Mi primera vez con mi tío
Hasta antes de este día pensaba que mi tío era un hombre desagradable, hasta que algo entre sus piernas me hizo cambiar de opinión.
Odio mucho ir de visita con mi familia, en especial a la casa de mis tíos, no entiendo porque siempre me tienen que llevar, yo soy perfectamente capaz de cuidarme solo, ya tengo 19 años, puedo hacer lo que quiera, pero cuando se trata de visitas familiares, siempre tengo que ir con mis padres.
Mi tía Ana era una tremenda puta que le encantaba resaltar los defectos de los demás, como si fuera perfecta la muy desgraciada, siempre haciendo comentarios estúpidos sobre mis padres o sobre mí mismo, odio a esa puta con toda mi alma.
Mi tío Juan era un viejo de 60 años, un idiota que solo le gustaba presumir de su trabajo, sus carros y su casa grande, la cual hoy teníamos que ir a visitar, como odiaba todo en este momento.
Llegamos a la casa de mis tíos, mi tío Juan se estaba bañando y mi tía Ana nos recibió, en esa casa había más familiares, pero sinceramente no prefiero hablar de ellos. Me llenaba de incomodidad saludarles a todos ellos, no les conocía a casi nadie.
Mi tía Ana me mandó llamar a mi tío, ya que era bastante tiempo que se estaba arreglando. Subí hasta su habitación, la cual estaba vacía y olía mucho a viejo. No había nadie pensé, en eso giro y en la puerta estaba mi tío Juan, completamente desnudo, aun mojado y con la toalla en los hombros.
Yo me quede completamente helado, inmóvil, mudo. Su cuerpo estaba mojadito, era un poco gordo, aun así atractivo, era muy velludo y le colgaba una enorme pija y unos huevos bien grandes.
Mi tío me miraba con lujuria, se acercó lentamente hacia mí mientras acariciaba su gran polla. Se claramente cuáles son sus intenciones, no hago nada para impedirlo. Estaba en frente de mí, toma mi mano y con ella me hace sujetarla, estaba caliente, gruesa y velluda, me puse a masturbarla, mi tío me intenta dar un abrazo, aunque en realidad lo que quería era agarrar mi trasero, y lo logra, no dejo de agitar su polla mientras siento como con sus manos intenta estrujar bien mis nalgas.
Era una extraña situación, yo estaba agitándole la polla y él tenía sus manos en mi culo, siento como mete 2 dedos dentro de mi ano, Dios que bien se siente eso, en ningún momento pienso en detenerlo, es inevitable, este hombre me va a follar aquí y ahora.
El hombre soltó mi culo de una vez y a la fuerza me puso en una posición de cuclillas, yo estaba con los labios titubeando. Mi tío sujeto su polla y la paso por mis cachetes, dándome ligeros golpes por toda la cara, cubriendo mi cara con una ligera babilla que salía de su pene, el cual tenía un olor fuerte pero que a mí me encantaba, todo esto mientras me cacheteaba con su polla.
Con dos dedos logro abrir mi boca, sujeto mi cabeza y metió 2 dedos hasta el fondo de mi garganta, por un momento me falto la respiración y casi vomito. Nuevamente abre mi boca, esta vez lentamente mete su pene en mi boca, pero ya no sujeta mi cabeza, porque esta vez soy yo el que la quiere chupar bien, y me dispongo a dejarla completamente seca.
Su polla entra hasta lo más profundo de mi garganta, el sabor me encanta, lo que no me gusta mucho es que puedo sentir también sus huevos peludos en mi mentón, pero en general me gusta el sabor que tiene su polla. De rato en rato siento que va llenando mi boca, no creo que sea semen, sin embargo no me detengo, y luego la chupo de una manera más agresiva haciendo evidente mi hambre de leche.
Aquel hombre gemía y gemía de rato en rato, mi meta era clara, dejarlo completamente vacío, y eso estaba a punto de hacer. Mi tío decide tomar la iniciativa una vez más, sujeta mi cabeza y con su polla me embiste la boca como si fuera un culo, me da muy brusco, pero a mí me encanta.
Con un último gemido de placer, el hombre término en mi boca, era mucha la leche que salió de su rica polla, leche caliente, sentirla recorriendo mi garganta hizo que me mojara un poco. Él había acabado, pero yo me dispuse a dejarla completamente limpia y así lo hice.
Estaba cansado de estar en cuclillas, y el hombre también se le notaba exhausto. Me puse de pie, pero mi tío era muy astuto y aprovechaba bien las situaciones, me dio la vuelta y me bajo los pantalones…metió su enorme y aun dura polla completa en mi culo, yo me quede sin aire…tenía toda su polla dentro de mí, fue tan rápido que ni siquiera pude procesar todo lo que estaba pasando.
