Mi tío y Yo. (5)

Después de desvirgarme, mi tío y yo pasamos a un nivel de necesidad sexual impresionante, acá cuento como despues de un año volvimos al camping en donde todo comenzó...

NOTA INICIAL: Si quieren leer los relatos anteriores a este aquí les dejo los links:

http://www.todorelatos.com/relato/121997/

http://www.todorelatos.com/relato/121996/

http://www.todorelatos.com/relato/122009/

http://www.todorelatos.com/relato/122071/


Una vez que mi tío y yo comenzamos con el sexo real, no pudimos parar, lo hacíamos en cada lugar donde podíamos, lo hicimos en su casa en la mía, me pasaba a buscar

por mi casa los día que estaba sola y

lo hacíamos

ahí, algunas veces me paseaba por su taller sabía los horarios en los que estaba solo o cerraba al medio día

.

Estábamos

totalmente

zafados

, nos habíamos vuelto adictos,

tratábamos

de

disimularlo

, pero cada vez nos costaba más, varias veces casi nos encuentran. Pero eso no nos detenía, ni bien podíamos seguir, seguíamos, por suerte, mis padres confiaban

muchísimo

en mi tío, y si el decía que

íbamos

a ir al parque con sus hijas no habría de que sospechar, aunque después

terminamos

teniendo sexo dentro del auto de mi tío. (Unas semanas después de haber tenido sexo con mi tío por primera vez, este se compró un auto y nos facilito bastante nuestros encuentros).

Pero, ese mismo verano, antes del comienzo de clases, mi padre organizó otra salida a pescar, solo él, mi tío mi hermanito y yo. Mi hermano era muy pequeño pero como hicieron conmigo, ellos

comenzaron

a llevarlo bien de pequeño, en cuanto caminara, el hijo de mi tío también vendría a nuestra salida de "hombres".

Teníamos todos organizado, ya habíamos empacado la carpa, las ollas, las cañas, y mi tío y yo

llevábamos

unas terribles ganas de sexo. Salimos a las 4 y casi 6

estábamos

llegando, "tarde" según mi padre, armamos la carpa en el camping, pusimos las bolsas de dormir, preparamos el agua calienta la pusimos en el termo, y nos dirigimos a muelle que había frente al camping, no hubo mucha suerte esa mañana, ya no sabía por qué íbamos a esa zona a pescar nunca

llevábamos

mucho.

Al medio día mi papá y mi tío prepararon asado mientras jugaba con unos chicos de mi edad que había conocido en el camping, jugamos a la pelota, a la hora de comer quería seguir jugando, eran muy divertidos, pero prometimos vernos

después

de la comida. Eran 3 chicos, Tomás, Javier y Kevin, tres hermanos. A la tarde mi papá y mi tío fueron a pescar, se llevaron a mi hermano, y los chicos y yo nos quedamos jugando, mi tío me

vio

con cara de enojo, y se enojó con mi papá por dejarme con esos tres chicos. Seguimos con la pelota un rato, y luego nos cansamos y nos recostamos bajo un

árbol

que había en el fondo del camping, ellos hablaban muchas tonterías de chicos. Pero nos divertíamos y a la tarde merendé con ellos.

Pero luego de la merienda me fui con mi familia, mi papá venía con mi hermano dormido, mi tío las cañas y demás cosas, y una gran cara de enfado. No comprendía por qué. Al rato mi papá empezó con la comida, le gustaba cocinar, mi hermano dormía, le propuse a mi tío dar una vuelta, y me accedió de mala gana, no entendía que le pasaba, pero supuse que un poco de cariño de su s

o

brina favorita le iba a cambiar el humor. Salimos del camping, y empezamos a caminar, lo tomé de la mano, es una costumbre mía tomar de la mano al adulto

responsable

cuando camino, en este caso él, me agarro muy fuerte la mano y empezó a caminar rápido sin dirigirme la palabra, me llevo hasta un campo con una casa abandonada bastante en ruinas, miró para todos lados, y nos metimos cuando entramos y pasamos por los paredones medio

caídos,

me empuja contra la pared.

  • Qué hiciste con esos chicos?

  • Qué?

  • Con los tres pendejos? Te los cojiste? Se la chupaste?

