Mi vecina de al lado

Hace ya unos 8 años que nos mudamos a un piso en mi ciudad natal.

Mi mujer Ana y yo por entonces aun no teníamos pensado tener hijos ni teníamos más planes que simplemente irnos a vivir juntos.

Debo decir que ella es, ante todo, una gran mujer con la cual me siento el hombre más afortunado del mundo. Tenemos mucha complicidad entre nosotros y aunque no es una mujer con mucha iniciativa sexual, le gusta el sexo y lo disfrutamos muchísimo.

Los primeros años que nos mudamos a nuestro piso apenas tuvimos compañía. Estábamos prácticamente solos en toda nuestra planta.

Al cabo de dos años de estar viviendo allí vinieron mis vecinos. Ella tiene cerca de 40 años como yo y él es algo más joven. Al poco de empezar a conocernos como vecinos congeniamos muy bien los cuatro y empezamos a crear una muy buena amistad que continúa hoy en día.

Pasados unos meses de conocernos ella se quedó embarazada y par de años después se volvió a quedar embarazada de su segunda hija, al mismo tiempo que nosotros también tuvimos un hijo.

Durante todo este tiempo hemos compartido muchos momentos y situaciones dentro de nuestras vidas pero entre ellas la que más me sorprendió es la que hoy os relato;

Digamos que mi vecina se llama.....Lucia y su marido se llama....Pepe J

Antes de nada, he de decir que en ocasiones entre ella y yo nos hemos mandado al móvil y al correo los típicos mensajes cachondos y simpáticos sin que hayan pasado a más; algún que otro comentario picante como mucho al día siguiente al encontrarnos en el pasillo para salir a trabajar...

Pero en alguna conversación con ella alguna vez me insinuó que ella ya no iba a tener más hijos con pepe y que tan pronto sus hijas estuvieran algo más crecidas esperaba poder retomar algo más de vida social....salir algo mas y disfrutar como cuando no tenía tantas responsabilidades.

Los que tengan hijos sabrán a que me refiero...

Un día estaba solo en casa y recibí un mensaje de Lucia; me preguntaba si estaba por casa y si podría ayudarla con un problema que tenía en el ordenador

Aunque no trabajo en ese mundillo, creo que la informática no se me da mal así que le conteste que iba a prepararme algo de comer y que en 30 minutos estaría llamando a su puerta.

Como en otras ocasiones le dije de una forma burlona que se vistiese, que no fuera ser que le abriese la puerta al reparador en ropa interior

:)

Ella me respondió que sin problema...que ella también iba a preparar algo de comida porque había dejado a sus hijas en un cumpleaños y que si quería aprovechaba y me invitaba a comer.

Accedí sin pensarlo porque la verdad es que hacia días que mi mujer y mi hijo se habían ido a pasar unos días a casa de sus abuelos y mi nevera estaba bajo mínimos....

A los cinco minutos llame a la puerta de mi vecina y tras unos breves instantes, ella me abrió la puerta con una amplia sonrisa como siempre.

(mi vecina está rondando la cuarentena como yo y aunque esta algo rellenita para mi tiene un encanto especial; sus facciones son de lo más sensuales y su cuerpo, aun teniendo algún kilo de más, está muy pero que muy apetecible.

Cuando me abrió estaba todavía en pijama como ya la había visto más de una vez. Le encanta andar en pijama y descalza por su casa y esta era, en principio, un día más como tantos otros que la había visto así.

Me preguntó que como era que estaba solo y le dije que Ana se había marchado a pasar el fin de semana con sus padres.

Ella por su parte me comento que Pepe estaba también fuera en su ciudad natal el fin de semana y que tenía un problema con su ordenador que le gustaría solucionar cuanto antes. Lo pospusimos para después de comer.

Nos fuimos a la cocina de ella y empezamos a hacer la comida. Un poco de pasta y una salsa rápida nos permitiría solucionar la comida de una forma fácil.

Mientras le ayudaba a cocinar no pude evitar mirarla de reojo cuando se aproximaba a mí y he de reconocer que su olor me encantaba.

No sabía si se habría duchado ese día ya que aún estaba en pijama, pero su olor corporal era de lo más encandilador…

En alguna ocasión creo que se percató perfectamente que la miraba y de una forma algo traviesa se limitaba a esbozar una sonrisa.

Recuerdo que en un momento se agachó a echar los desperdicios en el cubo de basura que tiene debajo de su fregadero y, dado que su acceso es algo complicado, la parte de arriba de su pijama se subió ligeramente permitiéndome ver que tenía un tattoo encima de su cadera que yo desconocía.

Era un tattoo de un pequeño diablo....o para bien ser, debería ser....una pequeña diablesa…

Al mismo tiempo, distinguí las cintas de sus braguitas por encima del pantalón del pijama; eran de un color rojo intenso y destacaban sobre su piel clara y su pijama color beige.

La situación de ver su tatuaje sobre su piel y el comienzo de su pedazo de tela más íntimo hizo despertar mi virilidad de una forma instantánea.

Mi cabeza en una fracción de segundo solo pudo pensar en que en su momento probablemente ella se había hecho ese pequeño tattoo para que la persona que la disfrutase en su vida privada supiese que era una pequeña ....diablesa, o por lo menos, algo traviesa.

Noté como mi entrepierna se despertaba con sus instintos más básicos y tuve que disimular pegándome a la encimera y los muebles para evitar que fuese más evidente.

…Tarde!

Ella se incorporó después de un buen rato solucionando el cubo de la basura y lo primero que hizo como en un acto reflejo instintivo fue mirar hacia atrás donde yo estaba, como cuando un animal presiente que algo lo acecha…; me vio justo en el instante que intentaba girarme para evitar que viese mi bulto pero creo que vió suficiente como para imaginarse lo que estaba pasando.

