Mi primera vez.

Hola a todos los lectores de esta página, después de algunos años me he atrevido a escribir un relato; después de mucho leer e imaginar algunas circunstancias con el paso de los años pude realizar mis propias fantasías.

En la actualidad tengo 28 años con honestidad no soy una modelo, ni tampoco una belleza, por el contrario soy una chica del tipo llenita, talla 36-38, tengo un busto grande 38DD aunque en cuanto a caderas soy normal nada extra; siempre he sido una persona muy seria de tal suerte que jamás atraigo miradas ni piropos; soy una persona promedio casi llegando a lo ignorable… Pocos novios, muchos amigos, aunque en cuanto a lo sexual se refiere soy muy liberal y he tenido bastantes experiencias, por lo que quiero pensar que no soy tan “espantosa” como me describo; y muchos me han dicho que soy bonita dentro de todo.

Algunas cuestiones a lo largo de mi vida y sobretodo malas experiencias de amigas me llevaron a no decidir perder mi virginidad a edad temprana aunque afortunadamente no fue por falta de candidatos, ya había tenido algunos novios de manita sudada y quizá uno que otro faje pero no más por el miedo a los riesgos de no hacerlo de manera correcta (embarazos, enfermedades, dolor y otros miedos).

El relato que les contaré es sobre la primer experiencia que tuve y cómo fue que después de algún tiempo decidí entregare mi virginidad a alguien y sobretodo como esto definió el rumbo de mi vida en muchos aspectos.

Todo esto sucedió cuando yo tenía 22 años ya contaba con una profesión, estaba lejos de casa y un empleo, no fijo pero al menos ya tenía la madurez para enfrentar un poco los errores que pudiese llegar a cometer, conocí a un chico por internet en una de esas tantas páginas para conocer personas, hablamos alrededor de 2 semanas casi todos los días. Uno de esos días realizamos una video llamada y una sorpresa al vernos hubo una atracción mutua. Acordamos conocernos en persona, ir a ver una película y quizá cenar algo el día Viernes, a lo que faltaba casi una semana.

Transcurrió la semana con mensajes de texto al celular sin nada fuera de lo normal, en esos le platique a una amiga la cual me aconsejo bastantes cosas por experiencia yo no pensaba fueran importantes, que ropa usar, que zapatos, perfume, maquillaje, ropa interior, dentro de todo me sugirió depilarme mi zona intima, usar tanga, etc. A lo que solo reí de nervios. Fuimos de compras para la ocasión y constantemente ella insistía en que esa era la cita perfecta para  perder mi virginidad yo solo reía y me moría de la vergüenza siempre que tratábamos el tema. Durante nuestras compras entramos a una tienda y directamente me llevo al área de ropa interior, escogió un coordinado bastante lindo he de decirlo, negro con encaje blanco en algunas partes, un brasier de media copa y una tanga con un moño grande atrás, posteriormente fuimos por ropa eligió una blusa con un escote pronunciado y una falda un poco corta pero estaba linda.

Llegando a casa persistió en la idea del depilado, a lo que después de molestar durante un largo tiempo accedí, para mi buena suerte era Martes. Me explico cómo se realizaba y lo hice, un poco complicado y doloroso porque sufrí unas pequeñas cortaduras e irritación, aunque al siguiente día me arrepentí ya que sobrellevé una ligera infección urinaria por hacerlo rápido y no de forma gradual. El día viernes por la mañana estaba totalmente lista con un depilado listo, ya sin dolor y sin molesta alguna, solamente los nervios naturales de conocer a alguien nuevo y sobre todo por la decisión que había tomado para ese día: dejar de ser virgen. Fuera de eso el  día continuo de lo más normal posible.

