Mi primera vez fue con una prima de mi madre.

Ella vestia solamente un camison, el cual le transparentaba todo su cuerpo. Al estar yo pegado a la nevera, ella tenia poco espacio para pasar entre la mesa de la cocina y yo. No llevaba ropa interior, y la fina prenda mostraba borrosamente la zona de su sexo, rodeada de unos muslos...

Mi primera vez fue con una prima de mi madre.

Hola, me llamo jo'se , y lo que voy a relatar esta inspirado en un suceso autentico, entre

una prima de mi madre y yo, estando esta en tramites de divorcio de su marido, (un alcoholico y maltratador , a cuya relacion decidio poner fin), aprovechando que pasaba esos malos dias en casa con nosotros.

Clara rondaba los treinta y cinco, morena, guapa, de pecho no muy exagerado, uno sesenta, delgada y con unas caderas y piernas proporcionadas, lo que le daba un aspecto un tanto discreto, pero muy femenino y deseable para cualquier observador que se preciara. Siempre estuvo muy unida a mi madre, por lo que yo estaba acostumbrado a ella desde muy pequeño.

Yo por mi parte contaba con diecinueve años, uno setenta, pelo castaño, y un cuerpo atletico

y trabajado, debido a mis sesiones de gim a las que acudia asiduamente, y mi experiencia con las mujeres se limitaban a besos y tocamientos furtivos, pero sin llegar a mas.

Teniamos una tienda de ultramarinos, en la cual ella nos echaba una mano, no disponia de vehiculo propio, y yo la llevaba a donde necesitara ir, lo cual creo' una relacion incluso mas cercana entre nosotros, ello unido a que yo ya no era un niño, la idea de llegar a algo mas con ella formaba por supuesto parte de mis fantasias mas intimas.

Yo siempre la animaba cuando ella se lamentaba por su situacion, a lo que yo le contestaba

que aun era joven y guapa, que habria muchos hombres rendidos a sus pies, respondiendome ella con un “si...pero...cuando pasas tantos años con alguien...”,negando suavemente con la cabeza, en claro signo de que lo que sucedia afectaba seriamente esa posibilidad, ya que estaba amimicamente muy afectada, lo que le daba un aspecto vulnerable que la hacia para mi mas deseable todavia.

Una noche, ya acostado, me apetecia beber un poco de agua, asi que me levante y fui a la cocina, la cual comunicaba con una zona que utilizabamos como secadero y planchado, de donde venia ella con ropa en la mano. Yo estaba en calzoncillos y camiseta, y ella vestia solamente un camison, el cual le transparentaba todo su cuerpo. Al estar yo pegado a la nevera, ella tenia poco

espacio para pasar entre la mesa de la cocina y yo. No llevaba ropa interior, y la fina prenda mostraba borrosamente la zona de su sexo, rodeada de unos muslos y un vientre color carne perfectamente definidos por debajo de la prenda, asi como unos redondos y bien formados pechos, los cuales, liberados de la incomodidad del sosten, mostraban unas aureolas sonrosadas, en cuyo centro unos botoncitos del mismo color, empujaban marcando la fina tela, desafiantes y provocadores, yo me quede tan impactado por tan maravillosa vision, que una especie de corriente me recorrio de abajo arriva, causandome sequedad en la boca y provocando una reaccion inmediata de mi pene, ella se dio perfecta cuenta de ello, asi que cubrio su sexo con ambas manos, y bajando la cabeza como sintiendose culpable de haber generado aquella situacion, continuo' hacia su habitacio'n sin dirigirme la palabra, mientras me obsequiaba con la visio'n de unas nalgas y unos bonitos muslos tambien transparentados por la delicada prenda.

Comence a reaccionar cuando la puerta de su habitacion se cerro tras ella, y como un robot, abstraido totalmente de la realidad, bebi el ahora mas necesitado vaso de agua y me diriji a mi habitacion. Dios!...pensaba yo, ya en mi cama, sin intencion de recuperarme de semejante situacion vivida, y comprobando que mi pene, compartiendo la misma idea no estaba dispuesto a dejarme dormir, acosandome con esa sensacion de calor interior, esa comezo'n en los testiculos y el glande, a la que tuve que responder con movimientos deslizantes de mi prepucio a lo largo de este, al ritmo de mi mano, atrapando los hinchados testiculos a cada movimiento, sin necesidad de mas lubricacion que la ya proporcionada por el glande devido a la tan morbosa situacion vivida minutos antes..., asta sentir finalmente como se vertia sobre mi vientre esa tan necesitada y placentera descarga. Supe entonces que la relacion con clara ya no seria la misma, al menos por mi parte, viendola ahora autenticamente deseable.