Note como en un principio se ponía algo colorada pero inmediatamente en su cara se dibujó otra ligera sonrisa.

Hizo como quien no se había dado cuenta de nada y nos sentamos a la mesa. Mientras comíamos charlamos de muchos temas, entre ellos los hijos y como la vida cambia cuando los tienes.

Coincidimos en que ellos aportan a nuestras vidas la dosis de vitalidad y alegría que supone tener familia, pero que por el camino en ocasiones se pierden muchas otras cosas como la forma de vivir el día a día antes de tener hijos.

Tenemos mucha confianza y en ese momento no teníamos ningún problema en comentar incluso que la vida sexual se había vuelto algo monótona ya que casi siempre los críos ocupaban la mayor parte de las horas del día sin dejar apenas lugar al disfrute de pareja.

Tanto ella como yo reconocimos que mientras estábamos en esta etapa con los críos muy pequeños teníamos que conformarnos con rascar los pocos momentos que teníamos libres para disfrutar con nuestras respectivas parejas.

A esto ella me respondió que no solamente con nuestras parejas...que cada uno podía tener su propia autosatisfacción…

En ese momento la miré a los ojos fijamente y no pude evitar imaginarme como seria ver a mi vecina tocándose sola y haciéndose un dedo; eso debería ser de lo más excitante…

Por mi parte en muchas ocasiones he jugado con mi mujer a vernos ambos masturbándonos uno frente a otro, pero en ese momento pensar en cómo sería ver a mi vecina haciéndose un dedo me puso muy caliente.

...una vez más.

Fuimos saltando de tema en tema con numerosos comentarios algo subidos de tono mientras yo no dejaba de pensar en qué pensaría mi vecina al hacerse un dedo; si pensaría en su marido o si dejaría volar su imaginación pensando en otra persona…; porun momento hasta me imaginé que ojalá fuese pensando en mí...

Terminamos de comer y nos fuimos al salón. Su piso es mucho más grande que el mío y su salón lo preside un enorme chaise longue de lado a lado.

Allí nos sentamos y me comenzó a explicar que le ocurría en su pc.

Al parecer algún virus había hecho cambios en sus carpetas y ahora no tenía acceso a sus ficheros.

Necesitaba recuperar el acceso a ellos porque entre otras, tenía todas sus fotos guardadas y no poder acceder a ellas implicaba perder todas las fotos; de sus niñas, de sus vacaciones, familia y demás....

Mientras tanto indagaba en el problema que tenía y en su posible solución, pusimos la televisión de fondo para ayudarnos a hacer el rato más llevadero.

Estuve un buen rato trasteando en su portátil hasta que empecé a encontrar solución a lo que ella creía ya perdido.

Era una labor algo tediosa ya que tenía que solucionar carpeta por carpeta.

Durante un tiempo ella se sentó a mi lado viendo lo que hacía, pero supongo que llegó un momento que le aburría soberanamente, así que después de un tiempo, se recostó en el sofá y continuo viendo la película que daban en la tv.

Mientras tanto yo continúe trabajando en su pc y después de unos minutos, mientras le hacía una pregunta, me di cuenta de que se había quedado dormida.

Estaba estirada a lo largo en el sofá con las piernas algo flexionadas y con los pies cerca de donde estaba sentado.

Me quede mirando durante un rato como dormía ya la verdad es que tenía una cara angelical durmiendo. Por un momento se me pasó por la cabeza como sería volver a ver su ropa interior y que era una pena que en vez de pantalón de pijama no estuviese ese día con una camiseta larga de pijama con la que ya la había visto más de una ocasión; así podría escudriñar entre su tela para comprobar si su ropa interior era tan sugerente como imaginaba.

Ella parecía dormida profundamente y mientras dormitaba angelicalmente movió sus piernas, las estiró y sus pies fueron a dar encima de mis piernas. Uno de sus pies estaba apoyando directamente encima de mi entrepierna. Notar ese delicado pie encima de mi sexo volvió a hacer que en mi mente surgiesen los pensamientos más sexuales con ella.

La verdad es que siempre que la he visto descalza en su casa me he dado cuenta de que mima mucho sus pies y en ese caso tenia uno de esos pies encima de mí, tocándome. Seguí intentando ignorar que ella involuntariamente estaba encima mía y continué desbloqueando cada carpeta de ficheros.

Entraba en cada una para comprobar que todos los ficheros seguían operativos. Se sucedían carpetas y carpetas de fotos de las niñas, de la familia, vacaciones....etc.

Todo normal excepto porque una de las carpetas estaba nombrada como PRIV y cuando le llegó el turno la desbloquee y no pude sino seguir haciendo lo que ya había hecho con las anteriores.

Mi sorpresa fue mayúscula cuando abrí esa carpeta y empecé a ver fotos muy subidas de tono de mi vecina.

En la mayor parte de ellas estaba en ropa interior, luciendo todo tipo de modelitos de una forma muy sugerente.

Note como mi polla se despertaba aún más y comenzaba a endurecerse rabiosamente.

En el resto de las fotos que no estaba en ropa interior estaba en bañador o bikini.

La verdad es que, aunque algo rellenita, mi vecina tenía un cuerpo de lo más sugerente. Mire para ella para saber si seguía dormida  y poder deleitarme con el secreto que estaba encontrando.

Lamenté en ese momento no tener un pendrive a mano para poder hacer una morbosa copia de aquellas fotos pero me conformaba en ese momento con poder verla como nunca la había visto antes.

Al final de todas esas fotos (unas 50) había otro archivo comprimido que rezaba "chat.zip"

Intenté abrirlo pero estaba comprimido con contraseña; mierda! pensé. Seguro que aquí habrá algo más....

Probé con algunas contraseñas típicas pero no era capaz de abrirlo hasta que pensé; no será tan simple como para comprimirlo con su nombre....

