Mi sobrina Andrea
Mi sobrina viene de vacaciones a mi casa.
MI SOBRINA ANDREA
Autor: Nacho
Hola a todos:
La historia que les voy a relatar es totalmente real y me sucedió hace unos 6 años aproximadamente, hoy tengo 44 años, soy colombiano y vivo en Bogotá, soy Ingeniero. Debo aclarar que lo que sucedió no fue forzado y tampoco fue premeditado, me paso y punto. En otros relatos les había contado cómo me había culeado a mi sobrina Angélica y cómo eso despertó en mí una digamos fijación en mis sobrinas, yo nunca las había visto como las veo ahora.
Ya les había contado que yo vivo solo en mi apartamento a las afueras de la ciudad, como tengo espacio y vivo solo mi hermana que vive en otra ciudad siempre viene en época de Navidad con sus hijas, ella es separada, a pasar las fiestas, mi hermana tiene tres hijas una tiene 22 años, se llama Luisa, la que le sigue que tiene 18 años y se llama Andrea y la última que tiene 9 años y se llama Daniela. Mis sobrinas son muy lindas y son muy especiales conmigo, ya que yo siempre que viajo a donde ellas viven las saco y les llevo regalos y cuando vienen a Bogotá, pues la pasan de maravilla conmigo por que yo les hago caso en todo lo que quieren y les doy gusto en todo.
Lo que sucedió esta vez fue que yo fui a recoger a mi hermana al aeropuerto, cuando llegaron solo venían mi hermana Ana, y mis dos sobrinas pequeñas, Andrea y Daniela, por que mi otra sobrina tenía que trabajar y este año no vendría a pasar las fiestas con la familia. Cuando llegaron nos abrazamos y nos dimos los respectivos besos, yo mientras tanto recogía las maletas y las iba metiendo en el baúl de mi carro, cuando levanto la vista y veo un panorama que no me esperaba le estaba viendo el trasero a mi sobrina Andrea, se había puesto buenísima, tenía una cola paradita y se veía divina, no me había percatado de lo hermosa que se veía, tanto que lo dije:
Oye Andrea te has puesto muy linda y tienes una cola divina
Mi sobrina se puso colorada y me miró un poco pícaramente y no dijo nada solo se volteo y le pude ver su cola en todo su esplendor, ella tenía puesto un jean descaderado que le llaman y una blusita ombliguera que dejaban ver su cinturita y las formas de su cuerpo que me dejaron con la boca abierta, fuera de eso también mostraba parte de su panty. Eso me puso la cabeza a mil, mi hermana intervino y dijo:
Déjela, no la moleste más.
Pero si yo solo estoy diciendo que Andrea está muy linda y esos es todo.
En el camino hablamos de cosas familiares y nos pusimos al día de los acontecimientos normales, mi hermana no viene a Bogotá sino una vez al año y es en esa época, así que hablamos y hablamos, también le preguntaba a las niñas cómo les había ido ese año y cosas triviales, Andrea ya había termina el bachillerato y ahora entraba a la Universidad, ella está un poco adelantada, y Daniela entraba a cuarto de primaria. Llegamos a mi apartamento, subí las maletas y les dije que si querían descansar y ellas dijeron que no que tenían que salir para hacer compras de navidad, por supuesto yo las tenía que acompañar, por que si no quien iba a manejar. En el camino y sin que las niñas oyeran mi hermana me comentaba que mi sobrina Andrea andaba con un tipo mayor que ella, el tipo tenía 24 años y ella 18, eso a mi hermana no le gustó mucho, además que salía mucho por la noches a parrandear y siempre llegaba con algunos tragos en la cabeza, mi hermana estaba preocupada con eso y me decía que le hablara para que no fuera a terminar en malos pasos, a ella no le preocupaba que su hija ya hubiera hecho el amor, al fin al cabo ellas se entendían bien y de eso seguramente ya habían hablado, sino que cayera en malas compañías. Yo le dije que hablaría con ella que no se preocupara.
