Mi primera vez en el aseo del centro comercial

Ya aceptada mi bisexualidad y que me encanta estar con tios y disfrutar de su vergas empece a cogerle vicio al tema.

Tras varios meses sin chupar una buena verga, bien dura, y con unas ganas terribles, puse un anuncio en una pagina y contacte con un turista que venia a la ciudad a pasar aquí unos días de verano.

Quería que le chupara la verga hasta el final y hacerme tragar toda la lefada, ya que su mujer no lo hace y le encanta ver como la tragan. Como yo no tengo sitio y el tenía difícil conseguir uno, me propuso hacerlo en el servicio de un aseo comercial.

Me daba un poco de corte el tema, pero como estaba deseoso de tener una polla bien dura en mi boca acepte.Fuimos a un centro comercial cerca de mi zona de trabajo, al terminar mi jornada de mañana. Le dije como iría vestido y quedamos en encontrarnos "lavándonos" las manos en el aseo de la segunda planta, que tiene menos concurrencia. Allí estuve como unos 3 minutos, bastante inquieto, y cuando alguien entraba fingía lavarme las manos o secarmelas. Tras 2 personas, entro un tío normal, vestido con vaqueros y me dijo, "tu eres Jose, la mamona?". Le dije que si.

Entro, haciéndome una seña con el dedo, en el aseo reservado a minusvalidos, pues es mas amplio y tiene un lavadero propio. Al entrar yo cerré la puerta con pestillo, apenas  puse el pestillo, se bajo los pantalones y me dijo "Desnudate y ponte de rodillas".

Así lo hice, y empece chupándole los huevos y manoseando su verga, que en seguida paso de morcillona a dura. Me empujo la cabeza con la mano a lo que respondí descapullandosela y empezando a mamársela. Era no muy larga pero bastante gordita, con mis labios mamaba arriba y abajo manteniendo su piel y capullo tirante y con mi lengua lamia su capullo por arriba y por abajo, a la vez que succionaba para darle mas placer. En unos minutos su verga se puso dura como el acero y yo notaba el sabor de los líquidos que salían de ella antes de la corrida, que se mezclaban con mi saliva, genero bastante cuando la chupo y me excito, y por eso me caía un hilo que goteaba hasta sus huevos.

Empezó ese duro miembro, a palpitar con vida propia y a la vez subi mi mirada a su cara, empezó a correrse y sentí los chorros de  su caliente y viscoso semen golpear con fuerza contra el fondo de mi boca, cosa que me produjo un inmenso placer.

El sujeto con fuerza mi cabeza para que su polla permaneciera bien dentro y dijo "traga puta traga todo". En ese momento siempre un cierto asco se apodera de mi y me cuesta tragar la corrida, pero con esfuerzo y ganas de complacerle viendo el gusto que le producía saber que iba a tragarla y que no iba a soltarme la cabeza, lo hice. Trague todo su lefada, espesa y caliente y luego retire mi boca lentamente de su verga apretando con mis labios para que saliera bien limpia.El tío además de correrse gozo viendo como había tragado su corrida y limpiado su verga. -

Dijo: "Que buena zorra eres, como te veo bien complaciente quiero que me des el gusto de mear en tu boca, es algo que llevo ganas queriendo hacer y creo que tu eres la zorra complaciente y glotona que necesito".  Le dije que "si".

Nunca lo había hecho pero me apetecía complacerle y era algo con lo que había fantaseado alguna que otra vez. Su polla estaba ya solo un poco morcillona y con su tamaño reducido casi a la mitad. Me dijo "Metetela en la boca y meare despacio para no manchar el suelo con la meada, tendras que tragarla toda".

Así lo hizo el muy cerdo, se acomodo bien cerca, y metió su verga en mi boca, sus huevos tocaban mi barbilla, cerré mis labios alrededor de su polla blanda y empezó a relajarse y a mear en mi boca, trague a toda la velocidad que pude aquel liquido caliente y salado cuyo sabor no tenia nada que ver con la lefa que había tenido en mi boca unos minutos antes. Bebí y bebí aquel meado, creo que si no llego a ser un litro cerca se ando. Mientras decia "si, que placer, zorra, como te gusta mi meado, no pares de beber. Que puta eres". Y creo que si no tuvo un orgasmo estuvo cerca.

Cuando acabo y saco la polla, se volvió a empalmar de ver su sucio deseo cumplido. Tocandose la verga me dijo: "date la vuelta y pon tu cabeza apoyada en la taza que voy a follarte también ese culo gordo que tienes".

Fue a donde había dejado los pantalones y saco un preservativo que se puso en la verga. Cogió un pedazo bastante grande de papel del wc y lo mojo ligeramente formando una especie de bola de 5 o 6cm de diámetro, como si fuera un supusitorio gigante, empujo mi cabeza hacia abajo, y oí y sentí como escupía en mi ano para lubricarlo varias veces. Primero metio un dedo mojado y luego 2, abriéndose paso en mi ano con decision pero suavidad. Le rogue: "Haz lo despacio que hace tiempo que no me lo follan". Eso parece que le dio mas ganas de hacerlo, pero me hizo caso. Tras meter varias veces los 2 dedos y hacer un ligero mete y saca, que me supo a gloria y me puso a mil, todo hay que decirlo, presiono el cilindro de papel mojado metiendolo por mi culo. Lo que lo abrió un poco mas permitiendo mejor la penetracion con su verga.

Sentí como su dura polla iba entrando despacio en mi ano, que se adaptaba a ella y como la bola de papel iba introduciéndose en mi culo cada vez mas arriba, una sensación nueva pero que no me disgusto. Así presiono hasta que sus huevos golpearon mi culo, empezó primero un mete y saca suave y luego fue incrementándolo.

Sentí una mezcla de dolor y placer, mi polla se puso dura y sentí que me goteaba del placer que iba sintiendo al ser follado. Dijo:"joder que apretado tienes el culo, que gusto da", y empezó a follarme mas fuerte, sacando su verga y volviéndola a meter y tras varias embestidas se corrió con gran gusto. Todo casi en silencio debido al lugar donde estábamos.

Las piernas me flojeaban del gusto y me senté al lado de la taza. Vi su cara de satisfacción. Se quito el preservativo, arrojándolo a mis pies y se acerco, diciendo "abre la boca y limpiame la verga de los restos de semen". Obedeci, sintiendo el olor del semen mezclado con el del preservativo y lamí el resto que la corrida que había quedado en su polla. Debió de quitarse el preservativo apretando lo un poco pues tenia bastante lefa en su polla. la limpie toda tragando. Tuve que controlar unas ligeras arcadas de asco. Saco la verga de mi boca.

Y dijo "Que zorra eres, la mamas genial y que tragues las meadas así me ha encantado, quizás otro día volvamos a quedar para repetir". Abrió la puerta y se fue.

Baje mi mano a mi polla bastante dura y me masturbe arrojando la corrida al suelo del aseo, junto al preservativo. Me vestí, enjuague mi boca y me fui.

Ese día al llegar a casa no tenia "ganas de comer" y así se lo dije a mi mujer.