Mi tio y yo 2
Otra vez mi tio....
Primero quiero agradecer todos sus mails, gracias por sus comentarios, y por incentivarme a contarles lo que paso al día siguiente de mi primera vez…
La noche del día que tuve sexo con mi tío fue una noche extraña en tal sentido que no pude dormir, no por haber perdido mi virginidad, y con mi tío, sino, por el miedo a quedar preñada de mi tío Ernesto, a que pasaría si alguien se entera, uff... los conflictos que traería a mi familia, que diría mi papá, (esta es otra historia), pero también, el placer que sentía al haber sido desvirgada por tío, al contacto de su miembro con mi conchita de adolescente, a la inmensa excitación que pude tener y que no se me quito por haberme acostado con mi tío, a las ganas de repetirlo, a las ganas que tenía en ese momento que ir corriendo a él y chuparle la pinga, fue una noche loca de verdad.
Al día siguiente, desperté con una nueva forma de pensar, mas desinhibida, mas mujer, mas puta, fui a desayunar y estaba mi tío y su mujer desayunando, me puse roja como tomate de la vergüenza, y creo también que de la excitación, de pensar que la mujer de mi tío no sabía que él y yo habíamos tirado el día anterior y que fue lo más rico de mi vida hasta el momento, solo de acordarme me pongo a mil.
Durante el desayuno yo no podía mirar a mi tía, sentía remordimiento al verla, pero cuando miraba a mi todo era todo lo contrario, sentía un cosquilleo en mi conchita, y solo podía pensar: ¿a qué hora se larga mi tía para poder comerme a mi tío?, mi tío no se hacia problemas, estaba como si nada hubiera pasado, y eso me demostraba que era alguien en quien podía confiar y con quién podía deshacerme de todo mi calentura, propia de una muchachita de 14 años recientemente desvirgada.
Después del desayuno, mi tía como siempre se fue a hacer sus chamba en la computadora, la verdad es que no recuerdo en que trabajaba, pero pasaba todo el día ahí, y eso era propicio para ponerme como una zorrita con mi tío, desayunamos y mi tío se fue para su cuarto, yo me fui al mío y me puse un bikini blanco con bolitas rojas, y al salir pase por el cuarto de mi tío, y me di con la sorpresa que él estaba tumbado en la cama completamente desnudo y agarrando su pene, su delicioso y grande pene, al ver eso me puse a mil de nuevo, me arreche como se dice en Perú, y me acerque sin titubear y le agarre el pene, era mi obsesión, mi delirio, mi exquisito pecado, y empecé a masturbarlo y a darle besitos en la cabecita, cosa que me excitaba mas aun, entonces me acorde que mi tía estaba en casa y me detuve, le dije: tío no, mi tía está en la casa, y si nos ve. A lo que mi tío respondió: yo sé marcelita preciosa que tu tía esta acá, y sé que no se va a ir en todo el día, pero tengo algo preparado para que podamos estar juntos y pueda metértela de nuevo, eso es lo que quieres no preciosa. Y le dije: claro que si tío, quiero que me la metas de nuevo, me encanto ser tu putita. Después de eso me pare y me fui, sin antes enseñarle mi culito, me aleje dos pasos de él, le di la espalda y me baje el bikini para que pudiera verme el culito.
Al rato me fui para la piscina, para ver si podía relajarme un poquito, distraerme y quitarme la calentura, pero no podía, solo tenía en la cabeza lo que dijo mi tío acerca de que tenía algo preparado para estar juntos, no me imaginaba que podía ser, es eso mi tío se acerco a la piscina, traía unos shorts y se sentó a mi lado, yo temblaba solo de verlo, yo estaba echada en una camilla, solo con el bikini, y cuando el se acercó yo abrí un poquito las piernas, mi tío no pudo evitar ver mi calentura, y me dijo:
- Hola preciosa, que tal esta el sol.
- Yo dije: está muy caliente tío, me pones bloqueador?