Llegamos al centro comercial y mi hermana se fue con la más pequeña a comprarle ropa, nos quedamos Andrea y yo y fuimos a mirar algunos almacenes, cuando pasábamos frente a una tienda de ropa interior de mujer, mi sobrina me dijo: Tío quiero comprar algunos pantys, ¿me acompañas?, mi sobrina creyó que yo me iba a cortar o me iba a dar pena, yo le dije que claro que entráramos, entramos y empezó a escoger, unos hilos dentales que son los que se usan ahora, yo le dije que no me gustaban esos, además, bromee, con esa cola tu necesitas unas pantys más grandes, mi sobrina me empujo un poco y no dijo nada, en cambio yo fui y escogí unos pantys muy lindos, de deferentes colores, se los acerqué y le dije: ¿te gustan estos?, te los regalo, mi sobrina me dijo. De verdad tío, son muy finos y caros, ¿me los regalas?, claro, dije yo, además busca los compañeros o sea los top , ella salió corriendo y al cabo llego con todo, pasamos y pague. Cuando salimos de la tienda mi sobrina me dio un abrazo y un beso en la mejilla que me cogió desprevenido y cuando voltee me plato el beso en la boca, casi, pero casi nos damos un beso con lengua y todo, note que ella estaba dispuesta, pero la contuve un poco y le dije que no se preocupara que le iban a quedar muy lindos. Nos encontramos con mi hermana y me pidió que si la llevaba donde otra hermana mía, que ella tenía que quedarse un rato allá y que luego vendría a mi casa. Andrea dijo que ella no quería ir que se quería probar sus compras lo más pronto posible, mi hermana la reprendió pero acordaron que entraba, saludaba y mañana volvía a saludar de verdad. Yo no entré, solo me quedé esperando a Andrea en el carro, cuando se subió me volvió a dar un beso en agradecimiento, le dije que no hiciera más eso, que podían pensar mal de una jovencita con un viejo, ella respondió, tu no eres ningún viejo a mi me pareces muy joven y además muy lindo, y se echo a reír.
En el camino me fue contando de sus cosas, de sus problemas y me decía que su mamá no la dejaba hacer nada, lo le decía que tenía que entenderla, que ella era todavía muy niña para andar de fiesta en fiesta por ahí, ella me respondió, mira tío ya no soy tan niña, yo se cuidarme y se que es lo que hago, entonces le dije que qué hacía andando con un hombre mayor que ella, ella me dijo, tío a mi me gustan los hombres mayores por que los de mi edad o un poco de más edad que yo son unos tontos babosos, le dije que me explicara eso, que yo no entendía como era eso que los jóvenes de la edad de ella eran unos tontos, ay tío, no quiero hablar de eso contigo pero los de mi edad no aguantan nada, toman trago y rapidísimo se emborrachan, hablan de tonterías, solo piensan en como tocarle a uno la cola o tocarle a uno las tetas, bueno eso lo hacen todos los hombres, pero de verdad tío son unas pelotas completas, yo le decía que eso era normal que a esa edad debía ser así que todo viene a su debido tiempo, mira tío la peor decepción la tuve hace como dos años andaba con un novio de 16 años yo tenía 14 y una vez empezamos a besarnos y esas cosas, un momento le dije yo, ¿a qué te refieres a esas cosas?, no te hagas el tonto tío, empezamos a tocarnos, el me tocaba mis senitos y yo le toqué su cosa por encima del pantalón y el muy imbécil se vino, no aguantó y se corrió y yo quede iniciada. Yo me reí y le dije que eso también era normal, que uno debía aprender hacer esas cosas poco a poco, me dijo, no tío esa no fue mi única experiencia, al poco tiempo tenía otro novio y de verdad lo quería e íbamos a hacer el amor por primera vez y cuando estábamos en lo mejor le pasó lo mismo, se vino y no pudimos hacer nada, me dio mucha rabia, parece que solo piensan en ellos mismos, en cambio cuando he salido con personas mayores, eso es otra cosa, yo le dije: ¿cómo así, tu ya tienes experiencia?, ella se sonrojó y me dijo, no mucha pero he aprendido cositas, ¿cositas?, qué cositas?, le pregunte, ay tío no te hagas el bobo yo se que tu haces cosas con tus amigas y yo