Mi primera vez con un travesti

MI PRIMERA VEZ CON UNA TRAVESTI

Hola nuevamente a todos los que me han leído y gracias a los que han enviado algún comentario, deciros a todos que si aguante y disfrute de mi primera vez con un tío fue debido a que durante tiempo había ido preparando mi culo con diferentes consoladores, cada vez de mayor tamaño, sobre todo me gusta uno hinchable con el que ya dilato hasta 8 cm de diámetro.

Como ya comente en los relatos anteriores, en la actualidad tengo 49 años de edad. Me inicie en el mundo Bisex de forma activa hace 6 años. Soy un hombre casado, toda mi vida he fantaseado con mi lado bisexual, y para mí era fabuloso explorar mi lado femenino en mi soledad sin llegar a exteriorizar ante los demás, no puedo negar que desde muy joven y en mi soledad me he introducido toda serie de cosas por el culo y me ponía lencería femenina que le cogía a mi madre o mi tía, llegando a sentir verdadero placer, acabando siempre masturbándome mientras pensaba que era una putita a la que se follaban por todos sus orificios.

Actualmente me sigue gustando ponerme lencería femenina, siendo yo el que ahora va a comprarla, aprovechando para ello principalmente los viajes que por motivos de trabajo realizo, ya que de esta manera puedo decir que son para mí. Sobre todo me encanta ponerme tangas o braguitas de encaje con liguero y medias, en cuanto a los colores me van el negro, el blanco y el rojo.

En este relato os voy a contar mi primera experiencia con una travesti, después de las experiencias anteriores, las cuales me dejaron muy satisfecho, pensé en probar con una travesti, para ello aproveche un viernes que tenia una cena con los de la empresa, para celebrar la despedida de un compañero que se jubilaba.

A primera hora de la Tarde cogí la prensa y Busque en la sección de contactos para ver si encontraba algo que me gustara, tras descartar un par de ellas, finalmente me quede con Babel, a la que tras visitar su página web la llame para quedar para la noche y acordar la tarifa.

Sobre las ocho de la tarde me duche y me rasure bien todo el pubis y la zona de la polla y el culo y me puse unas braguitas negras a juego con las medias y el liguero, vistiéndome a continuación una camisa y un pantalón vaquero, con lo que mi secreto quedaba bien resguardado.

Tras terminar de prepararme me dirigí al bar donde habíamos quedado todos antes de ir a cenar, la cena la celebramos en una Sociedad Gastronómica, donde nos dieron la una de la mañana para cuando salimos de ella.

Tras salir de la sociedad, algunos se fueron a tomar alguna copas, optando otros por irse a casa, apuntándome yo a este último grupo, no para irme a casa sino para pasar un rato con una Travesti, por lo que llame a una que se anunciaba en la sección de contactos de la prensa local con el nombre de Babel, con la que ya había quedado a la tarde de que sobre la una y media de la madrugada la llamaría.

Tarde un cuarto de hora en llegar a la dirección que ella me facilito, llame al timbre del 5º A como ella me indicó, y una dulce voz se escucha por el interfono.

Si

Yo: hola soy la putita que ha llamado esta tarde para quedar con Babel.

Babel: soy yo, pasa y me abre la puerta del portal.

Sin más dilación me adentro en el portal para coger el ascensor y subir al último piso, al llegar arriba encuentro la puerta entornada,  por lo que paso y cierro tras de mi, encontrándome con una travesti mulata muy hermosa, a la que saludo con un par de besos y le entrego la cantidad acordada.

Babel: pasa a esta habitación y pon te cómodo que ya mismo estoy contigo, te apetece tomar algo?

Yo: No gracias, quizás luego

Salio, y me dejo solo en la habitación, yo comencé a desnudarme, quedándome con las medias, las braguitas y el liguero, enseguida apareció ella, estaba impresionante, llevaba un sujetador blanco y un tanga a juego del mismo color, que le quedaba fenomenal, sobre todo el contraste con su piel canela, llevaba sus piernas enfundadas en una especie de calentadores blancos con motas negras, que dejaban libre la zona de los pies, como si fueran las piernas de un dálmata.

Babel: uhmm que tenemos aquí, una putita con un culo bien rico, así que tú quieres ser mi putita esta noche.

Yo: si me encantara ser tu putita y realizar todo lo que quieras.

