Mi vecina, mi puta sumisa, infiel y domada (3)

Los días pasan con episodios variados con cris.

Si no me pongo en contacto con ella, es ella misma la que pide ración de polla en alguno de sus agujeros.

Una tarde, después de pasarme 4 días sin dirigirme a ella, me vibra el móvil con un Whatsapp de cris:

cris: [cris le ha enviado una imagen]

Una foto en un baño en la que se ve su coño con un bote de desodorante metido. "Tengo ganas"

Yo: pero que zorra eres, ¿4 días sin mi polla y hasta te metes desodorantes por el coño? ¿Cuantos dedos te has hecho desde el último día?

Cris: 3 o 4, ¡¡ al día!!

Yo: pero que cerda viciosa, te dije que no te tocaras sin permiso, a las 8 te quiero en mi oficina.

Cris: si, señor, gracias.

Yo: cuando termine no me darás las gracias....

A las 8, como un clavo, ahí estaba, con un abrigo largo y negro.

Yo: pasa, puta.

Nada más entrar, dejó caer el abrigo sorprendiéndome con que debajo únicamente llevaba unas medias.

Yo: vaya pedazo de golfa que estas hecha, ponte a 4 patas.

Cris: si, señor.

Según se puso a 4 patas empecé a azotar su culo con ganas, cada azote era un grito por su parte y su culo se puso empezó a poner rojo.

Después de 30 azotes (me ardía la mano y su culo era un poema, totalmente rojo) ordené:

Yo: pon la cara en el suelo y ábrete ese culo de zorra que tienes.

Escupí en su culo y puse la punta de la polla en su ano, empujé fuerte y se la metí hasta el fondo, con un grito ahogado por su parte. Sin darle tiempo a acostumbrarse bombee fuerte, sonaban los golpes de mi pelvis contra sus cachetes y los gritos se transformaron en gemidos, cuando me faltaba poco para correrme se la saqué del culo y dije:

Yo: chupa y no dejes ni gota.

Como buena perrita se puso a mamar mientras se la metía hasta la garganta.

El corridon inundo su boca y entre toses se lo trago relamiéndose.

Yo: sigue mamando, como se me baje te daré otros 30 azotes.

Chupó con ganas, la polla entera y los huevos, con la presión justa y usando bien la lengua.

Cuando volvía a tenerla totalmente dura......

Yo: ponte encima de la mesa, boca arriba, abre las piernas y levántalas, sujétalas con los brazos.

La imagen era como la de un pavo listo para meter en el horno, su coño brillante por lo cachonda que estaba y su culo aun abierto por la anterior follada.

Saqué un vibrador de buen tamaño (unos 20 cm y bien gordo) y se lo ensarté en el chocho de golpe, entró perfectamente por lo húmeda que andaba la puta.

A continuación puse la polla en su culo y dándole al máximo al vibrador se la metí.

La sensación de estrechez teniendo sus dos agujeros llenos y el notar como vibraba mi polla gracias al rabo de goma que tenía metido en el coño me puso a 100, empujaba con todas mis fuerzas, ella gemía y soltaba flujo como una fuente, corriéndose entre espasmos, notaba como su culo apretaba mi polla en casa orgasmo.

Me tumbe en el suelo y poniendo el vibrador encima de mi polla....

Yo: metete la polla de plástico en el culo y la mía en el coño, quiero dejarte llena de lefa.

Como una zombi se metió de un golpe las dos pollas en sus dos agujeros y se dejó caer clavándoselas hasta dentro con un gemido impresionante, en cuclillas subía y bajaba mientras yo veía sus agujeros dilatarse, cuando estaba a punto, la sujeté fuerte y regué su útero con una larga corrida que se acompaño con su enésimo espasmo brutal quedando tumbada encima de mi pecho con sus agujeros aun llenos y palpitando.

Sin llegar a decir nada me besó, lamió mi pecho y limpio mi tripa, mi polla, huevos y piernas con su lengua de los flujos y el semen derramado, cuando terminó, lo único que dijo, antes de caer casi desmayada fue:

Cris: gracias señor....

