Mi sobrina mayor

Una sobrina mayor

Rogaría disculpar mi falta de experiencia, esto fue real hace mucho tiempo.

En cada verano, nuestra familia procedía a veranear en la playa, los dos meses (enero y febrero) en un balneario cerca de nuestra ciudad. Cuando yo tenía aproximadamente 12 años y aun no pensaba en el sexo, puesto que aun no sentía ni siquiera excitación y aun si la sentía no sabía lo que realmente era., fuimos como de costumbre a dicho balneario. Cuando estábamos en pleno disfrute, llegó una hermanastra, con toda su familia. Dicha hermanastra era mucha mas edad que todos mis hermanos, por lo que tenia hijos ya mayores y entre los cuales estaba una sobrina mayor que yo, de 18 años, morena, de un metro sesenta y cinco, de estatura, y su cuerpo que después de ese momento me fijé, escultural, y los que nunca olvidare, sus ojos verdes preciosos.

Siempre salía con su hermano menor a la playa y solo de vez en cuando con ella, pues debía trabajar con sus padres.

Por lo cual casi siempre estaba o en su casa, hasta tarde, pues estaba muy cerca de la nuestra, por ser verano ella trajinaba con ropa muy liviana, solo una solera.

Claro que yo casi no percataba de ello, pero todo cambio esa noche

Estaba en casa escuchando música, cuando siento que mi madre me llama,

--¡Antonio!

Me acerco a la cocina y esta mi madre con ella.

--Hijo, Violeta me ha pedido si puedes acompañarla en casa esta noche, pues esta sola y le da miedo.

--¿Y Fabián?, pregunte inocentemente.

-- Fue con mis papa a la ciudad, me respondió Violeta, --pero podemos jugar los dos—acoto mientras sonreía. Lógicamente después comprendí por que sonreía así

--Bueno, respondí a mi madre.

-- Salimos los dos con rumbo a su casa.

--Dame la mano para sentirme acompañada, me dijo mientras lo hacia.

--Prende el TV, ¿Quieres bebida?, pregunto.

-- Ya, respondí

Fue a la cocina regreso con dos vasos.

-- Toma este es tuyo, pues el mió tiene un poco de licor.

-- OK.

-- Espérame un rato, voy a ponerme más cómoda, pues hace mucho calor.

-- Muuu, respondí mientras bebía un poco.

-- Un rato después esta yo viendo TV. Cuando veo que se habré la puerta del cuarto, como estaba oscuro el cuarto en el que yo estaba, me encandilo un poco, pero pude distinguir su figura a trasluz, solamente cubierta por una especie de Baby-Doll transparente.

Quede totalmente ido (Debería decir excitado, pero aun no sabia que era eso).

--¿Quieres jugar un rato antes que nos acostemos?, me pregunto dos veces, pues yo aun no salía de mi asombro, pues a medida que se acercaba, iba descubriendo mas cosas, sus pecho grandes casi totalmente expuesto bajo esa sex tela y unos pequeños calzoncitos (bragas).

--S…, si, respondí casi tartamudeando.

Como la casa, tenia solo dos piezas, en la que estaba, era comedor dormitorio, por lo que estaba ahí mismo la cama de sus padres.

--Ven, me dijo mientras también ella se colocaba encima de ella.

Yo como un autómata, me dirigí hasta ella, sin dejar de mirar todo su cuerpo.

--Quiero enseñarte un juego nuevo, me dijo mientras me colocaba a su lado.

--Pero para eso debo quitarte tu ropa, pues puedes transpirar mucho y ensuciarla.

Me empezó sacando la camisa luego los pantalones y mi ropa interior, no recuerdo si mi pequeña (en esos entonces) pija, estaba erecta, pero ella la empezó a acariciar, produciéndome un muy grata sensación. Yo recostado, ella de rodillas a mi lado, me permitía verla en todo su esplendor esos pechos maravillosos.

-- ¿Antonio?

--Si, respondí

--¿Tu has visto a los perritos cuando…, pensó un poco, cuando los perritos se hacen cariño?

--Si…, ¿pero... como? Pregunte en mi ingenuidad.

--Digo, cuando el perro monta a la perrita?

--Si, si los he visto, porque?