Eureka!. tras poner Lucia como contraseña una carpeta de más archivos se abrió ante mis ojos.

Alucinaba; todos los archivos eran fotos de mi vecina; sacándose la ropa interior y desnuda. Contemplé los archivos con el miedo de que si ella se despertaba me cogería viendo sus fotografías más íntimas y personales.

Que se le pasaría por la cabeza para hacerse ese tipo de fotos? estaría liada chateando con alguien o simplemente sería un juego que se traía con su marido Pepe?

Me extrañaría que fuese eso porque entonces incluso tendría sentido que hubiese fotos de él, pero realmente agradecí que no las hubiese.

Al final de las fotos había otros cinco archivos con extensión de video

Ufffff

Y si en esos videos ella estuviese...

Volví a mirarla para comprobar que seguía en brazos de Morfeo y me dispuse a abrir los archivos.

Al mismo tiempo,  a su primer pie encima de mi entrepierna se sumó el otro y parecía como si buscasen de forma autónoma su propio confort y se deslizaban en medio de mis piernas, buscando el punto más caliente que yo tenía...

El primer archivo era muy pequeño y se mostraba mi vecina encima de cama, simplemente riendo y charlando con alguien que supuse estaría al otro lado de la cámara del ordenador…

Segundo y tercer archivo era lo que mis ojos esperaban ver con más ansia...

Mi vecina aparecía encima de su cama en camiseta larga de pijama enseñando su ropa interior. En uno de los videos aparecía enseñando un conjunto negro muy sugerente de culote y sujetador a juego, de color azul.

En el tercer video estaba en cama igualmente pero con otra camiseta de pijama y otro conjunto. En ese caso eran unas braguitas muy cortitas que se ceñían a su cuerpo dibujando cada cm de su contorno. A esas braguitas, que eran de color negro, les acompañaba un sujetador rojo cereza que hacia las delicias de mis ojos.

Cuarto y quinto video esperaba ver más de lo mismo cuando mi sorpresa fue que en ambos aparecía en coño de mi vecina en primer plano.

Ella se hacía un dedo mientras se filmaba. Su coño estaba depilado y aparecía muy mojado por su flujo. Sus dedos bailaban entorno a sus labios, moviéndose de un lado al otro, de arriba abajo sin parar, haciendo las delicias del coño de mi vecina que no paraba de humedecerse cada vez más y soltar pequeños chorreones blanquecinos de flujo a través de sus labios, impregnando sus dedos y haciendo que sus manos acabasen brillantes por culpa de su excitación.

Mi polla palpitaba a ver ese espectáculo. Notaba como crecía y se empalmaba al ver disfrutando a mi vecina con sus propias manos.

De algún modo, yo forzaba la postura para que sus pies rozasen más mi bulto deseando que entre mi polla y sus pies no existiese la tela que los separaba.

Volvía a abrir las fotos y las repasé otra vez, causando que mi polla se pusiese aún más dura; la notaba cada vez más dura con ganas de liberarse.

Pensé por un momento sacármela y hacerme allí mismo una paja pero fríamente pensé que podría ser un disparate si ella se despertaba y me veía con la polla fuera de mi pantalón.

No hizo falta.

Cuando abría el tercer video por segunda vez, noté una ligera presión en mi entrepierna. Esa no era la misma presión que había notado antes; no era simplemente el peso de las piernas y los pies de mi vecina; sus pies hacían presión sobre el bulto de mi polla. No daba crédito a ello.

Miré para mi vecina y sus ojos estaban cerrados o eso parecía. Todo indicaba que seguía durmiendo pero no me encajaba que sus pies estuviesen empezando a hacerme un masaje celestial sobre mi polla.

Una mirada más detenida y observe que sus ojos no estaba cerrados totalmente, apreciando que me estaba mirando con ellos casi cerrados

...Lucia, susurré.

Otra vez la llamé con la voz algo más alta;

...Lucía!

En ese momento ella abrió los ojos, se fijó en los que había en la pantalla de su ordenador y me miró fijamente.

<…hola!; Por lo que veo, creo que has conseguido recuperar mis archivos, me dijo.....hasta los que tenía más escondidos.

Estoooo.....si, he conseguido recuperarlos...dije sin saber que más decir

Uffff, joder Lucia, como no voy a estar así después de verte así como te he visto?

Ella seguía moviendo sus pies encima de mi entrepierna notando como el bulto que tenía estaba cada vez más duro y caliente.

Pero.....estos archivos  que tienes.....??? por qué los tienes?

Sin dejar de sentir sus pies haciéndome lo que ya parecía una paja en toda regla, le dije

Que sistemas?

ufffff, eres muy traviesa Lucia. Algo había intuido hace ya años pero no me imaginaba esto de ti. Y Pepe? qué piensa de esto?

En qué?

Cómo? que? te has masturbado pensando en mí? Uffff

<Sí; eso te he dicho; mas una vez. Acaso nunca has notado que siempre te sigo los comentarios calientes y morbosos

Siempre me has atraido desde que nos vinimos a vivir aquí y eso no ha cambiado....ni aunque este casada. Y tú? Veo que no estas separando mis pies? Tienes algún problema, remordimiento....?

Mi cabeza no podía pensar; amo a mi mujer con locura pero eso no era amor; era atracción sexual 100%.

No: creo que mi vecinita se merece que le siga el juego, no crees?

Me incline sobre ella y la besé en la boca. Nuestras lenguas se entrelazaron en un movimiento compulsivo.

Estaba claro que nuestra excitación era recíproca. Ella comenzó a acercarse a mi cuerpo de forma que ya comenzaba a sentir el calor de su cuerpo sobre el mío. Una ola de calor invadió mi cuerpo en ese momento. Mi corazón latía con fuerza y notaba como esos latidos rebotaban en mi polla. Notaba como palpitaba dentro de mi pantalón deseando tener escape por fin.