también las hago con mis amigos o mejor con mi novio y con quien yo quiera, eso no quiere decir que yo sea una puta, simplemente que cuando pasa eso pues me gusta y listo eso es todo, además ¿qué tiene de malo que me gusten los mayores?, no, no tiene nada de malo, solamente que tu mamá se preocupa mucho por ti y no quiere que andes por ahí y que digan que tu eres una cualquiera, yo se tío, yo lo se, pero no te preocupes yo se cuidarme y se muy bien lo que hago, además tu dices que yo estoy muy bien, ¿entonces?, si mi amor tu tienes razón pero debes tener cuidado, tu estas muy linda y a cualquier hombre le gustaría hacer cosas contigo, entonces debes saber que hacer, si tío ya se eso, no te preocupes, yo se que te gustó mucho mi cola, por la forma que me miras, y también se que podría pasar algo contigo, pero no te preocupes, yo le dije, no se a qué te refieres con eso, yo soy tu tío y solo quiero lo mejor para ti mi linda, tranquilo tío yo no voy a decir nada a nadie, se que te encanta mi cuerpo y que quisieras hacerme cositas pero fresco nadie lo va saber. Yo me quedé de una pieza, la niña no es ninguna boba, simplemente le dije, mira mi linda, tu eres una niña y yo soy una persona mayor, además de ser tu tío no pienses nada malo, ¿me entiendes?, si tío, no hay nada malo. La conversación me dejo muy excitado y mi verga estaba a mil, pero debía disimular y no seguimos hablando.
Llegamos a mi apartamento y yo me puse a responder algunos mails que tenía que responder y mi sobrina fue a su habitación, estaba yo haciendo mis deberes cuando siento que me tapan los ojos y me dicen, no abras los ojos por favor solo mira como me queda lo que me compraste, cuando pude abrir los ojos mi sobrinita estaba solo en pantys y top o sostén, eran de color negro, se veía divina, su piel bronceada y su cuerpo de niña mujer espectacular, ¿cómo me queda?, me quede de una sola pieza, con la boca abierta, cierra la boca y dime ¿cómo me veo?, mi amor te ves divina, sus piernas torneadas, su monte de venus sobresalía un poco, algunos pelitos de su pubis se asomaban, ya la tenía durísima, se me había parado, sus senitos se veían divinos, estaba para modelar, le dije que estaba realmente muy bella que parecía una modelo de ropa interior, ella siguió y me desfilo un poco, se dio vuelta y pude apreciar su cola paradita, se le metía el panty en su colita y ella se medio agachaba para que pudiera ver su colita, me estaba enloqueciendo, le dije que se veía divina que debía tomarle algunas fotos, ella me dijo, ¿de verdad tío?, ¿me veo bien?, si mi reina te ves muy pero muy bien, acentúe en muy bien para que notara mi interés, le dije también que ahora comprendía el por qué sus novios no aguantaban, que con ese cuerpo a cualquiera se le escapan las babas y todo lo demás, ella reía y se daba vueltas, me miraba con ojos de fiera, me estaba provocando, yo debía contenerme, se volvió hacia mi y volvió a darme un abrazo, yo acepté el abrazo y la pude sentir, su cuerpo caliente, su piel suave y fresca, olía delicioso, tenía un aroma a mujer excitada, me estaba poniendo a mil, ella me planto un beso en la boca, yo no quería abrir mi boca y así hice, la alejé un poco y le dije que no me hiciera eso, mi linda no me hagas esto, mira que mi corazón no aguanta tantas revoluciones, lo decía bromeando, ella reía y me decía, yo se que si aguantas tíito lindo, yo se que aguantas, además soy tu sobrinita, gracias tío, volvió la espalda y me alejó, yo le miraba la cola, estaba que me la culiaba, no podía ser verdad tanta belleza, pensé, que voy a hacer, si ella sigue en ese plan, pues lo hago y punto, me dio vueltas la cabeza, era mi sobrina, tenía 18 años, tenía un cuerpecito de niña, cómo voy a se capaz, pero en fin me senté y seguí trabajando, cuando vuelvo y siento que ella viene volví a mirar y venía con un conjunto de ropa interior blanco, otra vez se veía radiante, espectacular, no iba aguantar mucho, ¿cómo me veo con este conjunto tío?, te ves divina mi amor, insistí, no