Mi vecina 7

Por fin nos ven y pueden disfrutar las dos dos de mi leche. Este es el final de esta zaga. Espero vuestros comentarios

Espero les esten gustando estos relatos, continuamos con el siguiente. Espero les guste y no se ha muy pesado.

A los dos días de aquella magnifica noche recibí un mensaje de Loli:

“Referente a lo de que nos vea, me he masturbado pensando en que María Dolores nos veía, pero no sé si podría hacerlo”

A leerlo sonreí, lo tenía casi hecho. Así que le dije:

“No te preocupes, sino quieres no lo hacemos. Solo quiero que disfrutes”

“Vale, lo hablamos está noche” me contesto ella.

Inmediatamente le mandé un mensaje a mi otra vecina contándole lo sucedido y que podría haber posibilidad de que nos viese.

“Perfecto, espero os pueda ver de nuevo” me contesto con un emoticono de beso.

Ya que estaba lanzado, me arriesgué más y le dije:

“¿Te gustaría participar, si quiere ella? O solo quieres mirar”

Ya estaba lanzada la pregunta, solo cabía esperar su respuesta y convencer a Loli, para que o bien nos viese o mucho mejor que participase.

Me lie con el trabajo y a veces no atiendo el whasapt. Una de las veces que mire, había varios mensajes. Uno era de ella, al leerlo sonreí

“Me gustaría veros y si puedo participar mejor”

A lo que le respondí:

“De acuerdo, pero ¿cuándo podré verte yo a solas?”

Ahí quedo la cosa y no recibí contestación de ella. La tarde fue tranquila, charlando con mi pareja y hablando con mis hijos por videollamada. Una vez que terminé de ducharme y cenar, recibí un mensaje de Loli:

“Estaré en la azotea, pero poco tiempo”

No me lo pensé, cogí la toalla de la ducha y para hacer el paripé, subí a tenderla. Allí estaba ella, está vez con su vestido de estar por casa. Me acerqué y le di un beso en los labios, me respondió con ansias. Comencé a acariciarle los pechos, pero me paro.

“No tengo tiempo, tengo que bajar pronto”

“¿Que has decidido al final?” le pregunté.

“No sé qué decirte, tengo ganas de que nos vea, pero me da miedo a que se lo pueda decir a mi marido o al suyo”

“Si quieres hablo con ella y le dijo que no puede decir nada” le comente

“También puedo decirle que si nos quiere ver tiene que ser con poca ropa o semidesnuda y se tiene que masturbar”

Su cara iba cambiando poco a poco, parecía que la estaba convenciendo. Sin venir a cuento, se puso de rodillas, me bajo las calzonas y se metió mi polla en su boca.

“Necesito sentirla antes de irme”

Fue una mamada corta pero placentera, no llegue a eyacular, tenía prisa. Yo quería corresponderle pero no me dejo, cuando ya se iba, me dijo:

“Nos puede ver pero no intervenir. De momento no”

Aquello me dejo un halo de esperanza de poder estar con las dos. Pero primero tenía que saber si María Dolores quería. Estando allí y con el fresquito que hacia esa noche mandé un mensaje y le dije:

“Estoy en la azotea, si puedes subir te cuento lo que me ha dicho”

“Voy” contesto María Dolores al momento.

Al subir encendió la luz, eso suponía que no podría hacer nada con ella. Al llegar me dijo:

“Que te ha dicho Loli”

“Que nos puedes ver, pero no participar de momento” También le comenté el miedo que tenía ella de que se lo contases a su marido o al tuyo. Y que le dije que para no haber problemas estarías viéndonos con poca ropa, semidesnuda o masturbándote viéndonos.

Al decirle eso, sus ojos brillaron de lujuria, en ese momento el marido la llamo al móvil y me dijo:

“No te vayas ahora vengo”

Volví a contemplar las estrellas, con la luz apagada, pensando en lo afortunado que estaba siendo. Aunque un poco cabroncete por serle infiel a mi pareja.

