Mi vecina de al lado II
Repitiendo otra vez con mi vecina del 3º
Viernes por la noche.
Recuerdo que venía de uno de mis viajes de trabajo cuando llegaba al garaje de mi edificio. Venía en el último avión y el traslado desde el aeropuerto hasta mi casa casi siempre me llevaba unos 45 min así que llegaba a golpe de viernes a última hora cansado y con ganas de irme a dormir.
Eran sobre las 23:45 cuando estaba entrando en el garaje. El coche de Lucia, mi vecina, estaba aparcado. Nada fuera de lo normal porque casi todos los días ella suele tenerlo aparcado cuando yo vuelvo a casa. Lo único raro ese día era que las luces del interior del coche estaban encendidas. Aparque mi coche y me acerque a curiosear a ver qué había hecho para dejarlas encendidas.
Lucia estaba dentro, sollozando y con las manos tapándose la cara.
Dude por un momento si atreverme o no a hablar con ella. Por un momento pensé que nadie me mandaba entrometerme en la vida de los demás, pero mi relación con ella cada vez era más cercana, por lo que no pude evitarlo.
Llame al cristal y ella, que ya supongo que me había iodo entrar con el coche, hizo el ademán de que no pasaba nada.
Volví a insistir otra vez sobre el cristal de su coche.
Lucia….que te pasa?
<Nada, tranquilo, no me pasa nada…
Ya, por eso estas llorando, no? A ver, cuéntame que te ha pasado.
Lucia me abrió la puerta del coche y me senté junto a ella. Entre sollozos comenzó a contarme que había discutido fuertemente con mi vecino Pepe y que él después de discutir se había llevado a sus hijas al pueblo. Que no podía estar sola en casa y que había intentado coger el coche para ir al pueblo pero que se notaba muy nerviosa y no había podido pasar del garaje.
La intente tranquilizar y la saque del coche. Subimos en el ascensor y le pedí las llaves para ayudarla a entrar en su casa. Ella vive puerta con puerta conmigo así que mientras le abría la puerta, fui a mi casa a dejar mis maletas y volví rápidamente hacia su puerta a acompañarla.
No; se han ido al pueblo a visitar a su abuelo porque ya sabían que yo hoy llegaría muy tarde. Estarán todo el fin de semana allí, conteste.
Estas algo más tranquila?
<Bueno…..algo, contestó. Es que no me gusta nada cuando discutimos y lo paso fatal cuando además se lleva a mis hijas.
Bueno, no te preocupes que Pepe es un tío muy cabal y volveréis a hacer las paces, vale?
Estuve un buen rato hablando con ella y después de una hora conseguí que sus sollozos fueran a menos y poco a poco me pareció que estaba mucho más tranquila…
Lucia, creo que estas ya algo más tranquila, así que si no te parece mal, me voy a casa. Vengo cansadísimo de viaje y necesito meterme en cama a descansar, ok?
<Vale, perdona por la lata que te he dado, Diego.
No te preocupes mujer, ya sabes que me tienes para lo que necesites… Un besote.
Así me despedí de ella y entre en mi casa. Estuve desmontando la maleta y poniendo una lavadora de última hora y aunque tenía intención de darme una ducha el cansancio me podía…así que estaba empezando a quedarme dormido en el sofá, cuando recibí un whatsapp.
Era la 1:30 de la madrugada más o menos. Quien coño me estará mandando un mensaje a estas horas?…pensé.
< Lucia Movil: aun estas despierto vecino?
Si. Aun despierto pero por poco tiempo J. Que te pasa? Te puedo ayudar en algo?
Lucia móvil: puedo pedirte una cosa?
Si claro. A ver si puedo ayudarte; dime.
Lucia móvil: Sé que te parecerá raro lo que te voy a pedir, pero como sé que estas solo en casa este finde, podrías venir aquí?.
Pero si acabo de estar ahí!. Que te ocurre?
No, me refiero a que necesitaría que vinieses a pasar la noche aquí…
Vecinaaaaaa……..que aún recuerdo lo que hicimos en tu salón hace meses….y no creo que estés para esos cuentos hoy….
Lucia móvil: No, en serio, no me refiero a eso; estoy acostumbrada a dormir acompañada y no soy capaz de dormir sola. Te prometo que no pasara nada. Puedes porfi?
La verdad es que la idea de dormir con mi vecina era de lo más sugerente. Era como compartir algo más con ella. Algo del día a día como lo que compartía con mi vecino Pepe. Además, yo también estaba solo todo el finde, asi que no me pareció mala idea.
Ok, vale; en un minuto estoy ahí.
