Mi tío abuelo

Y sé me pega, sintiendo algo grande, grueso, duro y muy caliente, tanto como me está poniendo a mí, pues encima no deja de comerme el cuello. Y adormilado, me dice... “No hace falta que hagas nada Mercedes, tu hombre te va a hacer hoy de todo, ¡sueña cielo que te voy a preñar... mmm!!”.

Mi tío abuelo

No soy mucho a veces de contar relaciones con familiares cercanos, pero ante las peticiones de un lector, aquí os hago saber unas experiencias a las cuales me las tomo como anécdotas, bueno comenzare...

Hace años de estos hechos, todo comenzó unas semanas antes, cuando llegas a casa después de haber regresado del instituto, encontrándome con unos familiares. Hermanos de mi madre que habían ido de visita, y cuyo cachondeo había entorno hacía mí, pues no dejaban de decirme lo mayor que hacía a algunos de ellos, sobre todo con la denominación de tío abuelo (conyugue de uno de las hermanas de mi madre).

Y entre conversación y conversación, propusieron el irnos el siguiente acueducto (acueducto para quien no lo sepa, se le suele llamar a la unión de un fin de semana con otra fiesta, un puente festivo más largo)de camping, sugiriendo ellos uno que estaba junto a la playa en Mazagón (Huelva). Pues eso, tras hacer unos los preparativos y otros encargados de realizar las gestiones, acabamos por marcharnos en dirección hacia el camping, donde en teoría habría tres tiendas de campañas, una de mis tíos que son dos por no tener niños, y otra mucho más grande, tienda que tiene dos compartimentos, uno para mis padres y la otra, para mi hermana y para mí.

Y recuerdo esos días, cuyo acueducto era con la idea de pasarlo en familia, y que, al día siguiente de llegar, acabamos por acercamos a la playa. Día que hizo un calor sofocante, haciendo un sol de justicia y que tanto mis padres, como algún que otro familiar más, les dio por tomar el sol. Acabando por coger una insolación, y para no quedar ahí la cosa, como que se quemaron también, estando toda la noche con crema y aislados.

Y esa noche, nos dispusieron de la siguiente manera, mis padres estarían en su habitáculo de la tienda, y el otro era destinado para mi hermana y mi tía, mientras mi tío y por supuesto yo, dormiríamos en su tienda. Pero imaginad el panorama, pues esa noche hizo un calor tan sofocante como el día, no muy normal la verdad, pero dentro de una tienda hace más aún. Y como algo normal me metí en mi saco con tan solo mi short, apareciendo en esos precisos momentos mi tío abuelo, persona que me informo que esa noche dormimos ambos en la tienda. Y no te extrañas porque sabes el motivo realmente, ya que las otras parecen más unos hospitales de campaña, todos son quejas por malestar.

Y recuerdo que me metí en el saco, no siendo el mío tipo capullo de gusano, sino de esos de los abiertos, mucho mejor si por el calor había que destaparse. Y vez a esa persona ciertamente fraternal, despojarse de sus prendas hasta quedarse en ‘gayumbos’, hombre que pasa de los cincuenta tacos. Alto y corpulento, persona que le da por darme conversación, a la cual apenas le echo cuenta, pues estoy desecho del día, y que con rapidez me quedo dormido.

Y no estando del todo en brazos de ‘morfeo’, escucho el ruido de cremalleras, sonido que lo asocio tanto al cierre de la tienda, pues pienso que quizás se haya acercado a ver a su mujer o a mis padres. Como que también, pienso que debido al calor que hace en el interior de la tienda, esté va a dormir sobre el mismo saco sin tener que taparse.

Cosa que finalmente a los pocos minutos, yo hago lo mismo, acto involuntario que me da por apartar la parte del saco que me cubre, no pensando en nada malo. Pero no porque esta persona sea un familiar, sino porque a pesar de estar adormilado, escucho el ruido de sus ronquidos.

Y al rato noto unos nuevos movimientos, sintiendo la presencia de un cuerpo detrás, moviéndome hacia un lado pues el calor es sofocante, y es inútil decir algo, pues si está dormido es como hablar con la pared. Y en nada, notas como te rodea con uno de sus brazos, mientras con el otro me toma de mis caderas, sintiendo sus labios muy cerca de mi oreja, y escuchar decirme...

  • “Mercedes... acércate, mira como me tienes mujer, ven...”.