A las 6pm me mando mensaje mi amigo y me dijo que solo quería confirmar nuestra cita; y saber si pasaba por mi o lo veía en el cine. Le conteste rápidamente que lo vería en el cine a las 8pm. Estaba yo totalmente lista los nervios me estaban matando, mi amiga llamo a un taxi y me fui a mi tan esperada cita. Llegué y lo vi a lo lejos, era mucho más guapo de lo esperado y eso solo consiguió ponerme más nerviosa. Me acerqué y nos abrazamos como si nos conociéramos de hace mucho tiempo, me dijo algunos piropos sobre lo bien que me veía, entramos al cine, nos besamos, termino la película y nos fuimos…

Entramos a un bar, el pidió una cerveza y yo tequila, bebimos un poco pero yo me sentía muy nerviosa y bebí demasiado rápido, me maree un poco, salimos de allí, él dijo que me llevaría a mi casa, pensé que lo había arruinado, pero antes de subir a su carro, tome valor y lo bese. Comenzamos a besarnos con un poco de timidez pero subiendo de tono, entramos a su auto, continuamos los besos, y el empezó a tocarme encima de la ropa, a lo que empecé a sentir mi vagina muy húmeda, bajo un poco mi blusa y enseguida comenzó a besar mis pechos, comencé a gemir. Se detuvo ya que comenzaron a pasar autos, recuerdo que dijo; iremos a un lugar más cómodo, solo asentí con la cabeza, no podía ni hablar.

Llegamos a un motel, entramos, pago, subimos algunas escaleras, me tomo de la mano y me llevo a la cama… Me pregunto si quería continuar, nuevamente asentí sin hablar, comenzamos nuevamente con los besos, quito mi blusa y la falda, comenzó a besar mis pechos bajo un poco el brasier y empezó a lamer mis pezones, se ponían muy duros, y con su mano acariciaba mi vagina por encima de la tanga la cual ya estaba muy mojada. Me quito el brasier y empezó a comerme los pechos muy rico, no quería que parara, me mordía los pezones me lamia, me levante, empecé a quitarle la ropa me ayudo un poco, quite su bóxer y vi su pene, era largo, comencé a lamerlo torpemente pero recordé algunos consejos de mi amiga, cambie a chuparlo como si fuera una paleta, lo metía a mi boca, trataba de meterlo todo, me daba un poco de nausea cuando lo introducía rápido, sentía que cada vez crecía más, de repente el me detuvo, pensé que lo había lastimado, pero me recostó. Me quito la tanga. Empezó a lamer mi vagina… Yo sentía que iba a desmayarme.

-          Abre tus piernas lo más que puedas, no las cierres.

-          Si, aja.

-          Estas muy mojada.

-          Si, aja.

De repente introdujo 2 dedos en mi vagina, no sé lo que sintió, solo recuerdo que dijo.

-          ¿Estas segura?

-          Si, segura.

-          Quizá te duela un poco.

-          No hay problema.

Saco un poco sus dedos y empezó a moverlos dentro, yo solo sentía que algo muy caliente, algún líquido y escurría por mi vagina, sentí la necesidad de apretar mis piernas pero él no lo permitió, pensé que tendría un accidente, sentí ganas de orinar, y de repente sentí algo salir muy caliente y a presión, mi espalda se arqueaba y mis pechos se ponían duros, duro unos segundos, aunque yo lo sentí como una eternidad. Cuando termine me dio mucha vergüenza, pensé que había hecho algo mal, el solo empezó a lamer nuevamente mi vagina como si tratara de exprimir algo dentro, nuevamente empecé a calentarme.

-          Acuéstate bien, abre tus piernas, acomódate.

-          Okey, que pena por lo que acaba de pasar, no fue mi intención

-          Tu solo relájate.

Me recosté como él lo indico, abrí mis piernas, se colocó un condón y puso mucho gel en su pene, lo puso a la entrada de mi vagina, me beso con mucha ternura y empujo de un solo golpe hasta el fondo, yo di un pequeño quejido, solo dolió poco (realmente fue como un pequeño pellizco por dentro), se quedó sin mover un momento.

-          ¿Te duele o te dolió?

-          Realmente no, solo fue como un ardor, pero sin dolor.

-          ¿Estas segura? ¿Puedo moverme?