Me levanté del sofá y por un momento pensé….joder; otra vez a solas con mi vecina…..No sé qué podrá salir de todo esto….pero la verdad es que me gusta estar con ella y hoy la pobre necesita alguien como compañía. …SOLO Compañía….
Salí de casa y allí estaba ella; esperándome con la puerta entreabierta. Como casi siempre, vestía un pijama no muy holgado que permitía distinguir las curvas de su cuerpo. Camiseta blanca de manga corta y descalza completaban la visión de mujer cómoda en su casa.
Ok; no te preocupes contesté con una sonrisa en la cara.
Mientras subíamos hacia el piso superior donde tiene su habitación, pude comprobar otra vez como su cuerpo aun con muchas curvas sigue trayéndome loco; me encanta la redondez de su cuerpo que, sin estar gorda, tiene un morbo tremendo.
Al final ni siquiera había podido ducharme en casa, así que le dije: Oye, que sepas que ni siquiera he podido ducharme; espero que no te moleste que me vaya así para cama.
Nos metimos en cama y en ese momento mis pensamientos volvieron a pasar por pensar en lo que habíamos hecho la vez que habíamos estado juntos en el salón. Recordar como había estado con ella me ponía realmente caliente estando otra vez a su lado…..aunque en ese momento ella no pretendía nada más que tenerme como compañía.
Aun así, mi cabeza se dejaba volar por todo tipo de pensamientos sexuales, por lo que notaba un bulto considerable en mi entrepierna…
Ok; sin problema….
Yo estaba acostado de lado y ella me echó su brazo por encima. Colgaba por encima de mi brazo y su mano llegaba hasta mi cintura. Por un momento pensé que si se daba cuenta que estaba empalmado a su lado, la jodería, ya que no era el momento de ponerme cachondo cuando ella lo estaba pasando mal.
Aun así, no podía dejar de pensar que estaba metido en su cama. En la cama donde probablemente no haría muchas horas que estaría del mismo modo con Pepe, su marido. No sé por qué razón se me venía a la cabeza que haría en su día a día, como se iría a la cama, como se levantaría, como haría el amor allí en esa cama…..etc. Noté como seguía empalmándome cada vez más, mientras lo intentaba disimular poniéndome algo más de lado en la cama y separándome de ella. En ese momento, como en un acto involuntario, me intentó sujetar de la cintura para acercarme a ella pero lo que noto fue directamente la parte superior de mi polla pegada a mi ombligo.
Se hizo un silencio. Mi respiración se aceleró por un momento y creo que ella lo notó.
<Diego…..
Que Ana?….susurre mientras seguía de lado sin mirarla.
Me giré y vi en la penumbra su cara mirándome fijamente.
Ufffff……sí; creo que sí; no lo pude evitar, lo siento. Estar cerca de ti es lo que me provoca.
Si claro, sin problema; perdona mi reacción.
Asi que, dejando la situación en ese punto, nos dispusimos a dormir.
Diego….
<Queeeeeeeeeeeeeeee
….gracias
Recuerdo que durante esa noche ella se despertó un par de veces diciendo cosas sin sentido. Supongo que seguía preocupada y nerviosa por su discusión y balbuceaba cosas que no entendía así que lo que hice fue estrecharla en mis brazos varias veces y con ello conseguía que se durmiese otra vez.
Por la mañana, yo ya estaba despierto cuando ella comenzó a desperezarse. Yo llevaba un buen rato pensando qué coño hacia allí, dentro de la cama de mi vecina, cuando ella me preguntó susurrando;
< Estás despierto?
Si, conteste.
<OK; genial…..Diego, gracias por haberme hecho compañía esta noche. No hubiese podido dormir si no hubieses estado aquí a mi lado.
Ok; no te preocupes; ha sido un placer. Oye, por cierto, perdona por lo de ayer. Las reacciones del cuerpo a veces son impredecibles…
<No, no tienes que disculparte por nada; me gusta saber que causo esas reacciones en ti, pero ayer no era el día para seguirte. Lo siento.
Nada, mujer. No te preocupes. Oye, te importa que me dé una ducha rápida y si quieres después te invito a desayunar en la cafetería de abajo?
<OK, me encantaría.
Salí de cama dejándola a ella arropada con el edredón y me fui a su ducha.
Al entrar en la ducha me di cuenta que la cesta de la ropa sucia estaba a pie de la ducha y encima de toda la ropa se veían unas braguitas. No me considero fetichista de estas cosas pero no pude evitar cogerlas y verlas porque me parecían muy simpáticas. Tenían un Piolín en el centro y estaban llenas de lunares rojos; parecían unas braguitas infantiles hechas para una mujer que entraba en la cuarentena.
No sé por qué pero mis manos fueron más rápidas que mi cabeza y en un acto instintivo sexual las olí. Ese pedazo de tela olía a coño. Reconocía ese olor; era olor a coño. Ese coño que hacía meses me había comido y follado.