me hagas esto, ella me dijo ¿cómo se ve la cola tío?, se me acercó y se volteó, su colita estaba a menos de 20 centímetros de mi mano, le acerqué mi mano y le cogí su colita, ella sintió mi mano, sentí que se sobresalto un poco y dijo, Tío ¿qué son esas cosas?, yo solo le saqué el panty que se la había metido en la cola y se lo dije, mi linda es que se te metió el panty en la colita y quería verlo mejor, ella se río otra vez, su sonrisa era picaresca, dio media vuelta y la vi de frente a unos centímetros mío, se veían su senitos muy bellos, sus aureolas eran oscuras, sus senitos eran pequeños pero preciosos, baje mi vista y vi su monte de venus, los pelitos se notaban más, estaba babeando, no aguantaba más quería tocarla, recorrerla, tocarle todos sus rincones, quería chuparla, quería comérmela, quería darle por ese culito, por esa cuquita, que rica que estaba, ella me miraba fijamente y daba vueltas como mostrándose. Me paré y fui y me serví un trago de tequila, no podía más, ella me dijo, tío ¿me das uno?, no mi amor, tu madre me mata si sabe que te doy trago, ay tío dame un trago, a mi me gusta mucho y quiero calentarme un poco, mira como tengo la piel, y si, la tenía erizada, al parecer si tenía frío, sus pezones estaban paraditos, yo le serví un trago grande y se lo pasé, se lo tomo de un sorbo, se atraganto, pero se lo tomo, se sentó en la sala y me pidió agua, se la traje y se la tomo, me dijo, que rico tío el primero siempre entra mal y se burlo un poco, se veía muy linda, así, con su conjunto de ropa interior blanca y su piel bronceada, estaba como para tomarle una foto, yo tenía mi verga ya muy parada, estaba durísima, se me notaba en el pantalón y ella se burlaba un poco, le dije, mira mi amor no hagas más esto que yo no voy a aguantar mucho, tu eres mi sobrina y no se que pueda pasar, ella no dijo nada se levantó y se fue a otra vez, yo me quedé sentado y me serví un trago bien grande, tenía que pasar este momento tan excitante, pero en le fondo no quería que terminase, prendí un cigarrillo y me quede un rato esperando, apareció otra vez, esta vez tenía puesto un conjunto semi rosado y semi trasparente, me pregunto, ¿y este como me queda?, le respondí, muy bien mi amor se te ve muy bien y te queda precioso, esta vez no me desfiló, solo se acercó y se sirvió un trago más de tequila, se agacho un poco y otra vez se le veía esa cola divina, sus piernas y su cola eran como para lamerla toda, se volteo y quedó parada al frente mío, le veía muy bien sus senitos y sus aureolas, su pezón paradito, su pubis con bastantes pelitos negros, el camino de la felicidad, pensé, mi sobrina volvió a abrazarme y darme las gracias, me dio un beso y esta vez no pude más, le di un beso prolongado, eso era lo que ella quería, con mis manos libres le cogí la cola, le recorrí su colita por encima del panty, la otra mano la metí dentro de sus panty y le toque su mata de bellos, baje más la mano y empecé a tocarle su cuquita, estaba mojada, muy mojada, recorrí su cuquita con mis dedos, ella no decía nada solo jadeaba, la senté en el sofá de la sala, no deje que dijera nada, la tenía agobiada de besos y de caricias, dejé de besarla y baje mi boca hasta sus senitos, se los chupe por encima del brasiere, se lo chupaba, se los mordía, ella solo jadeaba y respiraba aceleradamente, mi mano no había salido de su cuevita, le tenía metido un dedito, era muy estrecha, estaba muy mojada, se notaba que no había tenido mucha experiencia, solo se dejaba hacer, la acosté en el sofá y le abrí las piernas baje mi cabeza hasta su cuevita, todo por encima del panty, empece a chupar, a lamer por los bordes del panty, tuvo un orgasmo, se tensó y lanzo un gemido de mujer, gritó, que rico tío, que rico, sigue, por favor sigue, yo estaba hundido en ella, el aroma a mujer, el olor a sexo, su aroma de niña, me encantaba su sabor, un poco a orina pero muy poco, el sabor pasó a ser un sabor más placentero, seguía chupando, lamiendo, hice a un lado el panty