Mi reencuentro con el socio de mi marido
El muy cabrón me ordenaba prácticamente salir en ese momento al aeropuerto, tomar un avión y verlo, me mojé, me calenté, me encanta que me deseen así, que me dominen y me ordenen. Le llamé a mi marido y le inventé una urgencia de trabajo, no llevé equipaje, así me lo ordenaron...
Algunos comentarios:
En mi entrega anterior informaba sobre algunos problemas, estos son principalmente de tiempo, a pesar de ello he encontrado un archivo que creía perdido en donde encontré varos textos que nunca se han publicado, por el momento pubicaré estas historias
Para las personas que escriben pidiendo fotos acabo de abrir una cuenta de instagram, mi dirección es exactamente la misma que el correo, danielaacosta1816.
La presente historia es una continuación de tres realtos previos publicados hace bastante tiempo: El invitado de mi marido, El socio de mi marido y El anitrion de mi marido
Siempre creí que lo que empezó en Miami terminaría con ese viaje, a pesar de ello, un buen día día llegó a mi oficina un sobre, al abrirlo pude encontrar un boleto de avión y una nota.
- Tu vuelo sale a las 9 pm, no lleves nada, todo lo que necesitas está aquí
El muy cabrón me ordenaba prácticamente salir en ese momento al aeropuerto, tomar un avión e irlo a ver, me mojé, me calenté, me encanta que me deseen así, que me dominen y me ordenen.
Le llamé a mi marido y le inventé una urgencia de trabajo, le dije que iría rápido por una maleta, mentí, tenía instrucciones expresas de no llevar nada
Me dirigí al aeropuerto y tomé el avión, al llegar me esperaba un chofer, me llevó al estacionamiento y manejaba una limosina, la parte de atrás era privada y el chofer no tenía vista hacia ella a menos que se abriera una ventana, el chofer me entregó una bolsa, ahí encontré un vestido rojo, súper corto y entallado, además había una nota que decía “tu primer atuendo del día, póntelo en este momento”
El escote era pronunciado, entre esto y lo corto de la prenda no sé qué era más difícil de tapar si mis tetas o mi culo, gracias a lo privado del vehículo me pude cambiar sin problema, al llegar a nuestro destino, fue evidente la sorpresa del chofer al abrirme la puerta y pasar de ser una mujer ejecutiva a una vil puta callejera, sus ojos se posaron generosamente sobre mi cuerpo y yo le regalé una sonrisa en señal de agradecimiento.
Me llevó a un hotel, pero no era un hotel convencional era un hotel con temática sexual, entiendo que en México se llaman hoteles kinky, seguro la gente de ese hotel con poco se espanta, así que creo que fácilmente pensaron que era una puta que visitaba a un cliente, el solo pensarlo me puso aún más caliente
El hotel estaba padrísimo elegante y sensual, me llevaron a mi habitación, entonces me di cuenta que había reservado la suite principal, era una habitación enorme, diseñada para el sexo, parecía ideal para hacer una fiesta en ella, tenía su propia alberca pequeña con tobogán y cascada, un tubo, un potro del amor, varias camas con una cama principal redonda, regaderas con cristales transparentes y un rincón de sacrificio donde podían amarrarte.
Me quedé entonces sola en la habitación esperando instrucciones, me recosté en la cama, prendí la televisión y evidentemente estaba lleno de pornografía, apenas estaba seleccionando que ver cundo tocaron a la puerta, me entregaron entonces un paquete, adentro un vibrador enorme.
Entendí el mensaje, sintonicé unos de los canales porno y me estacioné en una escena lésbica, comencé a jugar con mi aparato y en cuestión de minutos ya lo tenía bien ensartado en mi cuquita, el primer orgasmo de los muchos que tendría en ese viaje se asomó entonces por mi cuerpo.
Creo que me dormí un rato y cerca de la media noche por fin apareció mi amante, corrí a recibirlo y sin decir palabra nos comimos a besos.
De inmediato tome su verga poderosa y me arrodillé ante ella, se la mamé con pasión y sin freno, era tanta nuestra excitación que me llevó de inmediato a la cama y me desnudó al instante
Me chupaba y me masajeaba las tetas sin piedad, mientras tanto se montó sobre mí y sin quitarse la ropa me penetró de manera salvaje, había tanta pasión contenida que el acto duró poco, corto pero bien intenso, terminamos juntos, y aún no nos habíamos dicho hola
Durante gran parte de la noche usamos una parte importante del equipamiento del hotel, terminamos rendidos.