Una vez más note mi erección al dibujar en mi cabeza la silueta de mi vecina llenando esas braguitas en contacto con su piel más íntima…..ufffff….
Mejor será que entre en la ducha, pensé.
Me desvestí y entré en la cabina de ducha. Es un cabina de ducha como la que tengo en mi piso pero la situación de estar en la habitación de mi vecina y hber compartido con ella toda la noche hacia que todo lo que tenía alrededor captase mi atención. Botes de gel, champú….etc hacían imaginarme como sería el día a día de mi vecina cuando se levantaba…Note que mi erección no cesaba, más bien todo lo contrario……así que intente pensar en otras cosas para terminar de ducharme y salir de allí por fin.
En ese momento oí un ruido en la puerta y mi vecina golpeo la puerta del baño.
Ufffff joder Lucía…..
<Oye, tranquilo que ya te he visto desnudo; no me asustaré de ver nada que no haya visto, eh! Ajajajaja
Me gustó saber que parecía que su humor por fin estaba mejor, así que entró dentro del baño.
<Oye, tu sí que no mires, eh!
No no, mujer….que va! Yo sigo duchándome….Ajajajajaj. Pero te recuerdo que yo también te he visto desnuda, así que no me sorprenderé de nada….
Mi vecina sonrió de una forma muy traviesa…
Entre el vaho de la cabina de ducha distinguí como mi vecina se bajaba el pantalón del pijama y justo después unas braguitas color ceniza que le contrastaban muchísimo con su color de piel.
Un ruidito cantarín siguió al momento de sentarse en la taza del water y después de un breve instante, se secó con algo de papel y se dispuso a subir las bragas y el pantalón.
Pero lo que note es que cuando se subía las braguitas lo hacía de una forma muy lenta, como queriendo que la mirase….
Uffff, joder otra vez con la vecinita…..
Terminó de subirse las bragas e hizo lo mismo con el pantalón del pijama: muy muy lento.
Ya estaba….otra vez con la polla tiesa….joder!
Oyeeee. Donde puedo coger una toalla?
<Ah, sí; puedes coger una en el armario que está justo al lado….y se fue hacia la habitación.
Terminé de ducharme no sin intentar pensar en cosas que distrajeran mi pensamiento. Cogí una toalla y estaba empezando a secarme cuando vi a través del reflejo del espejo del baño lo que parecía mi vecina encima de cama.
La puerta no dejaba ver del todo, así que me moví hasta poder ver mejor. MI vecina estaba encima de cama. El edredón estaba a los pies de la cama y ella casi en el medio de la cama.
La piernas las tenía ligeramente abiertas y su mano derecha desaparecía dentro del pantalón del pijama para mi agrado. Su mano izquierda comenzaba a desaparecer también pero dentro de la camiseta dejándome ver parte de su vientre al aire.
Joder….esa cabrona estaba haciéndose un dedo!
Seguí mirando como si estuviese espiando aunque tan solo una puerta y escasos metros me separaban de ella. La situación de verla masturbándose me encendía mucho.
Note como mi polla no cabía dentro de la toalla de baño, pero en ese momento ya no me importaba…
Ella tenía la cabeza echada sobre la almohada y se veía que disfrutaba de tacto de su mano dentro de su pantalón.
Abrí la puerta y salí del baño con la toalla enrollada en mi cintura como buenamente podía y me quede allí, de pie, mirando el espectáculo que me estaba otorgando mi vecina.
Que vecina…..pasándolo bien? Ajajajaja
<Hola……pues si…..la verdad es que no he podido evitar dejar volar un poco la imaginación cuando te vi en la ducha y creo que ayer no fui justa contigo….Por eso quería que vinieses cuando terminases de ducharte…
Ummmm…Aja, respondí.
Y que se supone que quieres que haga? Ajajajajaj
Creo que me quedare un rato viendo lo que haces…
La idea de ver en primera línea de butacas como se hacía un dedo mi vecina era de lo más excitante, así que, me quede al lado de la puerta viendo como se lo hacía con sus dedos.
Ella sabía cómo jugar con sus manos. Veía como su mano desaparecía dentro de su pantalón con un movimiento rítmico que hacía que todo su cuerpo se contonease al ritmo de las caricias que se daba. Una mano más se sumó a las caricias más íntimas y ahora ya eran los dos brazos los que desaparecían en el medio de la tela de su pijama.
Mordía su labio inferior de la forma más sexual que os podéis imaginar. Respiraba entrecortado soltando pequeños gemido mientras sus manos desparecían aún más dentro de su pijama.
Lucia……puedo pedirte algo?