  • Qué? No! Jugamos a la pelota!

  • No me mientas!

  • No hice nada mas que jugar a la pelota y tomar mate cocido con pan! Qué te pasa? Te enojaste conmigo?

Se acercó a mi, y me abrazo, y lo entendí, estaba celoso, de tres pendejos que ni juntos llegarían a lo que es él.

  • No te gustan chicos de tu edad?

  • Eh... no, nunca me gusto nadie...

  • No te molesta que sea viejo?

-Qué te pasa? No! Me encanta que seas grande! Los chicos de mi edad son divertidos, pero son medio bobos!

Esa respuesta pareció calmarlo, y con eso,

comenzó

a acariciarme, primero sobre mi remera,

después

levantándola y

tocándome

directamente mis tetitas, era muy rico, sabía justo como calentarme, donde tocar, y mientras lo hacía, yo le manoseaba la entrepierna, lo masajeaba, y lo hacia gemir de a ratos, estaba muy duro ya, y eso me encantaba, se bajo el cierre del pantalón y saco su pene por ahí , yo me agache un poco y comencé a chuparsela, había transpirado bajo el sol y podía olerlo en su piel, eso me excitaba más, jugaba con mi lenguita en su puntita, sabía que mi lenguita lo volvía loco, que hacía que se

estremeciera

, y lo metí en mi boca, aún no me entraba todo, pero hacía mi mayor esfuerzo para que entrara gran parte de ese gran pene en mi boca.

  • Qué rico bebé me encanta...

Dejó salir, mientras se la chupaba, y me mojaba terriblemente rápido. Él me agarró la cabeza y empezó a empujarla mientras yo aguantaba la respiración, para no atragantarme, pero no pude aguantar mucho, y la saqué para toser.

  • Me encanta que te

atragantes

con mi verga bebé...

  • A mi no! no seas tan bruto!

Se río, pero seguí

chupándola

, de a ratos la sacaba y le relamía los huevos, dejaba que sus pelos me hicieran cosquillas en la cara, eso me ponía mas caliente, sus pelitos acariciando mi cara, su textura en mi lengua. De pronto sentí que me agarro, y me cargó hacia la ventana que daba a la calle, podíamos ver a la gente pasar, pero ellos a nosotros no, me paré en lo que parecía un pedazo de pared caída me bajé los pantalones, la bombacha, y parada allí

apoyándome

contra una pared que había en frente, paré mi colita, y lo miré y le sonreí. El me miró con una cara de loco, y sin pensarlo se bajó los pantalones, y agarrando su pene con una mano y

acomodándolo

en la puerta de mi vagina, la metió, de una sola embestida, gemí muy fuerte y ahogué un grito.

  • Qué rica! Tu conchita siempre me pone así de caliente bebé! Haces que me caliente mucho!

No contesté, aún se sentía extraño cuando me penetraba, placentero claro, pero me costaba reaccionar, mi cuerpo se estremecía constantemente, y más cuando lo hacía con fuerza y rápido, y por un tiempo, había algo de dolor. Pero trataba de no concentrarme en eso. Con sus manos me tomaba de mis caderas, y me acercaba a él en cada embestida, sentía sus gemidos. ero aún me aturdía cada vez que teníamos sexo, me costaba mantenerme parada, o

percibir

lo que pasaba a nuestro alrededor, solo podía ver a

través

de esa ventana rota y ver que la gente pasada indiferente a lo que pasaba dentro. Eso me

excitaba

más.

  • Te gusta bebé? Te gusta sentir la verga caliente de tu tío dentro tuyo?

  • Si... tu verga... es muy rica...

metémela

más!

  • Me encanta que seas así de putita pulguita! Haces que me caliente más!

-

Metémela.

.. hasta darme tu lechita!

  • Queres mi lechita? Donde la queres mi cielo? Tu tío te la va a dar donde quieras bebé!

  • Quiero sentir tu lechita dentro mío! Quiero que me llenes de leche!

