Mi tío enfermo

Mi tío enfermo...

Me llamo Montserrat, actualmente cuento con 18 años de edad, soy de la ciudad de México y esto me paso cuando iba a cumplir los 17 años, y los que les relatare es verídico.

Antes que nada me voy a describir tal y como soy, mido 1.67 cm. Peso 60 Kg., y mis pechos son talla 36c, como verán soy se buen ver, ya que mi figura es algo que a mucha gente y principalmente a los hombres llama la atención, soy muy cachonda y me encanta los relatos de sexo entre familiares, y esto es lo que paso cuando iba a cumplir los 17 años.

A mi tío primo hermano de mi madre le ocurrió un accidente automovilístico el cual solo lleva fractura de pierna, el cual quedo en cama por un lago tiempo, a decir verdad fue por 3 meses, ya que el muy canijo se paro antes de tiempo, y aunque andaba con muletas, se la pasaba caminando por toda la casa, y en ocasiones nos poníamos a jugar muy bruscamente, él es delgado con un cuerpo atlético y aunque es mas bajito que yo se ve muy bien, es de esas personas que les dicen zorros plateados por que tiene canas a los lados de cabellera la cual es ondulada, es muy velludo del cuerpo y no se diga de sus piernas, es mas parece un osito de felpa.

En el lapso que llevo en la cama, pues como no se podía parar, tenia que hacer sus necesidades fisiológicas en cama, en ese tiempo la esposa de mi tío trabajaba, por lo tanto yo me encargaba de los quehaceres de la casa, así como cuidar de sus dos hijos de 5 y 2 años, cuando mi tío me llamaba para pedirme el cómodo o el paro, que sirve para orinar y defecar, le tenia que ayudar con los pantalones o short, para que después el mismo realizara dichas labores, yo me hacia que me retiraba del la recamara para que el quedara agústo, pero en lugar de retirarme me quedaba en la puerta de su cuarto para observar como sacaba su enorme pene de aproximadamente 12 cm. Así es como la tenia cuando no se le erectaba, y miraba por el espejo, era una posición muy estratégica ya que el no me miraba, claro, esto lo hacia cundo no estaba su esposa, ya que llegaba tarde del trabajo.

Pasaron los días y cada vez que observaba a mi tío haciendo sus necesidades, yo desde la puerta me masturbaba pensando en ese enorme pene que me hacia soñar mil cosas, cuando era de noche y todos disque descansábamos, los escuchaba hacer el amor, ya que mi tía es muy escandalosa mas aparte la calla de ellos hacia mucho ruido y se escuchaba hasta la recamara de los niños, ya que esta se encuentra junto a la de ellos, al empezar a escuchar los gemidos de mi tía, lo cual no esta nada mal para su edad, me excitaba de tal manera que tomaba uno de los muñecos de peluche de mis primos y me masturbaba de tal forma que llegaba a un clímax muy fuerte, esto lo hacia reprimiendo mis gemidos.

Cuando mi tío se levanto de la cama (como le había comentado andaba en muletas por toda la casa), me ponía a jugar con él, de tal forma que cuando forcejeábamos, intencionalmente hacia que mi cuerpo quedara pegado al suyo de tal forma que mis pechos de gran tamaño quedaran pegados a su cuerpo. Al principio no se daba cuenta de lo que pasaba, pero con el tiempo observe que a él le encantaba sentirme seca, con el paso de los días, me propuse exitarlo aun más, ya que me ponía ropa muy sexi y escotada, en ocasiones el se encontraba trabajando en la casa, ya que es técnico en electrónica y aprovechaba el momento de que estuviera distraído para llegar por la parte trasera y pegar mis turgentes pechos a su espalda, sabia que esto le excitaba de gran manera, y cierto día me propuse acercarme de la misma forma, pero esta vez sin sostén y con un playera transparente y muy holgada que dejaba ver mis pechos en todo su esplendor.

  • Hola tío, que haces?

  • Ya sabes que estoy trabajando, que más quieres que haga?

  • Oh perdón, no pense que te enojaras, me puedes explicar para que son tantas cosas en esa televisión, para que son tantas cochinadas?