Al día siguiente, nos despertamos tarde pedimos desayuno, y por fin conversamos un poco, me dijo que en el closet estaba todo lo que necesitaba para los días que pasaríamos juntos, como era de esperarse no había una sola indumentaria decente en ese inventario, todo era pegado, corto, escotado, transparente etc etc
Me quedaba claro que la intención era exhibirme, cosa que a mí me encantaba, nos bañamos juntos, con nuestros cuerpos mojados me encargué de mi macho, lo bañé completo, le restregué mis tetas por todo su cuerpo, le mamé la verga bien rico y cogimos nuevamente.
Después del baño, me alisté para salir, mi amante me indicó entonces que cada una de las vestimentas que usaría durante mi visita, serían seleccionadas por él, me dio un poco de miedo y mucho de morbo la decisión
Escogió entonces un pantalón un tanto holgado pero muy sexy, acompañado de un top negro muy corto y escotado, dentro del inventario de ropa creo que esto era de lo más “decente” aunque no dejaba para nada de ser muy sexy
El muy cabrón me llevó al pleno Centro Histórico de la Ciudad de México, me hizo caminar con él por algunas cuadras tomados de la mano, quienes conocen este lugar pueden dimensionar la cantidad de gente que hay y la diversidad cultural y social de la misma; a pleno día, sentía como a mi paso, medio centro histórico volteaba a verme, mi indumentaria no era nada común y menos mis tetas y mis nalgas, no sé si parecía una turista un poco despistada o una puta consumada del brazo de un cliente ejecutivo
Comimos muy rico en un restaurante tradicional, durante la comida varios besos y caricias, nos tomamos nuestro tiempo en la comida y la sobremesa, de tal suerte que al terminar de comer, nos tomamos algunas copas, como no teníamos prisa, sin notarlo mucho, se habían pasado las horas y la tarde ya expiraba, serían como las seis de la tarde y con los arrumacos y las copas yo ya estaba caliente y creo que mi acompañante también lo estaba.
Pedimos la cuenta, pagamos y al salir me toma de la cintura y disimuladamente saca los tirantes de mi tanga del pantalón y los deja a la vista de mi cintura desnuda.
Empezamos a caminar y de repente me dice que me adelante, que va a caminar unos cuantos pasos detrás de mí para verme el culo y me pide que se lo mueva generosamente al caminar.
Obedezco pero a diferencia de la primer caminata en donde iba acompañada, ahora la gente asume que camino sola por la calle, las miradas, se convierten en silbidos y múltiples piropos de todos tonos, yo caliente a mas no poder, muevo aún más caderas, creyendo que estoy cumpliendo una orden, cuando en realidad es una reacción de gusto y placer al morbo que me produce el generar todo tipo de comentarios obscenos a mi paso.
Llegamos por fin al auto y de inmediato me ordena que le mame la verga durante el camino, el tráfico del DF es muy pesado y estoy cierta que muchas personas pudieron adivinar que yo hacía un trabajo muy particular en ese automóvil
Llegamos al hotel y nuevamente nos devoramos a besos, en segundos ambos estamos desnudos y con ganas de cogernos salvajemente, en posición de misionero, acelera el ritmo y no lo baja por varios minutos, termino un par de veces en el proceso y estoy en el cielo.
- Que rico¡¡¡¡¡ delicioso¡¡¡¡ eres un rey¡¡¡
- Te gusta??
- Me encanta¡¡¡¡
- Que buenas tetas tienes puta¡¡
- A la orden papito¡¡¡
- Te gusta enseñarlas cabrona?
- Me encanta mi rey¡¡
- Di que te gusta que te vean la tetas¡¡
- Me encantan que vean las tetas cabrón¡¡
Y así me toma las tetas y las succiona a más no poder, se concentra en mi seno izquierdo, lo muerde y mientras chupa da de lengüetazos en mis pezones
Deseo que guarde energías para que me ponga en 4 patas, primero porque me encanta esa posición, segundo porque quiero que me nalguee.
Cambio de posición y me coloco como perra en celo, él se posa detrás mío y empieza otra vez la penetración, no me da descanso, este cabrón no sabe lo que es coger despacio y eso a mí me encanta, con una mano toma mi pelo y me jala y con la otra comienza a nalguearme, literalmente me monta como a una yegua desbocada, con la mano izquierda toma la rienda (mi pelo) y con la derecha me azota las nalgas para cabalgarme más rápido.
