Mi Sol

Cuando llegue a la fiesta de fin de año de la empresa, el organizador me acompaño hasta mi mesa, yo había ido solo porque mi esposa estaba enferma y me insistió para que fuera, pocos minutos después llego Sol que era una de las cajeras de la compañía, ella también llego sola, le pregunte por su pareja y me dijo que había salido de viaje por lo que ella decidió venir sola.

Hicimos comentarios como que éramos unos incomprendidos por eso estábamos solos en esa fiesta, y cosas por el estilo.

En nuestra mesa se sentaron una parejita de compañeros de trabajo que habían empezado a salir hace unas semanas.

Sol le preguntaba a la pareja que tal era eso de salir con alguien del trabajo, ellos decían que era lindo porque se veían constantemente. Entonces Sol me mira, me sonríe y me dice que tal vez deberíamos probar, el comentario quedo en el aire porque justo llegaron los otros ocupantes de la mesa.

Terminamos de cenar y comenzó el baile, apenas empezó la música Sol me saco a bailar, yo no soy un gran bailarín y ni si quiera me gusta el baile pero accedí para no dejar a Sol sola en la mesa.

Bailamos un par de temas y comenzaron a poner salsa, ella que sí sabía bailar muy bien me tomo de las manos y me guió en el baile, cada vez que ella daba una vuelta sin querer o a propósito me pasaba su hermosa figura por mi cuerpo, uno no es de goma y como la enfermedad de mi esposa me tenía hace seis días en ayuna sexual mi miembro no tardo nada en ponerse duro como piedra.

Sol se dio cuenta de lo que había provocado y mirándome a los ojos me dijo:

Sol: Dari que tenemos acá (al tiempo que con su mano derecha me agarraba el miembro)

Dari: Vos sabes bien que es esto. Fue lo único que se me ocurrió contestarle.

Sol: la verdad que conozco varios de esos pero específicamente este todavía no he tenido el gusto.

La conversación se corto ahí nomás y ella me pidió que la acompañara a tomar algo. Salimos al parque donde había una barra muy completa, y pedimos nuestras bebidas, luego nos dirigimos a la parte posterior del salón donde entramos por una puerta y nos encontramos con una habitación que debía ser del casero del lugar pero que ahora estaba libre para nosotros.

Sol se sentó sobre la cama y agarro un libro, mientras se le caían los breteles del vestido negro que llevaba ella se tocaba los ya duros pezones y me miraba desafiante.

Me dijo que se había enterado que yo iba a ir a la fiesta solo y por eso le dijo a su novio que no iba a ir por eso él se había ido con unos amigos. También me dijo que desde que me conoció pensó en el polvo que nos echaríamos en estos momentos.

Ya el clima era más que ardiente y sol se dedico con devoción a sacarme la ropa y me chupo la pija como si fuera un helado me la dejo brillante y lista para el combate cuerpo a cuerpo que íbamos a tener en segundos. Antes de penetrarla le di una buena dosis de lengua en su cueva que ella agradeció dándome una gran cantidad de líquidos que yo bebí gustoso. Sol me acostó en la cama y se sentó en mi pija tragándosela toda empezó con un lento subir y bajar hasta que sincronizamos los cuerpo y se convirtió en un veloz pistón que nos llevo a los dos al orgasmo. Con mi pija en su interior Sol se dio vuelta quedando abajo mío subió sus piernas por detrás de mi espalda para mejorar la profundidad de las envestidas que le estaba dando así estuvimos un largo rato hasta que volvimos a acabar casi al unísono. Sol se puso de nuevo a chuparme la pija y yo la acomode para hacer un 69 ahí volvimos a acabar. Parecía que las fuerzas nos abandonaban pero yo no estaba dispuesto a irme sin conseguir el culo de mi acompañante que me estaba volviendo loco.

Ella se puso en cuatro patas y me dejo que le desflorara el orto. Mientras le daba por el culo con una mano le estimulaba el clítoris y con la otra me concentraba en sus ricas tetas. Así alcanzamos el cuarto orgasmo consecutivo.