pero no se lo quité, ella seguía jadeando y gimiendo, me tragaba todos sus jugos, se volvió a venir, sentí como un chorro que me caía en la cara, me lo trague todo, lamía como loco, no quería despegarme, le levanté las piernas y seguí lamiendo llegue hasta su colita, le pase la lengua por su hoyito negro, ella se movía como si estuviera culiando, me esta haciendo daño en el cuello, pero no quería parar, al fin ella me dijo, no más tío no más que me matas, me vas a dañar la ropa que me regalaste, no sigas que me vas a matar, por favor, yo me detuve y levanté mi cabeza, la miré, ella tenía la cara colorada, estaba roja y excitada, se le notaba que estaba como loca también, le di un beso, ella respondió me quería comer la lengua, que beso tan morboso, la seguía tocando por todos lados, le metía dos dedos en su cuquita, ella gemía como si le doliera, realmente era muy estrecha, su cuerpo no había sido usado casi nada, la quería desnuda, la quería recorrer toda, le iba a quitar el panty y ella me dijo, tío no, todavía tienes que ver dos conjuntos más, le dije, ya no quiero ver más mi amor, te quiero comer toda, tío no, me da miedo, tío no lo hagas, dejemos las cosas así por favor, le dije, no mi amor, vas aprender a tirar de verdad, ella me dijo, tío detente, detente, puede venir mi mamá, yo le respondí, tranquila mi amor si viene el portero nos avisa y nos da tiempo, no tío no sigas por favor, yo tenía una mano en sus senos y se los pellizcaba y la otra estaba en su colita, quería tocarla, me había provocado toda la tarde, ella quería que me la culiara, eso era cierto, la senté en mis piernas y la seguí besando, le pregunté, ¿Andrea de verdad has tenido mucha experiencia?, no tío no mucha, lo siento, no he tenido mucha experiencia, he tenido unos pocos rollos pero no muchos, cuéntame cuántos y cuéntame con quien mi amor, le decía mientras le seguía tocando su colita y trataba de meter un dedito, yo ya estaba dispuesto a todo, no me importaba nada, haber mi linda cuéntame cómo fue tu primera vez, cómo ha sido todo cuéntame.
Bueno tío, pero no digas nada, solo déjame que te cuente, yo seguía con mis manos dentro de ella, la primera vez fue hace como un año, estábamos en la casa de una amiga y me iba a quedar allá, no había nadie, estábamos mi amiga, su novio, yo y el mío, mi amiga se fue a un cuarto y me dejó en la sala con mi novio, ella ya tenía experiencia, mi novio y yo empezamos a besarnos y todo eso, el me ese día llevaba una faldita corta y eso facilitó todo, mi novio, me acaricio mucho y me daba besos, me empezó a tocar y yo me fui volviendo loca, hasta que el me quitó mis pantys y me la empezó a meter, fue muy rico tío, y que pasó te dolió mucho, ¿qué te hizo?, tío no seas morboso, hicimos el amor, el me puso encima de él y me la fue metiendo poco a poco, y ¿qué pasó mi amor?, pues no pudo metérmela toda por que a mí me dolía mucho pero eso no fue todo, el novio de mi amiga nos estaba viendo, yo me di cuenta, entonces yo paré y me hice la boba, mi novio se dio cuenta y me dijo que me tranquilizada que no pasaba nada y volvió a besarme y a pasarme sus manos por todos lados, yo no tenía fuerzas para detenerlo, el me metía sus dedos igual que tu, se me olvidó que el novio de mi amiga estaba mirándonos o me estaba mirando mejor, no se por que me dio mucho morbo eso, me estaban mirando y yo no decía nada, mi novio me sentó en sus piernas otra vez pero esta vez mi espalda quedó contra su pecho y él tenía las manos libres para tocarme, me hizo abrir las piernas y me acariciaba, de ahí yo veía como el novio de mi amiga me miraba y se tocaba su paquete, mi novio me la volvió a meter y parece que esta posición si pudo entrar mejor, yo sentía que la tenía en la garganta, pero fue muy rico, me vine como mil veces, el seguía metiéndola y sacándola yo no hacia nada, solamente él me subía y me bajaba, hasta que se vino y fue muy rico, lo más loco de todo es que el novio de mi amiga me miraba y me mandaba besos, eso fue muy loco.