Asintió con la cabeza sin pronunciar palabra…
qué te parece si te sacas algo más de ropa? No estarás más cómoda? J
Ella, sin contestar nuevamente, y sabiendo cómo seguir el juego que estaba practicando, deslizó sus manos hacia la cintura del pantalón y se lo sacó suavemente al mismo tiempo que levantaba las dos piernas en paralelo hacia mí. Su pantalón discurría lentamente por sus piernas hasta que se lo sacó completamente.
Ahora seguía con las piernas flexionadas y en el aire intencionadamente. Sus braguitas miraban hacia mí.
Se veían oscuras pero no era por su color ceniza; la parte más interna de las braguitas estaba muy oscura y brillaba por el flujo que comenzaba a mojar su tela.
Bajo las piernas y sus manos retomaron la tarea que había empezado anteriormente cuando yo aún estaba en la ducha.
<Sabes, me dijo? Me acuerdo mucho de cuando estuvimos juntos en el sofá hace meses. Ese día disfrute mucho y me gustaría que volviésemos a pasarlo bien. Ayer no era mi día y lo siento, pero hoy me gustaría compensarte por haber sido tan comprensivo conmigo.
No dije nada: seguí mirando como se tocaba esbozando una sonrisa y aceptando con la cabeza la proposición que me hacía.
Sus manos seguían otra vez rítmicamente acariciando su sexo. Primero por encima de la tela de las bragas. Pasando por encima de ellas y apretando por encima de los labios dejando que la tela se introdujese ligeramente en su sexo, marcando la línea de ese fruto prohibido que yo anhelaba comer otra vez…
A continuación se sacó la camiseta y sus pechos de dejaron ver. Como ya dije mi vecina esta algo rellenita, pero las curvas que tiene son como para perder la cabeza: sus pechos son algo grandes pero a la vez muy bien formados
Así que ahí estaba; casi desnuda encima de su cama, tocándose el coño por encima de sus bragas y al mismo tiempo acariciándose los pechos y haciendo que sus pezones se pusieran duros y tiesos de la excitación.
Sus dedos buscaban humedad. Se veía que disfrutaba notándose mojada. Acariciaba una y otra vez sus labios por encima de las bragas y cada vez parecían más empapadas.
Una de sus manos se deslizó furtivamente hacia un lado de la tela y apartando la tela de las bragas descubrió ante mis ojos su coño.
Uffff, joder….que mojado estaba ese coñito. A escasos dos metros de distancia podía percibir la humedad de su coño y al mismo tiempo su olor. Comenzaba a haber olor a sexo en su habitación. Recordaba que la vez que había estado con ella en su salón su olor me había hipnotizado. Su olor corporal era encandilador. Ahora volvía a sentir un sentimiento de deja-vu al recordar ese olor a coño mojado y caliente.
Mi mano no pudo evitar bajar hacia la toalla y soltarla de mi cintura, con lo que al caer al suelo, me quedé completamente desnudo ante ella. Su mirada se fue directamente hacia mi entrepierna. Mi polla estaba dura y palpitante y ahora la sujetaba con mi mano.
Se mordió otra vez los labios
< Ven aquí vecino….e hizo el gesto de que me fuese hacia ella
No, replique. Estoy disfrutando viendo cómo te haces un dedo. Quiero ver como tus dedos entran en tu coño follándote y mojándote.
<Ufffff, que malo, respondió. Y tu no me vas a dejar probarte?
Ummmmm tendrás que ganarte todo lo que quieras de mí……así que esmérate J
En ese momento ella se volvió a recostar sobre la cama y llevando nuevamente las manos a su cintura, comenzó a deslizar sus braguitas piernas abajo.
Cuando las retiró completamente me dijo…..
< Estas también las vas a oler? Ajajajajajaj
Cómo? Respondí?
ummmmm; que mala eres…. contesté
Y al mismo tiempo me acerqué a ella para recoger la pieza de tela mojada que me ofrecía. Al acercármela pude percibir otra vez el olor de antes pero mucho más intenso. Olía a coño. Pero ese coño ahora creo que tenía ganas de lengua, de boca, de polla….
Ella sabía que armas usaba…
Se dio la vuelta y se puso a cuatro patas encima de cama. Sus tetas colgaban hacia abajo pidiendo a gritos que alguien se comiera esos frutos que colgaban como si fuese un árbol; árbol de sexo.
Arqueaba ligeramente la espalda para que yo pudiese ver mejor lo que hacía. Sus dedos pasaban por encima de su coño. Separaba los labios mojados con los dedos y los pasaba una y otra vez rozándolos y mojando sus manos.
Brillaba. Su piel más íntima brillaba de lo mojada que estaba.
