Mi vecina Ana madura

Hola. Soy un chico bastante timido de Ciudad Real. La verdad es que desde pequeño mi vecina siempre me ha puesto mucho y ahora con 18 años pues no lo puedo reprimir. Mi vecina esta cerca de los 50 pero tiene unos pechos muy redondos aunque algo pequeños y su hija tiene 30 años y la constitución fisica es parecida a la de la madre.

Siempre que salgo de casa me gusta espiar por la ventana por si esta haciendo la cama y puedo ver algun canalillo de cualquiera de las dos, o un cambio de blusa… Tambien aprovecho para ojear la ropa interior que cuelgan en el patio a secar, y alguna vez la he quitado y me he masturbado de placer con la ropa.

En cuanto a la hija su habitación da enfrente a la mia y la he visto muchas veces en ropa interior con la consiguiente paja. Ella me ha visto pero no se atreve a mas y se da la vuelta o bien cierra la persiana. Cuando coincidimos en el ascensor la tension se corta con el cuchillo y ninguno de los dos se atreve a decir palabras. Solo furtivas y timidas miradas.

Pero sin duda mi gran obsesion es la madre llamada Ana. Como os decia sus pechos son de tamaño mediano y redonditos. Ademas de unos pezones bien marcados dispone de un gran culo. Ahora os cuento mi experencia voyeur.

Todo ocurrio una calida noche de verano pues en Ciudad Real hay que dejar las ventanas abiertas por la noche debido al gran calor que hay. Escuche que llegaba de una fiesta de un pueblo de al lado. Entonces decidi hacer guardia en la ventana. Su marido fue a darse una ducha al baño. Ella llego a su habitación sobre las 3 de la mañana, y encedio la luz. Estando la ventana abierta se veia todo con la luz. Mi sorpresa llego cuando se quito la blusa quedando en sujetador. Yo ya estaba poniendo muy cachondo y entonces se quito el sujetador y dejo al aire sus bellos pechos. Justo en ese momento yo comence a magrearme la polla que fue adquiriendo gran tamaño. Ella dio unas vueltas por la habitación y comenzo a sobarse los pezones que ya estaban duros. Yo iba a estallar y Ana se quito la ropa de abajo y se puso a hacerse un dedo tremendo. Saltaba encima de la cama como una loca mientras se metia los dedos y apretaba sus pezones.

Yo no pude mas y me corri dando un grito de placer que por fortuna ella no oyó. Poco después ella se corrio justo antes de que llegara el marido y se metio totalmente desnuda en la cama. Después el marido apago la luz y el show se acabo. Fue mi mejor paja sin duda y no la podre olvidar fácilmente.