La historia que me había contado mi sobrina me había calentado más, ya quería comérmela, la tenía en mis piernas y la seguía besando, ella me decía que no más que paráramos, que le daba mucho miedo, yo le decía que se tranquilizara, que iba a ser muy rico, que iba ser el mejor polvo de su vida, ella se dejaba tocar y besar. Me saque como pude mi verga y la senté bien encima, mi verga estaba en su colita, uy tío la siento grandísima, le dije, ¿quieres verla?, bueno esta bien, la levanté y se la mostré, uy tío eso no me va a entrar, mi amor claro que te entra, no tío, no creo, está muy grande, ¿la quieres tocar?, ella colocó sus manos en mi verga y esa sensación fue grandiosa, sus manitas me estaba agarrando mi verga, que placer más rico y más morboso, con su carita de niña traviesa, le dije, mi amor acaríciala que ella quiere entrar en tu cuevita, uy tío es muy suave, pero muy grande, ¿qué hago?, acaríciala que ella quiere tenerte, no tío mira mi cuquita, se quitó el panty y me mostró su cuquita , mi cuquita es muy pequeña. Acosté a mi sobrina en el sofá y le abrí las piernas y volví a meter mi cabeza en sus piernas, le chupé su clítoris y le metía mi lengua en su cuevita, ella jadeaba mucho, jadeaba y gemía, se puso tensa otra vez y se vino de nuevo, me trague sus jugos y le lamí toda la cuquita y las piernas que estaban muy mojadas, me levanté y la miré, tenía la mirada perdida y con ganas de más, le fui acercando mi verga a su cuevita y le metí la punta, empezó a respirar más fuerte, estaba muy estrecha, tomé sus piernas en mis hombros y la fui penetrando poco a poco, ella abría lo que más podía sus piernas, no decía nada, pero jadeaba mucho, yo le hablaba, mira ya está entrando mi reina, ya esta entrando, ella me decía, lo siento muy difícil tío, no va entrar tío, yo le decía, si entra mi amor, mira como va entrando, ella trataba de mirar, mira como entra, mi verga iba entrando poco a poco, yo trataba de no ser muy brusco, a medida que iba entrando cada centímetro, la deja descansar un poco, la sacaba otro poco y la volvía a meter, cada vez que la metía ella jadeaba más fuerte, yo la tranquilizaba, ahí va mi amor, ahí va, ella me decía, suave por favor, suave, trátame bien tío, por favor, suave, mi verga ya estaba en un 70 por ciento adentro, se la sacaba un poco y la volvía a meter, le hablaba, ves mi linda, que rico es, que rico se siente, yo sentía que mi verga estaba abriendo hueco, la sentía aprisionada, sentía una sensación increíble, me estaba culiando a mi sobrinita, que rico, ¿la moral?, para el carajo, yo no cambiaba esto por nada en el mundo, ella me decía, tío más suave, que me tienes rota, no puedo abrirme más, suave por favor, yo sentía que mi verga crecía dentro de ella, llegó la estocada final, la saqué un poco y la volví a meter con fuerza y esta vez hasta el fondo, ella gritó, ay, ay, ya, ya por favor, le dije, mi amor ya la tienes toda adentro, ¿cómo te sientes?, ella dijo, tío, me estas matando, pero se siente muy rico, me estas partiendo en dos, sigue, sigue más, ahí empece a culiarme a mi sobrina de verdad, se la sacaba y se la metía, empezó el mete y saca, tres embestidas cortas y una profunda, empezamos coger ritmo, una y otra vez, ella gemía y gemía, me gritaba, tío eres un hijueputa, te estas comiendo a tu sobrina, eres un hp, sigue tío sigue, ella tenía un orgasmo, se le nublaban los ojos y volvía, dale más tío, dale más, quiero más, volvía a tener otro orgasmo, se estaba volviendo loca, tío yo nunca había culeado así, nunca me habían hecho esto, tío que rico, quiero más tío, dale que quiero más, le dije que cambiáramos de posición, ella me decía que no quería que se la sacara, no tío no me la saques, no quiero que la saques, como pude la levante sin sacársela, la mantuve en el aire y me acose de espalda ella ahora estaba arriba mío y mi verga seguía dentro de ella, tío en esta posición siento tu verga en mi garganta, le dije, mi amor ahora te toca a ti, muévete, mueve las caderas, tío me duelen las caderas, trata de rotarlas, sube y baja mi amor, sube y baja, mueve las caderas, tío esto es muy rico, la siento toda