Mi primera vez disfrutando de una chica virgen igu

Mi primera vez fue con una chica virgen en un rancho en Santiago de Compostela, Nayarit.

.- Mi primera vez disfrutando de una chica virgen igual que yo.

Mi primera vez fue con una chica virgen en un rancho en Santiago de Compostela, Nayarit.

Después de descubrir que las niñas eran diferentes a los niños y pasados varios años de ello, en la primaria , tuve una maestra que me gustaba mucho, con un peinado de cola de caballo, rubia, un vestido de ésa época plisado, cuando pasaba la maestra entre los mesa bancos y se ponía a explicar algo a mi compañero de la otra fila, con el codo acariciaba su nalga levemente o me paraba cuando ella escribía en el pizarrón preguntándole que decía al final de la oración, aprovechando para poner mi mano en sus nalgas, lo mismo hacia en el recreo cuando la veía con el pretexto de que me correteaban me escondía atrás de ella poniendo mis manos en sus caderas o nalga.

En una ocasión que iba a pasar al pizarrón, se le cayó el lápiz a un compañero y al agacharme a recogerlo, las piernas de la maestra estaban un tanto abiertas y pide ver sus piernas y su calzón, al regresar a mi lugar después de exponer mi tema, le pedí a mi maestra si me podía pasar a la primera fila porque no alcanzaba a ver bien lo que escribía en el pizarrón y le cambié el lugar a mi compañero (el mismo al que se le cayó el lápiz) desde ése día siempre me sentaba ahí para verle los calzones y su liguero ya que era lo que se usaba en ésa época, las medias las sujetaban con ligas o con liguero.

Por estar primero distraído viendo entre sus piernas como se dibujaban sus labios vaginales en su pantaleta y luego por estar platicando con un compañero, me castigó en el recreo sin salir del salón y me puso unos ejercicios en mi cuaderno. Pero en lugar de resolver los ejercicios, estaba casi recostado en la banca viendo con curiosidad la entrepierna de mi maestra, qué bien se marcaban sus labios vaginales ya que estaba sentada muy a la orilla de su silla y el contraste de sus piernas enfundadas en las medias y la parte que estaba desnuda hasta llegar a su pantaleta.

Salí de mi concentración cuando oí la voz de mi maestra diciendo: qué estás viendo Eugenio? Ya terminaste los ejercicios, ya va a acabar el recreo y si no los terminas te quedarás hasta hacerlos…

Pero maestra me va a dejar el transporte, se los traigo de tarea….

No, ya te dije si no los terminas en el recreo, te quedas después de clase hasta terminarlos, ya vendrán tus papás por ti. Al terminar las clases, me tuve que quedar, la maestra se fue al salón de maestros y después regresó a ver si ya había terminado.

Ya casi termino maestra, me falta poco le dije, ella se sentó nuevamente en su escritorio, volteé a verla y cómo estaba leyendo pensé que no me vería y bajando mi cabeza continué viendo sus piernas, ella se levantó y sentándose sobre mi mesa banco, me dijo:

A ver Eugenio dime qué tanto ves debajo de mi escritorio, qué te llama la atención que no puedes terminar lo que te dejé…..?

Sentí que me ponía rojo y no le contesté….

Estabas viendo mis piernas? No te avergüences es normal, la mayoría empieza a tener interés en el otro sexo un poco más grande que tú, pero es lo normal, dime… te gustó lo que veías? Aparte de mis piernas, que más viste? Lo que me digas será un secreto entre nosotros y si eres sincero y me dices la verdad, te quito el castigo… qué dices?

Me le quedé viendo y con tal de que me quitara el castigo le comenté que si le había visto las piernas y que eran muy bonitas.

Sólo eso viste?

No,  le vi todo….

Te gustaría volver a ver todo?

Me quedé inmóvil y callado.

Entonces ella tomó la iniciativa y me dijo: recuerda que será nuestro secreto, no le diremos a nadie de acuerdo?

Sí le dije

Se levantó el vestido hasta los broches del liguero, hasta aquí viste?

