Mi primera vez II

Conclusión del relato de mi primera experiencia sexual

La primera parte:

https://www.todorelatos.com/relato/164149/

Al fin, María me pregunto si quería ahora el té. Yo le dije que si y fue a prepararlo. Me encanto verla desnudita trajinando para preparar la bebida. Tenía un cuerpo muy bonito a pesar de su edad, unas tetas grandes pero no demasiado, era pequeñita, morena. Preciosa.

Se acerco a la cama con los tes y se tumbo a mi lado mientras lo bebíamos. Hablamos un rato hasta que vio que estaba ya tirando mucho a acariciarla. Me cogió la taza las dejo a un lado y girándose me dijo.

-Ahora vamos a hacer más cositas.

Se tumbo a mi lado y guio mi mano para empezar a tocar sus pechos, le pregunte si podía dirigiendo mi mano hacia su chocho, claro me dijo, y yo le pregunte, ¿con la boca? Ella se coloco y yo me tire a chupar. Como dije no tenia ninguna experiencia asi que empecé a chupar como si fuera un helado, no sabia nada.

-Alguna vez has visto una vagina en la realidad? -me pregunto

-No

-Mira, mete un dedo...

Metí un dedo y note una parte un poco mas dura casi al principio y me le pregunte si era el punto g, ella me dijo que me olvidara de eso, así que volví a lo mío, chupar como si fuera un helado.

Desde aquel día siempre me ha gustado chupar coños, aquel estaba muy bien, olía bien sabía bien, aquello era una delicia, pero no tenia ni idea, en lugar de mover la lengua y ya, movía la cabeza mogollón, a al poco rato tenia un dolor de cuello importante así que pare, me duele el cuello me excuse. ¿Me puedo poner yo ahora encima le pregunte? Ella me dijo si pero que no la aplastara y me puse encima.

Fue un error, como os dije nací con una enfermedad de corazón, en aquella época me cansaba muchísimo. Como me había dicho que no la aplastara me puse encima con los brazos completamente extendidos, como no me había fijado demasiado en los tíos en las pelis porno no clave las rodillas y ahí me tenéis follando como si estuviera haciendo flexiones. Ella me metió dentro y yo hice lo que pude, estaba muy excitado, intente apoyarme en los codos pero luego me preocupe por si la aplastaba y me incorporaba un poco, como un verraco que no puede parar, hacia lo que podía para seguir metiéndola, en seguida estaba ahogado  y ella me paro, poniéndose de lado me puso detrás y se la metió para hacer la cucharita.

Aquella hubiera sido buena postura para tocarle las tetas o el coño, pero yo ya solo quería meterla y darle todo lo que pudiera asi que ahí seguía empujando con todo. La pobre ya no sabia que hacer para que yo disfrutara pero no me asfixiara, estaba agotado jadeando pero no cejaba, ella me dijo que no hacia falta que me moviera pero yo ya no escuchaba.

Al final ella se separo, me tumbo y se puse encima, se movió un poco antes de que yo la agarrara nuevamente del culo y le diera todo lo que pude hasta correrme.

En vez de levantarse, ella se tumbo encima de mi, mi polla seguía dentro y ella recostada sobre mi. Acaricie su espalda en una sensación gloriosa, la calidez de su cuerpo contra el mio, su suave respiración mientras yo recuperaba mi aliento, estuvimos asi unos minutos maravillosos.

-¿peso mucho? – me pregunto

-no pesas nada – le conteste encantado

Asi seguimos un buen rato hasta que mi erección bajo y mi miembro ya flácido se salió de su cuerpo, aun seguimos asi un poco mas hasta que ella se levanto diciendo, me voy a dormir de lo a gusto que estoy.

Se levanto, empezó a recoger su ropa y se vistió.

-Tu quédate aquí tranquilo y disfruta del momento -me dijo, y con un beso se marcho

La velada había sido preciosa, había disfrutado me había sentido cuidado y casi querido, estaba muy a gusto. Cuando por fin me vesti y me marche me quede con una sensación de vacio. Habia sido muy buena noche, pero me faltaba algo. No iba a volver a verla, a lo mejor alguna otra vez pero ¿que? No iba a  pagarle todos los días para follar, y además también me gusto estar charlando con ella, era dulce e inteligente, simpática. Al final que iba a hacer ¿pagarle todos los días 3 o 400 € por pasar un par de horas con ella? No, necesitaba algo distinto

Me fui convencido de que necesitaba una novia y dispuesto a salir mas y buscar una chica que no me cobrara.

El hombre propone y Dios dispone.