Y de esta forma mostré mis pechos ya que me agache frente a él, y que no perdió detalles de lo que veía, él nervioso y a la vez excitado, con una voz temblorosa me fue explicando cada parte de las piezas y para que funcionaban, yo seguía viendo las piezas agachada y de vez en cuando lo miraba a la cara, el pobre ya no sabia que hacer ya que estaba muy colorado por la excitación y observe que en los pantalones se le comenzaba a hacer un bulto de excelente tamaño, al querer agarrar una pinza que se encontraba del lado donde yo estaba paso rozando su mano por uno de mis pechos y muy cómodamente lo vi a los ojos y le dije:

  • Pillín, conque tratando de sobarme mis chichis.

  • Perdóname, no fue mi intención hacerlo, lo que pasa es que creo que ya encontré la falla de esta televisión y necesitaba las pinzas para retirar la pieza que esta mal, ¿te puedo pedir un favor?, Me podrías traer el pato, ya que me anda de la pis y no creo que me de tiempo de llegar al baño.

  • Claro tío, pero con una condición.

  • ¿Cuál?

  • Que me dejes verte como orinas.

  • Esta bien, pero apúrale que ya me orino en los pantalones.

Rápidamente le fui por el pato y el nerviosamente saco su enorme pene, que en esos momentos ya lo tenia a reventar, cuando lo vi me di cuanta que no era pequeño ya que con gran erección media casi los 20 cm, y al velo me dio susto y a la vez excitación.

  • Oye tío, esa cosa es enorme, ¿apoco no le duele a mi tía cuando se la mentes?

  • Mira, al principio cuando éramos novios, empezamos a tener relaciones, pero estas eran solo reces ya que cuando me la vio, así como tu se asusto mucho, pero cuando se la metí por primera vez, le encanto ya que decía que la llenaba toda y le producía un gran placer.

  • Bueno, es que como nunca había visto una de verdad, pues pense que no eran tan grandes y gordas como la que tienes.

  • Mira hija, hay mucha gente que la tiene de tamaño estándar, pero hay otros que la tiene de gran tamaño, y pues como veras, yo soy uno de esos.

Todo esto pasó, pero yo sin quitarle la vista de ese encantador instrumento de placer, el ya se la había quitado la vergüenza y cuando comenzó a orinar pues como le pasa a todos, su pene comenzó a hacerse de tamaño normal (como quien dice flácida), el me veía y yo a el, todo sin decir ni una sola palabra.

Ese día paso y al siguiente día me decidí a provocarlo mas, ya que deseaba que me hiciera gemir como lo hacia con mi tía, ya soñaba con el entre mis piernas y dándome una gran cogida de campeonato y a la vez que me hiciera desmayar de la emoción de que el fuera el primer hombre en mi iniciación sexual.

Me levante temprano y despedí a mi tía que se iba a trabajar como de costumbre, los niños se fueron a pasar el día con la mamá de mi tía y pues como verán nos quedamos solo mi tío y yo en la casa, el se levanto a bañarse y hacer el desayuno como era su costumbre, yo solo me quede en mi bata de dormir, la cual es larga y algo semitransparente, el en la cocina haciendo sus labores, algo difíciles para el, ya que con las muletas se le dificultaba agacharse por algunas cosas que requería, y por lo tanto tuvo que llamarme para que lo hiciera yo,

  • Montserrat, por favor me podrías dar la cacerola que esta haya abajo, ya que no la puedo alcanzar, estas condenadas muletas y esta pinche operación me desesperan, ya no se a que horas me la piensan quitar estos pinches doctores, malditos matasanos.

Yo me acerque a la cocina y me agache a darle lo que él pedía, y levantándome le dije que se tranquilizara por que el hacer corajes le podría hacer mal a su herida, y de rodilla frente a él le di lo que me había pedido, el solo se me quedo viendo ya que en esa posición mi bata se abrió los primeros dos botones y casi quedo uno de mis pechos al descubierto, y sin hacer ningún movimiento solo le dije

  • ¿Quieres verlos mejor? Te los puedo mostrar si quieres.

  • Estas loca, como se te ocurren esas cosas.

  • Es que como no te mueves y no parpadeas, pues pense que te gustaría verlos al desnudo.

  • Mira chamaca latosa, será mejor que te vallas a bañar, ya que en cuanto termine de hace el desayuno me sentare a comer y no te estaré esperando.