Al dia siguiente, despues de desayunar, baje a la tienda, ya que era verano y no tenia

clase. Mi madre estaba atendiendo un repa'rtidor y clara estaba arreglando una caja en una estanteria. Llevaba puesto un vestido estampado asta las rodillas muy veraniego, y al saludar yo, todos los presentes me devolvieron los buenos dias, pero Clara, ademas lo alargo con una sonrrisa, o eso me parecio.

Clara se acerco a mi..., preguntandome;

--- Oye Jo'se, podrias acercarme a mi casa a recojer unas cosas y limpiarla un poco?...

Tengo que aclarar que la casa era de ella, y que su marido tubo que marcharse devido a la denuncia

que Clara no tubo mas remedio que interponer finalmente contra el.

--- Claro... conteste yo, --- voy a buscar el coche y te recojo en cinco minutos.

Mientras andaba hacia el garage, no podia evitar pensar en la idea de pasar unas horas con ella

en aquella casa los dos solos, fantaseando de nuevo con la posibilidad de hacer realidad mi sueño.

La recoji enfrente de la tienda y conduje hacia alla' mientras la veia de reojo sentada a mi lado, tan cerca y a la vez tan lejos, con aquel vestido cuya falda marcaba sus muslos, y cuyo poco generoso escote me prohibia ahora observar mas alla de lo deseable, esos pechos redonditos, mas realzados incluso por el paso del cinto de seguridad entre ellos.

A unos tres quilometros, la casa aparecio ante nosotros despues de dar una curva y bajar una pequeña loma en una zona rural muy tranquila, asi que aparque', y ya bajando del coche, nos dirijimos al portal, y luego a la casa, a la cual Clara me indico que entrara luego de abrir la puerta.

La casa estaba decorada con gusto y sencillez, y un acogedor recibidor nos esperaba al entrar, Clara me invito a sentarme, mientras ella realizaria las tareas que nos habian llevado alli, acepte sentandome en un comodo sofa enfrente a la television, la cual Clara encendio para distraerme, en la cual estaban dando un programa de variedades de los que ocupan toda la mañana, y al cual no prestaba atencion, ya que en el interior de mi cabeza se estaban generando una mezcla de ideas, todas ellas dirijidas hacia un objetivo comu'n, que me excitaba y asustaba por igual, pero que se apoderaba cada vez mas de mi voluntad.

Oia el aspirador en la planta alta, el cual me obligaba a recordar el cuerpo de Clara una vez mas, recuerdo este, que me tenia atrapado desde la pasada noche, y ante el cual sentia la respuesta de mi pene, empujando fuertemente la fina tela de mi pantalon corto, y frenandose contra la costura de la cintura de este, molestia que me hizo ponerme en pie, dirijiendo la mirada al piso de arriva, y como si fuera levitando a ras del suelo, ya que de alguna manera ese no era yo, me diriji hacia alli, guiado por aquel complice sonido y obligado por aquella emocion que me aceleraba cada vez mas el corazon .

A medida que iva avanzando, senti que el sonido provenia de una de las habitaciones, la cual tenia la puerta entreabierta, permitiendome al acercarme, ver a Clara de espaldas a mi, sujetando el mango del aspirador, situacion que yo aproveche, para acercarme a ella, y con decision abrazarla con firmeza por la cintura y haciendole sentir toda la dureza de mi pene un poco mas arriba de sus nalgas.

Ella solto una exclamacion, soltando el mango del aspirador, al tiempo que se quedo impactada unos segundos, tiempo que yo aproveche para besarle el cuello, dejando mi cabeza apretada sobre su hombro, y mover mis brazos y manos arriva y abajo, desde sus muslos hasta justo debajo de sus pechos, sintiendo sus femeninas formas y el maravilloso tacto de su piel a traves de la fina tela de su vestido, al tempo que volvia a besarle el cuello de arriva abajo, sintiendo su aroma y el sabor de su piel en mi boca.

--- Que estas haciendo?..., pregunto mientras trataba de girar su cuerpo para encararse a mi,

a lo que yo me negaba a pesar que lo intentaba con ganas, intentando liberarse de mis brazos,

tirando de ellos agarrando mis muñecas y tratando de rotar su atrapado cuerpo, empeño este que no dio sus frutos.

Yo no queria contestarle, le estaba respondiendo con mi silencio, esperando que este actuara en ella como una declaracion de intenciones a las que tenia que ceder, continuando con mis caricias y besos en el cuello, subiendo a su cara y bajando de nuevo a su hombro, sin dejar de humedecer la zona con mi lengua.

---Para por favor!..., dejame!..., decia mientras yo sentia como su corazon se aceleraba, y la obligaba a tomar aire con mas profundidad, debido a lo cual su pecho se expandio justo cuando yo

deslize mis manos debajo de sus senos, sintiendo la forma y el peso de estos en las palmas de

mis manos. Este descuido, le permitio girarse liberandose de mi abrazo y soltarme una sonora bofetada..., devolviendome rapidamente a la realidad.