- Ohhhhhh así, así¡¡¡ dame, dame¡¡¡
No puedo más y al primer azote termino, no puedo articular palabra y solo gimo y gimo
- Ahhhhhhhhh Uffffffffff más, más ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Las envestidas no ceden y yo no dejo de terminar parece que a cada nalgada la acompaña un orgasmo.
- Que rico coges cabrón¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ te gusta mi culo??
- Mucho
- Pues es tuyo rey¡¡ hazme lo que quieras, estrújame¡¡ nalguéame¡¡ jálame el pelo¡¡ haz lo que quieras¡¡
- Que buenas nalgas tienes puta
- Son tuyas papi, porque eres un rey, un vergón que la tiene deliciosa¡¡¡ Ahhh¡¡¡ siiii¡ sii¡
- Tu marido la tiene así de grande puta?
- No cabrón; tú la tienes más grande
- Y te lo hace así de rico??
- No¡¡¡ tú lo haces delicioso corazón¡¡
- Pídeme que le te coja como no te sabe coger el pendejo de tu marido¡¡
- Cógeme como no me coge el pendejo de mi marido papi¡¡¡ Ufhhhhhh¡¡¡ Ahhhhh¡
Quedamos entonces rendidos sobre la cama, nos dormimos una rato para recuperar el aliento, al despertar me dice que me arreglé nuevamente porque vamos a salir, así lo hago, me retocó un poco y salgo desnuda a su encuentro, pregunto entonces coquetamente que ropa voy a usar y me da una tanga, un short de mezclilla muy corto, un top rosa con la palabra sexy en el pecho y unos tacones muy altos, no llevo bra y mi pezones son evidentes por la tela del top. Para completar el cuadro usos una artes en forma de esposas y arete en el ombligo con el numero 69.
Me avisa que me va a cumplir alguna fantasía que yo le había confesado en alguna ocasión, intrigada pregunto a que se refiere pero me dice que espere un poco y que será sorpresa, al poco rato me doy cuenta que me lleva un table dance, nada más al darme cuenta comienzo a mojarme
Era un lugar muy exclusivo y elegante, las chicas todas guapísimas, yo de la mano de mi macho y vestida como puta, pensé que podía tener problemas para entrar, no tanto por ser mujer sino por ser una competidora de las trabajadoras del lugar
Tomamos una mesa y estuvimos un rato platicando, viendo a las bailarinas y tomando copas, de repente algunas chicas se acercaban a platicar o a ofrecer un baile, mi amigo hasta ese momento las había rechazado.
Luego mi amante se dirige al mesero, le da algunas instrucciones y al poco rato aparece en nuestra mesa una chica que había bailado hace algunos minutos, me da la impresión que se tomó su tiempo para seleccionar a la chica que quería que nos acompañara esa noche.
Era una latina, morena casi negra, imponente, de grandes tetas, y nalgona, con cinturita, llena de curvas, su cuerpo era puro deseo, sexoso y cachondo
Nos saluda de beso a los dos y mi amigo le dice algo a la oreja, acto seguido, la chica se me acerca para a bailar de manera muy sexy.
Mi amiga se acerca a mí y me saca a bailar en plena mesa , yo ya entrada en ambiente acepto, la muy cabrona me ha dado una manoseada riquísima, me restriega sus tetas sobre las mías, me agarra el culo, me pone de espaldas y me sobas la tetas, yo la verdad es que hago mi parte, muevo las nalgas y les sujeto la manos cuando me manosea, el espectáculo es de lo mejor, al fondo solo oigo murmullos, pero yo me siento en el cielo, todo es erótico, me encanta sentir sus senos contra los míos, me encanta lo rico que huele y sentir su boca cerca de la mía.
Luego me lleva a un privado, solas ella y yo, ahí me baila un par de canciones, nos cachondeamos muy rico, jugamos con nuestras tetas y creo que no soy yo la única caliente en todo en proceso.
Regresamos a la mesa y los tres platicamos un rato y bebemos, luego decido tomar un poco la iniciativa y le pido a nuestra acompañante que le bailemos un poco a mi macho, ahí delante de todos lo hacemos, lo calentamos y me caliento al extremo, luego nos dirigimos al privado y ahí si ambas nos desnudamos, está prohibido coger y por eso no me lo violo como lo deseo, pero estoy ardiendo, necesito verga y la necesito ya.