-- Porque me gustaría que jugáramos igual que ellos, ¿ya?, yo me pongo así, me dijo mientras se colocaba en cuatro patatitas, -- y ahora tu te colocas detrás.

Yo obedientemente me situé tras ella.

--Espera, me interrumpió,--también debo sacarme mi ropa, pues puedo transpirar mucho y se ensucia. La vi sacarse por encima su tela sexy como se movían sus pechos inmensos y luego su calzoncito, asomando entre sus piernas una abundante mata de pelos, que no permitían ver su conchita, luego volvió a ponerse en cuatro. Solo ahí logre ver sus labios hinchados y un tanto húmedos.

--Vamos, ponte detrás, me dijo mientras que con una mano me jalaba hacia ella. Sentí sus nalgas chocar contra mis caderas y mi pija se mojo un tanto, yo pensando que quizás estaba mojada por el pis.

--Muévete como lo hace el perrito, me dijo mientras retrocedía un poco para pegarse más a mí. Solo imitando a dichos animales lo empecé a hacer, cuando siento que por debajo, su mano empieza a acariciar mi pija y a pasarla por su conchita, luego de un rato de escucharla quejarse (Ahora diría, gozar), cuando de repente siento como mi pija se empieza a humedecer, pues esta entrando en su conchita. Que sensación tan agradable, pues estaba en otro mundo, en el mundo de los placeres, por primera vez.

--Muévete mas rapido, mmm…, me pidió y yo obediente lo hacia.

--¿Te gusta este juego?, Pregunto con una voz un tanto mas lánguida.

--Se siente muy rico, respondí

Luego de movernos un rato, ella me pidió que parara.

--Tiéndete boca arriba, me dijo, lego se coloco encima con sus piernas separadas. Recién pude ver su conchita escarchada y sus pelos todos húmedos. Tomo mi pija y la guió hacia su interior, volví a sentir ese calorcito húmedo en ella, se empezó a mover rítmicamente, mientras acariciaba sus pechos, yo solamente miraba toda su belleza, luego se inclino encima, quedando sus pecho a la altura de mi boca.

--Chupalos por favor, me pidió con un hilo de voz. Empecé a chupar como si fuesen chupetes, cuando ella me corrigió.

--Pásales la lengua y luego chupalos despacito, me pidió. Sentí como crecían tanto sus pezones como la aureola que los rodeaba.

--Mmmmm…, que rico, sigue así. Luego se movía con mayor rapidez que incluso mi pija se salía de repente, pero ella se encargaba de volverla a su conchita mojadísima.

De repente, sentí como empezaba a tiritar y a apretar con sus piernas las mías mientras exhalaba fuertemente por su boca.

--Haa…, haaa...,haaaaaaaaaa……., y se desplomo sobre mi por un instante, o no sabia que hacer, pero ella reaccionando se enderezo, me miro y acerco sus labios a los míos me bezo tiernamente, luego siguió besándome el cuello, mi pecho, mi estomago bajo hasta que sus labios tocaron mi pija, que no había perdido su dureza. La besaba y con su lengua empezó a limpiarla, para luego introducirla en su boca y chupar de ella, como queriendo sacar no sabia que. Luego de seguir así un rato, sentí como si me estuviese dando la corriente y un calor que me recorría desde la punta de mis pies desde mi cabeza, todas dirigidas hacia mi pija, cuando tome su cabeza, pues la sentía muy sensible.

--Me siento raro…., le dije. Ella se saco la pija de su boca y me dijo:

--Deja que te ocurra, vas a sentir rico, y volvió a chuparla con más énfasis.

--Haaa….., alcance a decir cuando dicha corriente la sentí que salía por mi pija.

Ella siguió chupando y sentía que se tragaba lo que salía de mi pija.

Ya cuando deje de sentir la corriente y mi pija se achicaba, ella la soltó.

--Te gustó?, me preguntó mientras se enderezaba.

--Si, mucho, pero que me paso?, inocentemente pregunte.

--Que ya eres un hombre.

Luego ella se coloco una camisa de dormir, me dio un tierno beso y se fue a su pieza.

Después de esa noche nunca más volvimos a hacerlo, pero después comprendí, lo que me dijo al final.

Espero les haya gustado el relato, son bellos recuerdos de mi infancia que terminaba.

Escríbanme para saber si fue de vuestro agrado.

Con cariño para C.L.