Mi querida profesora

QUERIDA PROFESORA

Ariana era la maestra más joven del instituto, con una belleza serena, ese día entró al salón de clase iluminando todo a su paso, su cabello desprendía un destello rojo brillante, sus bien formadas piernas destacaban bajo esa falda azul ajustada a su cadera, su sonrisa brillaba en su rostro.

Iván, era un joven alumno, inquieto como muchos, inteligente como pocos, llegó tarde a clase ese día, cuando estaba cerca de la puerta, se puso una máscara para hacer reír a su maestra consentida, le falló el plan, estaba abierto, y se detuvo en seco cuando la vio allí parada junto al escritorio a lo largo de su 1,65 de estatura, recorrió con la mirada toda su figura perfecta, cuando ella volteo y le sonrió dándole el paso.

La clase se desarrollo con normalidad, la maestra se movía de un lado a otro, su andar siempre era pausado, con elegancia, fino, parecía que flotaba en lugar de caminar, Iván la seguía con la mirada de un lado a otro, pensando, imaginando, sonriendo para sus adentros.

La clase termino con el grito de desencanto cuando Ariana dejaba la tarea para la siguiente sesión, ella recogió lentamente sus cosas mientras sus alumnos la rodeaban preguntando mil y una cosas, cuando un chiflido del fondo del salón la distrajo, volteo la cara con gran coquetería para descubrir a Iván y a todos sus amigos ahí parados, no supo a ciencia cierta quién había sido, pero a todos les dejo una tarea extra.

Al salir del salón Iván la alcanzó y le dijo que si iba a ir al cine con él como lo había prometido, Ariana soltó una carcajada sonora y nerviosa, y su alumno con una mirada afirmo lo que ella sabía que iba a aceptar quedaron de verse en el otro trabajo de ella en la tarde, así se separaron cada uno para un rumbo distinto, Ari, como la conocían sus amigos, subió a su carro y arrancó el motor, cuando paso a un lado de todos sus alumnos otra orquesta de chiflidos la hizo sonrojar y despedirse con un alegre "hay niños". La tarde paso sin mayor problema conforme se acercaba la hora de que llegará su alumno, ella se ponía más nerviosa, no sabía si esperar o salir corriendo, cuando el reloj sonó con las seis de la tarde, tocaron la puerta de la oficina y ella decidió meterse al baño para no demostrar lo nerviosa que estaba, cuando salió se dio cuenta que no era su alumno y sin saber porque se sintió decepcionada, se ocupo en algo para no pensar en la posibilidad de que la dejaran plantada, había pasado cerca de media hora cuando volvieron a llamar y su compañero abrió, escucho ella desde su escritorio que preguntaban por ella misma, y dijo en son de broma "dile que ya se fue" cuando levantó la vista se topo de frente con la sonrisa enorme de Iván, iba muy bien peinado, bañado y vestido, le sonrío y le pidió que se sentara y la esperara, no iba a dejar notar su ansia por salir de allí con él.

Pasó casi media hora más, cuando por fin Ari dejo todo sobre su escritorio y le dijo a Iván que ya se fueran, el compañero de oficina de ella se pegó para que le dieran un aventón, y así salieron tres personas que pensaban mil y una cosa, el compañero de oficina de Ariana era amigo también de su novio, lo conocía desde hace mucho tiempo, y pensaba en que había hecho que Ariana citara a un alumno y saliera con el de su oficina, Iván no dejaba de ver a su profesora, desde sus ojos tiernos hasta su espectaculares piernas, que se notaban más cada vez que ella hacia cambio de velocidades, y ella sumida en pensamientos muy profundos, pensando en que iba a pasar, en las siguientes horas.

Cuando se quedaron solos, se dirigieron hacia un cine, todo parecía indicar que era una salida muy inocente, cuando llegaron escogieron el estreno del mes, Iván no se limitaba a pensar cosas, empezó a decirle que era muy bella, que era fabulosa y nunca se había imaginado en estar ahí a su lado esa noche tan estrellada, Ariana estaba nerviosa como una colegiala ante su primer cita, solo podía reírse y pedirle a Iván que guardara un poco de respeto hacia su profesora, entraron a la sala del cine, ya estaba oscuro y subieron a lo más alto, Iván poso su mano en la cintura de Ariana y le susurro "aquí está oscuro, ¿puedo abrazarte?" y sin esperar respuesta la tomo de la mano y la paso por su espalda, se sentaron en una fila que estaba vacía, y todo se oscureció, en un movimiento rápido Iván dejó toda cordura y se prendió de los labios de su amada profesora, ella se sorprendió pero acepto el beso de muy buena manera y lo correspondió, la película era romántica a más no poder, y en cada frase que decían Iván veía de lado a Ariana y le repetía cada frase al oído, sus labios se juntaban de vez en cuando y ella no podía evitar vibrar ante este acontecimiento.