Me acerqué a su cama con la polla en la mano. Me recreaba tocándomela suavemente cuando llegué junto a ella. En ese momento ella soltó una mano e hizo el movimiento de querer cogerla, pero me separé ligeramente impidiéndoselo. Me miró con cara de enfado pero yo le devolví una sonrisa. Me volví a acerca a ella y mi polla se acercó a su cara.
Mientras seguía tocándose el coño su cabeza intentó captar mi polla con su boca. Su lengua salía de su boca intentando llegar a contactar con mi parte del cuerpo más caliente. Volví a impedírselo con una sonrisa en la cara. Me ponía mucho hacerla sufrir así que durante un rato estuve tocándome con mi polla a escasos milímetros de su cara. Seguro que ella percibía el olor que desprendía mi polla. El mío también era olor a sexo; sexo básico; pura hormona sexual.
Mi mano se movió hacia su cuerpo y se deslizó por su espalda mientras ella seguía tocándose. Poco a poco fue a dar encima de su culo.
Un dedo mío se deslizó a través de los pliegues de su piel y fue a coincidir con uno de sus dedos, mojado por su flujo. Juguetee como un niño travieso con él, aprovechándome de su humedad y provocando que al paso de mi dedo por sus labios un gemido de placer saliese de su boca.
Pasaba mis dedos por su coñito con un movimiento de vaivén haciendo que se estremeciese a cada mm que avanzaba.
Si? Te gusta notar como te toco vecina? Ummmmm que rica debes estar ahí abajo. Que pena que hoy no te vaya a comer ni a follar…. Ajajajajaj
Se paró en seco. Sus manos se detuvieron al momento y me dijo:
<Cómo?. No me vas a follar con lo cachonda que estoy? `
No
Ajajajajaja…. Estas muy cachonda? Le dije.
Ummm. Pues quiero que lo estés aún más…. Y acto seguido me acerqué a ella.
Mi cabeza se acercó a la de ella y le susurré al oído:
Era broma vecina; te voy a follar esta boquita que está pidiendo mi polla. Y si te portas bien a lo mejor también te follo algún otro agujero….
Y me separé de ella sonriendo. Ella sonrió aliviada. Cogí nuevamente mi polla y se la acerqué a su boca. Su lengua volvió a salir de su boca con un gesto desesperado y al fin entró en contacto conmigo. Mi polla estaba mojada de la excitación y unas pequeñas gotitas de preseminal asomaban en mi capullo. Hábilmente su lengua se fue directa a ellas y se impregnó de mi líquido. Un gesto de placer se dibujó en su rostro. A mi vecina le gustaba chuparla y se notaba.
Su lengua recorrió despacio mi polla desde arriba abajo. Trazaba líneas rectas a través del tronco de mi polla con su lengua haciéndome la caricia más sensual y sexual que podía imaginar en ese momento. Se separó de mí y abriendo la boca de forma que yo la mirase, se metió mi polla dentro de su boca. Notaba la humedad de su boca. Mi polla rozaba con las paredes de su boca humedeciéndome más. Noté presión sobre mi polla y comenzando a chupar me descubrió el capullo dentro de su boca. Ahora entraban en contacto mi glande totalmente liberado con las paredes de su boca, con su lengua. Su saliva se impregnaba de mi sabor y mi polla recogía su saliva mezclándose.
Uffff, joder vecina, como me encanta que me comas la polla, le dije.
Levantó la mirada y sacándosela de la boca la lamió como si de un helado se tratase mostrándome la lengua a cada movimiento que me hacía.
Al mismo tiempo yo seguía moviendo mis dedos a través de los labios de su coño. Ya notaba mi mano completamente por la cantidad de flujo que se derramaba a través de su coñito.
Comencé a separarme de su boca y ella siguió persiguiendo mi polla con su cabeza hasta que me fui hacia su retaguardia. La obligué a seguir a cuatro patas sentada en la cama.
Te voy a follar. Te voy a meter mi polla en tu coñito porque eres muy puta y es lo que ahora deseas, verdad?
<Siiiii,….
Pues pídemelo. Suplícame que te folle. Dime cuanto deseas que lo haga
<Uffff, joder, Diego…..por favor. Mira como estoy……
Dios, no seas cabrón y métemela ya!
Jijijiji…….No. Primero creo que voy a probar a que sabe tu coño. Recuerdo que cuando lo probé por primera vez soñé muchos días con ese sabor. Quiero saber si ha cambiado. Si ha mejorado…
Y me acerqué a ella por detrás. Sus dedos seguían masajeando su coño y su clítoris mojándola más y más. Me acerqué más. Mi boca se pegó a sus labios y pude percibir que ese sabor caliente y algo salado volvía a enloquecerme. Era un yonqui del coño de mi vecina. Mi lengua se unió a sus labios y comenzó a moverse dentro de ellos, separándolos y moviéndolos sutilmente. Me encantaba ese sabor. El olor y el sabor me encendían.