Al rato llego, observe que traía otra ropa distinta. Traía puesto un camisón y no debería llevar sujetador, porque se le notaban los pezones, como dos pitones a punto de estallar. Me sonrió y me dijo:

“Tengo que irme pronto, pero quiero que me veas”

Y se bajó las tirantas, cayendo al suelo el camisón, dejándola completamente desnuda, llevaba un tanga que no dejaba nada a la imaginación.

“Así es como estaré la noche que os vea, ¿Qué te parece?”

Me sonrió maliciosamente y le dije:

“Sí pudiese te devoraba ahora mismo”, mientras le decía eso me iba acercando poco a poco a ella, se le notaba la respiración cada vez mas acelerada. Acerque mi mano a uno de sus pechos, se notaba duro, no había tenido hijos, y tiernos a la vez. Cuando fui a llevármelo a mi boca, me dijo:

“Eso será otro día, me tengo que ir”

Me dejo con una erección de caballo. Esperé un poco para irme a mi piso y nada más llegar me hice una paja de campeonato. Pasarón los días sin nada reseñable, mi pareja venia de vez en cuando a verme y esa noche lo pasábamos de campeonato y gemíamos para que Loli se enterase, siempre recibía un mensaje diciéndome que le habíamos puesto a mil y su marido nada.

Un finde que no tenía que ir a ver a mi pareja, ella trabajaba esa noche, recibí un mensaje de Loli que esta noche podríamos vernos y que nos podrían ver. Al leerlo mi corazón me dio un vuelco, lo había conseguido. Inmediatamente le mande un mensaje a María Dolores comentándoselo. Recibí un mensaje que me decía:

“hoy hemos quedado con unos amigos para cenar, no podre veros”

Me lleve una desilusión, pero bueno pasaría una buena noche con Loli. Cuando llego la hora de irme para la azotea y esperar a Loli, que sería sobre las 11, apareció como siempre impresionante y con poca ropa, siempre dejaba la ropa colgada en el tendedero por si se tenía que vestir rápidamente. Está vez traía puesto un conjunto de encaje, me encanta, de color burdeos que le realzaba los pechos, pequeños pero turgentes y un hilo que se adentraba por esa rajita de su culo que me volvía loco. Esta vez me dijo que nada de tumbarnos, de pie, para que nos pudiese ver. No le quise decir que no vendría, quería disfrutar de ella. Empezó a besarme, se estaba volviendo en una experta, me mordía con suavidad los labios y con su lengua, la pasaba por ellos, bajaba por mi cuello mordisqueándolo y pechizcandome los pezones que los tenia ya duros. Se puso de cuchillas, me bajo los boxes y mi polla salió disparaba de la prisión que le tenia oprimido los boxes. Al verla gimió de placer y poco a poco fue metiéndosela en la boca, para empezar una mamada de campeonato, salía y con la lengua refregaba el glande, pasaba su lengua por mis huevos, los mordisqueaba. Me estaba llevando al éxtasis, cunado note su lengua por la intersección del ano y los testículos, gemía de placer cerrando los ojos. Al abrirlos me lleve una sorpresa, allí estaba María Dolores viéndonos mientras se masturbaba, solo llevaba una tanguita y se veía en el suelo un vestido de flores. Casi me corro al verla. La miré a los ojos y me sonrió pasándose la lengua por los labios.

No le dije nada a Loli que se la veía cada vez mas caliente, se estaba haciendo un dedito.

Le dije ahora es mi turno, se quejo un poco, pero sabía que ahora le tocaba a ella disfrutar

La puse contra la pared dándome la espalda, y comencé a besarle y morderle el cuello y los hombros, mientras le iba desabrochando poco a poco el sujetador, gemía como una gata en celo, sabía lo que venía.

Le di la vuelta nuestros labios se unieron y empezaron a jugar nuestras lenguas, mientras acariciaba y pellizcabas sus pezones, sacándole gemidos que se ahogaran en nuestras bocas. Me fui para su oído y comencé a lamer su lóbulo, esta a mil, y le dije:

“nos están viendo, disfruta”

Mi boca se fue para sus pechos los cuales empecé a mamar y a morder con suavidad, miré para arriba y la ví con sus ojos abiertos mirando a María Dolores que no paraba de masturbarse y acariciarse los pechos.