adentro, la siento muy rica, te voy a exprimir tíito, te estoy comiendo tío, gritaba, me estoy comiendo a mi tío, estaba empezando a moverse bien, estaba cogiendo el ritmo, de pronto de vino, tuvo un orgasmo fuertísimo, trato de caerse pero se repuso, le salían lagrimas, eran lagrimas de felicidad, uy tío no quiero parar, yo ya tenía ganas de venirme, pero quería más así que me concentré y seguí, le dije que probáramos otra posición, ella me preguntó, ¿cuál tío cuál?, le dije probemos la posición del perrito, que rico tío hazme lo que quieras tu, hazme lo que se te de la gana, le dije, no me des tanta liberta mi amor, tu no sabes que quiero yo, no importa tío, no importa quiero hacerlo toda lo vida contigo, se la saque y se oyó un sonido fuerte, plop, mi verga estaba hecha un hierro, no la bajaba nadie, mi amor colócate en cuatro patas como los perros, ella me dio un beso y miró mi verga, ay tío yo pensé que no me iba a caber, la tomo en sus manos y vía que tenía algo de sangre, se asustó, tío mira sangre, me rompiste algo adentro, yo la tranquilice y le dije, no mi amor, lo que pasa es tu eres muy estrecha y seguramente rompió algunos vasos sanguíneos por ahí pero nada más, bien tío, sigamos quiero más, le puse en cuatro y me pasó por la cabeza metérselo por la cola y le dije, oye, Andrea, ¿qué tío, qué pasa?, ya te lo han metido por la cola, uy tío como se te ocurre pero, ¿pero qué?, le pregunté, no tío lo que pasa es que una vez en un bus alguien intentó hacerme algo por la cola, ¿cómo así? le pregunte, cuéntame, ay tío tu si eres muy morboso, pero está bien te voy a contar, espérate y nos tomamos un traguito le dije, fui corriendo y traje la botella, le dije, no hay tiempo de copas ni nada toma de la botella, ella tomo un trago y yo enseguida también, el mío fue largo, tenía mucha adrenalina, cuéntame, nos sentamos en el sofá mientras le acariciaba la cuquita y ella me contaba:
Un día que salí del colegio después de la práctica de basquet, venía muy cansada y decidí ponerme la falda y los pantys no más ya que mi lycra se había sudado mucho, iba muy cansada y ya eran como las seis de la tarde, pare el primer bus que venía y estaba repleto, pero estaba muy cansada y pensé que de pronto alguien me cedía el puesto, pero que va tío se acabaron los caballeros, entre por el medio de la gente y casi no podía avanzar, como en la mitad vi un huequito y me metí ahí, pero resulta que alguien empezó a apoyarse en mi, como si me empujaran, lo que estaba pasando era que algún hp se estaba refregando con mi colita, yo no quise hacer escándalo y lo deje total ya se pasaría pense, pero el muy hp creyó que yo esta feliz con eso y se atrevió a meterme la mano, yo trataba de cerrar la piernas y el me estaba tocando la cola y metía la mano por delante y me tocaba mi cosita aunque no podía tocármela bien, él trataba de abrirme las piernas pero no pudo, hasta que alguien me pisó y sin querer abrí mis piernas, el muy hp aprovechó me metió la mano, me estaban tocando mi cosita y yo no podía hacer nada, no se cómo pero el pendejo logró meterme los dedos pero aparto mi tanga, como las tangas brasileñas son muy pequeñas pues no tuvo problema, te cuento que de alguna manera eso me calentó y empece a mojarme, me estaba masturbando, y estaba rico de todas formas, de pronto es que se me acercó a mi oreja y me dijo que me quería culiar, yo no decía nada, de pronto sentí que me tocaba con su verga la cola, la empalmo entre mis nalgas y me decía, quiero ese culito, quiero ese culito, como tenía una mano en mi cuquita fue metiendo un dedo en mi cola, era la sensación más rara, pero lujuriosa que había tenido, me trataba de meter un dedo, yo no me dejaba, apretaba mis nalgas, pero en un momento siento que su verga es la que está empujando, empezó a empujar y de verdad sentí que me la había metido, eso duro como cinco minutos, el trataba de meterla y yo sentía que me esta partiendo mi colita, de pronto es que siento que se retiran y siento el frío, pasé mi mano por mi cola y siento que estaba toda chorreada se semen, yo no sabía que hacer, me toqué bien y sentía que si me había metido algo.