Esto lo hizo pero sin perder ningún detalle de lo que veía, al levantarme quedo uno de mis pechos al descubierto y sin hacer ningún ademan solo le sonreí de una manera muy coqueta y dándole la espalda le dije:

Pues de lo que te pierdes, ya que de estas oportunidades no hay otras.

  • Mira será mejor que no me provoques ya que no respondo de mis actos.

Y dicho esto me di la media vuelta y lo mire a los ojos retándolo para ver si se atrevía a hacerme algo, de lo cual pedía mi limosna, al verlo me percate que en su short se le había hecho un gran bulto que me saco de mis casillas, y de tal forma que el no podía moverse muy rápido le solté un golpe que solo lo esquivo con el hombro, esto dio rienda suelta a que nos pusiéramos a jugar como siempre y él ya sacado de onda opto por apretarme un pecho, el cual me dolió mucho, y me fui para atrás doliéndome de tal apretón.

  • Té pasas, crees que no duele.

  • Perdóname no quise hacerlo, ¿te dolió mucho?.

  • Tu que crees, que no duele.

  • Déjame sobártelo, pobrecita mi niñita, que le dolió una chichi y todo por mi culpa.

De esta forma el se agasajo de uno de mis pechos, y no era el que estaba al descubierto, si no que el que estaba tapado todavía, y el muy canijo, como ya esta super excitado, pues tomo el otro pecho y lo comenzó a masajear de tal forma que me comenzó a excitar también, yo haciéndome la modosita le dije que ya era suficiente, que ya me iba al baño, el solo dijo de una forma triste, esta bien pero apúrate que se enfría el desayuno, me metí a la regadera y a pesar de que el agua estaba muy caliente (que es como me gusta) yo la sentía muy fría, mi excitación había sido tremenda y comencé a masturbarme como una loca, no calle mis gemidos y deje que salieran de la regadera para que el los escuchara con mas agrado.

Al salir del baño, con una risa en los labios me dijo, ¿baya que los disfrutaste, verdad?, y sin decir una sola palabra, solo le guiñe el ojo y me fui a la recamara de los niños a ponerme un pequeño short de mezclilla sin bikini y que en la parte de entre las piernas es muy angosto y una ombliguera sin sostén, al dirigirme a la mesa, él se me quedo viendo de una manera muy excitante que quería comerme con los ojos.

  • Ya estoy lista tío.

  • Baya que te ves muy hermosa hija, cualquiera daría cualquier cosa por tenerte en la intimidad.

  • Estas loco, no eh estado con nadie en la cama, ya que aun soy virgen.

  • Baya defecto, ¿pero con tu novio no has tenido ningún tipo de relaciones?.

  • Solo me ah tocado los pechos, pero es muy brusco y en ocasiones me lastima el muy tonto, no fue como tu me lo hiciste hace rato, ya que me gusto mucho.

  • Baya que es algo pendejo tu noviecito, no sabe como tratar a las damitas como tu.

  • Pues la verdad si tío, pero dejemos esas platicas por que hay que apurarnos para hacer la limpieza de la casa y me sigas explicando lo de la televisión, ya que me interesaría aprender mas de eso, ya que es muy chistoso y además deja dinero.

Terminamos de comer y yo me dedique a hacer la limpieza de la casa y el a su cuarto de reparación, al termino de este, me dirigí a su recamara de mi tío y en ella me puse un sostén de mi tía, pero ella es copa 38b, y cuando lo tenia puesto, le llame a mi tío para decirle que el sostén no me quedaba, él al entrar al cuarto para verme me dijo:

  • Mira nada mas, crees que cualquier cosa te queda, pero no ves como se te botan las tetas, no eres de la talla de mi esposa, mejor cuando ella regrese le comento que te compre un sostén igual a ese para que se te vea mas hermoso, ya que es de los mejores y los que mas me gustan.