Con esas palabras, mi tío se

volvió

loco, comenzó a embestirme con gran fuerza y velocidad, mientras que a mi la vista se me nubló, y

comencé

a ver "estrellitas", pero a eso lo

acompaño

un gran placer, sentí nuevamente como un calor me recorría cada vez que mi tío me embestía, que pronto se volvieron mas rápidas y agresivas, y fue cuando sentí como su pene comenzaba a latir y a estremecerse dentro mío, y pronto un gran chorro de leche me lleno por dentro,

haciéndome

llegar al orgasmo, mis piernas se aflojaron, y caí al suelo, haciendo que su pene saliera repentinamente, y al parecer no había terminado de tirarme su lechita, porque soltó unos cuantos chorritos cuando caí al piso. Él se agarro su pene y apretó de forma tal que pudiera sacar todo, y me lo tiró encima.

  • No estaba enojado con vos, solo tenía miedo que conocieras a alguien de tu edad, y que te gustara...

  • No me gustan los chicos de mi edad... No te tendrías que preocupar por eso!

  • Lo se, pero algún día vas a conocer a alguien de tu edad y me vas a dejar solo!

  • jaja No! Puede que conozca a algún chico, pero nunca te voy a dejar solo! Pero tampoco quiere decir que me quiera casar con vos o algo así...

Me miro sin comprenderme, pero me

sonrió

, tampoco sabía que le pasaba a él, pero también le sonreí.

  • Deberías invitar a tus amiguitos a que nos vean... A esa edad solo pueden pensar en sexo..

  • Vos decís? No les va a parecer extraño?

  • Les va a dar igual siempre y cuando puedan verte en bolas...

  • jaja Pero vos no estabas celoso de ellos?

  • Solo porque pense que te querían hacer algo jaja. Cosas de viejo tonto...

Después de esa conversación me levanto del piso, estaba bastante llena de su semen, y ni hablar de lo que me salía de la vagina, que era muchisimo, y el sacó un pañuelo de su bolsillo, y como pudimos nos limpiamos. Al caerme sobre el suelo duro me había lastimado la rodilla, y el tuvo que llevarme a caballito hasta el camping, cuando llegamos, mi papá estaba preocupado, habíamos tardado bastante al parecer, y le dijimos que habíamos ido caminando y que yo me caí jugando y que mi tío quiso esperar un rato a ver si se me pasaba el dolor o no. Pero que al final decidió cargarme. Nos sentamos en una mesa del camping y comimos y luego nos fuimos a acostar.

Al otro día, sábado, me

desperté

y

estábamos

mi hermano y yo solos en la carpa, él seguía durmiendo. Salí de la carpa y no había nadie ahí, mire y buscando a mi papá o a mi tío pero no los

encontré

, pero sobre la mesa, bajo el termo de agua, había un papel con una nota "Fuimos a pescar, pero no quisimos despertarlos, a las 11 volvemos, así que cuando se despierten desayunen." Mire mi reloj de Garfield de muñeca y eran casi 10 y media, y me puse a preparar mate cocido para mi y mi hermano. Cuando lo tuve listo, lo desperté y desayunamos con un pedazo de pan casero que nos habían dejado. A eso de las 11 y media mi llegaron y pusieron a preparar la comida, iban a hacer unas

chorizos

a la parrilla para comer en

sándwich

(acá llamado choripan), almorzamos a eso de la una, y mi papá parecía cansado y fue a dormir una siesta, mi hermano también, yo miré a mi tío, y sabíamos que era nuestra oportunidad para darnos cariño otra vez. Me sonrió y le dijo a mi papá que mientras ellos dormían nosotros iríamos a pasear.

Mi tío agarró una mochila cargo una toalla grande y una de mano, y salimos a caminar, al principio nos dirigimos directamente a la casa en ruinas, pero al llegar notamos que de día se veía mucho desde el exterior, y no quisimos arriesgarnos demasiado. Estabamos ya muy calientes realmente queríamos hacer y teníamos que encontrar un lugar ya! Volvimos sobre nuestros pasos, pero no

encontrábamos

nada, por último mi tío decidió alquilar una cabaña durante lo que quedaba del fin de semana para que podamos ir cuando lo necesitemos, en el mismo camping, salía $50 (pesos argentinos) la noche en las cabañas, mi tío la alquilo hasta el lunes a las 6 pm que era cuando nos volvíamos a casa. Nos dieron una que estaba apartada, bajo un

árbol

y cuando entramos solo tenía dos camas de una plaza y nada más. Estaban hechas solo para dormir claramente, pero la utilizaríamos de otra manera.