Claro dijo mi tío, y procedió a ponerme el bloqueador, primero en mi cintura, yo me sentía completamente loca, apenas sentí sus manos en mi cuerpo empecé a expulsar juguitos de mi conchita, mi tío siguió aplicándome el producto y fue subiendo hasta me pecho, volteo para ver si venia mi tía y metió sus manos por debajo de mi bikini y a tocar mis pechos, lo hacía con suavidad, yo no podía evitar juntar las piernas y apretarlas del placer que sentía, después se echo mas bloqueador en las manos y empezó a ponérmelo en las piernas, desde los pies hasta las caderas, cuando pasaba por mi muslos se introducía al interior de los mismos y con sutileza me tocaba la conchita, y salía de nuevo, luego me dijo: voltéate preciosa… lo cual hice al instante, ya estando de espaldas, me siguió aplicando el producto, empezó en los hombros y fue bajando, se detuvo en mi cintura y tocaba suavemente mis caderas, luego volvió a mirar si venia mi tía y fue bajando hasta mis nalgas, ahí si me la apretaba fuerte, y despacito me metió la mano hasta mi culito y estuvo masajeándolo por un ratito, yo ya estaba completamente mojadita, quería que me la metiera en eso momento, quería chupársela y ser su mujer.
Después de 1 minuto que estuvo así, me quito las manos de encima y me dijo: espérate mi niña, tengo algo para ti pero es para la noche… yo no aguantaba lo quería en ese momento, quería ser penetrada ahí mismo, es increíble como una muchachita de 14 años puede volverse tan puta, y tan caliente, después de eso no metimos a la piscina y cuando estábamos dentro del agua nos acercábamos muy disimuladamente y le cogía el pene, jugábamos a bucear, y cuando me tocaba a mi ser la que buceaba, me demoraba mas porque le sacaba el pene y se lo chupaba debajo del agua, al comienzo fue difícil porque me quedaba sin aire, pero después ya agarre practica jajaja… el hacía lo mismo, pero cuando se metía debajo del agua, el se me acervaba y me metía 2 dedos en mi conchita, si mi tía me hubiese visto la cara se hubiera dado cuenta en una, porque estaba más arrecha que perro en celo.
Estuvimos en la piscina como 2 horas, jugando a chupadas de pinga y metidas de dedo y después mi tío se fue porque lo habían llamado para hacer unos negocios, se fue y no volvió hasta la tarde, cosa que me puso muy triste, y no me consoló masturbarme todo la tarde pensando en lo que había pasado, a golpe de las 7 de la noche, mi tío volvió y me llamo para que cenáramos con mi tía, íbamos a ir a un restaurante y me propuse a seguir con el juego, me puse un vestido negro que me quedaba chico pero que sabía que me quedaba bastante bien, era mini falda, un poquito muy levantada que hacía que se me vieran la piernas en todo su expresión, mi tía al verme dijo: ¿qué? ¿Con ese vestido vas a ir? Todos te van a estar mirando y lo le dije: pero esta mi tío para que me defienda… a lo que ella miro a mi tío y sonrió y dijo: tienes razón, tu tío te adora y te va a cuidar.
Ya en el restaurante, llego el mozo y se me quedo mirando a lo que mi tío dijo: si joven… pasa algo. El mozo se avergonzó y no dijo nada, la verdad es que era un poco incomodo que todo mundo me mire, con cara de mañoso y con bastante morbo, pero me tranquilizaba pensar en que era la putita de mi tío y de nadie más. Después de comer me fui para el baño y mi tío se ofreció a acompañarme, cuando íbamos juntos el me tomo de la cintura, yo me sentía como una reina, me daba gusto saber que era su preferida, y más gusto me daba saber que muchos hombres ahí en el restaurante se morían de la envida, de ver a mi tío conmigo, cuando llegamos a la puerta del baño el me cogió de la mano y me jalo para el baño de hombres, apenas entramos empezamos a besarnos, era delicioso, con tanta pasión, mi tío me dijo: me muero de celos que la gente que te mira, a lo que respondí: no te preocupes tío, soy solo tuya, tu eres el único que quiero que me penetre y me haga su mujer, eso puso a mi tío a mil, lo se porque yo tenía mi mano en su paquete y sentí como creció de un solo sacudón, el tenia su mano en mi colita y miraba mi colita por el espejo, me levanto el vestido un poquito y me metió la mano hasta el fondo, otra vez estaba a mil y quería ser cogida en ese momento, quería sentir su pene dentro de mí, era mi obsesión, entonces entro una persona al baño y nos quedo mirando sorprendido, me acomode el vestido y nos fuimos, yo seguía esperando lo prometido…
Al llegar a casa mi tío dijo: vamos a ver una película entre los tres, a lo que respondí: está bien… claro que no quería que mi tía estuviera ahí pero bueno, ya llegaría el momento, en la sala habían 2 sillones de 3 personas cada uno, mi tía se hecho en uno y mi tío y yo nos sentamos en otro, y empezamos a ver la película, la verdad es que no vi la película, solo pensaba: ¿Por qué mi tío quería que mi tía también viera la película?, ¿Cuál era el regalito que esperaba?