Cuando pudo volver a ser persona comencé a sacar información que me interesaba sobre su suegro y los próximos movimientos que iba a hacer la empresa para la que trabajaba, su puesto en el departamento de informática y las noticias que su suegro soltaba por descuido en las reuniones familiares me podían resultar muy útiles para poder hacer inversiones altamente rentables en empresas que fueran a ser adquiridas por la gran multinacional.

Mientras, puse las pinzas en sus pezones y le pedí que me contase si había ido ya al cirujano plástico para que esos dos pequeños bultos se conviertan en dos tetas en condiciones.

Al parecer su marido estaba dispuesto a pagarle la operación porque ella le había convencido de que estaba acomplejada, tenía ya la fecha, aprovechando 15 días de vacaciones que tenía en febrero.

Además de emputecerla, domarla y follarla como a una buena perra sumisa estaba consiguiendo que deseara complacerme de cualquier modo, hasta llegar a transformar su cuerpo.

Tirando de las pinzas que apretaban sus pezones dirigí su boca a mi polla, ya un poco recuperada de las dos corridas previas, arrodillada delante de mí, con los ojos bien abiertos.

Yo: vas a recibir una follada en tu boca, no quiero ni un mal gesto ni que te retires.

Cris: (abriendo su boca): si, mi señor.

Metí la polla en su boca y sujeté su cabeza hasta sentir su barbilla en los cojones, a continuación, el mete-saca hasta la garganta, sentía como mi capullo hacia tope en el fondo de su boca y la forzaba, las arcadas eran más que evidentes y la baba chorreaba por las comisuras de sus labios, tardo poco en empezar a lagrimear por el esfuerzo.

Yo: joder cris, como mamas zorra, que gusto usar todos tus agujeros, sigue así putita.

Vi como su mano estaba dando buen uso a su clítoris, la muy perra estaba cachonda mientras yo usaba su boca como la de una puta muñeca hinchable.

Más de 15 minutos después cris era un cuadro, todo su pecho lleno de baba, había tenido otros dos orgasmos y su boca ya estaba totalmente acostumbrada al trato que  le daba, es más, ya sin sujetarla, ella misma se la metía hasta el fondo y la mantenía ahí unos segundos, estaba construyendo una puta perfecta a base de pollazos.

Cuando estaba a punto.....

Yo: va la cena, preciosa.

Se la metió hasta dentro y me apretó muy suavemente los huevos con una mano, exprimiendo hasta la última gota de leche que quedaba en mi cuerpo, una vez el rabo se fue ablandando se lo saco de la boca mientras lo repasaba con la lengua, me miró fijamente.

Cris: gracias señor, cada vez que me usas mi cuerpo se vuelve loco, en mi puta vida me había corrido más de una vez por polvo y la mayoría de las veces ni eso y tu, violándome el culo, apoyándome y tratándome como la puta más sucia del mundo consigues que me olvide de quién soy y de lo que soy, quiero que me uses a tu antojo, cuando y como quieras.

Yo: ¿sabes lo que eres?

Cris: ¿tu puta?

Yo: no cris, eres mi sumisa, disfrutas siendo usada, vejada y tratada como una esclava sexual, asúmelo y sigue así, aun te queda mucho por descubrir. Vete a casa.

Cris: si Amo (por primera vez y sin que se lo ordenase, salió esa palabra de su boca)

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En los siguientes días, poco a poco, fui dirigiendo a cris a otro nuevo objetivo, quería follarme a su amiga Laura, la cotilla que tanto hablaba y que le había dicho a mi mujer que cris le ponía los cuernos a su marido, movida por la venganza y por el deseo de satisfacerme tramó un plan muy bien buscado.

Os describiré a Laura y a susi, otra vecina a la que cris quiso meter en vereda y aprovechar su estrategia para servirme a las dos en bandeja.

Laura era bajita, morena, ojos verdes, algo gordita, con unos melones grandes y bien puestos y una boca de comedora de pollas impresionante.

Susi, la otra vecina, era una rubia teñida, altiva y prepotente, con un buen cuerpo y un pasado choni que de vez en cuando salía en su forma de vestir y de hablar.

Continuará.