Regresamos a la mesa, y mi amante mi dice que me tiene una nueva sorpresa/orden/fantasía que cumplir, le había confesado que un día me hubiera gustado bailar en el tubo en un lugar así, me informa que mientras me había ido al privado lo había arreglado todo para que me dejaran bailar, me sorprendo, me emociono y me excito a la vez.
Entonces escucho al locutor presentarme como una aficionada que subirá a bailar, me muero de nervios y de deseo, no dudo en hacerlo y me decido.
La experiencia fue genial, sentir las miradas, verme rodeada de hombres, estar bailando sola, con el tubo, todo el contexto fue genial, una cosa lleva a la otra y a pesar de que no estoy obligada a desnudarme, pienso en hacerlo, parece que el saber que era una chica aficionada y que se para a bailar por gusto ha animado a la audiencia y me ven con más curiosidad, me aplauden y me chiflan, me animan también a que me quite la ropa y coquetamente juego con ello, finjo quitarme alguna prenda y luego hago como que me arrepiento.
Al final la calentura es mucha y decido desnudarme, me quedo solamente en tanga, entonces llega la cereza en el pastel, un tipo se acerca a la pista con billete en mano y me pide que me acerque, así lo hago y coloca el billete en mi tanga, le doy un beso como agradecimiento y al terminar de colocar el billete me da una nalgadita, estoy ardiendo ¡¡
Termina la canción y la gente me pide otra a grito abierto, el locutor me anima a hacerlo y no batallan mucho para convencerme, ya solo con la tanga, me dispongo a hacer un show más caliente y sensual en mis movimientos, hago lo mejor que puedo y creo que el público le gusta, animados por lo ocurrido con el primer chico, al poco rato tengo filas de tipos ofreciéndome billetes, con cada uno de ellos me acerco, los beso y les saco el culo para que lo nalgueen.
Al finalizar la segunda canción estoy llena de billetes y llena de deseos sexuales que pienso satisfacer con mi macho
Regreso a la mesa solo para darme cuenta que mi amante ya ha pagado la cuenta y que estamos listos para irnos, al salir me sorprende la noticia que nuestra nueva amiga nos acompaña y se va con nosotros a seguir la fiesta.
Nos vamos los tres en la parte de adelante de auto, mientras mi macho maneja, la morena y yo nos damos una calentada y manoseada de miedo aprovechando que vamos muy juntas en el asiento delantero.
Llegamos al hotel y nuestro amigo camina con sus dos putas de cada lado tomándolas de la cintura, al llegar al cuarto todos sabemos que tenemos fantasías que cumplir y pretendemos hacerlo.
Al llegar al lobby nos pide que nos adelantemos porque quiere arreglar unas cosas en la recepción, así lo hacemos y en el elevador nos besamos delicioso, me quita el top y me mama las tetas, entramos al cuarto y entre beso y beso le pido que una vez que llegue mi macho juguemos un poco y pretendamos ser unas amigas que están seduciéndolo y compartiéndolo, por supuesto que acepta, le marco entonces a mi macho al celular y le explico la dinámica, le pido que nos de unos minutos porque queremos entonces cambiarnos de ropa
Revisamos el guardarropa y ella escogió un atuendo como de niña buena, era una blusa corta tipo top, de color celeste y con unos ángeles en el pecho, una faldita muy corta y holgada, yo escogí un vestido muy apretado de color blanco
Nos veíamos buenísimas, listas para recibir, una a su macho y la otra a su generoso cliente, (porque la noche seguro no había sido nada barata).
Por fin el cabrón llega al cuarto y nos ve vestidas de putas, no se inmuta, hubiera apostado que se le vería lujuria en sus ojos, no fue así, su reacción no denotaba emoción, eso me excitó más.
- Si?
- Queremos pedirle un favor
- A la orden
- Nos puede decir quien tiene mejores nalgas?
- No sé, necesito ver más, de entrada las dos se ven muy bien
Mi amiga se da la vuelta y me toma de la mano, las dos nos quedamos de espalda
- Ahora está mejor?
- No, agáchense
Nos agachamos y sacamos el culo
- Ya??
- Creo que no
Mi amiga me toma el vestido y lo levanta, ella hace lo mismo con su falda
- Ya?
- No puedo saber, por qué no bailan un poco?