Al salir de la sala, ya no importó que se notara la diferencia de edades entre ellos, Iván la tomo de la mano y la abrazo hasta el carro, iban hablando de una cosa y de otra, y sin más subieron dirigiéndose a un lugar apartado de toda vista de curiosos, el tomó el mando del carro y fueron a un hotel discreto, entraron ante la mirada curiosa de los encargados, subieron a una habitación sin despegar los labios, susurrándose palabras tiernas al oído, acariciando él sus piernas, su espalda baja y ella sintiendo recorrer una escalofrío por la espalda, cuando estaban entrando sonó el celular de ella, y contestó sin mayor problema con voz tranquila, era su novio que esa noche estaba trabajando, le hablo con la misma voz tierna de siempre, y se despidió de él, cuando colgó el teléfono, al voltear se topó de frente con Iván, quien sin perder el tiempo se prendió de sus labios y los succionó con gran avidez.

Sus manos recorrían toda la espalda de ella, como gravando cada centímetro de su piel, como si quisiera que cada pulgada guardara un tatuaje en sus dedos, la fue despojando de su ropa poco a poco, disfrutando cada momento, estudiando cada movimiento, cuando cayó al suelo por fin la ultima prenda de ella y la pudo admirar en todo su esplendor sus ojos cruzaron una mirada de complicidad todo lo demás quedo fuera de ese cuarto de hotel, sus bocas ya no eran tímidas, eran fuego puro, las manos de ella arrancaban con fuerza su camisa y su pantalón, su deseo crecía poco a poco y sus impulsos iban tomando mayor fuerza, cuando los dos quedaron al descubierto, sus manos buscaron la intimidad del otro, Iván se topó con una vagina húmeda y calientita, y Ariana encontró un pene muy bien desarrollado y en todo su esplendor, los besos cada vez iban subiendo de intensidad, Iván mordía con fuerza el labio superior de ella, haciendo que sintiera un rico dolor y un agradable calor, sus manos buscaban en la entrepierna de cada uno, Iván ya ansioso la tomo en sus brazos y la condujo a la cama, la recostó y se hincó besando sus pies subiendo poco a poco por su pantorrilla, midiendo sus perfectas piernas hasta que su lengua encontró su vagina húmeda, caliente palpitante, se sumió en esos jugos que emanaban, y el los devoraba con movimientos fuertes metía y sacaba la lengua hasta que la hizo llegar al orgasmo, una, dos, tres veces, en ese momento Iván tenía el control completo sobre su querida profesora, cuando terminó ella se levanto y le pidió que se recostara, poco a poco fue metiendo su enorme pene en la boca devolviéndole el favor, chupaba como una niña su paleta de caramelo, subía y bajaba, Iván no aguantaba ya le aviso que se correría, ella tragó hasta la última gota de ese líquido blanco que salía con tanta fuerza, cuando termino de limpiar todo se recostó a un lado de Iván y se quedaron en silencio, mirándose uno al otro.

Habían pasado cerca de diez minutos cuando la mano juguetona de Ariana empezó a acariciar de nuevo el pene de su alumno, este reaccionó de inmediato, y volvió a crecer como no se imaginaba, Ariana se monto en la cadera de Iván haciendo que la penetrara fuertemente, soltando un gemido de placer, se movía como una Diosa, hacía que cada embestida él se retorciera, que gritara, Iván solo se limitaba a gozar lo que estaba haciendo, fue así como en poco rato hizo que terminara de nuevo dentro de ella, sintió como todos los fluidos salían de su vagina llena, cayeron uno al lado del otro se besaron apasionadamente y se levantaron.

Ariana se empezó a vestir lentamente, mientras le decía que debía irse pues él tenía clase temprano al día siguiente, Iván la tomo por la cintura y beso su cuello haciendo que se estremeciera, le susurró al oído no importa esto se repetirá nuevamente. Salieron del hotel de la mano como dos jóvenes enamorados subieron al auto y se dirigieron al centro de la ciudad, Iván hablaba y hablaba para que su profesora no notara lo nervioso y ansioso que estaba, se detuvieron unas cuantas veces para besarse y continuaron su camino, llegaron a la colonia donde Iván vivía y el carro se detuvo en una esquina, le dijo que allí se quedaba él, bajó del carro, y ella salió para pasarse al lugar del conductor, antes de volver a subir él la detuvo por la cintura y le dio un largo y tierno beso, se despidió preguntando cuando se verían de nuevo, y ella solo sonrió y le dijo "te veo mañana en clase", le dio un beso y subió al auto arrancándolo de inmediato.

Al día siguiente Ariana llego temprano a su clase, Iván ya se encontraba en el salón rodeado de sus compañeros y cuando al vio llegar le sonrío como siempre, la clase transcurrió normalmente, solo ese alumno y esa maestra sabían lo que había sucedido la noche anterior, cuando terminaron Ariana recogió sus cosas con tranquilidad, y cuando salió sintió una mano en su cintura y un susurro en el oído por su espalda diciéndole "la pase increíble quiero volver a verte".