No, más arriba

Tomando mi mano la puso en su pierna y me dijo: a ver enséñame con tu mano hasta dónde me viste y fui subiendo por su pierna hasta llegar al borde de su pantaleta y pasando mi dedo índice por sus labios vaginales le dije: hasta aquí le ví maestra….

Ella levantó la falda de su vestido hasta la cintura mostrándome todas sus piernas y su pantaleta y apretando mi mano contra su intimidad, me dijo: te gusta tocarlo, sientes rico?

Si, se siente muy bien!!!

Se quitó la pantaleta y me indicó cómo tocarla, puso mis dedos entre sus labios vaginales y me dijo como tocarla y como metérselos en su vagina, se sentía muy caliente y húmeda, con mi otra mano presionaba su clítoris de acuerdo a sus órdenes hasta que cerró sus piernas y gimiendo mojó mi mano y dedos copiosamente al tener su orgasmo, después me dejó acariciarle un buen rato sus nalgas, se vistió y fue a dejarme a mi casa.

Varias veces más me hizo masturbarla y lamer su vagina y senos enseñándome como hacerlo para darle gran placer a una mujer…

Pasaron unos meses seguí con mis experiencias con mi maestra, yo la masturbaba y lamía como ella me indicaba y ella hacía lo mismo con mi pene enseñándome a masturbarme, me salía al principio algo como el líquido pre seminal y algo blanquecino, ya después mis espermas salían bastantes y muy espesos, nos fuimos a vivir a Tepic Nayarit, porque a mí padre le ofrecieron una gerencia en una cadena de panaderías y nos mudamos, entré en una escuela del centro, al llegar mi tío hizo una reunión de bienvenida para presentarnos a sus amistades, ahí conocí a una jovencita de 18 años cuando yo estaba por cumplir doce, era la hija de unos amigos de mis tíos, pasábamos mucho tiempo juntos ya que sus papás trabajaban hasta tarde y ella iba a la secundaria en una escuela muy cerca de mi casa y se quedaba a comer con nosotros,  hacíamos la tarea y nos íbamos a dar la vuelta al parque donde aprovechábamos para besarnos y acariciarnos.

En una de esas veces estando acostados en el césped besándonos y acariciándonos, tocó mi pene por encima de mi pantalón, el cual estaba totalmente erecto y duro, lo sobó y apretó diciendo: que es esto?

Es mi pene…..  se quedó pensativa y le dije: o cómo le dices pito, verga?

No, lo que pasa es que nunca lo he visto o sentido tan duro y grande, en los libros y láminas de anatomía siempre está relajado, no así!!!

He visto a mi hermano cuando se viste y es diferente..

Quieres verlo?

Sí, me contestó… desabroché mi pantalón y bajándome la trusa se lo enseñé, ella lo tomó con sus manos y lo veía como revisándolo, lo levantaba veía mis huevos y los tocaba con curiosidad, yo estaba súper excitado y trataba de controlarme para no venirme, ella empezó a acariciar mis huevos y yo le decía como masturbarme ya que era el primer pene que tocaba en su vida.

Levanté su falda y comencé a acariciar su vagina por encima de su pantaleta y con mi otra mano acariciaba sus piernas y nalgas. Metí mis manos en sus calzones y se los bajé a medio muslo, acariciaba y apretaba sus nalgas mientras seguía acariciando su vagina y su clítoris.

Me dijo: espera nunca lo he hecho….

No te preocupes, sólo quiero darte placer, y seguí jugando con su clítoris mientras ella también me masturbaba hasta que gimiendo llegó a su orgasmo,  los dos nos corrimos al mismo tiempo, ella mojó mi mano y yo al eyacular mojé sus piernas y parte de sus pantaletas.

Aaahhh que es esto? Gritó al sentir mi cálido esperma mojando sus piernas. Puso una de sus manos en mi glande y seguía masturbándome recibiendo en su palma el resto de mi eyaculación. Con sus dedos lo tocaba como verificando su viscosidad y textura, lo acercó a su nariz, no huele mal…

Es mi semen le contesté, así como tú segregaste fluidos, los hombres eyaculamos se llaman espermas y son los que fecundan el óvulo y nacen los bebés, quieres probarlo?