Loli, me miro y me dijo:

“Me acabo de correrrrrr aggggrrrrrrr”

SE había corrido solo al verla, fui bajando para poder saborear sus flujos, decir que su sabor es algo amargo pero me encantan, mordisquee su tanga y notaba su humedad, se lo quite con los dientes y empecé a pasar mi lengua por sus labios buscando su duro y apetitoso clítoris, al notar mi lengua rozarlo, no puedo mas y mirando a nuestra vecina gimió mientras se corría con siempre hacia al tener su gran orgasmo.

Me miro y me dijo:

“Follame, no aguanto más, lléname con tu semen”, a la vez que miraba a la vecina y se pasaba la lengua por sus labios.

No me lo hice repetir dos veces, me levanté y de una estocada se la metí entera, mentiras oía como gemía y me pedía más y más.

Notamos unos gemidos cerca de nosotros, era María Dolores que se había acercado a nosotros no quería perderse nada, Yo estaba en la gloria, follándome a Loli y escuchando y viendo como María Dolores se masturbaba y gemía. No puede mas cuando oí como me decía Loli:

“Me corrooooooooo ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh”

Al momento oía como decía María Dolores:

“Y yoooooo agggrrrrrrrrr”

Fue demasiado para mí, y empecé a eyacular como hacia años que no los hacía, llené a Loli y parte del semen se salía de su vagina cayendo por sus piernas. Me separé de ella y le dije:

“Límpiamela”

Me miro y sonrió, cuando se estaba bajando para hacerlo, oímos los dos

“¿Puedo?”

Oí como decía Loli

“Si”

No me lo podía creer, dos lenguas, dos bocas y dos lenguas limpiándome los restos de mi semen y los fluidos de Loli. Fue demasiado para mí, veía como las dos me devoraban la polla, incluso llegaron sus lenguas a rozarse, mi polla empezó a ponerse dura. Empezaron a hacerme una mamada entre las dos, cuando una la tenía en la boca, la otra me lamia los huevos. No pude aguantar más y les dije:

“Me corroooooo” las dos abrieron sus bocas con sus lenguas fueras para recibir mi leche, estalle entre sus bocas y ví como juntaban sus lenguas para no perderse anda de mi semen. Tenían sus bocas llenas, me miraron y con sonrisas picaras se lo tragaron mirándome. Pero a continuación se fundieron en un beso, del cual quise participar, refregándonos nuestras lenguas entre todos.

Sonó el móvil de María Dolores, era su marido preguntándole si le faltaba mucho. Le dijo:

“Ya voy”

Se levanto, me beso con pasión y me dijo:

“Gracias” y se fue.

Loli, estaba todavía desnuda y exhausta. SE acerco y empezamos a besarnos y me dijo:

“Ha sido maravilloso”

A lo cual le contesté:

“A sido lo máximo, veros como os besabais y como me la chupabais, uffffffffff, lo recuerdo y se me pone dura jajajajajjaja

“¿Te ha gustado?” le dije

“Sí”

“¿Qué has sentido al besarla?”

“No sé, una sensación rara pero placentera”

“¿Te hubiese gustado acariciarla y ella a ti?”

Me miro, sonrió y me dijo:

“En ese momento si”

Ya que estábamos los dos desnudos y excitados por lo que había pasado, le pregunte:

“¿Te gustaría repetirlo? ¿Te gustaría acariciarla y ella a ti?”

Su respuesta me dejo helado:

“Sino se llega a ir, lo hubiésemos hecho de nuevo”

Se vistió, me beso y me dejo pensativo, mientras meneaba ese precioso culito.

No me lo podía creer, podría realizar mi sueño, un trio con dos mujeres ufffffffffffff.

No le comenté nada a Loli, pero creí ver a otra persona observándonos, mientras ellas estaban liadas con mi polla. Creí ver a su hija, tenía 20 años, y no había dicho nada

Pero eso será otra historia, con este relato se termina MI VECINA. Espero os haya gustado y agradezco vuestros comentarios y mensajes a mi correo.