos estábamos exhaustos después de haber follado. Mire el reloj eran ya las 9.45 me levante recogí el tanga que estaba tirado en la cocina, me lo puse y me fui a despedirme de mi amante nos besamos en la puerta como locos, el aún  estaba desnudo y su polla empezó otra vez a ponerse tiesa y no lo dude, me agache y se la empecé a comer otra vez, fue una mamada intensa no tardo en correrse otra vez en mi boca me sorprendió la cantidad de leche que soltó en esta segunda corrida me lo volví a tragar, me levante, el me abrió la puerta y me dio una cachetada en el culo y sonriendo me dijo

-mañana repetimos serás mi mujer mientras la mia esta trabajando

–eso será un placer marido- le  di un pico y me fui a mi piso.

Los encuentros con mi vecino negro se repitieron durante meses casi a diario hasta que un problema con los papeles de su mujer los obligaron a mudarse a Francia.