Un dedo mío se fue a investigar que podía hacer para ayudar.
Suspiró una vez más al sentir que otro elemento se sumaba a las caricias. Mi dedo se movía adentrándose en su coño, buscando el punto que más la haría disfrutar. Al mismo tiempo otro dedo se sumó a las caricias y alcanzaba su clítoris que ya notaba muy abultado.
Seguí con mis caricias. Ella se movía al compás de mis caricias. Su cuerpo se deshacía en movimientos impulsivos. Me gustaba. Me gustaba notar como se retorcía de placer con lo que le hacía. Mi boca se pegó aún más a su coño y comencé a sorber ese manjar que brotaba de su interior. En ese momento noté como la mano de mi vecina me sujetaba la cabeza y hacia presión sobre su cuerpo evitando que me separase de ella. Ummmmm, lo estaba disfrutando.
Un par de lametones más y mi dedo rozando su interior y su botón maravilloso y empezó a moverse frenéticamente
Diego……me voy…..me…vvvvvo…..
Y ya no dijo más. No por lo menos que lo pudiera entender.
Se corrió en mi boca. Sentí los espasmos dentro de su coño aprisionándome los dedos.
Estaba mojada. Muy mojada. Y yo también. Mis dedos y mi cara estaban empapados por su flujo y mi saliva.
Un par de espasmos más y llevó sus manos hacia la mía impidiendo momentáneamente que yo siguiera moviendo mis dedos dentro de ella.
Travieso, le di un par de lametones más en sus labios y ella se retorció nuevamente.
Yooooo? Si he sido muyyyy bueno! Ajajajajaj
Mi polla estaba durísima y necesitaba desahogo.
Cómo?.....Noooo vecina…..Me lo vas a pedir tu…..Quiero que me pidas lo que quieres que te haga.
<Ufffff, joder, hoy te has levantado tremendo, eh! Ajajajaj
Fóllame anda!
No. Que me lo pidas. Suplícame lo que quieres. Dime cuanto lo deseas y veré que hago….
<Ufffff, joder. Mira como me tienes…..No te doy pena?. Me he corrido con tu mano y con tu boca y no he podido sentirte dentro de mí. Fóllame anda, porfa.
No; te repito que quiero que me digas cuanto lo deseas y que me lo supliques J
Se volvió hacia mí con cara de vicio y lujuria.
< Me he corrido en tu cara, vecino. Estas mojado de mi coño y creo que tienes la polla deseando entrar en mí. Quiero que me metas esa polla dentro. Necesito sentir como entra dentro de mí; como va entrando dentro de mi coño abriéndome por dentro. Quiero sentir como me follas desde atrás.
Y se separó las piernas para dejarme ver como se separaba los labios del coño con su mano.
Me puse detrás de ella con la polla en mi mano. Estaba muy duro y mojado (y joder… como deseaba follármela).
Rocé con mi polla sus labios. Metí mi polla entre sus labios sin metérsela dentro, haciendo un movimiento de mete saca a través de sus labios. Así me mojaba de ella y ella de mí. Ambos estábamos muy calientes.
Lucia….
<Que?
Debería ir a casa a por un condón. Recuerda que la última vez me corrí dentro y al final tuviste que solucionar en planificación familiar….
<Ajajajajajaj, siiiii, lo recuerdo! Pero sabes qué?
Ufffff….Intenté seguir con ese movimiento sensual frotándome contra ella pero no me dejó
Sentí como una de sus manos me cogía la polla y se la llevaba a su coño. La guio hábilmente hacia ella y de un golpe entró deslizándome dentro de ella.
Ufffff. Diossssss que rico se está dentro de ti vecina!
Lo que me preguntó a continuación me dejo descolocado pero a decir verdad no me importó responder…
Ufffff, me vuelves loco vecina. Disfruto contigo más que con nadie. La última vez que estuve contigo estuve soñando con lo que hicimos días y días. Me encanta sentirme dentro de ti. Me pone muchísimo como me comas la polla y como me follas.
Oir eso de mi vecina, me ponía mucho. Joder, realmente me encantaba follar con ella y ella disfrutaba igual conmigo….era genial!
Ummmmm, pues sabes qué?. Que ahora tienes mi polla dentro de ti. No es la de Pepe. Te está follando la polla de tu vecino… Vés lo duro que me has puesto? Te gusta cómo te follo?
Y comencé a moverme dentro y fuera de su coño. Mi polla resbalaba en ese movimiento como si se tratase de dos engranajes perfectamente acoplados y lubricados.
