Mi Vaquero Favorito (1)
Angel, ya que no confías en mi, que te parece si montas conmigo, puedes ir detrás de mí y guiar las riendas en caso que yo no pueda dominarlas
Mi Vaquero Favorito. (1)
Les contare una historia sobre mi verano en Texas, tengo unos familiares que tienen muchos años viviendo allá, llevan una vida muy rural para mis gustos así que nunca quise visitarles a pesar de que me insistieron tanto. Este verano acepte su invitación por estar huyendo de la realidad tan aburrida que vivía con mi novio, el pendiente de sus cosas, de sus conquistas y me tenia severamente descuidada, yo no soy una mujer despampanante pero tengo mis atributos, en cambio sus conquistas dejan mucho que pensar, cuando un hombre tiene todo en casa y se va a buscarlo a la calle es un idiota, y perdónenme mis amados lectores. Yo soy una mujer blanca, de cabellos castaños, con muy buenos atributos, tengo unos senos prominentes, de pezón rosadito, cintura delgada y un tren trasero de muerte, lo que me negaron en estatura me lo dieron en atributos, además soy una mujer muy apasionada, y me encanta el sexo, el no valoro mis atributos y decidí marcharme con mis tíos a Texas para que mi novio me extrañara, para mi sorpresa, no solo lograría que mi novio me extrañase, si no que viviría la aventura de mi vida.
El día de mi llegada conocí a Angel, el es el vecino de mis tíos, y wow! Que vecino, Un hombre alto, fuerte, con una mirada capaz de derretir un iceberg, unos ojos color topacio, y un bronceado, que lo hace lucir como modelo de revista, recuerdo que el mismo día que lo conocí, moje la pantaletas al conocer a semejante espécimen, un abdomen marcadito, al igual que los brazos, llevaba unos jeans tan ajustados que no pude evitar mirarle el paquetote. Ese día me lo pase pensando en el, en sus manos fuertes, soñando como se sentiría una caricia de un hombre así. Mis suplicas no se hicieron esperar pues mi adorada tía me contrato clases de equitación con Angel. (El nombre le quedaba de maravilla, solo un Angel podía ser tan despampanante)
En mi segundo día mis clases de equitación comenzarían, mi sexy instructor me paso buscando, fuimos a las caballerías de su casa, me consiguió una yegua bellísima, y caminamos a un lugar mas cómodo primera lección, como montar, el hablando y yo con ganas de montar otra cosa, que no era precisamente a la yegua. Durante 3 días de absurdas clases lo único que yo conseguía era estar totalmente excitada y llegar dándome una ducha bien fría.
El 4to día me decidí, dejar de mirar y ser más activa, preste más atención a las instrucciones, trate de comportarme muy sensual, y lo convencía de que estaba lista para montar y dar un paseo sin q el guiara la yegua, el no estaba muy seguro, así que hice de las mías y le propuse.
"Angel, ya que no confías en mi, que te parece si montas conmigo, puedes ir detrás de mí y guiar las riendas en caso que yo no pueda dominarlas" el no lo dudo y se monto detrás de mí, ese hombre sí que había sido bendecido podía sentir yo un bultote en mi trasero, así q decidí aprovecharme de la situación, y empecé a frotarme contra el disimulando con el andar de la cabalgada, su miembro fue respondiendo al punto que pensé que me penetraría en ese instante, la tenía tan grande que hasta se le escaparon un par de gemidos, al parecer la situación fue insostenible para él y decidió parar un lugar cerca de un riachuelo para que la yegua tomara agua. Desmontamos, y él se estaba alejando de mí, yo me acerque un poco y comencé a quitarme la ropa para bañarme en el rio y provocarlo un poco más, yo sabía q el me estaba observando, pero me hice la que no me di cuenta, me metí al rio nade un poco, y Salí para mi sorpresa el estaba en el piso recostado esperándome, observo detalladamente mi cuerpo, yo no me intimide, camine hasta donde él estaba, dispuesta a vestirme frente a él, no me percate del momento en que ese hombre se me lanzo encima como un tigre, comenzó a besarme, con una pasión descomunal, me toco los senos y me los chupaba cuidadosamente, uno por uno, luego me acerco los pechos y paso su lengua por mis dos pezones a la vez, yo estaba loca de placer, el estaba dispuesto a penetrarme, cuando lo detuve con brusquedad lo empuje, para que se tumbara en su espalda, y me decidí saciar mi curiosidad de ver y tener aquel descomunal miembro, lamí lentamente el cuerpo de su pene, luego dedique atenciones a su glande, con mi lengua rozaba toda la cabeza, luego chupaba solo la cabeza, lamí su frenillo, y metí mi lengua en su agujerito, y ahora si comencé a meterme poco a poco aquella pieza, completa hasta que sentí que me tocaba la campanilla el me advirtió que iba a acabar pero yo no me la saque de la boca y me trague parte de su semen, y antes de que se me durmiera el hombre, me metí sin contemplación aquel miembro, el emitía gemidos que me guiaban a continuar, yo ya sentía explotar, antes de terminar subí mi concha hasta su cara y su lengua curiosa me dio un placer que nunca olvidare, me corrí en su cara y cumplí mi cometido de cabalgar semejante semental.
Esa no fue la única vez, ese hombre me hizo vivir experiencias fantásticas si les gusta este relato, en uno próximo contare como me profano mi culito, y como me regalo la fantasía de estar con dos hombres a la vez, si mi vaquero es bueno, dos vaqueros fueron mucho mejor.