Y adormilado... que no es lo mismo que dormido, pues la causa de no estar del todo es él, siento como acaricia mi espalda, mano derecha que desciende hasta mis muslos, mientras le da por lamer mi oreja y acabar por chupar el lóbulo... uuummm!!.

Continuando por besar mi cuello e ir descendiendo por mi espalda, mientras siento ese otro brazo rodeándome, brazo cuya mano acaricia mi pecho, y si me extraño que no note diferencia, pues mi tía es una mujer de mucha ‘pechonalidad’. Aunque debo creer que, debido a estar dormido no caiga en ese aspecto, pero, por otro lado, tampoco digo yo nada, ya que no estoy dormido del todo.

Y es cuando siento como introduce su mano por dentro de mi prenda interior, cuya palma ocupa perfectamente una de mis nalgas, mano que magrea a conciencia mis glúteos. Y al mismo tiempo que la otra dedea mis pezones, mientras este vuelve a comerme mi oreja y besa mi cuello... uuuffff!!. Y notar como me despoja de mi short, escuchándole volver a decirme...

  • “Uuuffff!!... Mercedes como me tienes, notas ya mi polla mujer”.

Y callo mientras se me pone la piel de gallina, siento escalofríos llevado por esas caricias y esa lengua, me estremezco y no pienso que no es el único que está caliente. Debiendo que notar mis pezones duros, pero cayo, pues mmi estado de cansancio me puede, y en mis pensamientos me digo a mi mismo que, esto es solo un sueño, o más bien una fantasía... aaahhh!!.

Y un nuevo movimiento por su parte primero, y sentir acto seguido después su verga apretarse contra mis nalgas, me hace presagiar en mis sueños como voy a acabar. Polla que siento como la desliza entre mis glúteos, diluyéndose desde la mitad de mi culo hasta traspasar mis muslos, llegando a pasar por encima de mi miembro... uuummm!!.

Sintiéndola grande de al menos veinte centímetros, gruesa, dura y muy caliente, tanto como me está poniendo a mí, pues no deja de comerme la oreja y sobre todo haciendo hincapié en el lóbulo, como mi cuello y hombro... uuuffff!!. Y escucharle murmullar...

  • “No hace falta que hagas nada Mercedes, tu hombre te va a hacer de todo, ¡sueña cielo que te voy a preñar... aaahhh!!”.

Y noto como desliza algo por entre mis glúteos, sintiendo que algún tipo de líquido espeso e incluso suave, líquido que esté con ayuda de sus dedos me introduce uno de sus grandes dedos... ooohhh!!. Y con su segundo dedo, me silencia mi boca con su otra mano, esa que cuyo brazo me rodeaba, tapándome ahora la boca... uuummm!!. Mientras me suelta...

  • “Joder... Mercedes, que estrecha estas hoy... jodida”.

Dedos que son sustituidos por su glande, ¡sintiéndolo como presiona y como me entra poco a poco... uuuffff!!, verga que me está destrozando, mientras no dejo de escuchar a esté gemir, suspirar y llamarme Mercedes. Y ese sueño o fantasía llega a su fin, cuando en nada, noto su mano posarse sobre mi morcillón miembro, mano grande que se apodera de mi verga, y que comienza a masturbarme... uuummm!!.

Y digo que llega a su fin, pues me da por mirarlo a la cara, mientras mi tío abuelo sonríe mientras me sodomiza, jadea y no deja de comerme la oreja... uuuffff!!. Y me suelta...

  • “Lo siento no he podido contenerme, estas demasiado bueno como para perder la oportunidad”.

Dice, y continua...

  • “Además toda la culpa la tiene tú tía Mercedes, ya que me ha calentado todo el día, pues su idea era cogerme por la noche, y mira tú por donde”.

Y darle por sacarla cuando más estaba disfrutando, tomarme por las caderas y colocarme a cuatro patas, sintiendo de nuevo su miembro deslizarse entre mis nalgas... uuummm!!. Deteniéndose precisamente delante de mi orificio y comenzar a presionar, sintiendo de nuevo como ese líquido espeso hace la función de lubricante... ooohhh!!.

Sobre todo cuando su glande me entra sin problema alguno, continuando empujando hasta tener al menos algo más que la mitad, y tras unos minutos inerte, comienza a moverse... ooohhh!!. Dándome una serie de embestidas brutales y secas, cuyos genitales golpean mis nalgas, y unos minutos después comenzar a correrse... ooohhh!!.