Mi tío se quitó la camiseta y los shorts quedando en bóxer, y se sentó sobre la cama apoyando su espalda contra una pared de la cabaña, como ya había contado antes, mi tío era grande y robusto, y tenía una enorme panza cubierta de pelos. Yo por otro lado era pequeña no llegaba a medir mas de un metro cincuenta, mi cabello para esa época no era tan corto, lo llevaba carre, lo suficientemente largo para dos coletas. Como sabía que a mi tío le gustaba que usase vestidos, me había llevado unos pocos de verano, este me llegaba a penas debajo de la cola, ya que mas que vestido era una remera larga lo solía usar con un short. Pero en ese momento me quite el short y la bombacha, y los puse con la remera de mi tío, el me pidió que me sentase sobre sus piernas, frente a él con mis piernas abiertas sobre las suyas. Con tanto tiempo de esperar, ambos

estábamos

muy calientes ya. Comenzó por sobarme mis tetitas sobre el vestido, rozaba mis pezones, y los apretaba, yo gemía era muy rico, bajó una de sus manos, y me empez a frotar mi

clítoris.

  • Oh que linda mi putita, ya estás mojada bebé?

  • Es tu culpa! Podrías haber alquilado esto desde el principio, y yo no tendría tantas ganas.

Se sonrío, y me desprendió unos botones de mi vestido, para dejar mis pezoncitos al aire, aún no usaba

sostén

, no había necesidad. Con su pulgar, podía cubrir todo mi pezón, y lo sobaba, para que me calentara aún más. Con su mano derecha volvió a mi entrepierna que estaba abierta a causa de la pose, y siguió masajeandome, yo baje ambas manos hacia su bóxer, y por el agujero de enfrente saqué su pene, estaba ya muy duro y grande, con ambas manos comencé a masturbarlo, para que gosace junto conmigo, su respiración se agitó, y podía ver como su panza se movía con cada respiración. Siempre m

e

han excitado los pelos en un hombre, pero nunca como los de mi tío en esa panza, tal vez sea extraño pero esos kilos demás siempre lograban calentarme. Mientras que lo masturbaba, decidí soltar una mano, y comenzar a acariciar su panza, eso lograba que me mojara mas. De pronto, mi tío se acostó poniendo su cabeza sobre la almohada que doblo en dos, y me dijo que me pusiera sobre él, lo hice, y si me recostaba sobre su panza, su pene me quedaba justo frente mi cara, y entendí que quería, así que lo tome con mis dos manos, y

comencé

a masturbar, pronto saqué mi lengua y lo lamí, estaba rico, como ayer podía oler su sudor, pero eso no me

detenía

, es más me calentaba. Mientras lo mamaba, el me relamía el

clítoris

, jugando con su lengua, también podía sentir su respiración agitada en mi cola, me parecía divertido. Estuvimos un rato en esa pose, peros

había

que si continuaba mucho con eso, el

acabaría

muy rápido, y aparentemente se percató de eso, porque paró.

  • Bebé quiero probar algo, me dijo, quieres intentar meterla vos sola?

  • Cómo? No se si me va a salir...

  • Dale intentalo...

Me dijo que me pusiera en

cuclillas

sobre su pene, y que con las manos lo sostuviera en la entrada de mi vagina, y que fuera bajando de a poco, si aveces dolía que me penetrara él, esto dolía más, pero quería intentarlo, iba bajando de a poco, a penas había entrado la cabeza de su pene, y me había costado, era gorda y larga, quería seguir bajando de a poco, pero el

cometo

a moverme sobre su pene, subirme y bajarme, y el dolor fue superado por el placer,

quise

utilizar mis piernas para moverme, pero me temblaban mucho, y no podía lograr un movimiento uniforme sobre su pene. Así que fue el que se movió abajo mío, y

comenzó

a meter y sacar su pene, me abrazó contra su cuerpo para hacerlo, y mi cabeza a penas llegaba abajo de su mentón. De un solo movimiento, mi tío saco su pende de adentro, me paro en

cuatro

sobre la cama, y volvió a meterla.