Esta bien tío. Pero cuando me estaba comentando eso, yo fui quitándome el sostén frente de él, sus ojos se querían salir de las órbitas y quería comerme con ellos. Cuando me puse mi ombliguera el estaba sentado en la cama sin decir ninguna palabra, solo me veía con ojos de lobo feroz, me dirigí hacia el y como siempre me puse a jugar, primero le solté un golpe pero él como estaba sentado pudo detener el golpe con la mano y me jalo hacia él, yo como no queriendo caí sobre él e inmediatamente me dio la vuelta para quedar sobre mi, en el movimiento rápido y brusco yo abrí las piernas para que él se acomodara entre ellas, él ya no aguanto mas y me agarro las manos con fuerza y comenzó a besarme el cuello y a moverse entre mis piernas, yo trate de hacer fuerza y a decirle que se estuviera quieto, pero el no paraba de hacer esas cosas que en esos momentos me estaban excitando, no paso ni un minuto cuando con su boca mordió la ombliguera y me la levanto quedando mis pechos al descubierto, ya en esos momentos yo ya me encontraba muy excitada por la forma en que lo estaba haciendo, sus movimientos de la pelvis contra el mío eran algo bruscos pero me encanto en esos momentos por que los dos estabamos como locos, nuevamente giramos y él quedo boca arriba y yo encima de el, ahora mis movimientos de cadera los marcaba yo, y sentía como su enorme tolete iba en aumento, mis pechos se movían al ritmo de mis caderas y él trataba de mamarlos de la forma mas excitante mientras sus manos se movían por todo mi cuerpo y mis pechos, los apretaba y los masajeaba con mayor énfasis.

Yo estaba como loca y mis fluidos ya habían manchado mi short, él comenzó a desabrochar este y me decía, "esto es lo que buscabas ¿verdad? Era lo que querías, pues ya lo tienes y te lo daré, al escuchar esto, me entro una especie de vergüenza y a la ves excitación, pero me levante y me fui al cuarto de los niños, y me quede sacada de onda pensando en si ¿eso quería?, ¿Sí él era el indicado?, ¿Él que estaría pensando de mí?. Al estar pensando en todas estas cosa y aun con los pechos de fuera él entro al cuarto y viéndome en como me encontraba se acerco y me dijo:

Perdóname hija, no sabia lo que hacia, pero creo que tu también tienes la culpa ya que en estos últimos días me has estado provocando mucho, tus juegos, tus acercamientos y tu forma de vestir me traen loco, y será mejor que cambies un poco estas cosas, por mi parte are lo posible por ya no jugar mas contigo y no pensar mas en ti de otra forma mas que como lo que eres, mi sobrina la hija de mi prima.

  • Esta bien tío, y perdóname tú a mí, ya que es mi culpa lo que paso.

Me levante y quise abrasarlo, pero él me detuvo de los hombros y me dijo:

  • Por favor vístete y termina la limpieza de la casa que todavía té falta la cocina y los trastes, yo voy a ir a decirle al cliente que ya esta su televisión, que ya funciona.

Yo no dije nada mas, y una vez dicho esto él se retiro, y me quede pensando en su enorme trozo de carne dura que todavía traía. El día transcurrió como si nada, y al día siguiente mi tío fue a la casa de sus suegros a recoger a los niños, pero una ves ahí mi tía decidió quedarse ese fin de semana en casa de ellos y mi tío tuvo que regresar a la casa por que al otro día tenia que ir al hospital para que le retiraran el yeso, ya estando los dos solos en la casa me bino la idea de que ese día me entregaría a mi tío, de momento no sabia como lo iba a hacer pero ya en la noche después de cenar él se fue a su cuarto y yo al mío, ya estando en el curato me puse una bata transparente sin sostén y con un hilo dental que solo tapaba mi rajita, antes de acostarme me dirigí al baño para rasurarme mi bello pubico dejando solo un poco en mi monte de venus y ya estando bien preparada, deje pasar uno 30 minutos y comencé a quejarme muy fuertemente para llamar su atención, después de 5 minutos el apareció en el cuarto y solo traía puesto un boxer y me pregunto

  • ¿Qué té pasa?, ¿Qué tienes?

  • Me duele el estomago, ya tiene tiempo pero los dolores no se quitan, ya fui al baño y no-pasa nada y me sigue doliendo.

  • ¿Qué mas comiste en la tarde?.

  • Lo que me dejaron en el refrigerador, solo eso.

  • A lo mejor te recargaste del estomago, deja voy por unas pastillas para que te calmen el dolor y mañana vamos al doctor para ver que te recetan.