Mis manos se fueron hacia la camiseta de mi vecina y comencé a meter mis dedos por debajo de su ropa. Su piel era suave y delicada; aun entrando en los 40 tenía un tacto de chica de 18 años; notaba como se estremecía a medida que mis dedos recorrían su cintura para subir hacia su pecho.

Mis dedos empezaron a posarse encima de su sujetador y acariciar suavemente la tela que separaba sus pezones de mi mano.

Notaba como sus pezones tenían un tamaño considerable e iban creciendo en tamaño y dureza a medida que se sucedían mis caricias.

No dudo ni un instante más; estaba claro que lo que deseaba era sentir mi mano encima de su piel, así que se incorporó algo más y llevo sus manos a su espalda, desabrochándose el sujetador. Se sacó la camiseta del pijama y su sujetador cayó en su cintura dejándome ver los pechos maravillosos que tenía. Su talla debía ser una 100 pero sus pezones eran enormes y preciosos; unas aureolas delimitaban las zonas erógenas que antes acababa de acariciar por encima de la tela.

Me cogió las manos y se las llevó a sus pechos.

Su mirada era una mirada lasciva; deseaba igual que yo que mis manos la recorriesen.

Con mis manos en sus pechos dudando de si hacia la pregunta o no le pregunté

...Lucia......y Pepe?

Ella me respondió:

Me lo había dejado claro; no le importaba nada en ese momento su marido y yo, lamentándolo mucho, lo que menos quería era dejar pasar esa situación; quería disfrutar con mi vecina lo que pudiera.

Mientras mis manos seguían acariciando los pechos de mi vecina, ella llevo las manos a mi camiseta y me la sacó de un tirón, dejándome el torso al descubierto. Sus manos recorrían mi cuerpo muy sensualmente haciéndome estremecer de gusto, deseando que avanzasen poco a poco hasta los sitios donde más placer me apetecía recibir.

Ahora mis manos bajaban haciendo pequeñas caricias hasta su vientre. Su ombligo agradecía también mis caricias haciendo que su vientre se contrajese dejando un pequeño hueco ente su pantalón de pijama y sus braguitas.

Ahora si las veía sin ningún reparo. se asomaban azules como ya había visto en la cocina por la mañana.

No pude esperar más. necesitaba sacarle el pantalón a Lucia y así hice.

Mis manos se fueron hacia su pijama, se asieron a su cintura y le bajé el pantalón despacio, recorriendo sus piernas y dejándome ver por final su ropa interior.

Ella sabía en qué situación estaba, así que separó las piernas y pude ver como una mancha de humedad se distinguía en el centro de sus braguitas.

Un color azul más marcado, mas mojado, me permitía comprobar que la situación la estaba poniendo muy caliente y empezaba a mojar sus bragas.

Mis dedos se fueron a recorrer sutilmente su contorno. Lo único que deseaba era tocar su coño pero eso mismo era lo que me proponía evitar el mayor tiempo que pudiera, haciendo que se calentase mucho más aún.

Recorria con las yemas de mis dedos el contorno de sus braguitas, metía con sutileza un dedo un poco por debajo de su tela haciendo que ella cerrase más los ojos para sentir con más intensidad las caricias que deseaba.

No aguantaba más. No yo;…ella!. Llevó una de sus manos a sus bragas y separó la tela que cubría su coño para dejarme ver su coño en todo su esplendor. Tenía un coñito de ensueño como ya había visto antes en los videos. Estaba igual de mojada y sus labios brillaban por la cantidad de flujo que se veía sobre los pliegues más íntimos de ella.

Note que era todo deseo y pasión e intuí que se calentaba cada vez más.

Mis dedos recorrieron la porción de tela que había separado a un lado y mis dedos se mojaron de sus fluidos en su tela.

Mire para ella y me lleve los dedos a mi cara. Olían a coño. A coño de vecina cachonda por lo que le estaba haciendo. Me lleve los dedos a la boca y saboreé su flujo. He de reconocer que cuando me como el coño de mi mujer sabe algo salado e intenso.

El coño de ella sabía igual de intenso pero algo menos salado; era muy agradable a la boca.

Ella me miró con cara lasciva y me preguntó; prefieres saborear mis bragas o mi coño?

...vaya pregunta....

Pero tenía que ser algo travieso con ella porque me daba la sensación que a ella le ponía esa situación, por lo que volví a pasar mis dedos por la tela de sus braguitas, descendiendo por la fina tira de tela en la que se había convertido hasta llegar a su perineo.

Una suave caricia hizo que se contrajese y que soltase un suspiro.

Volví a mojar mis dedos en la parte más mojada de sus braguitas y me los volví a llevar a mi boca para volver a deleitarme con el sabor de su coño.

Y tú? eres mala y traviesa?

Volví a llevarme los dedos a la boca y volvía chupar ese licor que veía que resbalaba por su piel, saliendo de su coño, mojando sus labios, sus bragas y su perineo, mojando su culito que parecía que también quería su ración de placer.

No podía hacerla sufrir más; mi boca descendió hasta su ombligo y comencé a besarla despacio, parándome en cada cm de piel que encontraba a mi paso.

Ella seguía separando con una de sus manos la tela de sus bragas y a esa altura su coño desprendía un olor a sexo increíble.

Mi boca siguió descendiendo hasta encontrar el manantial de su flujo. Su coño rezumaba flujo y mi boca lo recogía ansiosa por probar ese manjar que me ofrecía mi vecina.

Mi lengua jugueteaba con sus labios, moviéndose traviesa de un lado al otro, jugando con su clítoris de vez en cuando, sin resultar demasiado insistente en el mismo.

Mi vecina se estremecía en el sofá, cerrando las piernas cada vez que intuía que yo me iba a separar de su coño.