Qué? Hacer un bebé, no como crees soy virgen, es el primer pene que tNo, me refería si quieres probar el semen?

Lo volvió a oler, sacó la punta de la lengua pero se arrepintió, no mejor otro día y quitándose la pantaleta se limpió las piernas y haciéndolas bolita las tiró y nos fuimos para la casa a esperar a su mamá.

Ésa era nuestra rutina, comíamos, hacíamos la tarea y nos íbamos al parque a masturbarnos mutuamente.

Un viernes llegó mi tío y nos dijo que su amigo nos invitaba a pasar el día en su rancho en Santiago de Compostela, mi hermano y yo nos pusimos muy contentos pues podríamos montar a caballo y hacer vida de campo, lo cuál era nuevo para nosotros, además yo tendría la oportunidad de ver a Alejandra que así se llamaba mi dizque novia.

El  motivo de la invitación   era el cumpleaños de su mamá y como ella también cumpliría sus 18 años en la siguiente semana, pues la celebrarían a las dos.

Llegamos como a las diez de la mañana, nos indicaron cuáles eran nuestros cuartos, nos acomodamos y bajamos para conocer el rancho, su mamá llevaba una falda pantalón azúl cielo, bastante ajustada que se notaba la costura de su pantaleta y se le veían unas nalgas firmes y muy paraditas, con razón Alejandra estaba tan bien formada herencia de su mamá, aunque los senos de la señora eran más grandes los de Ale eran firmes y desafiaban la gravedad.

Ella llevaba un short blanco y una blusa azul y sandalias, yo me puse unas bermudas y abajo mi traje de baño, pues mi tío nos comentó que había alberca y a mi desde muy chico me gusta mucho nadar. Recorrimos las caballerizas, el establo y dónde guardaban las pacas de alfalfa y demás alimentos para los animales, mis papás y mis tíos fueron a caminar, mientras el señor veía a sus empleados y su esposa, Alejandra, mi hermano y yo nos fuimos a la casa, Alejandra se fue a poner su traje de baño y mi hermano y yo nos fuimos a la alberca.

Me puse en una tumbona esperando a Ale, cuando ella apareció me quedé embobado viéndola, llevaba un traje de baño rosa muy bonito con una malla transparente que iba de sus senos a su ombligo haciendo resaltar el diseño su abultado pubis, su ajustado traje marcaba sus labios vaginales al caminar y se metía un poco entre sus nalgas mostrando un poco de las mismas.

Tuve una erección tal que mi traje se separaba de mi cuerpo, traté de taparme pero era inútil, lo único que ocasione fue que ella se diera cuenta de mi estado y se sintiera poniendo su dedo entre sus labios.

Me levanté y me tiré un clavado al agua, ella se sentó en la orilla mojando sus pies, se fue deslizando hasta meterse también en la alberca, se me acercó aventándome agua, una de sus manos bajó a mi entrepierna agarrando mi paquete y apretándolo.

Y ahora porque estás así?

Cómo por qué? Con éste traje de baño que esperabas? Tengo unas ganas de tenerte entre mis brazos….. y bajando mis manos le agarré las nalgas, apretándoselas tan fuerte que emitió un leve grito que hasta mi hermano volteó a vernos, me recargue en el borde de la alberca y al acercarse ella, le acaricié su vagina y haciendo a un lado su traje de baño la empecé a masturbar mientras ella veía hacia la casa por si salía su mamá, tomó entre sus manos mi erguido miembro y también me masturbaba sobando mis huevos a la vez que jalaba la piel del tronco, en pocos minutos los dos jadeábamos de placer estallando en un riquísimo clímax, nos reímos al ver flotar mis espermas en el agua, saliéndonos de la alberca acomodando nuestras respectivas prendas y nos tumbamos en el pasto para que el sol secara nuestros cuerpos intercambiando miradas cómplices.

Así pasamos la mañana hasta la hora de la comida, después nos fuimos a bañar cada quién a su habitación y arreglarnos para la fiesta dónde celebraríamos su cumpleaños y el de su mamá.

