Mi primera vez...

No encuentro palabras para describir como mis labios, mi lengua, toda yo me sentí, al llegar a percibir su calidez, su textura, la mire a través de mi lengua, la percibí con mi alma completa, me siento plena, dueña del universo.

Ella no sale del closet y yo pues... en unos meses salí corriendo de el...

Ella es una dama jovial, yo ja! una plaga e inmadura, aunque de treinta años...

Veremos que resulta de esto... por lo pronto conocerla resulto espléndido.

Tenia unos nervios que me moría, y si yo no le gustaba? Esa pregunta no dejaba de atormentarme... yo quería llevarla a un boliche gay, y así poder seducirla abiertamente, ese era mi deseo. Al final pasamos por un bar, tomamos y comimos un poco. Yo no podía dejar de mirarla, es que tiene muchas particularidades que me dejan extasiada, sobre todo su piel, que se ve tan tersa... no puedo evitar decirlo, ni evitar comentarle lo hermosa que es, ni lo maravillosa que es su sonrisa, tan picara y tan dulce. Ella no deja de sonrojarse y a mi me encanta que lo haga. La forma en que ella habla es encantadora, también se lo hago saber y ella siempre se sonroja, y a mí siempre me encanta que así sea...

Ya no puedo evitar sumergirme en sus ojos, con una sonrisa en mi cara, que ya es permanente, aquel momento en que toco mi mano, allí sobre la mesa de aquel bar, sentí que flotaba, nunca me imagine que un gesto tan simple me llenara tanto el pecho de vida.

Le cuento del boliche y ella con esa sonrisa picarona acepta y mientras caminábamos por la calle, entre la gente, yo no podía evitar rozarla como al pasar, y en cada contacto mi cuerpo se acaloraba cada vez mas, al rato ella cogió el jueguito y al cruzar la calle me toma por la espalda, su mano solo se detuvo en la mitad de mi espalda y bajo lento, muy lento, eso convirtió a mi cuerpo en un volcán ya a punto de erupción...

Una vez dentro del boliche yo, lentamente fui haciendo que mis descuidados roces se tornaran caricias las que poco a poco fueron mas atrevidas, pase de acariciar su brazo a acariciar su hombro, luego su cuello, su nuca, espalda, zona alta del pecho... mientras pensaba que si su piel se sentía tan suave por esos lugares... como no seria debajo de su ropa... Ella solo cerraba sus ojos y se dejaba hacer... tan hermosa como era. Y yo me deleitaba observando disfrutar aquello.

Mientras tomábamos un par de tragos y por la música, yo le hablaba al oído y al ella tener su pelo recogido en un moño improvisado, dejaba su espléndido cuello a mi vista. Ya procuraba yo al hablarle, estremecer su piel en aquella zona tan deseada por mil, y rozarle la oreja al descuido con movimientos lentos y suaves... al fin no resistí y sin poder evitarlo me acerco a ella como para hablar y le beso en la unión del cuello con el hombro... me separo con picardía y ella se acerca y me da un beso en la boca, el que acepto complacida, mis fantasías se tornaban reales... ya al rato y luego de otros besos tan maravillosos como el primero nos retiramos del lugar, y al dirigirnos a la puerta, sin poder evitarlo, toque su cola, la que me reto a hacerlo toda la noche, ella se dio la vuelta y sonrió... yo estaba en las nubes!!!

Ya en mi casa nos bañamos, yo súper nerviosa y sin saber que hacer la dejo ir a ella primero, con la esperanza de que me invite a acompañarla, pero no es así... espero pacientemente en mi cuarto y cuando regresa lo hace solo con la toalla mostrando sus hombros y espalda de seda... me voy a bañar suspirando y esperando que me siga jiji… pero no es así. Al llegar al dormitorio la encuentro a ella esplendida sobre la cama, me anima a subir ya que me quedo petrificada mirándola, es tan sensual, ella sabe que es mi primera vez.

Por fin podía acariciar su piel, más suave de lo que podía imaginar alguna vez, me tenía embelezada, no dejaba de sentirla...