La tela de sus bragas ya no podía estar más empapada así que la sujete por sus cintas laterales y se la saque. Ella se ayudó levantando sus piernas en paralelo dejándome ver su coño hinchado y mojado… y cuando terminaba de sacarle las bragas, su culo se puso en mi línea de visión.

Ella se dio cuenta que no perdía detalle de la panorámica e intuyendo que me iba a gustar lo que iba a hacer, dejo las piernas arriba y bajó una de sus manos hacia su coño. Me separé de ella para ver mejor la actuación. Mi polla en esos momentos ya asomaba por la cintura de mi pantalón, mi capullo estaba baboso por la excitación de todo lo que estaba ocurriendo esa tarde.

Ella la vio y dejo de tocarse el coño para bajar las piernas.

Llevó sus manos a mi pantalón y descubrió de golpe mi polla al bajar pantalón y bóxer de una solo tirón.

Suspirando ni contesté; me limité a cerrar los ojos y esperar que ella tomase la decisión de lo que quería hacer conmigo.

Noté como su boca se pegaba a mi polla para darle un pequeño beso. Eso me excitó sobremanera.

Mi polla deseaba su boca, su lengua, su coño....todo lo que ella me quisiera dar.

Otro pequeño beso y un lametón travieso terminó la operación de la que ella quería dar un adelanto...

Acto seguido, se volvió a poner con las piernas en alto ofreciéndome la vista de su coño y su culo.

Su mano bajó hasta su coño, para acariciarlo primero muy despacio y después de un rato, casi frenéticamente.

Yo me sostenía la polla en la mano, haciéndome una paja y viendo el espectáculo que esa mujer quería regalarme.

Cuando tuvo sus dedos mojados lo suficiente deslizó uno de ellos hacia su culo y empezó a masajear el agujero más oscuro de su piel

ufff como me ponía esa mujer; me ponía muy cerdo verla así.

Eres muy traviesa Lucia; no sabía esta faceta tuya...Y querrás que yo también lo sea, no?

No contesté.

Mi boca se fue directa otra vez a su coño, que ella entonces separaba con sus manos.

Mi lengua se pegó a el, recorriendo sus labios una y otra vez, comiéndome ese coño que chorreaba flujo.

Mi lengua entonces empezó a recorrer los extremos de sus labios para ir bajando progresivamente hacia su perineo.

Al mismo tiempo que le comía el coño, llevé un dedo hacia su coñito y mojé mi dedo todo lo que pude en su flujo. Cuando estuvo muy mojado lo fui llevando poco a poco hasta su culo.

Ella suspiraba mas entrecortadamente a cada lametón y caricia que le otorgaba. Notaba que a mi vecina le iba que jugase muy travieso y eso iba a hacer.

Mi dedo se dedicó a acariciar su agujerito mientras seguía comiéndole el coño. Un par de caricias más y me dedo se adentró ligeramente en su culo.

Se retorcía de placer; estaba claro que quería más de lo mismo.

Un poco más y mi dedo tenía la yema dentro de su culo.

Me separe de su coño, la miré como pidiendo aprobación y lo que tuve como respuesta es;

Me reí y acto seguido, mi dedo entro dentro de su culo, doblándose y haciéndola retorcerse de placer.

Estuve un poco más jugando con su ano hasta que deslice otro dedo hacia su coñito. No podía estar más empapado; era increíble notar como se mojaba mi vecinita.

Mi boca seguía comiéndome su coño al tiempo que mi segundo dedo se dedicaba a meterse en sus pliegues y el primero a su culo.

Note como su respiración se aceleraba y al poco tiempo comenzó a agitarse en el sofá, casi impidiéndome que siguiese pegado a ella.

Un par de sacudidas más y soltó un suspiro que debió notarse en todo el edificio.

Se corrió en mi boca; aunque pareciese increíble note como se mojaba algo más; estaba claro que mi vecinita era una delicia para disfrutarla.

me separe de ella y mi cara estaba mojada de ella.

me incorporé y subí hasta su boca. La besé intensamente. Nuestras lenguas se entrelazaban saboreando mi saliva, la suya y su licor más íntimo.

Después de un largo e intenso beso mojado me separó y me dijo

le dije; creo que te has puesto muy puta Lucia; ahora quiero que me pongas caliente a mí!

No lo dudó. se incorporó de donde estaba dejando una mancha de humedad en el sofá.

Ostias! dije yo; mira cómo has dejado el sofá!

<Ajajaja; es que esto no lo suelo hacer ni en el sofá ni con mi vecino....

Se inclinó sobre mi polla y la volvió a besar.

Un beso inocente no era lo que quería en ese momento; necesitaba que mi vecina se comiese entera mi polla.

Me puso mucho pensar que hacia tan solo un día y medio que mi mujer me estaba comiendo la polla y ahora era mi ansiada vecinita quien me lo estaba haciendo.

Su boca se abrió y de repente mi polla despareció dentro de su boca

Dios! qué sensación! Pensé. Me encanta sentir como Lucia me come la polla...

Ella no dejaba de metérsela y sacársela de su boca, chupando cada mm de mi polla.

Sacaba la lengua para que la viera hacerlo y me daba lametones con cara de ser la tía más guarra del mundo. La volvió a meter en su boca y con su lengua y sus labios me retiro el prepucio para poder notar mejor mi piel.

Mi polla no podía estar más agradecida por aquella mamada; era alucinante!

Note como algunas gotas de mi liquido pre seminal iba a salir y ella, como intuyéndolo, saco mi polla de su boca y la dejo un rato fuera, entre sus manos como esperando q ver qué pasaba.

La tenía entre sus manos cuando unas cuantas gotas de líquido salieron de mi capullo.

Me miro otra vez fijamente y saco su lengua. Joder, que puta estaba siendo!

Alargo su lengua hacia mi capullo y mis gotas se fueron a la punta de su lengua como queriendo migrar de cuerpo.