---Por que hiciste esto?..., estabas abusando de mi!...era lo que me faltaba..., con todo lo que estoy pasando...

---Se acabo!...nos vamos..., decia con decision, mientras apagaba el aspirador de un golpe seco con el pie en el boton de apagado.

---No se lo que me paso..., acerte a decir yo, --- lo siento... perdoname..., le decia cabizbajo.

Ella me miro, alli estaba yo, un niñato salido,... pensaria ella, incluso observo' mi ereccion, ya que mi pene empujaba con dureza la tela de mi pantalon corto, asi que llevando una mano a la cabeza, se lamentaba sacudiendo esta lateralmente, mirandome para luego clavar la vista en el suelo.

Yo me hacerque a ella, abrazandola suavemente esta vez.

--- Perdoname..., le decia casi al oido, al tiempo que ella apoyaba su cabeza en mi hombro,

manteniendose inmovil, gesto que yo interprete como una tenue invitacion a continuar, por lo cual comenze a frotar su espalda desde la cintura a los hombros, sintiendo como ella se relajaba, permitiendo que me pegara mas a ella para sentir totalmente sus formas femeninas, desde su bajo vientre presionado por mi pene asta los pechos, aplastados contra mi.

--- Para..., dejame..., me pedia en un tono confuso para mi, mientras yo comenzaba a soltarle los botones del vestido por detras de su cuello, dejandolo finalmente abierto a lo largo de su espalda, donde continue con mi mano deslizandola por dentro de la tela mientras torpemente pero sin brusquedad buscaba sus labios, los cuales se negaba a entreabrir cuando pose los mios sobre ellos, por lo cual le daba besos suaves y humedos asta que cedio, ofreciendole a mi lengua el interior de su boca, la cual explore jugando con sus labios, en un sensual y ferviente beso, mientras mi mano ya estaba recorriendo sus nalgas sobre su prenda mas intima.

No protesto, asi que llevando mis manos a sus hombros, deslize su vestido, aprovechando que tenia simplemente apoyados sus brazos en mis caderas, sin dejar de besarla, segui empujandolo hacia abajo, llegando a su cintura, para finalmente, gracias a su colaboracion, arrugarse en el suelo

con la unica fuerza necesaria de su propio peso. Ella tiro' de mi camiseta hacia arriba, terminando yo mismo de quitarmela y tirarla al suelo como una liberacion, mientras ella ya hurgaba con sus manos en el interior de mi pantalon corto, jugando con mis nalgas y aprovechando para empujarlo tambien hacia abajo con la unica oposicion de mi miembro erecto, que le dificulto un poco la operacion, pero que ella soluciono' tirando de el hacia delante, para..., mientras yo hacia un gesto de incomodidad, tirar de golpe hacia abajo, provocando que mi pene, con sus diecisiete centimetros pegara un latigazo al ser liberado, mientras ella, despegandose de mis labios, lo observaba, rijido y curvado hacia arriva con el glande cubierto asta la mitad por la fina piel del prepucio, con los ojos ya vidriosos debido a la excitacion.

Que maravillosa vision..., tenia ese codiciado cuerpo delante de mi, asi que mientras ella me acariciaba el pene desde los testiculos al glande, terminando de liberar este, proporcionandome unos pequeños calambres cada vez que lo frotaba con la palma de su mano, yo liberaba sus pechos de la opresion de su sujetador, sintiendo el peso y tacto de estos en las palmas de mis manos hacia arriba, girandolas luego para sujeta'ndolos por los lados y ya posiciona'ndolos entre mis indices y pulgares, poder apretarlas un poquito y ver como sus formas ahora eran perfectas para iniciar

una buena lamida de estos, sintiendo al introducirlos en mi boca esa deliciosa sensacion que causaban sus aureolas ahora mas hinchadas y suaves , y esos maravillosos y salientes pezones, los cuales combatia con mi lengua, rozandolos un poquito con los dientes, succionandolos alternativamente con autentico placer. Mientras ella no paraba de acariciarme los testiculos y el pene con las manos.

La deje caer de espaldas en la cama, de la cual tan oportunamente disponiamos, para..., todavia yo estando de pie, poder tirar con suavidad de su ultima prenda, ayudado por ella al levantar un poquito las nalgas, dejandola caer al suelo al sobrepasar por fin sus tobillos, lo que me permitio al separarle las piernas, observar su sexo en todo su esplendor, esa perfecta rajita, protegida por el interior de unos muslos entre los que yo instintivamente posicione mi cabeza, y mientras ella jugaba con mi cabello, yo comence a lamer su bajo vientre, deslizandome asta el inicio de su sexo, girando para sentir la suavidad del interior de sus muslos, el comienzo de sus nalgas, para finalmente dirijir mi boca a su zona mas intima, donde juguetee' con mi lengua y labios deslizandolos de arriva abajo, a los lados e interior de su vulva, la cual con la unica fuerza de mi lengua se abrio a mi boca para poder saborear los fluidos provenientes de su excitacion.