Babel: bien ponte de rodillas y lámeme los pies

Yo sin demorarme me arrodillo ante ella y comienzo a lamer sus pies, esmerándome lo mejor posible, metía sus dedos en mi boca y los iba saboreando, primero un pie y luego otro, ella entre tanto se movía por la habitación y yo la seguía como una perrita para seguir lamiéndole los pies.

Babel: Así putita, sigue lamiendo que lo haces muy bien, y acercándose a la puerta llama a sus compañeros

Babel: Oye acercaros un momento mirar que nueva putita tenemos hoy con nosotras.

Enseguida aparecen en la habitación un par de chicas acompañados de un chico de raza negra, los tres estaban en ropa interior, notándosele al negro un bulto considerable en la entrepierna.

Babel: a ver putita saluda a mis amigos como se merecen

Yo: hola encantada de conocerles, aquí una putita para lo que necesitéis, y uno a uno fui lamiendo a cada uno de ellos desde los pies hasta la entrepierna.

Cuando ya termine con todos ellos salieron dejando la puerta abierta y nos dejaron solos.

Babel: a ver putita quítame el tanga despacio y comienza a comerte este clítoris tan hermoso que tengo para ti.

Yo cogí con mis manos el tanga y cuando iba a comenzar a bajárselo lentamente, ella me da un tortazo a la vez que me dice.

Babel: así no putita con la boca, pon tus manos en la espalda y con la boca vete poco a poco retirándome el tanga, ni se te ocurra usar las manos.

Poco a poco con mi boca fui bajando el tanga hasta que cayo en sus pies, ella levanto una de sus piernas primero y la otra después para terminar de despojarse del tanga, ante mis ojos apareció una hermosa polla en estado de letargo que rápidamente comencé a saborear, introduciendo toda ella en mi boca a la vez que mi lengua jugaba con el glande.

Subía y bajaba recorriendo ese mástil que cada vez se ponía mas duro, de vez en cuando la sacaba de la boca y recorría toda ella con mi lengua llegando hasta los huevos los cuales chupaba y metía en mi boca, ella entre tanto me acariciaba los pechos pellizcando y tirando de mis pezones, a la vez que me iba dando palmadas cada vez más fuerte en mi culo mientras yo suspiraba de placer pidiendo más.

Babel: vamos putita sube a la cama y pon te de rodillas que quiero follarme ese culo de zorra que tienes.

Se coloco un condón y me la metió de un solo golpe hasta que sus huevos chocaron con mi culo.

Yo: Ahhh, sigue  siii, me duele pero ya pasara.

Babel: calla zorra que ya veras como te va gustar.

Comenzó a cabalgar me cada vez más rápido a la vez que me palmeaba el culo con fuertes cachetes, yo cada vez más cachonda no hacía si no que pedirle más y más, mis gemidos debían de escucharse en todo el vecindario.

Yo: si mi AMA, folla a tu putita hasta que reviente de placer, más fuerte, pellízcame los pezones así me encanta como me follas, da me más, más....

Babel: calla zorra que vas a despertar a todo el vecindario,  mira zorrita hasta mis compañeros han venido a ver que pasaba con tanto escándalo.

Así es en la puerta que permanecía abierta estaban las dos chicas acariciándose el coño mientras disfrutaban de la visión de la follada que Babel me estaba dando, durante una eternidad babel seguía follando mi culo mientras alternaba cachetes en mi culo y pellizcos en los pezones.

Ella también comenzó a jadear, indicador de que estaba disfrutando y que se aproximaba a alcanzar su orgasmo, ya que me la saco del culo y quitándose el condón me la metió en la boca para que se la comiera y correrse en mi boca, a la vez que cogió un consolador y comenzó a follarme el culo con el.

Yo saboreaba la polla y me la metía hasta el fondo mientras jugaba con mi lengua en el glande.

Yo: uhmmm que rico REINA, como me gusta saborear esta hermosa polla, si asíii da me toda la leche.

Babel: Te gusta zorrita, toma toma toda para ti.

Y comenzó a follarme la boca con un ritmo salvaje, metiéndomela hasta la garganta, lo cual provocaba que me dieran arcadas, hasta que finalmente se corrió en mi cara y mi boca, llenándome toda de leche, a la vez que también de mi polla comenzó a brotar un pequeño reguero de leche.

Cogí su polla y me la metí en la boca para limpiársela de los restos de semen, tras lo cual me limpie un poco yo también antes de vestirme y dándonos una buena comida de morros nos despedimos.

Más fotos en www.bisex1960.es.tl

Espero que os guste este nuevo relato que es 100/100 real.