Mi primera vez sin forro

Era mi cumpleaños, estaba solo y triste. De repente, recordé aquel amigo que siempre me llama para esta fecha y que me quiere y me ama con locura. Decidí que si me llamaba suspendería cualquier actividad y me iría con él a festejar mi cumpleaños.

Mi primera vez sin preservativo

Era mi cumpleaños, estaba solo y triste. De repente, recordé aquel amigo que siempre me llama para esta fecha y que me quiere y me ama con locura. Decidí que si me llamaba suspendería cualquier actividad y me iría con él a festejar mi cumpleaños.

Efectivamente, a las 21 h. de la fecha me llamó y ni lerdo ni perezoso me invité a su casa. Él, al principio no lo podía creer, hasta que se dio cuenta que hablaba muy seriamente, entonces comenzó a apurarme con el horario de llegada. Le prometí un horario aceptable, pero él insistía en que fuera YA! Resumiendo.... llegué antes de lo que él preveía, yo estaba muy excitado y la respuesta al ingreso a su casa no se hizo esperar. Sin darnos cuenta estábamos desnudos, rodeados por sus hermosos perros de raza que nos miraban celosos(ellos duermen con él). Brindamos con un vino que había llevado y le sugerí que probablemente haría menos frío debajo de las sábanas. Lo demás es historia... empezamos a besarnos febrilmente. Él, que se llama como yo, tiene la capacidad de calentarme hasta la locura, soy capaz de llegar a orgasmos con sus besos en mi cuello(nunca nada parecido me ha sucedido con otro hombre o mujer, ya que soy bisexual), orejas, tetillas o axilas, donde se le ocurra me quita un orgasmo!!!!!!!!!! Imagínense que en este precalentamiento ya había perdido la cuenta de los orgasmos. Por otra parte cuando me ve así él también se pone loco....

Comencé lentamente a introducir un dedo en su ano(siempre se jactó de ser SÓLO activo) primero con dolor y luego con pasión. A pesar que me pedía que se lo retirara, yo me puse firme y le dije que se relajara sino irían más dedos y que hiciera fuerza como para defecar suavemente. Sin darme cuenta ya estaba como loco mientras le succionaba su pene descomunal (22x9) que me provocaba náuseas que retenía. Mi pene que es normal no aguantaba más, entonces, en su distracción y abstracción, dejé de mamarlo para ir hasta sus labios y así poner mi pelvis a la altura de su ano. En ese momento me di cuenta que no teníamos lubricantes y de repente recordé que me había contado que una cliente le había regalado miel.... Fui a ella y empecé a tocarlo con pequeñas porciones en lugares estratégicos y me guardé un poco en mi boca para un beso........negro y de lengua alternadamente.

Cuando se dio cuenta me trató de loco pero duró un instante darse cuenta que aquello era lo más. Distraído como lo tenía, comencé a introducir mi pene, mientras él estaba encima mío. Se quejó, refunfuñó un poco, lo ignoré pero esperé sus tiempos y cuando menos lo sospechó tenía toda mi carne en sus entrañas. Empezamos a movernos rítmicamente, yo estaba en el Nirvana y creo que él también. En un momento me fui incorporando sobre mi cuerpo hasta que ambos quedamos sentados, él sobre mi pija.

Gracias a mi gran elasticidad, mientras lo penetraba sentado encima mío le chupaba su enorme pija que llenaba de miel y alternaba con besos calientes en su boca..... Hasta que le dije que el verdadero placer lo tendría si se acostaba sobre sus espaldas con sus piernas en mis hombros. Titubeó un poco pero no le di tiempo. Se acostó sobre su espalda y yo sobre la mía y así bombeamos un buen rato hasta que me senté de nuevo y sin sacarla pasé mis piernas hacia atrás, las suyas sobre mis hombros y levanté su pelvis. Era alucinante como mis huevos pegaban con sus nalgas y hasta donde le entraba, mientras que mi pelvis masajeaba sus huevos y el se pajeaba blanqueando los ojos. En cuestión de un instante una fiebre convulsiva e incontrolable me corrió desde la nuca hasta el glande y exploté en una contractura rígida en la que puedo asegurar que además de mi pija le había metido un huevo entero. No podía parar, ni tampoco dejaba de llenar sus entrañas de las más calientes de las leches que jamás hubiera eyaculado, al tiempo que nos decíamos palabras dulces y tiernas. En ese momento me comentó que ESE era uno de sus sueños.... se levantó a limpiarse y del baño trajo la palma de la mano llena de mi leche. Estuve tentado de probarla pero decidí que por aquel día ya era bastante.

Luego de unos cigarrillos y otros mimos entramos en calor de nuevo y me dijo que la otra parte de su sueño era que yo me sentara sobre él. Me asusté y le dije que si estaba loco que yo también era activo como el y que no tenía práctica en el uso de la dilatación anal y menos para semejante pedazo de carne. Me miró con tanta lástima que le dije "pruebo pero no te garantizo nada". Su cabeza, solamente, me quebró en dos!!!!!! Retrocedí e hice mi mayor esfuerzo por relajarme, me coloqué mucha miel y le pedí que no se mueva. Con mínimos movimientos de vaivén(soy muy ágil) empecé a tragarme semejante trozo. En la oscuridad me pedía que me apurara, lo ignoré y como si la naturaleza hubiera obrado un milagro, en un instante ya la tenía hasta los huevos. Cómo me habré dilatado que dudó que estuviera adentro(yo mismo no lo podía creer, NO ME DOLÍA!!!!) Entonces, audazmente, me paré y me la saqué; le pregunté si se había dado cuenta que ahora estaba afuera y su silencio y azoramiento fueron su respuesta. Antes que alcanzara a tocársela me senté de nuevo esta vez de golpe, por dentro pensaba que me estaba suicidando con esta maniobra, pero para sorpresa mía también entró de una. Entonces, con semejante grado de excitación, al comprobar que mi culo se podía tragar fácilmente una pija del tamaño de un desodorante de hombres, empecé a cabalgarlo hasta que nos volvimos locos ambos y como nunca acabamos juntos; yo sin tocarme sobre su panza peluda y el en mis entrañas. Sentía que me había revuelto todo ya que no sólo subía y bajaba sino que me iba para atrás y para adelante. Su orgasmo fue silencioso, casi desapercibido, lo que me hizo dudar que me hubiera volcado adentro.

El insistió que sí y que fuera al baño a ver. Cuando me toqué no encontré nada, sólo un orificio por el que me entraba la mano y que estaba dispuesto a otra penetración más. Volví del baño con mi duda y a pesar que ambos queríamos seguir, tuve que hacer fuerzas y soltarme de él para volver a mi hogar ya que en 2 horas entraba a trabajar.

Recién a la mañana siguiente, cuando fui al baño, vi el resultado de su orgasmo..........claro.......... había quedado por lo menos 20 cm. adentro mío.

La experiencia mutua fue alucinante, ambos tenemos chequeos de VIH negativos...... pero a mí me quedó la sensación que algo que no era mío, mis intestinos habían absorbido esa noche. Es difícil de explicar la sensación. No lo siento como algo natural, como lo es la vagina donde el epitelio no absorbe el semen, pero en el colon la cosa es diferente. Es como si sintiera que mi ADN desde ese día se modificó y yo ya no soy "corporalmente" el mismo.

Los invito a que opinen y compartamos experiencias y sensaciones similares.

Los quiero y respeto mucho

Federico