Esto lo hizo sin quitar sus ojos de mi cuerpo y mis tetas que tenia al descubierto, salió del cuarto para regresar con un vaso con agua y una pastilla que disque me quitaría el dolor que simulaba tener, yo hice que me la tomaba pero no lo hice ya que la deje en la boca y cuando él se retiro para ir a dejar el vaso a la cocina yo escondí la pastilla debajo de la almohada, cuando el regreso yo seguía con mis quejidos y el se acerco para decirme que en unos momentos se me quitaría ese dolor que me calmara, pero le dije que por favor me diera un masaje para que el dolor se me quitara y me dijo:

Esta bien, dime en donde te duele.

En el abdomen tío,

¿Aquí?.

No mas abajo.

¿Aquí?.

No tío mas abajo.

¿Aquí?.

Si tío, ahí es donde me duele, sóbame fuerte para que se me quite el dolor que tengo.

Él había llagado hasta mi pubis y le daba un masaje con un ritmo tan especial que estaba calentando de lo lindo, mis movimientos junto con los de su mano se acoplaron de tal forma que los quejidos que yo había emitido anteriormente se habían convertido en pequeños gemidos y él lo había notado y muy lentamente bajo su mano aun un poco mas que ya estaba tocando mi monte de venus, los movimientos eran cada ves mas sabrosos que hasta mi bata ya se había levantado y solo estaba el hilo dental que era lo que obstruía que sus dedos entraran en mi rajita, los gemidos ya habían aumentado que yo ya había serrado los ojos cuando los abrí nuevamente vi en su boxer un bultote de gran tamaño, él ya me veía con ojos de lujuria y yo al verlo me mordí los labios y sacaba la lengua de una forma muy sexi y erótica, él al ver esto se decidió y metió su mano debajo del hilo dental mientras que con su otra mano jalo el listón que cerraba mi bata, yo estire mi mano y saque su paquete de carne de la prisión donde se encontraba, lo comencé a bajar y subir muy lentamente, él sin decir una sola palabra me tomo de la mano y me llevo a su cama, en el transcurso del camino a su recamara me quite la bata y le ayude a quitarse el boxer, una ves en ella el se recostó boca arriba y me jalo para que me colocara encima de él, yo tome si gran verga que en esos momentos parecía que iba a explotar e hizo que quedáramos en la posición del 69, él ya desesperado rompió mi hilo dental y comenzó a lamerme muy frenéticamente, mientras yo lleve su verga a mi boca y al ver que salía de él unas gotitas cristalinas pase mi lengua por su glande para después saborearlo y luego lo comencé a chupar como si fuese un chupirul, lo metía y lo sacaba de una forma tan rica que me enloquecía, mientras tanto él me estaba dando un tratamiento especial que me hizo venir en su boca y mis jugos los bebió con tal avidez que no dejo ni una sola gota de ellos, yo no me quise quedar atrás y le chupe la verga con mayor fuerza hasta que sentí que se venia en mi boca y era muy abundante, sin sacarlo de ella trague toda su leche como si ya lo hubiera hecho antes sin dejar escapar ni una sola gota de mi boca, pero para ser la primera vez me había encantado su sabor ya que era como agridulce y me encanto tanto que seguí chupando hasta dejarlo sin una gota de lecho, pero me sorprendí al ver que su verga aun seguía paradisima como si tuviera vida propia y con las venas a reventar.