Ella ya forzaba mucho la respiracio'n, y tomandome por debajo de las axilas, me invitaba

a subir sobre ella, mientras con cierta urgencia me decia.

---Ven aqui..., sobre mi..., subete..., mientras me ayudaba ahora con sus manos sobre mis caderas, a posicionarme de forma que mi pene quedara a la altura de su sexo, para ya, atrapando mi pene y dandole unas ultimas caricias, lo posiciono con mi ayuda en la entrada de ese lugar tan deseado, sintiendo muy placenteramente como lo acomodaba en su entrada, momento en que ya dandolo por echo, me beso mientras apretaba y presionaba mis lumbares, a lo que yo respondi moviendo estos, empujando con suavidad, sintiendo esa deliciosa, sensible y humeda piel atrapando mi pene mientras este se abria camino ayudado por una sobrada lubricacion, abanzando hasta que mi pelvis se unio a la de ella y sintiendo como mis testiculos reposaban sobre sus nalgas.

---Siiiii..., Que bien..., sigue cariño..., con el mismo tono que empleaba siempre conmigo desde pequeño, pero que ahora tenia para los dos un sentido especial.

---Siiii...,Clara...,siii...., mientras empezaba un vaiven de mis caderas, entrando y saliendo de ella, arrancandole grititos de placer, mientras la atrapaba por la nuca con una mano y por una nalga con la otra, para asi traerla mas hacia mi para poder penetrarla mas profundamente, llegando a sentir el fondo de sexo en forma de un caricia extra en la punta de mi glande, momento en que ella dijo...

---Ayyy!..., me estas penetrando mucho!..., ten cuidado!...,a lo que yo le respondia...,

---Te siento mia...mia...,mientras seguia y seguia, admirando el gesto de su cara asi como el vaiven de sus pechos en cada uno de mis empujones.

Me pidio que rotara sobre un lado, para sin salirse, lograr situarse encima, para asi

poder controlar ella el ritmo. Yo aproveche la posicion mientras comenzaba a restregarse sobre mi vientre para jugar con sus pechos , deteniendo su vaiven , sopesandolos y en un movimiendo rapido abdominal logre alcanzarlos con mi boca, abrazandola a ella por su espalda, pero al cortarle el ritmo, me empujo el pecho con decision devolviendome a mi posicion inicial, donde yo, lejos de reprocharselo, la atrape por las caderas, baje a sus nalgas, y acaricie la suave y delicada piel del interior de sus muslos. No estaba dispuesto a estropearlo todo, asi que, como habia comprobado en multiples ocasiones al masturbarme, separando las piernas y subiendo el ritmo de la respiracion lograba retrasar la eyaculacion que ya sentia cerca, tecnica esta que me estaba dando resultado, ya que este tiempo fue crucial para que ella al poco rato comenzara a jadear y a moverse mas rapido apoyada con sus manos en mi pecho, teniendo yo que sujetarla por las nalgas para que no se me escapara en su ya loca carrera hacia el final.

---Siii..., Jo'se...,Siii..., sigue asi...,no pares..., ya entrecerrando y desorbitando los ojos,

entrecortando la respiracion, echando la cabeza hacia atras al tiempo que abriendo mas la boca solo podia exclamar un suave quejido de autentico placer, signo inequivoco de que estaba siendo sacudida por un extraordinario orgasmo.

---Voy a terminar..., me viene...,le decia yo, apretandole mas sus nalgas y sintiendo como una agradable sensacion se deslizaba por mi interior, obligandome a respirar al ritmo que esta me producia, descargandola finalmente con una ultima arremetida al arquear todo mi cuerpo e inundando el interior de su zona mas intima.

Ella descanso su cabeza sobre mi pecho, al que seguia presionando con sus manos, mientras recuperaba la respiracion, al tiempo que yo, escapando de parte de sus cabellos sobre mi cara, conseguia aire fresco ladeando mi cabeza mientras acariciaba su espalda y nalgas para seguidamente, despues de mirarnos rendidos y satisfechos, abrazarnos los dos sellando el abrazo con un profundo beso, siguiendo asi un buen rato reviviendo lo ocurrido mientras sentia que mi pene tambien rendido era suavemente expulsado de su mas intima y suave humedad.

Ella se arreglo, terminando luego las tareas que la llevaron alli en un principio, para luego dirijirnos a casa de mis padres, donde simulabamos a la perfeccion nuestra antigua relaccion, que Clara rompia de vez en cuando con un guiño complice..., a pesar que me habia dejado bien claro que lo nuestro no podia ser.

Venga!!! Criticas.... Criticas.