- Ok
Y las dos comenzamos a bailar como unas auténticas profesionales, movemos el culo de manera maravillosa, yo sólo de ver a mi amiga me caliento mucho.
- Ya puede decidir?
- Creo que no, pero ya sé cómo decidir, la que me la mame mejor será la ganadora, vengan gateando y mámenme la verga
Así lo hicimos, comenzamos a gatear y a buscar su verga, él se la saca y nuestras expectativas se cumplen, su verga es una delicia, grande, muy gruesa y dura, de hombre, rápidamente llegamos a ella y comenzamos a mamarla con pasión, nos alternamos la punta y los huevos, a ratos nuestras bocas y lenguas se juntas, poco a poco tomamos un mejor ritmo y nos entendemos mejor, sacamos nuestras lenguas y juntas jugamos con su verga, nuestras lenguas se juntan, luego nos besamos teniendo la verga justo entre nuestras bocas, es delicioso, él no se inmuta, ni un solo gemido, nosotras por el contrario, empezamos a gemir como perras y a tocarnos las tetas.
Al poco rato nos ordena que nos levantemos, nos pone en cuatro patas a las dos, así nos tenía con los culos para arriba, sólo para decidir cuál de los dos tomaría, escogió el de mi amiga y a mí me nalgueaba y me ordenaba que moviera el culo y me tocara, eso hice, justo a mi lado estaba mi amiga gimiendo como zorra, la vi y nos besamos con pasión.
- Así, así¡¡, más, más¡¡, no sabes la ganas que tenía que esto pasara¡¡
El comentario me sorprende, parece que nuestra sexoservidora realmente estaba caliente por el proceso y lo está gozando, creo que ya la cogida va más allá de lo profesional o al menos lo disimula muy bien, se ve que mi amante la está atendiendo de la manera correcta o al menos eso pienso yo.
- Ya sabía que detrás de facha de puta insensible e interesada, había una puta mama vergas y caliente
- Si papacito, me encanta mamarla, te gusta mi culo?
- Si
- Tómalo, cógeme bien duro; o que no puedes?
El cabrón lo toma personal y comienza a darle durísimo, le jala el pelo con una mano y la nalguea con la otra, los golpes son secos y fuertes, no le tiene piedad, me excito mucho y me toco con más fuerza
- Eso querías perra?
- Siii
No podía hablar, apenas podía articular palabra entre lo gritos que tenía
- Ayyyyy, ayyyyyy, que rico¡¡¡
- De quien son esas nalgas?
- Tuyas¡¡
- No te oigo
- Son tuyas cabrón¡¡¡¡¡
Al parecer mi amiga termina una y otra vez, y yo también tocándome, después de un rato, le saca la verga y termina en sus nalgas, me ordena:
- Límpiale las nalgas a tu amiga, cómete mi leche
Así lo hago, sabe a hombre, me caliento mucho, me desilusiona verlo terminar sin que me la haya metido, termino de limpiar el semen y me voltea nuevamente, me pone en 4 patas, su verga sigue dura, sorpresivamente comienza mi turno, paso justo por lo mismo, nalgadas, jalones de pelo, y un mete y saca salvaje, era todo un hombre, con una potencia y una verga notables
- Ahhh, ahhhh, más¡¡¡¡
- Eres igual de puta que tu amiga
- Siii
- Y quien está más buena?
- Me vale madre, tu eres el que esta buenísimo cabrón, que rico¡¡¡¡
- Mueve el culo
Lo hago tal y como me dijo
- Voltea a verme
Volteo y pongo cara de actriz porno, me veo deseosa de verga, muerdo mis labios y veo sus ojos
- Así te gusta cabrón, te gusta cómo muevo mi culo??
- Muévelo mas¡
- Así??? Así?? Tu pide mi rey¡¡ que rico¡¡¡ que vergota tienes cabron¡¡
Mi amiga seguía tirada boca abajo recuperándose de la cogida que le habían dado, al poco rato yo corría la misma suerte, el cabrón terminó y me dejó rendida
Eso será todo por esa noche, ha sido por demás intenso, invitamos a nuestra morena a dormir, y acepta, los tres quedamos tendidos, desnudos y exhaustos por todo el ajetreo, mi macho duerme en medio de dos viejotas, nalgonas tetonas y muy putas caras a su lado, creo que a pesar del dinero que se ha gastado hemos sido un muy buena inversión.