Al ver esto me levante y me acomode con mis piernas entre ella, la tome y la fui introduciendo con agrado, al principio no entraba ya que como les dije su verga es muy gorda, pero con la ayuda de él y de mis flujos fue entrando poco a poco, mientras tanto él se daba una agasajada con mis pechos que los chupaba y mamaba como si fuese un bebe recién nacido y con sus manos recorría todo mi cuerpo y apretaba mis nalgas de una forma que me enloquecía, así lo estuve cabalgando por lago rato y tuve varios orgasmos los cuales disfrutaba como loca y sentía que me iba a desmayar y fue que me llevo a un clímax total, por mi cuerpo sentía que corrían descargas eléctricas y mi cuerpo se conmocionaba como si me fuera a Morir de un infarto, y me desplome encima de él sin fuerza y sin sentido, al reaccionar él me recorría todo el cuerpo con su lengua y dándome besos y haciéndome chupetones, mi cuerpo volvió a reaccionar y a ponerse al punto, él seguía con su mástil en todo lo alto y pidiendo batalla, y me dijo que me pusiera en cuatro puntos, yo obedientemente lo hice y el comenzó a penetrarme nuevamente, lo hacia con dificultad ya que el yeso le estorbaba y permitía que metiera toda su tranca, le pedí que se parara y que yo me quedaría viendo para pinozuarez (agachada), para que la penetración fuera mas fácil para el, una ves en esta posición la cosa fue mas rica para ambos, mientras me penetraba con su vergota, con un dedo estimulaba el orificio de mi ano, esas sensaciones me enloquecieron tanto que llegue a otro orgasmo muy fácilmente, una ves ya estimulado mi esfínter con tres dedos dentro de él, me pidió me le dejara meterlo por ahí, de momento me dio miedo, pero por la excitación que tenia le dije que estaba bien pero que lo hiciera con mucho cuidado ya que no quería que me doliera y él así lo hizo, primero puso su enorme cabeza en la entrada en la entrada de mi ano ya que estaba lubricado por nuestros jugos y muy lentamente lo fue metiendo, en cierto momento me dolió y se lo hice saber y el se detuvo para que mi orificio se acostumbrara al invasor y nuevamente lo fue metiendo pero ahora con mas calma, mientras hacia esto con una de sus manos me estimulaba el clítoris y con la otra restregaba mis pechos, una ves dentro todo su instrumento él se quedo quieto hasta que me acostumbre a él, y fui yo quien comenzó los movimientos oscilatorios y el comenzó con su mete y saca, el dolor que sentí al principió se convirtió en una excitación enloquecedora que me llevo a varios orgasmos nuevamente, fue cuando sentí que empezó a eyacular dentro de mi y me sentí en la gloria, como si me encontrara en las nubes, y nos tiramos a la cama para descansar un rato.

Nos quedamos muy profundamente dormidos, yo calculo que fueron unas dos oras, y al yo abrir lo ojos me di cuenta que él tenia una de sus manos en mi pecho, pense que había hecho mal, pero me sentía muy contenta y satisfecha, me moví muy lentamente para no despertarlo y me fui a mi cuarto para no despertarlo, una ves ahí me volví a quedar dormida pero no creo que haya pasado mucho tiempo ya que me despertaron unos besos en la parte baja de mi vientre los cuales eran intensos y muy ricos, al yo abrir los ojos observe que era mi tío que me estaba dando unos sabrosos lengutasos en mi clítoris y mi cuerpo volvió a reaccionar como la primera vez, y al ver que ya estaba despierta me dijo:

  • Sabes hija, ¡creo que esto que pasamos fue muy lindo de tu parte!, Pero espero que no te haya defraudado en lo que a sexo se trata, ya que me has entregado tu virginidad y es lo más grande y valioso que me has regalado.

  • Mira tío, quiero darte las gracias a ti ya que tu me has hecho una mujer y siempre había soñado que fueras tu el primer hombre en tu vida, ya que desde el accidente que tuvimos en la casa de mamá (que esa es otra historia), me encanto tu linda verga.

  • Veo que recuerdas bien aquel accidente, y te agradezco que me hayas escogido a mi para ese propósito, pero quiero que sepas que no me gustaría perderte y seguir teniéndote de ves en cuando.

  • Siempre me tendrás cuando te haga falta tío, y espero que tu también lo estés para mí.

  • Todas las veces que me busques y me necesites estaré para lo que sea hija.

Y esa fue la mejor de las frases que él me diera, ya que lo sellamos con un beso profundo y muy cachondo, todo el resto de la madrugada y el día siguiente nos la pasamos haciendo el amor en mil formas y posiciones, solo descansábamos para comer y de regreso al sexo, en la recamara del él, en el baño, en la cocina, en la sala, en el patio de la casa (exponiéndonos a que los vecinos nos vieran), dentro de su coche, etc., fueron muchos lugares y rincones de la casa donde disfrutamos al máximo.

Era de coger y quedarse dormidos unos minutos y a seguir en lo nuestro, pero el encanto se termino casi al final del día ya que mi tía llamo por teléfono para informarle a mi tío que uno de los niños había enfermado y que la temperatura era algo alta, por lo que el se fue nuevamente a la casa de sus suegros para regresar a casa como de eso de las 4 de la madrugada son el bebe enfermo, ella inmediatamente se fue a dormir ya que se encontraba muy cansada y el se fue al cuarto conmigo para ver como iba evolucionando la enfermedad de Pablin.

CONTINUARA.