Dentro, fuera, dentro fuera. Ella gemía de placer cada vez que me metía dentro de ella. Su mano derecha se fue directa a mi culo y acompañaba mi movimiento con ella, como intentando impedir que ningún otro movimiento se produjese.
La empujé algo más sobre la cama. Le hice poner los brazos cerca de su cabeza para poder embestirla más intensamente.
Te gusta? Te gusta sentirme dentro? Estoy muy duro vecina. Como siga follándote así conseguirás que me corra….
<Noooo; no puedes correrte porfa. Sigue follandome pero no te corras aun!
Y al mismo tiempo sentí como deslizaba como podía otra vez una mano hacia su coño.
Mientras bombeaba mi polla sobre su coño, se empezó a tocar ayudándose a alcanzar más rápidamente el clímax.
Me gustaba. Sentía mi polla rozándose en las paredes de su coño. Notaba como al pasar mi capullo las paredes de su coñito se abrían dejándome paso para seguir follándola y cuando estaba totalmente dentro de ella notaba el rozar de sus manos en su clítoris tocándome también ligeramente la polla.
Saqué mi polla. No aguantaba más…
No aguanto más vecina, le dije. Si te la meto una vez más me corro.
Date la vuelta, le dije.
Y se volvió hacia mí. Se tumbó en su cama abierta de piernas metiéndose dos dedos en su coño y masajeando su clítoris mientras me daba un breve respiro.
Volví a la carga. Miré mi polla. Estaba ahora llena de manchitas blancas de su flujo interno. Uffff como se mojaba mi vecina….
Mira como me has dejado! Le dije enseñándosela.
Quieres limpiármela? Uffff, joder vecina, estas muy puta hoy. Mucho más que la última vez!
Y acerqué mi polla mojada de su flujo y de mi lubricación a su boca. Ella sacó su lengua y suavemente lamió cada centímetro de mi polla limpiándome todo el cuerpo de la polla de su flujo hasta dejármela limpia del todo.
Y ahora qué? Que se supone que debo hacer?
Ella no contestó: simplemente se dejó caer otra vez encima de cama. Separó todo lo que podía los labios de su coño y me enseñó lo dilatado que tenía el agujero de su coño mostrándome de donde provenían todos los restos de su flujo. Dios, estaba empapadísima !
Ufffff, yo creo que debería metértela otra vez en ese coñito que sigue pidiendo guerra….
Cogí nuevamente mi polla con la mano y la acerqué otra vez al coño de mi vecina.
Su coño estaba dilatado y se veía su agujero muy lubricado.
Volvió a cogerme la polla con su mano. Si que tenía aganas de sentirme!. Ni siquiera un poco de presión hizo falta para que su coño se tragase nuevamente mi polla. La deslicé dentro resbalando por su piel.
Estaba otra vez dentro de su coño. Ahora veía su cara; era cara de vicio, de lujuria, de placer.
Ella me cogió la cara con sus manos y me besó profundamente. Jugábamos con nuestras lenguas al ritmo de mis penetraciones. Cada vez que metía mas mi polla en su coño, mi lengua se adentraba más en su boca igual que como ella recibía mi polla; con un gemido y apretándome más hacia ella.
Mientras la follaba a placer, me separaba ligeramente para observar el espectáculo de ver como mi polla se metía en su cuerpo empapada en sus fluidos y los míos. Ella se tumbó algo más en la cama y elevando sus piernas, me rodeó la cintura con ellas. Sus pies me enganchaban por la espalda marcándome el ritmo que deseaba recibir.
Como disfrutaba de su coño y como me gustaba ver cómo me la estaba follando!. Su cara era puro vicio. No podía meterla más dentro de ella. Mi polla chocaba con sus labios cuando entraba del todo haciendo un ruido que delataba que ambos estábamos encharcados de lubricación.
Notaba como ese roce húmedo hacía que se me derritieran las neuronas y dejaba de existir como persona. Solo sentía el placer de estar follándome a mi vecina, de estar dentro de su cuerpo notando su calor y su humedad.
Me acercó otra vez a su cara con sus manos y me susurró:
<Fóllame como te follas a Ana. Hoy quiero ser ella y quiero sentir como me follas y te corres dentro de mí.
Joder, parecía que mi vecino la tenía a pan y agua y que estaba muy necesitada de polla!
Entre sus manos y sus piernas rodeándome me marcaba el ritmo que ella quería.
Me gustaba sentir como era yo quien la follaba pero a la vez me gustaba sentir como era ella quien demandaba mis embestidas.
Otra vez más, ella se llevó los dedos a su clítoris para empezar a moverlo al compás de mis embestidas. Pero apenas se empezó a tocar, noté como su cuerpo empezaba con síntomas de haber llegado al punto de no retorno en su clímax.