Andrea, que cosa te han pasado, esa historia hizo que mi verga se pusiera a mil y le dije y si yo trato mi amor, me encantaría metértelo por tu colita, tu sabes que me encanta tu cola, no tío, no por favor, no me hagas eso, sigue como estabas por favor, bueno mi amor, pero esa colita debe ser mía, la puse en cuatro patas y le pase mi lengua por todo ese culito y su rajita que estaba roja y bien abierta, me puse en posición y le la mande toda de una vez, ella solo jadeo de placer, que rico tío, que rico, empecé con el vaivén de nuevo, la entrada y la salida, sentía la acolchado de sus nalgas y eso me producía un morbo delicioso, la sacaba un segundo y se la restregaba en la cola, en el orificio del culito, ella gemía y decía, por ahí no tío, por ahí no, tío por favor, yo seguía entrando y saliendo, ella volvió a tener un orgasmo, se puso tensa y grito, sigue tío, sigue, quiero más, yo tenía en mente su culito y poco a poco en cada entrada y salida trataba de ponerlo en la entrada de su colita, hice eso como diez veces, poco a poco su colita fue cediendo y en cada oportunidad trataba de meterlo, mi sobrina decía, no tío, no lo hagas, déjalo, el morbo de la situación estaba a punto de hacerme estallar, y le dije, yo creo que ya voy a terminar, ella me pidió que no lo hiciera adentro, ella me decía que no, yo le pedía que si que me dejara, íbamos llegando al final, ella me gritaba, bueno tío vente adentro, quiero sentir que te vienes adentro, dale tío, soy toda tuya, dame lo que tengas, yo hacia las últimas embestidas y no me iba dejar llevar por la locura, si me venía adentro posiblemente la dejaba preñada y eso era lo último que quería, entraba y salía, decidí en el último momento sacarla y tratar de meterla en la cola, así lo hice, la saque y trate de meterla en su cola, pero solo entro un poquito y mi sobrina grito, no tío por ahí no, solo había entrado un poco, pero el grito fue bastante fuerte, tío no, por favor sácalo, sácalo, pero ve vine a chorros, deje que la leche corriera y sentí un poco el placer de mertersela en la cola, un poco nada mas, me acosté encima de ella a descansar, mi verga se fue reduciendo y mi sobrina se volteo y me abrazo y nos dimos unos besos especiales, habíamos entablado un lazo irrompible.
Yo no quería que se acabara, pero en esos momentos me llamaron de portería a decir que había una señora preguntando por mi, le dije al portero que la hiciera identificar y que después la hiciera seguir, eso para darnos tiempo, mi sobrina corrió a la habitación y se metió dentro de las cobijas y se hizo la dormida, y por mi parte me metí en la ducha, cuando mi hermana entró estaba furiosa con el portero, pero le dije que esa era la labor de los porteros, que se tranquilizara, que no había problema.
Mi sobrina se levantó como dos horas después, mi hermana y mi otra sobrina ya habían comido pero nosotros no, así que pedí una pizza y me dispuse a comérmela con mi sobrina, mi hermana decía que estaba cansada y que se iba acostar que mañana iba tener un día de compras y que yo debía pasear a Andrea otra vez, Andrea y yo nos miramos y nos reímos.
Esa fue la primera experiencia con mi sobrina Andrea, pero esas Navidades iban a ser inolvidables, si quieren que le cuente más, sobre mi sobrina Andrea y yo en esas Navidades, escríbanme a mi correo NACHO136204@YAHOO.COM