Metió otra vez su lengua en su boca y tragó con cara de placer esas pequeñas gotas como pidiendo más de lo mismo.

Ufffff.

Mi mujer no solía dejarme correrme en su boca, pero esta tía parecía que era lo único que quería en ese momento.

Siguió con esas caricias sobre mi polla. Notaba como mi polla rozaba las paredes de su boca; notaba su calor y su humedad. Mi polla estaba mojada por su saliva y ella parecía no tener fin en su mete y saca de su boca.

Me estaba volviendo loco con esa mamada!

Se aferró a mi cadera y empezó a tragársela de forma más violente e impulsiva.

Mi polla palpitaba; no iba a aguantar mucho más así si no paraba.

le dije; Lucia, para o....me corro!

Miro para mí y no contestó; siguió comiéndome la polla sacando la lengua, recorriéndola una y otra vez y metiéndosela en la boca.

<y? me dijo....No es lo que quieres?

Uffff. ya, pero......es que me voy a correr ya....!

Lo que pretendía es que, de alguna forma me confirmase si quería que la avisase o si por el contrario iba a dejar correrme en su boca como yo deseaba en ese momento.

<y?...volvió a repetir mientras sacaba mi polla un instante de su boca...

Ya está.......no vuelvo a preguntar me dije; me lo ha dejado claro.

Ella siguió lamiendo y chupándome la polla como nunca antes me habían hecho. La cogí de la cabeza y acompañe sus movimientos con mis brazos como preveyéndola de lo que iba a suceder.

Un par de lametones más y empecé a notar como iba a dejarme ir. Noté como mis glúteos se tensaban y mis brazos sujetaban su cabeza.

Ella no hizo nada por separarse y en un último momento de consciencia le solté la cabeza para no incomodarla por si al final no coincidía con lo que yo quería.

Nada más lejos de la realidad. Ella noto como me iba a correr y acelero sus movimientos acercándose más incluso a mi cuerpo, sin separar mi polla de su boca.

Un par de movimientos más y note como mi corrida avanzaba por mi polla hasta salir despedida fuera.

Fuera no era sino dentro; dentro de la boca de  mi vecina!

Ella se aferraba a mi cadera aguantando los espasmos que me sobrevenían con mi polla dentro de su boca.

Seguía tragando mi polla, jugando con su lengua mientras mi polla derramaba toda su corrida dentro de ella.

Note como su lengua se interponía en la salida de mi corrida como deseando sentir cada gota caliente de mi corrida y esa misma lengua seguía acariciando mi glande como pidiendo que soltara todo lo que pudiera.

Notaba mi polla dentro de su boca; mis latidos se repercutían en mi polla y ella seguía con ella dentro, apurando cada gota que salía de mi polla.

La mire y ella me miró a mí.

Eres muy puta Lucia; te la has tragado?

Sonrió picaronamente y se separó de mí.

Abrió su boca y allí estaba mi corrida; toda dentro de su boca, mezclada con su saliva.

Quieres un klinnex? le dije

Cerró la boca sin contestar y note como tragaba mi corrida delante de mí.

joder Lucia.....me has puesto muy muy cachondo cabrona....

Joder, me has hecho la mejor mamada de mi vida.

Si claro, pero la tuya ha sido brutal. Y tú? Lo has pasado bien? Pepe también te hará disfrutar, no?

Ufff pues con cuatro meses sin follar......estarás que ardes....

Yo he follado hace apenas dos días...pero no te creas, ha sido coincidencia porque también llevaba algo más de un mes sin follar.

<Joder, o sea q solo llevabas dos días sin correrte y te has corrido así en mi boca!...wow

....bueno......no exactamente. Para ser exactos, me he hecho una paja esta mañana en cama

<Ajajajaj; si; joder, que portento! Oye, y que piensas cuando te masturbas?

Ajajajajaj: yo iba a hacerte la misma pregunta!

Pues no te lo creerás, pero yo también me he hecho pajas pensando en cómo sería follarte vecina....

<Si?....pues no lo has hecho.....

Y ahí estaba yo; en el sofá de mi vecina, desnudo, con la polla aun mojada de saliva de ella y los restos de mi corrida después de haberme corrido dentro de su boca, con ella desnuda a mi lado y sugiriéndome que no la había follado....

Oye Lucia, tu sabes que me estas poniendo muy cachondo, verdad?

<Yoooo? dijo con cara de no haber roto nunca un plato...

Al mismo tiempo que se tumbaba en el sofá y llevaba una mano a sus pechos y la otra a su coño.

Separaba con los dedos los labios de su coño y parecía que de aquel magnifico lugar no paraba de brotar flujo ya que otra vez volvía a estar mojada y brillante.

Y se dio la vuelta, se puso a cuatro patas y separó con su mano los labios de su coño para que pudiera verlos desde esa postura.

Entonces fue cuando volví a ver totalmente el tattoo que habían visto en la cocina al mediodía.

Y este tattoo vecina? es una diablesa.....! Tú eres una diablesa también?

Llevó sus dedos mojados a su boca, chupándolos de forma que me provocaba sobremanera.

Le dije, tu coño esta hinchado y mojado cabrona, mientras me acercaba a ella con mi polla en la mano.

Había comenzado otra vez a ponerse dura y tiesa y ahora lo que mi polla pedía era piel de coño; coño de vecina muy puta y cachonda.

Sabes que me pone mucho verte así de guarra en el sofá de tu casa? La próxima vez que estés aquí con tu marido viendo la tele te vas a acordar que te comiste la polla de tu vecino en él y que después de comerte el coño te follo como nunca te ha follado tu marido!

Me agaché un poco y mi boca se pegó a los labios de su coño como un dardo a su ansiada diana.

Ummmm dijo ella; ya me has comido el coño, ahora quiero que me folles como cuando te follas a tu mujer!