Te gusta vecina? Te gusta sentirme dentro de ti?
<Siiii, dioss……sigue así que me corro!!! Dale!
Uffffff, yo me voy a correr también! Donde quieres que me corra? Le pregunté
Un par de embestidas más sobre ella y noté como todo mi cuerpo avecinaba con tensarse al límite al mismo tiempo que empezaba a sentir como gran parte de mi sangre se dirigía a mi entrepierna para poder bombear mi corrida. Ella lanzó un gemido ahogado
<Ahhhhhhhh……..sssssssssssiiiiiiiiii!
Y noté como su coño volvía a presionarme internamente. Segundos después de oírla, todo mi cuerpo se tensó y noté como salía a borbotones la corrida que ella necesitaba. Note como ella me mojaba y como yo la mojaba a ella. Mi polla palpitaba soltando mi semen dentro de su cuerpo al mismo tiempo que notaba como sus músculos se contraían entorno a mi polla. Me corrí dentro de su coño de una forma brutal. Noté como mi semen salía despedido encharcando su interior.
Seguí pegado a ella, notando los latidos de mi corazón repercutiéndose en mi polla y translimitándoselos a ella mediante espasmos.
Sí; no era lo que querías?
<Uffffff, desde la vez que lo hicimos en el salón es lo que más me apetecía Diego. Deseaba sentir como te corrías. Desde esa vez me he imaginado muchas veces como sería volver a tenerte dentro de mí. Es algo muy personal que solo he compartido con Pepe y contigo. Al resto de mis parejas nunca les dejé hacerlo sin condón.
Si? Así que te gusta que me corra dentro de ti? ….Ummmmm que rico!
Y me pegué a ella dándole un beso muy intenso. Mi polla seguía dentro de su cuerpo perdiendo su rigidez.
Era alucinante haber podido follar otra vez con mi vecina.
Tienes algo para limpiarte? Tan pronto la saque, mojarás toda la cama.
Estas muy puta vecina…
Me separé de ella y saqué la polla de su coño. Al instante un chorro de semen, flujo y saliva salió de su interior, mojándole las piernas y los pliegues de su coño.
Ella se incorporó y vio como terminaba de salir todo esa mezcla de flujos fruto del polvo que acabamos de tener.
Traviesa, se llevó la mano a su coño viendo lo que había chorreado, cogió con sus dedos lo que podía de todo ese líquido, lo palpó en sus manos y me dijo;
<Vecino….creo que tenemos que conseguir quedarnos solos más veces…..no crees?
Sí; yo creo que tenemos que volver a repetir J
Abrió el cajón de su mesilla y vi que entre otras cosas, tenía varios paquetes de klinnex como me había dicho, así como un paquete de desogestrel y un bote de lubricante.
Eso es lo que usas, le dije?
<Tenía ganas de sentir como te corrías dentro de mí pero no quiero volver a quedarme embarazada….y menos de ti Ajajajaja.
Noooo, que tonta eres: me refiero al lubricante. Es eso lo que usas?
<Si, la verdad es que con Pepe hay veces que tengo que lubricarme artificialmente porque últimamente solo quiere meterla y correrse. Y yo necesito más. Necesito lo que tú me das. Excitación, lujuria, morbo, placer….
Ummmm. Me gusta saberlo vecina. La verdad es que conmigo no necesitas nada de eso!
Nos levantamos y nos fuimos a la ducha. Nos metimos los dos como pudimos en el interior de la cabina y nos duchamos juntos. La enjaboné y ella a mí. La verdad es que parecíamos una pareja normal, pero realmente le habíamos puesto los cuernos a nuestras respectivas parejas…
Y qué? La vida solo pasa una vez por nuestras vidas, amigos. Intentad no hacer daño a nadie pero tampoco dejéis de hacer lo que en un momento os apetezca porque puede llegar el día que os arrepintáis de no haberlo hecho…. Carpe Diem.
Ella se reconcilió con mi vecino al final de ese fin de semana; era previsible. Yo sigo queriendo a mi mujer y ella a su marido. Cada uno hacemos nuestra respectiva vida, pero de cuando en cuando volvemos a coincidir. Se trata en definitiva de sexo por sexo. Es agradable poner algo más de morbo y chispa en nuestras vidas. Sobre todo cuando encuentras a alguien con quien congenias muy bien.
Y lo que noto cada vez es que cada vez disfrutamos más. Hay muchísima atracción sexual contenida entre nosotros y algo de monotonía con nuestras respectivas parejas, así que seguimos follando y cada vez ambos estamos más calientes...
Pero ese será otro relato…
CARPE DIEM