Sus suspiros al besarla en su cuello me estremecieron, y seguí besando y sintiendo su piel hacia abajo, sus pechos, a los que no pude resistir, eran poseedores de la suavidad extrema, y en consecuencia los trate dulcemente, tratando de trasmitir aquello que me inspiraban, la ternura que su suavidad provocaba en mí, mientras escuchaba sus gemidos. Sin querer abandonarlos pero necesitando continuar, sigo bajando y besando esa piel maravillosa, la acaricio con mis manos, éstas no pueden dejar de sentirse extasiadas inmersas en tanta suavidad, ellas bajan mas rápido que mi boca y acarician al pasar sus labios, su entrepierna, sus labios otra vez, y sus gemidos se tornan en gritos que exigen profundizar mis caricias, mis manos acarician a lo largo su intimidad sintiendo su humedad y no lo resisto, llevo a mi boca mis dedos con sus jugos y son fabulosos. Mis labios se encuentran besando y acariciando el interior de sus piernas, escalando beso a beso para llegar al encuentro de su sexo que me espera palpitante. No encuentro palabras para describir como mis labios, mi lengua, toda yo me sentí, al llegar a percibir su calidez, su textura, la mire a través de mi lengua, la percibí con mi alma completa, me siento plena, dueña del universo.

Mis labios y mi lengua no dejan rincón sin reconocer, sin disfrutar, mientras ella continua emanando esos maravillosos líquidos que me alientan a continuar mi labor, mas tarde, sin querer abandonar aquello pero necesitando besarla me acerco a su boca y beso esos labios apasionados, mientras mi mano continua acariciando su sexo, mi dedo explora y casi sin querer entra en ella, mientras continuo disfrutando de su pecho que continua tan suave como siempre pero infinitamente mas apasionado, otro dedo entra con facilidad y por su posición mi pulgar de tanto en tanto roza su clítoris, veo que eso le va muy bien y procuro que ese bendito pulgar acaricie su clítoris mientras mis dedos entran y salen de su interior, cuando entran la acaricio por dentro moviéndolos, girándolos, y sus reacciones de placer confirman que voy bien sus líquidos aumentan notablemente eso provoca la proximidad de mi orgasmo, es que su placer es la fuente del mío y ya no puedo parar de lamerle su pezón mientras mi mano entra y sale, mi pulgar acaricia en cada embestida a su clítoris y de repente aquel maravilloso espasmo aprisiona a mi mano mientras un grito se escapa de su boca y sus líquidos sin control fluyen, en consecuencia mis espasmos anuncian mi propio orgasmo, mi espalda se arquea y de mi boca se escapa un profundo gemido... Cuando el mundo esta regresando a existir para mis sentidos... escucho su voz jadeante expresar incredulidad por lo acontecido conmigo... yo, solo puedo sonreír y besarla.

Me hubiese gustado continuar con aquello pero esas copas de mas y los dos días que tenia sin dormir no me lo permitieron, a la mañana siguiente luego de la ducha regreso a la cama y luego de una pequeña charla ella lleva mi mano a su sexo, el cual estaba inundado, no lo podía creer, sin perder ni un segundo mas me dedique a mimarlo con dedicación, esa mañana ella estaba súper radiante, mas que anoche si se puede... con ella arriba montamos un 69, que belleza este es mi lugar pensé, como disfrutaba de aquello, ya mas despejadita que anoche, sin alcohol ni cansancio pude sentirla mejor, en sus movimientos, en cuando le agradaba mas, sus jugos que se hacían mas notables beso a beso, mi lengua que no paraba de moverse y ella que me alentaba verbalmente a ello. Noto como a ella le gusta que la presione de tal forma que mi mentón se aloja en su entrada mientras mi lengua y mis labios abarcan su clítoris acompañado de un movimiento de cabeza circular, yo misma estaba disfrutando esto como nunca en la vida. Con una velocidad inesperada siento sus jugos abalanzarse y sus gritos ya son notables y continuo con mi labor disfrutando aquello a mas no poder, ella de inmediato gritaba cada vez mas, yo en mi inexperiencia temía estar lastimándola y de repente... no encuentro palabras para describir mi estado al sentir la maravillosa reacción de su intimidad... que fue aquello tan maravilloso? sus jugos brotaban exquisitos, ese beso apasionado que su intimidad me regalo, esa energía liberada que sentí me penetraba y llegaba a lo mas profundo de mi ser... soy tan feliz!!!

Interlina

Valeria.