Comenzaron a llegar los invitados, pusieron música y algunos bailaban y los señores tomaban, en un momento dado me salí al jardín y me puse a caminar, en eso sentí una presencia que se acercaba era Ale, venía con un vestido de tirantes floreado y su cabello adornado con una diadema de guirnaldas, nos tomamos de la mano y nos fuimos alejando de la casa hacia los establos, cogí un par de espigas del campo y le di una que se llevó a la boca, nos metimos en el establo y nos recostamos sobre la paja y comenzamos a besarnos y acariciarnos, metí mi mano bajo su vestido y comencé a acariciar sus piernas mientras besaba su cuello, desabroché los botones de su vestido quedando a mi vista sus lindos senos, suaves y tersos, se los besaba sobre el brassier y ella comenzó a gemir y su respiración se agitó un poco, saqué uno de sus senos y comencé a lamer su pezón tal y como me había enseñado tiempo atrás mi maestra.

Me puse sobre de ella y con mi pene erecto rosaba su vagina sólo separados nuestros sexos por la ropa, ella me decía que sentía muy rico mi pene sobre su vagina, me bajé los pantalones y así el roce era más cercano, sentía como mi miembro separaba levemente sus labios vaginales y ella suspiraba, yo no dejaba de succionar su pezón, me separó con sus brazos y pensé que ahí acabaría todo, pero para mi sorpresa solo se medio incorporó para quitarse el vestido y el brassier quedando únicamente con su pantaleta puesta, yo me desnudé por completo y le besaba sus piernas hasta llegar a su intimidad, ahí la lamí primero sobre su pantaleta para después quitándoselas por completo, me puse a mamar su virginal vagina como lo hacía con la de mi maestra, doble y separé sus piernas admirando su desnudez ella tapó sus senos pero retiré sus manos diciéndole: deja admirar tu cuerpo, eres muy bella!!!

Ella me sonrió y puso sus manos en su nuca haciendo que sus senos se irguieran y sus erectos y duros pezones apuntaran al techo, se quedó viendo mi pene completamente erecto, me puse entre sus piernas y reinicié mi mamada a su deliciosa y virginal vagina, qué rico olía y sabia, la tomaba de sus nalgas y olfateaba su vello púbico y después su cálida vagina, metía mi lengua entre sus labios vaginales punteando la entrada de su cuevita y lamía su clítoris, ponía mi lengua alrededor de su botoncito de placer y doblando mi lengua como taquito lamía su clítoris que de inmediato se erecto.

Sentí sus manos apretando mi cabeza contra su intimidad y con sus jugos inundó toda mi cara y con su respiración entrecortada y jalándome hacia arriba me dijo: ven te quiero sentir, quiero que seas el primero…..

Acerqué mi cara a la suya y mirándola fijamente le pregunté: estás segura Ale?

Si quiero que seas el primer hombre en mi vida y me abrazó. Házlo con cuidado que es mi primera vez, no me lastimes….

Yo tampoco lo he hecho y te deseo mucho le dije, poniéndome entre sus piernas y dirigiendo mi duro y grueso miembro a la entrada de su palpitante vagina.

Mi pene se fue abriendo paso entre sus labios vaginales, ella gimió y levantó su cadera a mi encuentro al sentir cómo entraba mi glande en su hasta ahora virginal cavidad!!!

Se quejó un poco al sentirme avanzar dentro de ella, se sentía muy rico y caliente ahí dentro.

Está muy grueso Eugenio, siento que me abres toda…. Comencé a moverme de atrás hacia adelante poco a poco hasta que sentí que la punta de mi pene topaba con algo (era su himen), acariciaba su clítoris tratando de darle placer mientras movía mi pene dentro de ella y cuando ella comenzó a gemir nuevamente, empujé mi cadera con fuerza y sentí como algo de rompía ai paso dentro de su vagina y se lo metí todo hasta quedar mis huevos pegados a sus nalgas.

Me quedé inmóvil, ella dio un fuerte grito al sentir cómo mi pene rompía su himen, me jaló hacia ella enterrando sus uñas en mi espalda y apretando sus piernas alrededor de mi cintura, levantó su cadera quedando con todo mi miembro dentro de su vagina, la besé en la boca tratando de mitigar su alarido, mordió mi labio inferior mientras se acostumbraba al tamaño y grosor del invasor de su intimidad.