-          Si. Ahora relájate tú. Parece que acabas de quitarle la virginidad a alguien.

-          (Reímos los dos)

Empezó a moverse sin sacarlo más que la mitad, y con a gran cantidad de gel resbalaba muy fácil, era más rápido su movimiento de repente sentí que se quedó sin mover y me dio un beso.

-          Perdón, terminé muy rápido. Estas muy apretada y no aguante mucho.

-          No te preocupes, vamos a dormir.

Yo pensé que quizá era normal, nos quedamos dormidos, entre el alcohol y lo demás; conciliamos el sueño muy rápido o al menos yo me quede profundamente dormida, y digamos que tengo un sueño bastante pesado.

No sé cuánto tiempo paso, de repente sentí como mordían mis pezones, pensé que estaba soñando, abrí los ojos y estaba dentro de mi vagina mientras me mordía los pezones, y solo empecé a moverme a su ritmo, era una sensación diferente, empezó a gustarme, comencé a gemir.

-          Ponte de perrito.

-          Si

-          Mmmmm, que vista!

-          Métela, me está gustando.

-          Si, ya vi, tienes la cama muy mojada.

-          Ash.

De repente la metió de golpe, y empezó a darme muy duro, grite, gemí, sentía como temblaban mis piernas, sentía que iba a explotar de nuevo, me jalo del cabello y empezó a hablarme al oído. Me desconcertó un poco pero empezó a prenderme de nuevo. Sinceramente me daba pena hablar.

-          ¿Te gusta perrita?

-          Si

-          Dime ¿Cómo la quieres?

-          Así.

-          Así, ¿Cómo?

-          De perrito, hasta adentro.

-          ¿Qué más?

-          (Gemidos), así.

-          Dime más. (Me dio un nalgada que dolió bastante)

-          Au, me dolió.

De repente empezó un mete y saca rápido, jalando mi cabello, al principio me sentía incomoda, pero me di cuenta que me gustaba, empecé a gemir más, después de un rato así me dijo, ponte bocarriba. Empezó un mete y saca rápido sentí nuevamente esa sensación de un líquido salir y ganas de orinar.

-          Te estas mojando de nuevo, me estas mojando mi verga bebecita.

-          Siento que voy mojar todo.

-          Relájate, así son tus orgasmos, déjalos salir.

-          Pero… (Empezó a moverse mucho más rápido)

-          Ohhh bebe. Estas muy mojada.

-          Ah, ah, ah. Va a salir algo..

Hizo más intenso su movimiento y sentí que estaba apretando su pene y algo caliente resbalando, el continuo su movimiento yo sentía algo recorrer por mi espalda y cada vez más mojada mi vagina y su pene, sentí de nuevo que algo salía.

-          Nena voy a terminar pero quiero que termines tu primero.

-          Siento que algo va a salir.

-          Déjalo salir nena.

-          Ahhh ahhh nooo.!!

-          Siiii. Vente.

-          Más rápido.!!

Sentía caliente todo el cuerpo, algo salía de mí, sentía su pene más grande y duro, sus movimientos con más fuerza como si quisiera partirme a la mitad. Me tomo de la cintura, enterró sus dedos, los dos sudamos, lo arañe de los brazos, tuvo un orgasmo yo sentí todo el placer, empecé a gritar, el grito, nos arañamos mutuamente, no nos movimos. Fue algo eterno, un placer indescriptible. Me beso. Nos besamos. Nos separamos. Y quedamos dormidos, abrazados.

Cuando amaneció, nos bañamos juntos, fue algo extraño, agradecimos el placer de la noche anterior, me llevo a casa, nos dimos un beso, quedamos en ser amigos, sexo de vez en cuando, nos vimos otras ocasiones, sinceramente todas las experiencias con él fueron buenas y agradables. Nos separamos, me mude de ciudad, el igual. Un buen recuerdo.

Gracias a todos los lectores, sé que no soy la mejor escritora, espero sus comentarios para poder mejorar.