Sacándola de mi interior, cogiendo su bóxer y unas calzonas, y ver como abandona la tienda, no sin antes decirme... ‘voy al baño a enjuagarme, deberías de hacer tú lo mismo’. Pero yo estoy ahí inerte, dolorido y desecho, dándome por colocarme mi short, y sin poderlo evitar, quedarme dormido.

Y cuando desperté por la mañana, tras dar los respectivos buenos días y preguntar por los convalecientes, acabé por acercarme a los baños, donde me di una buena ducha y quitándome los restos de ese líquido espeso. Líquido que ese me dijo más tarde... ‘use lo primero que tenía a mano, no siendo otro que aceite de oliva’, suelta y me dice...

  • “Esta noche creo que vamos a repetir, hacía tiempo que no disfrutaba tanto, no veas que incluso en el baño me tuve que pajear al recordarlo”.

Y tras mirarme, vuelve a decirme...

  • “Pero sabes una cosa, he notado que esto no es nuevo para ti, me he dado cuenta que tú de virgen tenías poco, quizás seas virgen con las chicas, pero con tíos como que no”.

Y me tiene nervioso, pero esté sin dejar el tema, me vuelve a soltar...

  • “Y seguro que la ‘chupas’ de muerte, luego vamos a comprobarlo, nos vamos a perder un rato por ahí, mientras estos están a la sombra y vamos a comprobarlo”.

Y después de almorzar, mientras el resto dormían la siesta, esté me llevo hacia una zona a la cual denominaban la playa ‘rompeculos’, zona que está en dirección a Matalascaña (Huelva). Hasta que le da por detenerme, dirigiéndome hacia la zona alta, y tras mirar de un lado hacia el otro, le da por pedirme así en seco que me agache. Dice mientras veo como se baja el bañador y se saca su polla fuera, pidiéndome que se la chupe.

Dándome por colocarme en cuclillas al tiempo que tomo su miembro, llevándomela a la boca, comenzando por lamer su glande, y seguir por lamer y ensalivar su tronco hasta sus genitales... uuuffff!!. Mientras mi tío abuelo gime y suspira, no dejando de decirme lo maricona que soy, y cosas similares, bueno eso, como...

  • “No vez tu debías de haber salido chica y no chico, como la chupas cabrona, ¡que pedazo de boca que tienes... puta... aaahhh!!, sigue... sigue... uuuffff!!”.

Acabando esté por sacármela de mi boca, y pedirme que me echara sobre la arena, cosa que no estaba en la labor de llenarme de arena, y darme por aprovechar mi postura, me da por colocarme en posición de perrito o sea en cuatro patas. Colocándose mi tío abuelo detrás, tomar su polla y tras lubricarme en esta ocasión con vaselina, pues vi como venía preparado, comenzar por introducírmela y follarme... ooohhh!!. Dándole por darle en un momento dado por cogerme de mis cabellos, y comenzar a tirar de mis pelos, mientras que esté me follaba mi culo... ooohhh!!. Acabando por correrse al rato, mientras descubrimos que teníamos público, mirones que más tarde en el camping, dos de ellos me saludaron en las duchas... uuummm!!.

Pero bueno, mejor dejarlo aquí, no deseando extenderme mucho más, pues la verdad es que me dio al final para mucho más, y no es mi idea extenderme mucho más, pues luego vienen las quejas. Y bueno antes de dejaros, debo decir hacia aquellos lectores que comparte conmigo sus criticas que, acepto todas ya que me enseñan a ver mis defectos, y sabiendo de sobra que peco sobre todo del gerundio. Pero no es mi intención entrar en un intercambio dialéctico al respecto, tampoco pido que nadie se crea mis vivencias, solo las comparto, porque son tan reales como la vida misma.

No me tengo que excusar porque amo el sexo como el que más, considerándome un adicto, disfrutando en toda su plenitud y disfruto mi vida con pasión. No importándome a veces la apariencia de libertinaje que doy, pero disfrutando aún más al poder compartirlo con todos vosotros como manera de desahogo.

Así que, aquellos que me leáis esto y no me crees, pienso que es tu problema, pero pienso que la vida hay que disfrutarla y vivirla, como uno sepa mejor porque pasa muy rápido. Y lo dicho, agradecer a todos aquellos que me seguís y me leéis, deseando que os haya gustado. Si queréis saber más de mí, me lo hacéis saber a mi email es: jhosua 1974 @ Gmail . com (obviamente todo junto).