Joder, que puta eres vecinita; de verdad quieres que te folle así; a cuatro patas?....ufffff  Sabes qué pasa cuando me follo a cuatro patas a mi mujer?

...que le meto mi polla tan dentro de su coño que después soy incapaz de salirme de dentro de ella y me corro dentro de su coño; lleno su coño de mi corrida caliente y viscosa; es eso lo que quieres?

<Nooo, joder! no puedes correrte dentro de mí, no estoy tomando la píldora desde hace meses pero follame como te la follas a ella; quiero sentirme como si fuese Ana. Imagínate que soy ella y que me follas como siempre la follas.

Cómo? Nooo, no pienso hacerte el amor como a mi mujer; eso es para ella; a ti no te voy a hacer el amor; voy a follarte como lo que eres; mi vecina con ganas de tirarte a tu vecino; nada más que eso. No soy tu marido y no quieres amor; solo quieres sexo; nada más que sexo. Y si no vas a dejar que me corra dentro de ti déjame entonces que vaya a casa a por un preservativo…que alguno aún debo tener....

Hice el ademán de incorporarme pero ella me sujetó con una mano y me dijo;

<espera; quiero sentirla primero un poco sin nada entre tú y yo. Y después, antes de que te corras te pones uno, vale?

Asentí con la cabeza

Me acerque otra vez con mi polla en la mano y la deslicé entre sus piernas

Frotaba el tronco de mi polla entre sus labios; notaba su coño caliente y húmedo mojándome la polla con sus flujos.

Mi movimiento se volvía más explícito en su entrar y salir de su entrepierna poniéndome más caliente y empalmado.

Notaba como mi polla se empapaba del mismo flujo que antes me había comido y que era delicioso; más rico incluso que el de mi mujer!

Tras un rato frotándome con ella, volví a agarrar mi polla y arrime mi capullo a la entrada de su coño.

Seguro que quieres que te la meta sin preservativo?

Me agaché sobre su espalda y le susurré al oído; Quieres sentir la polla de tu vecino en el coño en vez de la de tu marido? Eres muy puta y sabes qué? que te voy a follar Lucia…voy a meter mi polla así de dura como la estas sintiendo en tu coñito caliente.

Hice un poco de presión y sus labios comenzaron a abrirse y ceder ante mi polla, dejando que invadiese su lugar más íntimo.

Un poco más de presión y cuando esperaba volverla a sacar y hacerla sufrir un poco, en ese momento fue ella quien de un golpe hacia atrás se movió hacia mí, engullendo mi polla con su coño

Ahhhhhhh, joder que puta!

Ufffff, joder!

Ahora notaba como mi polla nadaba dentro de su cuerpo en su lugar más húmedo, caliente y sexual. Su coño era como estar en un horno caliente y mojado. Veía la espalda y el culo de mi vecina chocando contra mi cuerpo. Mi polla entraba dentro de ella y mis huevos chocaban contra su coño haciendo tope. Mis movimientos se acompañaban por las caderas de Lucia que se sincronizaba a la perfección conmigo. La agarré de la cintura y comencé a follarla despacio sintiendo cada movimiento dentro de su cuerpo. Mi polla entraba y salía en movimientos amplios permitiéndome disfrutar de la panorámica del coño y el culo de mi vecina. Ella se movía como una autentica zorra ayudándose a meterse mi polla tan adentro como podía. Yo por mi parte sentía como mi polla tocaba con las paredes de su coño húmedo y caliente.

Joder como lubricaba mi vecina!

Notaba como avanzaba dentro de ella cm a cm penetrándola como nunca había imaginado

Te gusta cómo te follo vecina?

Lo único que recibí como contestación fueron las manos de mi vecina agarrando sus nalgas y separándolas todo lo que podía para sentir más dentro mi polla.

Qué coño....?esta tía me está sugiriendo algo abriéndose así el culo?....pensé

Mis ojos no podían separarse de la visión de su culito separándose y acercándose a mi cuerpo al tiempo que la follaba a cuatro patas.

De manera instintiva mi mano se fue hacia su espalda y mis dedos bajaron hasta el comienzo de la raja de su culo. Uno de ellos recorrió desde su espalda hasta el comienzo de su culo y suavemente siguió hasta encontrar su oscuro agujero

Ufffff; estaba empapado del flujo que había resbalado desde su coño.

Situé un dedo en la entrada y note como mi vecina gemía ligeramente sin hacer ningún movimiento evasivo; si no me impedía nada, sería que consentía ese tipo de caricias.

Mi dedo comenzó un suave masaje en su culo y cuando ya note mi dedo lo suficientemente húmedo de ella, lo situé en su entrada e hice una pequeña presión. La yema de mi dedo empezaba a entrar dentro de su culo mientras seguía metiendo mi polla dentro de su coño en un incesante mete y saca. Me volví a inclinar sobre ella y le susurré

Que dices, vecina? Te gusta lo que te hago o paro?

<Ufffff, como? que pares que? Ni se te ocurra cabrón, me tienes chorreando y quiero que hagas conmigo lo que quieras.

Entonces, mientras introducía algo más mi dedo en su culo

.....quieres que siga?

<Siiii, por favor, haz lo que quieras pero no pares.

Entonces intuí que su agujero posterior ya no era virgen y que quería algo de disfrute en ese agujero y esa idea me puso más cachondo.

Seguro que dejaba que su marido se la follase así. Me imagine por un momento a mi vecina a cuatro patas igual que como estaba ahora pero follada por mi vecino.

Mi dedo continuo introduciéndose en su culo y cuando ya estaba dentro empecé a hacer un movimiento circular dilatando su ano y moviéndolo hacia su coño.

Ella suspiraba de placer; como gemía esa putita de vecina que tenía....Me encantaba.