  • Me encanta sentir tu conchita así! es tan rica! aprieta tanto! haces que me vuelva loco!

  • Seguí... bien fuerte...

Y con eso me agarro de la cintura y me

empezó

a embestir de manera bestial, comencé a disfrutarlo tanto que el sonido de mis gemidos era muy alto. Él agarró algo de la ropa que estaba a los pies de la cama, y me amordazó, era mi ropa interior, me la puso de tal manera que me roseaba la cabeza y se metía en mi boca, aunque no funcionó mucho, pareció que eso lo puso aún más caliente, porque lo que eran embestidas bestiales subieron a nivel de monstruosas, me estaba bombeando como si no hubiera mañana, y a mi me enloquecía.

  • Que rico...

  • Te gusta mi verga bebé? Te gusta bien adentro en

t

u conchita?

Dijo y me agarro del pelo, y el hombro para poder acercarme más a él en cada embestida, yo ya no entendía nada, era tan rico, y tan bueno, no podía parar. Pero paró, me tumbo sobre la cama sin

escrúpulos

, se recostó sobre mí, mientras yo abría mis piernas para darle la bienvenida a ese rico pene que me fascinaba tanto. Lo agarró con una mano, y lo puso sobre mi vagina, lo

movió

,

masturbándome

un poco, y lo puso en mi puerta, hacía fuerza, pero no entraba.

  • Metela! -dije en un susurro-

  • Qué?

  • METELA!

De un solo empujón la volvió a meter,otra vez las estrellitas nublaron mi vista, y él

comenzó

a embestir. Quise abrazarlo del cuello, pero mis manos a penas llegaron a

rodear lo

, el me estaba dando tanto placer que no podía soportarlo, podía sentir como mis fluidos goteaban por mi colita y caían en el colchón. De repente, mi tío paró, pero si sacarla, agarro la almohada y la puso bajo mi espalda,

levantándome

, y el se levantó, y erguido volvió a embestir.

  • Bebe, no voy a aguantar mucho.

  • Dame tu leche!

  • Donde la quieres bebe? Pídeme donde la quieres!

  • La quiero adentro! quiero que me vue

l

vas a llenar de tu lechita!

Me embistió, pero lo que dijo era verdad, no iba a aguantar mucho, y pronto sentí como su pene se estremecía y latía con fuerza dentro mío, ya iba a venir, y me iba a llenar de semen. Y así fue, sentí como los chorros de semen se esparcían dentro mío, y luego salían, era mucho semen, y era había poco espacio dentro mío. Mi tío se quedo dentro mío, mirando como el semen se salía de mí, y disfrutando la vista. Mientras que yo temblaba de pies a cabeza, y a penas podía controlar el temblor de las piernas.

  • Me encantas bebé...

Dijo, y sacó su pene, que se había reducido, pero aún latía. Acercó la mochila, y con cada punta de la toalla nos limpiamos, habíamos dejado un desastre en el colchón, pero mi tío lo

dio

vuelta para que no se notara. Como seguía con mi vestido, solo tuve que ponerme la bombacha, que había usado de mordaza, que en algún momento sin saber bien cual la habíamos tirado al piso, y el short.

  • Me has manchado todo el bóxer!

tendré

que

sacármelo

!

Protesto sonriendo al ver que el

bóxer

estaba lleno de mis fluidos,

prometió

no lavarlo nunca y guardarlo como recuerdo, le dije que era un asco, y me reí, volvimos a nuestra carpa y mi papá y mi hermano seguían dormidos, habían pasado mas de dos horas.

Preparamos el agua para tomar unos mates, y despertamos a ambos para merendar. Todavía nos quedaba todo el domingo, y parte del lunes para disfrutar entre nosotros.


NOTA FINAL: Como ya aclaré en el capitulo anterio, si mandan mail y no contesto es porque la facultad me tiene atareada, a parte que me gusta darle una respuesta personal a cada mail, así que si me contactan por favor no se enojen si no conteste en ese día .. Por skype pasa lo mismo, puede que un día no conteste pero lo haré cuando pueda... [email protected]

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Ahora sí, gracias por leer ♥