Comencé a moverme lentamente de atrás hacia adelante sin sacarlo mucho, volteé a ver y mi pene estaba totalmente húmedo por sus fluidos y lleno de sangre, sus labios vaginales se veían muy rojos por lo mismo. Me dijo: despacio, por favor me arde un poco…. Con sus ojos llorosos.

Inicié un lento mete y saca, ella me abrazaba por la espalda baja y aflojó sus piernas abriéndolas un poco más, permitiendo que mi movimiento fuera más continuo, me apoye de sus hombros por su espalda haciendo palanca y ya mi pene se deslizaba por toda su vagina, entraba y salía casi por completo, besaba y lamía sus senos mientras la embestía deliciosamente cada vez más duro, su llanto fue cambiando a ligeros pujidos y suspiros hasta llegar a constantes gemidos, arqueó su espalda y gimió apretando con sus manos mis brazos al llegar a su primer orgasmo con un pene dentro de ella.

Aminore la velocidad dándole oportunidad de que disfrutara al máximo su orgasmo, ella movió su cadera a mi encuentro indicando que deseaba siguiera bombeando su vagina recién inaugurada!!!

Puse mis manos en sus nalgas, las acaricié y apreté y comencé a darle unas fuertes y continuas embestidas penetrándola profundamente, ella abría la boca como jalando aire giraba su cabeza de un lado a otro y yo no dejaba de penetrarla y besar sus lindos senos, se lo metía completamente hasta sentir sus nalgas pegadas a mis huevos para luego sacarlo dejando sólo la cabeza dentro y así estuve cogiéndomela primero lento para que sintiera todo mi pene como entraba y salía de su vagina para después ir acelerando mis movimientos, le decía si le dolía… ella sólo me empujaba hacia ella diciendo: no, ya pasó…. Sigue y empujaba su cadera al encuentro de la mía permitiendo que se deslizara libremente mi miembro dentro de ella gracias a lo lubricada que estaba por sus fluidos.

Así le estuve dando hasta que sentí como mis espermas pujaban por salir engrosando aún más mi grueso miembro, ella abrió más los ojos al sentir cómo se abría su vagina al máximo, ajustándose al grosor de mi pene como una funda y me decía: hummm que rico me rosas me llenas toda!!!!

Eso me motivó y comencé a embestirla más rápido y fuerte hasta expulsar fuertes chorros de espeso esperma dentro de su recién estrenada vagina, se lo metí hasta el fondo y comencé a eyacular tres fuertes disparos inundaron su virginal útero, mi glande se acostaba al chocar contra su cuello uterino expulsando todo el semen acumulado!!!!

Ella entrelazó sus piernas alrededor de mi cintura al sentir cómo la llenaba de semen, agarré sus nalgas y apretándoselas la jalaba hacia mí queriendo traspasarla con mi ariete, quedando mis huevos pegados entre sus nalgas!!!! Me desplome sobre de ella apretando sus senos con mi pecho, que Rico y caliente se sentía su vagina y sus senos pegados a mi pecho.

Nos abrazamos fuertemente y nos rodamos sobre la paja besándonos apasionadamente en los labios, ella me miró a los ojos y me dijo: gracias que rico regalo de cumpleaños me diste me gustó mucho, se despegó de mí y sacándose mi pene lo vio semi erecto lleno de sangre, comenzó a vestirse y yo me limpié con un pañuelo que  metí entre la paja, quedando como muda prueba de nuestro primer encuentro.

Nos fuimos abrazados hacia la casa separándonos al llegar, ella se fue a su habitación para asearse y cambiarse, yo me metí al baño de la sala me lavé el pene y los huevos muy bien me puse loción y me serví un refresco y me fui a sentar a la sala, mi hermano me preguntó dónde andaba y le dije: por ahí….

Ella bajó ya cambiada con un short y blusa, se puso a platicar con sus amigas. Su mamá le hizo la observación del cambio de atuendo y ella solo le dijo es que tenía mucho calor restándole importancia al asunto.