Saque despacio mi dedo de su ano cuando note que estaba dilatado y le volví a susurrar:

Voy a follarte ese culo que tienes vecina. Te voy a meter mi polla en tu culito.

Ella giró la cabeza hacia mí y asintió mordiéndose el labio inferior

Saque mi polla suavemente de su coño y la subí hasta situarla enfrente de su culo.

Mi polla estaba totalmente lubricada por su coño, así que no costó empezar a introducir mi polla en su culo.

Un poco de presión y tan pronto entró el anillo de mi capullo, entró casi de un empujón hasta la mitad.

La deje así un rato mientras mi vecina intentaba sin éxito que yo moviese mi polla dentro de ella. Era agradable esa sensación de deseo que sentía en ella y me gustaba la situación de control que esa posición me facilitaba con ella.

Comencé otra vez a meter un poco más y de repente mi polla entro entera dentro de su culo

Dios; que sensación! como tiene de prieto mi vecina el culito....

Te gusta  que te meta mi polla en tu culo? Te gusta notar como te lleno tu culito de polla de vecino?

La única respuesta que tuve por parte  de ella fue que volvió a cogerse de las nalgas y se abrió más el culo para sentir más mis embestidas dentro de su culo…

Y yo continuaba bombeando sobre mi vecina con una cadencia regular y suave.

Note que mi polla estaba a punto de estallar por lo que empecé a sacarla del interior de su culo.

Voy a sacar mi polla fuera de tu culo que después me corro dentro y no quieres....

<No; no puedes correrte dentro pero aun quiero sentirla algo más dentro de mi coño..

Pues como como apures, me correré sin remedio...

<Túmbate, me dijo

Y tan pronto como me recosté ella se situaó a horcajadas sobre mí. Cogió mi polla con su mano y abriéndose el coño con la otra, llevo mi polla hasta su entrada y se la introdujo dentro de su coño.

Uffff; eso no es justo; así dejo de tener control sobre ti....

Se sentó a horcajadas sobre mí y comenzó a moverse como si fuese una auténtica puta.

Que viciosa estaba resultando esta vecina mía....

Sabía cómo mover su cuerpo en esa posición. Su cuerpo se movía rítmicamente sobre mí, sus caderas se movían adelante y atrás sobre mi cuerpo permitiéndole sentir mi polla totalmente dentro de su coño.

Me cogió de las manos y se inclinó sobre mí, sujetándome las manos con las suyas. Quería dominar la situación y yo me dejaba. En ese momento estaba disfrutando de los movimientos que ella deseaba y de la forma que ella deseaba y yo me dejaba hacer…

Lucía…..como sigas así…me voy a correr….

<No; aun no puedes correrte; un poquito más y paro…  me dijo

Seguía follándome como una perra en celo; atada a mi polla con su coño como si fuésemos un único cuerpo. Su coño acompañaba cada movimiento de su cadera haciendo que mi polla entrase y saliese de ella notando como se incendiaba dentro de su cuerpo.

…Lucía……

Me miró fijamente, acercó su cara a la mía y se pegó a mi boca; su lengua se retorcía dentro de mi boca buscando desesperadamente mi lengua para jugar con ella. Mientras, su cuerpo parecía acelerar los movimientos y notaba como mi polla estaba a punto de reventar.

Por un momento volví a pensar en avisarla una tercera vez, pero sinceramente, lo que más me apetecía en ese momento era correrme dentro del coño de mi vecina, así que pensé para mí; la he avisado varias veces….si no ha parado….allá ella…

Sentí que ella aceleraba también su ritmo y me follaba cada vez más rápido e intenso, notando como su coño tragaba mi polla con tal ímpetu que incluso llegue a pensar que estaba sin control.

Me deshice de sus manos y llevé mis manos a su cintura. La agarré con fuerza por la cintura y comencé a clavarle mi polla tan adentro como podía ayudándome de sus movimientos.

Noté como mi polla iba a estallar. Mis manos se aferraron a su cintura en el mismo momento que ella se retorció una última vez dejando un gemido ahogado en el ambiente. Mi polla entró una última vez en su coño tan adentro que noté las paredes de su coño aprisionando mi polla. Me corrí. Mi corrida caliente y viscosa inundó su coño. Noté como mi corrida inundaba su coño y la mojaba en el mismo momento que ella se corría encima de mí. Notaba como mi polla estaba caliente y mojada por la mezcla de mí y de ella.

Era alucinante! Habíamos conseguido corrernos juntos la primera vez que follábamos!

Mi polla seguía palpitante soltando mi corrida dentro de su cuerpo mientras mis manos seguían ancladas a su cintura. Ella recostó su cabeza al lado de la mía sin decir nada. Noté como ella también necesitaba unos breves instantes para reponerse de su orgasmo.

Uffff…Lucía, joder; no he podido evitar correrme…

Siiii, ufffff; me ha encantado. Pero y ahora?

La miré fijamente y nuestras bocas se volvieron a unir. Mi polla seguía dentro de su coño. Parecía que su cuerpo y el mío estaban hechos el uno para el otro y encajaban a la perfección.

Cuando me separé lentamente de ella un chorro de corrida y flujo salió de su coño y fue a parar a la tela de su sofá sin poder evitarlo.

<Joder! Dijo ella. Y se apresuró a ir hacia la cocina a buscar algo con que limpiarlo.

Me pareció simpática la imagen de mi vecina desnuda corriendo hacia la cocina mientras yo veía que esa mancha iba a ser difícil de enmascarar….

Durante un buen rato estuvimos intentando limpiar lo más posible el evidente lamparón que había quedado en su sofá, fruto de nuestra primera vez juntos.

He de decir que después de esa vez, cada vez que voy a su casa me suelo sentar a propósito encima de la mancha y ambos nos sonreímos con complicidad.

(Por cierto, ella ha leído el relato y me ha dado su aprobación para publicarlo)