Luego de media hora de ver la película, mi tía se quedo dormida, y en ese instante mi tío así de la nada empezó a meterme la mano, yo seguía con el vestido con el que fui al restaurante, yo intente parar eso porque mi tía estaba ahí con nosotros, y había el peligro de que despertara y nos viera, y mi tío dijo: no te preocupes preciosa, le he dado una pastilla sin que ella se dé cuenta y no se va a despertar en 2 días, esto era lo que tenía planeado para nosotros, en ese momento tuve un conflicto de sentimientos, por una lado el miedo a que mi tía se despierte, que le haga mal la pastilla que mi tío le dio, y por otro la alegría que ahora si por fin en todo el día, mi tío me iba a meter la pinga como yo quería. Mi tío dijo: mira preciosa, se fue donde mi tía y la movió y no se despertó, ven me dijo compruébalo por ti misma, me acerque y la toque, y no se despertaba… entonces mi tío me beso, ahí a pocos centímetros de su mujer, yo ya no podía resistirme o mejor dicho, no quería resistirme, me besaba con tanta ternura, su lengua se metía en mi boca de la manera mas angelical posible, mientras tanto yo iba buscando su pinga, quería comérmela, le baje el pantalón y me agache y empecé a chupársela mientras él me agarraba de la cabeza y me jalaba hacia el para que su pene entrara mas hasta mi garganta, mientras yo con mi mano me masturbaba la conchita toda mojadita… después de un rato, me puse de pie, el me volteó y me bajo el vestido, quedando solo en calzoncito, yo de frente a mi tía que estaba completamente dormida, mi tío se agacho y me bajo el calzoncito y empezó a chuparme la conchita con fuerza, no pude evitar caer sobre mi tía que ni cuenta se dio, y ahora estaba desnuda encima de mi tía mientras su esposo, mi tío, me hacia sexo oral, su lengua iba desde mi conchita hasta mi culito, era delicioso sentir su lengua en mi culito, luego se paro y muy despacio me fue metiendo la pinga, cuando estaba entrando yo hice un movimiento rápido para atrás para que me entre de una vez, ya no podía esperar más, espere todo el día por sentirme penetrada por mi tío, el mejor tío del mundo, por fin otra vez era penetrada por mi tío, su pinga me entraba de lo más rico, se resbalaba facilito gracias a que estaba completamente mojadita, mi tío siguió metiéndomela por un rato, cuando entonces me la quito y se sentó al lado de mi tía, y me hizo sentarme encima de él, me senté encima de él y con mi mano fue acoplando su pene a mi interior para volver a ser penetrada, y empecé a moverme como una perra, me sentía la mas puta del mundo y eso era delicioso, mientras mi tío me la metía, le agarraba las tetas a mi tía y eso me excitaba mas aun, saber que estaba con la pinga de mi tío adentro de me y vi tía estaba al costado… después de un rato de coger empecé a sentir la respiración de mi tío más agitada y le dije: tío, quiero tomarme tu leche, quiero tomármela todita y él me dijo: te la vas a tomar, pero la vas a compartir con tu tía… entonces se paro y empezó a masturbarse en la cara de mi tía, yo me quede atónita, entonces él empezó a votar su leche en la cara de mi tía y me dijo: ahora si marcelita precios, tomate la leche de tu tío de la cara de tu tía… yo me acerque a mi tía y con mi lengua fui recogiendo toda la leche de mi tío de la cara de mi tía, estaba calientita y rica, desde ese día me volví adicta a la leche de mi tío, después de eso nos levantamos y nos fuimos a acostar juntos para coger toda la noche, fue una noche única de verdad, lo hicimos 6 veces en toda la noche, y ese día fue cuando mi tío me pidió que le hiciera un favor, quería metérmela por el culo, pero no ese día, que otro día me iba a meter la pinga por el culo, yo le dije que iba a pensarlo… y esa es otra historia
Al día siguiente despertamos y mi tía despertó después y me dijo: que buena noche la de ayer no, ¿me quede completamente dormida no? Y después de decirme eso me guiño el ojo… no supe que pensar al respecto… pero esa también es otra historia