“Espero que te haya gustado, de momento eso será todo, pero aún tengo pendiente follarme este culo tuyo, ve abajo y diles que en un momento bajo yo también”
Saco la polla de mi culo y salgo de su habitación, estaba muy confundido y extasiado al mismo tiempo, tenía en toda mi cara el olor y sabor de su pija. Antes de bajar a la sala fui al baño a asearme y quitarme todo el olor de mi tío. Cogí el cepillo de dientes de mi tía y lo use para lavarme los dientes. Antes de salir vi un calzoncillo en el piso, lo olí, me encantaba el olor.
Aquel día la fiesta fue tranquila, afortunadamente nadie se dio cuenta y no dimos indicios para que sospecharan lo que hicimos en el cuarto de mi tío. Han pasado 2 semanas, he mantenido conversaciones calientes con mi tío desde aquel entonces, él me ha mandado fotos muy calientes a las cuales yo también les he respondido.
Aún quedaba pendiente que nos juntáramos para que me culee como se debe de verdad, pero él se hacia el difícil.
Luego de mucho hablar y mucho mandarnos fotos, acordamos juntarnos un día. Él iba a faltar a su trabajo y yo iba a faltar a la universidad, aun no sabía a donde me iba a llevar pero si estaba completamente seguro en que me iba a culear bien, quien diría que yo iba a pasar de odiar a mi tío a estar completamente obsesionado por él.
Nos encontramos en el centro comercial de la ciudad, compramos unas bebidas, eran más mis ganas por hacerlo de una vez que las suyas. Estuvimos caminando por todo el centro comercial, mientras veíamos ropa, traía ropa muy delgada y mi tío aprovechaba cuando nadie veía para meterme mano.
Mi tío ya se había percatado de mis ganas de ser penetrado por él, y en un determinado momento puso manos a la obra. En el centro comercial había un estacionamiento que era subterráneo, mi tío y yo usamos el ascensor para ir al piso más profundo de dicho estacionamiento. Era un lugar muy oscuro, no había cámaras de seguridad y tenía unos baños abandonados. Este lugar era aprovechado por las parejas para coger, y también por nosotros.
Mi tío procedió a quitarme prenda por prenda, lo hacía con una delicadeza a la par que acariciaba cada parte de mi cuerpo, lo hizo hasta que quede completamente desnudo. Luego me dijo que hiciera lo mismo con él, empecé por quitarle los zapatos y el pantalón, pasando por sus calzoncillos, apenas lo hice tenia nuevamente su enorme pija en mi cara, estaba un poco erecta, no pude evitar babear un poco y mi tío dio la iniciativa y la metió en mi boca. Yo estaba de cuclillas chupándosela y él se terminó de desvestir completamente.
Yo seguía haciendo lo mío, encargarme de esa rica pija, pero esta vez mi tío me detuvo y fue directo a mi ano. Cerró la puerta del baño, me puso de manos contra la puerta y me inclino un poco. Y sentí como su enorme verga entraba en mi culito. Admito que era gruesa y dolía un poco, pero no me importaba, yo lo estaba gozando.
La en un principio la metía y la sacaba entera, para que mi culo se acostumbre a su pene, luego la metía bien profunda y la agitaba dentro de mí, esto me llenaba de placer, mientras tenía una pierna sobre el lavamanos el por detrás me dejaba el culo chorreando.
Gemía como una puta, de hecho, mi tío decía que yo era su puta personal, mientras me penetraba con fuerza y me daba nalgadas. La pija de mi tío llegaba hasta lo más profundo de mi ano, yo ya no podía más, las piernas me estaban matando, mi tío me puso en 4 solo para encularme con más fuerza.
Estaba en una pose en la cual mis nalgas estaban bien abiertas, y la pija de mi tío solo las abría aún más, todo era perfecto en ese momento, la pija de mi tío era solo mía, me coloco boca arriba con las piernas bien abiertas para recibir toda la leche de mi tío.
Nunca se va a cansar de encularme, el hombre estaba dando su mejor esfuerzo pero llego un momento donde ya no pudo más y me lleno con toda su leche, a pesar de ser madurito, eyaculaba mucho, yo con las piernas abiertas sentí los últimos empujones de mi tío mientras gemía hasta quedarme desmayado, tirado en el piso.
Mi tío me había follado hasta llenar mi culo con su semen. Yo me había desmayado pero él se había vestido y salió de aquel baño. Lo que me había despertado era el sonido de la puerta abriéndose, había entrado a baño un señor con traje de seguridad.
El desconocido estaba enojado y comenzó a preguntarme que hacia ahí, y completamente desnudo…No había rastro de mi tío por ningún lado. Aquel hombre estaba enojado mientras me veía y sacaba su celular para tomar pruebas en fotos y videos.
“Mira no deberías estar aquí, pero todo se puede solucionar”…me dijo, se acercó lentamente mientras de sus pantalones sacaba su pene. Yo apenas estaba procesando todo, pero estaba tan excitado que cogí su pija y también me la comí enseguida.
Me alegro que hayas captado el mensaje…fue lo último que dijo antes de que la diversión continuara.
Mis amores espero que les guste este nuevo relato, de todo corazon espero seguir escribiendo para ustedes.